Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

♢Ocho♢

Su mirada está fijamente en mi, el abre la boca y la cierra inmediatamente y se pasa una mano por el cabello.

--- ¿Que es exactamente eso que marcó tu vida? ---pregunta susurrando, lento, con calma. Suspiro y me encojo de hombros.

--- No lo sé ---respondo, en un murmuro ahogado--- nisiquiera sé porque lo dije.

--- Alguna cosa debe haber tras esas palabras ¿no?

--- No lo sé ---repetí--- quizás lo hay, pero no lo recuerdo.

--- ¿Puede ser que hayas sido violada? ---pregunta y mis ojos se abren al igual que mi boca, de asombro.

--- ¿Que?

--- La mayoría de las personas luego de ser violadas o tocadas contra su voluntad, presentan una fobia llamada Afenfosfobia, lo cual significa, prácticamente, tu problema.

--- Yo no he sido violada ---chasque indignada--- si fuera así ¿No crees que lo recordaría y ya no sería virgen?

--- La violación no quiere decir solamente actividad como la conocemos comúnmente, puede ser como te dije antes, ser tocada contra tu voluntad.

Tocada contra tu voluntad. Sus palabras hicieron eco en mi cabeza. Nuevamente ráfagas de recuerdos pasaron velozmente por mi mente. Gritos. Golpes. El suelo frío. La oscura habitación. La sonrisa de mi madre. Mi padre mirándome con los ojos llorosos. Mamá riendo junto a Frank. Sollozos de un hombre. La sirena de policía. La sensación de que todo se encontraba terrible.

Sollocé llevándome una mano a la boca y luego a mi vientre. Frank. Su nombre resono en mi cabeza, la cual comenzó a dar vueltas. Necesitaba aire, necesitaba aire rápidamente.

Jos se acercó a mi asustado y confundido, su mano toco la mía y aquel tacto me calmó. No salte, no me asusté, fue un tacto dulce que hizo que me sintiera bien.

--- ¿Qué pasa? ---preguntó alarmado.

--- Frank ---susurre asustada--- Frank ---repetí sollozando incontrolable.

--- ¿Quién es él, _____? ¿Quién es Frank?

--- Mamá ---lloré como una niña asustada--- no dejes que me toque, mamá...

Murmure sin poder controlarme. La blanca habitación dejó de tener vida, las paredes se tiñeron de un color gris. La humedad y el frío me invadieron. El Doctor Canela desapareció, todo desapareció

Mamá gritaba desde el piso de abajo, un golpe en su mejilla, tan fuerte que me hizo estremecer. La risa ahogada de Frank disfrutando de su dolor. El placer de hacerla sufrir, el placer de verla retorcer debajo de él.

--- ¡No! ---su aguda voz en un grito retumba en mis odios--- no le hagas nada, no a ella Frank, por favor no a ella ---suplicó sollozando. El rió nuevamente y sus pasos se sintieron en la escalera.

Mi respiración se volvió densa. Corrí a un lado de mi cama, escondiendome allí, como lo solía hacer. La puerta se abrió lentamente. Pude ver su silueta a través de la oscuridad. Su mano secando el sudor de su frente, despeinando su cabello mientras buscaba alguna cosa. Me encogí aún más y aguante la respiración, asustada de que el pudiera escuchar y encontrarme.

--- ¡Frank! No Frank ---mi madre toció atragantándose con lo que podía ser su sangre--- Ven aquí y termina lo que comenzaste conmigo, por favor Frank, no le hagas nada.

Grité cuando sentí sus manos jalar mi cabello, peinado perfectamente en dos coletas a cada lado de mi cabeza. El pequeño oso de peluche calló al suelo, bajo mis pies.
Sus manos acariciaron mi cara, su sonrisa me hizo estremecer.

--- Oh, ______, mi dulce ______ ---susurró besando mi cuello--- pequeña y hermosa _______.

Sus caricias me hicieron pegar un pequeño brinco, grité, tratando de soltarme de sus brazos descontroladamente. Un gemido de dolor se escuchó fuera de la habitación. Sus manos frías, acariciaron mis piernas descubiertas. Sollocé una vez más, moviendome desesperada.

--- No, Frank ---susurre entrecortadamente, pronto, la luz reflejo en las paredes blancas, abrí mis ojos y mire a mi lado, Jos estaba ahí, mirándome confundido.

--- ¿Quién es Frank, ______? ¿Quién es Frank?

Alguien que marcó mi vida, alguien que no quería recordar.

Estaba haciendo el rídiculo. Rápido limpie las lágrimas de mis mejillas y meciedo la cabeza de un lado a otro y sonriendo lo más falso que pude, lo miré.

—¿Quién es Frank, _________? —preguntó nuevamente ahora esperando una respuesta, suspire agachando la cabeza, no quería responder, a algo que ni siquiera yo sabía.

—No lo sé —musité, mi voz salió ahoraga. El suspiro apartando su mano de la mía, cansado de la estupida respuesta que le daba a cada rato.

—Te pusiste como loca recién y gritabas su nombre a cada rato ¿quién es él?

—Él me tocaba, le pegaba a mi madre, pero no se quien mierda es.

Para cuando Jos iba a responder, su secretaria, Susanne, entro a la oficina avisándole que una paciente la esperaba desde hace rato, afuera. Sequé bien las lágrimas de mis mejillas y viéndome en el pequeño espejo de mi cartera, retoque el maquillaje escondiendo cualquier rastro de lágrimas de mi cara.

—Nos vemos nuevamente el lunes, _______, necesito que aunque sea doloroso, recuerdes quien es Frank —asentí silenciosamente tomando el pomo de la puerta y encontrándome con la sonrisa de Sara tras ésta.

Ella se mantuvo silenciosa todo el camino, ofreció pasar a tomar un café. Había tomado la tan ansiada siesta y quería seguir haciéndolo, pero con sueño, no podía seguir conduciendo.

—¿Qué sucedió, en la consulta? —negué jugando con la etiqueta del vaso, ella suspiro tomándome de la mano.

—Tengo una fobia llamada Afenfosfobia.

—¿Eso que significa? —egunto tomando un largo sorbo de café.

—Miedo a ser tocada. Jos cree que fui violada.

La cara de Sara se transformo, el café salió disparado de su boca, callendo como pequeñas gotas en la mesa blanca. Sus ojos demostraron miedo y puedo suponer que dejo de respirar por un segundo.

—¿Recordaste alguna cosa? —pregunto con temor, un notable temor. Negue con la cabeza confundida, ella sabía algo que yo no— ¿nada?

—No, nada, solo... que alguien me tocaba, pero no sé quién, solo recorde su nombre.

—¿Qué nombre?

—Frank —dije segura, la escuche suspirar fuertemente mientras se pasaba una mano por el cabello quitándolo de su cara.

—¿Segura que no recordaste nada más?

—No, Sara, nada más ¿hay algo que debes decirme?

—No —respondió rápido— ¿qué tal si ya nos vamos? Creo que ya puedo conducir.

En menos de diez segundo, sara se encontraba lista para salir del establecimiendo de café. La seguí a paso lento. Mirando de vez en cuando sus reacciones. Suspiraba nerviosa, apretaba fuertemente el manubrio y pude ver sudor en su frente.

—Sara —la llame, ella jadeo, echándome una rápida mirada— ¿estás bien?

—Si, bueno, tengo dolor de estómago, creo que vodka y café no hacen una buena combinación —respondió con su voz de "no, nada esta bien".

Decidí ignorar su tono, cerrando los ojos y pasando esas ráfagas de recuerdos que me hacian estremecer. Al llegar, se estaciono en frente despidiéndose de mí tan rápido que me extraño, gritandome que me llamaría luego.

Como no tenía nada mejor que hacer, abría el libro "Sexo para dummies" en la sección de "Como tener relaciones para procrear". Bajando el libro a mis piernas, respiré recostando mi cabeza en la cabezera del sillón, pregúntandome a mi misma, si alguna vez podría tener hijos, o simplemente, perder la virginidad antes de pasar a otra etapa, aunque, a este paso, era un enigma.


Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro