♢Díez♢
La alta música hace retumbar las paredes aun por fuera del club. La inmensa fila llegaba hasta casi la otra calle. Pero al ver a Jos realmente sexy parado a un lado del guardía, nos ahorramos eso, pasando de inmediato. Aun sorprendida al ver mi nombre y el de Sara en la lista.
-Dijo que llegaría acá en un rato más, ¿quieren tomar algo? -preguntó Jos fuerte sobre la música. Negue con la cabeza buscando dinero en mi bolso, no había echado ninguna centavo en ella- descuída, yo pagaré -sonrió dándose cuenta de mi error.
-Te lo pagaré -grité cuando lo vi alejarse luego de que Sara emocionada haya pedido un vodka con naranja.
-¡Esto es asombroso! -saltó sonriendo como una niña pequeña en una dulcería mirando a su alrededor pensando que podría ser lo primero que comería.
Una gran mano agarro mi brazo, haciendome saltar y alejarme rápidamente por el contacto. Girándome para mirar quien había sido. Vi a Jos parado con un vaso de vodka en su mano y una sonrisa pequeña. A su lado, el chico de la foto, con ambas manos ocupadas por los tragos.
Dios, era caliente.
Avergonzada baje la cabeza, incapaz de mirarlo, Jos había echo aquello quizá para probarle a su hermano mi problema. Estirando su mano, me paso el pequeño vaso y luego repitió lo mismo con Sara quien lo miraba asombrada mientras se humedecía los labios.
-Él es Jake, Jake, ______ -me apunto, presentándonos- Sara, Jake.
-Un gusto chicas -sonrió y oh, que linda sonrisa.
Al parecer, lo sexy, no era lo único que los hermanos Canela compartían, si no, también su hermosa sonrisa.
Un rato después, yo me encotraba en medio de dos calientes chicos, completamente intimidada. Sara me había dejado sola luego de irse a bailar con algún chico y desaparecer por completo de mi vista.
-Bueno, que esperan, primero ¡a bailar! -dijo Jos parándose frente a nosotros, miré por el rabillo del ojo nerviosa al gran Jake.
Para nada tímido, tomo mi mano y me condujo hacia la pista de baile, moviéndose al compás de la música a una distancia conciderable. Miraba de vez en cuando a Jos quien me incitaba a bailar con gestos, mirándome divertido llevándose la interminable copa (de lo que fuera que tomaba) a la boca.
-No seas tímida, acércate -murmuro moviéndose, sin tener ningún contacto, como Jos había dicho. Con una paso pequeño, quedamos separados por escasos centímetros.
Rápidamente, mi cuerpo comenzó a picar, ansiando que sus manos por lo menos tocaran mi cintura y me acercará a él para sentir completamente su anatomía pegada a la mía.
Oh Dios. Estaba realmente exitada solo con un baile. Jadeé moviéndome según la música dictaba, acercando mi pecho al suyo en cada compás. Vamos, tócame. Supliqué en voz baja. Cerrando los ojos. Sus manos se dirigeron a mi cintura y gemí ante el pequeño y rápido contacto.
La situación no ameritaba aquello, él no podía tocarme, Jos lo dijo. Así que lo miré, y las inmensas ganas de que él fuera con quien estuviera bailando me hicieron gemir.
Su mirada choco con la mía y pidiéndole que se uniera a nosotros. Lo hizo.
Mordi mi labio, mostrando lo excitada que me encontraba.
No tienen idea de lo difícil que es estar entre dos guapísimos chicos danzando sin saber que hacer. Ninguno de los dos me tocaba, ninguno de los dos estaba cerca de mí, y era lo más frustrante y exitante que alguna vez me puede pasar.
Gemí, al sentir el calor de la respiración de Jos tras mi cuello.
-Tócame -le pedí, inclinando mi cabeza hacia atrás, quedando a centímetros de su oído.
-Aun no -jadeo en mi oído.
Anhelante a su toque, quise ser la primera. Mi brazo se estiro solo un poco y mi mano acaricio el brazo de Jake suavemente. Pero él se aparto, sujetando mi mano entre la suya.
-Aún no -citó las palabras de su hermano. Colocando nuevamente mi brazo a un lado de mi cuerpo.
Esto era realmente injusto. Se suponía que debían ayudarme con mi miedo a ser tocada, pero ellos no hacían nada, me estaban dando un gran placer sin siquiera haberme tocado un cabello.
-Tócala Jake -murmuró Jos a mi espalda.
Él obedeció y suspiré tranquila al sentir su mano con experiencia acariciando mi cintura.
-Más abajo -ordenó Jos y él lo hizo, bajando lentamente su mano por el lado derecho de mi cuerpo.
Jadeé.
-Más abajo -repitió Jos y Jake acaricio mi trasero tan suave que sentí mis piernas derretir.
Mis defensas actuaron rápidamente, salte hacia atrás, chocando mi espalda contra el fuerte y duro pecho de Jos.
-Alto Jake -musitó al ver la mano de Jake acercarse una vez a mí- eso a sido todo por ahora.
¿Qué? Lo miré incrédula. Yo no quería que eso parará, quería que siguiera, que siguiera tocándome aun después de mi repentino cambio. Pero al parecer él no quería lo mismo. Así que tomando mi mano, me saco de la pista de baile, poniendo un vaso en mi mano.
Sin siquiera saber que era, lo tomé, sintiendo como la amarga sustancia quemaba mi garganta. Refrescante cerveza. El vaso se vació en un segundo y lo deje fuerte contra la barra mirando a Jos.
-¿Por qué no seguiste? ¿Eso fue todo por esta noche?
-Porque era bastante demostración, tampoco quería que te pusieras como loca allí, iban a pensar que Jake te violaría y eso hubiera sido un caos -contesto mirándome, tomando también el contenido de su vaso rápido, casi sin pestañar-. Y no, no es todo por esta noche, pero si por ahora, descansaremos un poco y continuaremos.
Asentí silenciosamente mirando a Jake quien tenía una sonrisa que me hizo temblar.
-¿Qué sucedió, allí? -preguntó Sara, llevándose mi atención.
-Jake me toco, como lo hacen todos a la hora de bailar y me asuste. Eso es todo.
-Oh -musitó y algo paso por sus ojos. Pero lo ignoré.
-¿Y tu conquista?
-Se paso de listo -contestó con una sonrisa- Así que lo deje solo con una patada en la parte abaja -Jos y Jake hicieron una mueca de dolor y solo sonreí divertida.
-¿Así que ambas ahora somos ninjas?
-Yo solo cuando la situación lo requiere -contestó guiñando su ojo derecho.
Esta vez, la música era más lenta y el club estaba ligeramente oscuro, debido al suave y lento parpadeo de las luces.
-Vamos, a la pista -dijo Jos, trague fuerte y grueso- ahora seré yo quién bailara contigo _______ -susurro y abrí los ojos sorprendida, al sentir su mano en mi cintura y luego su pecho contra el mío-. Pero ahora, estaremos cerca. Muy cerca.
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro