Jaebeom observaba con una obsesiva sonrisa las fotografías en la pared de su habitación. Retratos de hace tres años, tomados en cada una de las citas vividas al lado de su ex, había guardado todas y cada una de ellas, pues jamás tuvo el suficiente valor de desecharlas y ahora lo agradece.

Muchas veces esas imágenes habían servido mejor que un supresor en sus días de celo, amaba que lo primero al despertar sea el hermoso y sublime rostro de un omega puro y limpio. Justamente sus ojos están puestos en la imagen del centro, ahí se puede ver a un joven y pelinegro omega de ojos verdes esmeralda, su sonrisa a pesar de ser pequeña es dulce y juguetona, lo recuerda bien, se la tomó estando distraído, pero el resultado fue hermoso.

Se arrepiente de sus acciones, decir que Jimin es virgen fue la peor estupidez que pudo cometer, más siendo movido por el deseo de venganza, pero en ese momento estaba tan dolido y humillado que no midió las consecuencias.

Ahora tiene otro gran problema aparte, el cual respira y tiene nombre, un estorbo sin valor pero que igual es molesto.

Lo ha observado en silencio, la forma tan patética en la que sus ojos brillan al verlo, el sonrojo en sus mejillas y lo ridículo que se escucha tropezando con sus propias palabras cada que está con él, alguien que no tiene nada, que está ahí por caridad y jamás logrará nada porque la gente de su clase nunca llegan a nada.

Tenía una plática pendiente con el pelirrojo, en la cual se encargaría de alejarlo para siempre de Jimin, sería su oportunidad para dejar libre el camino por sus propios méritos. Está seguro que con un poco más de tiempo y atención ganaría el perdón de Jimin y ahí es donde aprovecharía para volverlo a conquistar, sus planes con el omega esta vez eran más serios, porque tanto tiempo alejado le había servido para reflexionar.

Jimin no solo sería su omega, si no también su esposo.

Jimin caminó apresuradamente hacia la puerta principal de aquel espacioso apartamento, esto a causa de los toques qué lo despegaron de la cocina donde se preparaba el desayuno. Está vez portaba sus lentes y el cabello lo tenía húmedo debido reciente baño, su frío cuerpo era abrigado por una bata blanca de tela gruesa pero suave; mientras que sus pies portaban unas pantuflas afelpadas protegiéndolos del gélido piso de la cerámica.

Abrió la puerta y una sonrisa dibujó sus labios por primera vez en el día al ver al par de omegas parados en la entrada; pero Taehyung y Hoseok sabían que su sonrisa no se debía a ellos dos y lo comprobaron cuando el peligris les arrebató la jaula que traían en manos y de esta forma volvía hacia adentro dejándolos a ellos dos en la entrada e ignorados por completo.

Aún así entraron y cerraron la puerta siguiendo al más pequeño de estatura, cuando llegaron a la sala Jimin dejó la jaula en uno de los sillones y abrió la puerta para luego sacar a su adorada mascota.

─ Hola Sora, ¿me extrañaste? ─ mencionó cargando el peludo animal, este al sentir el aroma y calor de su dueño comenzó a ronronear y a restregó su cabecita en el pecho del omega.

Los otros omegas observaron con una mueca de disgusto la imagen ante sus ojos y la muestra de su indignación está grabada  en el cuerpo de los recién llegados. Múltiples rasguños y mordidas adornan la piel de ambos, el animal les había dejado claro que no se dejaba tocar por alguien más que no sea Jimin y ahora lo confirmaban, tan tranquilo y sumiso, cualquiera pensaría que se trataba de otro gato y no el mismo demonio que los había atacado días atrás.

─ ¿Qué? ─ mencionó el omega al ver las miradas serias de sus amigos.

─ ¿Qué le das a esa bola de pelos? ─ soltó Taehyung, mirando aún sin poder creer aquella escena. Taehyung no pensó que llegando a su casa Sora fuera a cambiar completamente, si bien anteriormente se había dejado cargar por él, y quizá por esto se confió demasiado, fue llegando él animal adoptó un comportamiento completamente opuesto ─, es un demonio, casi me saca un ojo él día de ayer ─

Jimin los miró con incredulidad ─ ¿de qué hablan? mi bebé es un amor, ustedes a saber que le hicieron ─ los contrarios jadearon ofendidos, más al ver lo que siguió. Jimin levantó al animal a la altura de sus ojos y ahí lo mantuvo mientras hablaba ─ ¿que te hicieron estos bobos?, ¿Te cuidaron bien?, ¿Te dieron las tres comidas? ─ el animal solo movía la cola como si le divertiera.

─ Hijo de… ─ Tae entrecerró los ojos.

─ Gracias ─ toda expresión molesta se disipó del rostro del omega cuando la voz de Jimin llegó de forma repentina, su agradecimiento era sincero y se podía notar en su rostro.

El peligris pocas veces mostraba su agradecimiento, pero las pocas veces que lo hacía era de forma auténtica y sincera.

─ ¿Qué tal te fue? ─ Hoseok no imaginaba que no era el momento de hacer esa pregunta, pero se dio cuenta de ello al ver cómo la mirada de Jimin se cubría con un brillo deprimente, fue ahí cuando supieron que algo malo había sucedido y no había necesidad de ser sabio para saber que su madre tenía mucho que ver.

Ambos eran conocedores de la mala relación que su amigo tenía con su madre, algo que para ellos no tenía explicación, y es que no entendían el motivo de tanto odio y rechazo.

Jimin puso al animal en el suelo; este corrió al ver su bola de lana y ajeno a lo que ocurría comenzó a jugar sumido en su propio mundo.

─ Preferiría no hablar de eso, al menos no por el momento ─ su omega aún no se recuperaba, había sido algo sumamente traumático para ambos, un suceso delicado que revivió traumas y miedos de un pasado que creía enterrado. Hablar sobre ello aún le provocaba un desagradable sabor de boca y una opresión en su pecho horroroso.

─ Está bien ─ ambos omegas asintieron comprensivos, pero eso no cambia el hecho de que hayan quedado preocupados por su amigo; sin embargo lo único que les queda es respetar el silencio y apoyar sin pedir explicaciones.

Yoongi se encontraba realizando las compras de la semana. En sus manos cargaba la canasta color verde la cual se encargaba de llenar con lo necesario.

Su madre no había podido salir de casa, pues desde la mañana la notó enferma y no se equivocaba porque en efecto, la omega había sufrido una leve recaída que la mantuvo en cama desde muy temprano. Yoongi aprovechó su día libre para comprar algunas verduras y medicina para que la omega mejorará pronto. Para el joven alfa no era problema hacerse cargo de la casa, por eso desde que el reloj marcó las seis se levantó a preparar el desayuno, hizo la limpieza y preparo un remedio casero, al menos para que el dolor de cabeza de la omega disminuyera, quedando satisfecho cuando logró quedarse dormida.

Aprovechó ese tiempo para salir de casa y ahora estaba aquí buscando lo necesario para el almuerzo y de paso abastecer su refrigerador.

Sostuvo en sus manos un bote de cremora y fue imposible no pensar en en su omega, porque si; Yoongi lo consideró su omega desde el momento que supo que Jimin era su media luna.

Dejó salir débil un suspiro al recordar los últimos sucesos, después de regresar no había vuelto a saber nada del mayor y eso lo inquietaba, provocando unas enormes ansias en su lobo quien se muere de ganas por marcarle y saber sobre el, pero Yoongi ha luchado contra el mismo para no hacerlo, pues considera que Jimin necesita tiempo, no quiere atosigarlo y cansarlo.

Su mirada es triste, un sentimiento de insuficiencia lo llena por completo cuando piensa en Jimin. Siente que no ha hecho nada por el omega y eso lo frustra, porque él quisiera darle todo, ayudarlo a superar sus miedos y demostrarle cuánto lo ama.

Y todo es tan difícil y agonizante, siente una barrera enorme la cual siempre se interpondrá entre ellos dos, no ser correspondido es algo que lo aterra, quizá a eso se deba su cobardía. Desde pequeño se conformó con tan poco, nunca exigió más de lo que se le ofrecía, tampoco renegaba cuando llevaba la parte más pequeña.

Siente que nunca recibirá más que esa sonrisa que pocas veces recibe, pero que aún así es una de las más hermosas y auténticas que sus ojos han podido admirar y aunque para otros es poco el lo recibe encantado, porque sabe que en su posición no puede pedir más; sin embargo duele, duele saber que jamás será el causante de esas sonrisas que tanto ama, duele aún más saber que estas son pocas y contadas.

Pone el bote de cremora dentro de la canasta. Llega al final del pasillo y dobla al siguiente, es ahí cuando sus azulados ojos se topan con un viejo amigo.

Ambas miradas se conectan y al volverse a ver después de varios meses ambos sonríen.

─ Yugyeom ─ menciona animadamente ─, tiempo sin verte amigo ─ quizá no sea mucho, pero para ellos que se conocían desde niños y se habían visto crecer si lo era.

─ Hola ─ saludo con la misma emoción ─. Lo se, desde que comenzaste a trabajar ya no te volví a ver; por cierto, escuche que te está yendo bien, no sabes cuánto me alegro ─ debía admitirlo, Yoongi era un alfa admirable, a pesar de los obstáculos y problemas buscó la forma de arreglárselas para salir adelante, se siente feliz por él, y espera que pueda seguir creciendo, aunque solo le toque verlo desde abajo, porque Yugyeom no tiene fe en sí mismo.

─ Si, gracias a la diosa he visto cambios, ahora estoy ahorrando y solo gasto lo necesario ─ Yoongi había abierto una cuenta bancaria porque tenía planes a futuro.

─ ¿En serio? ─ el beta mostró su asombro ─, ¿para qué ahorras? ─

Yoongi no lo pensó mucho ─ principalmente quisiera un carro ─ había notado qué lo necesitaba, le era complicado viajar en bus al trabajo y a veces llegaba tarde ─ luego pienso arreglar la casa, cambiar el techo el piso, y un montón de desperfectos qué hasta ahora no he podido reparar ─ su padre había trabajado mucho tiempo en esa casa, quería que su esfuerzo valiera la pena y darle la imagen que se merecía ─; pero para eso aún me falta mucho ─ si, es consciente que para que sus planes se cumplan pasarán algunos años.

─ Wow… ─ al menos tenía una idea clara de su futuro ─ suerte ─ deseó con sinceridad.

Yoongi desvío su vista a la pequeña cajita que el beta sostenía en su mano, este al darse cuenta de su mirada sonrió apenado ─ y tu Yugyeom, ¿cuales son tus metas? ─ soltó sin poder apartar sus ojos de la cajetilla de cigarros.

─ Me graduó este mismo año, después de eso… ─ todo era incierto. A diferencia de Yoongi no tenía un motivo, un incentivo o alguien por quien luchar, porque desde que era un niño solo fue él, un momento… si había alguien, ahora que lo pensaba existía una persona por la cual soñar, pero tristemente el no era ni sería nadie en su vida ─, después de eso planeó dejar la ciudad, encontrar oportunidades de trabajo en otro lugar ─ tal vez era lo mejor, de lo contrario jamás podría superar y seguiría haciéndose daño con algo que nunca lo llevaría a ningún lado.

─ ¿Seguro? ─ Yoongi veía que no había seguridad en su mirada, pero no siguió insistiendo cuando el beta asintió sin dudarlo.

─ ¿Has sabido algo de Jungkook? ─ desde que el omega había estado evitándolo no había sabido nada de él, Yugyeom solo quería saber si estaba bien, si estaba comiendo como debía y si dormía lo necesario; pero el omega ni siquiera le contestaba las llamadas y eso dolía.

Dolía saber que este lo había estado evitando, dolía saber que lo que para él fue hermoso pudo haber sido algo desagradable para Jungkook, que este lo odie y piense que solo se aprovechó de su estado, que ya no le quiera hablar más.

Dolía saber que debido a las circunstancias jamás podría cumplir aquello que prometió hace ocho años.

Porque para su desdicha y mala suerte resultó ser un beta.

─ Sobre el… ─ Yoongi rasco su nuca con nerviosismo ─, ayer hable con él, discutimos y no quedamos en los mejores términos.

Eso llamó la atención del beta ─ ¿que ocurrió?, ¿él está bien? ─ fue imposible no demostrar su preocupación, sabía que si había sido una pelea con el pálido Jungkook debería estar mal.

─ Teníamos algo importante que aclarar, lo hice; pero él no lo tomó muy bien ─ mencionó recordando la fuerte discusión con el omega ─, aún así espero que este tiempo le sirva para recapacitar.

Yugyeom ya imaginaba a qué se debía aquella conversación, el anhelo de estar a su lado creció considerablemente. Siempre se arrepentirá de lo que sucedió aquella noche, porque sin querer arruino su amistad con Jungkook

¿Que piensan? 👁

Próxima actualización hasta el domingo y gracias por leer.

12/10/21.