Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

8: Destruir artículos personales

La pareja pasaba sus días "felices". Habían tomado una terapia con el psicólogo del pueblo. Y Mangel, a pesar de sus celos, trataba de luchar contra ellos, al menos a perspectiva de Lolito.

Vivían sus vidas haciendo cosas de parejas, dándose mimos, viendo series y películas, haciendo las compras juntos. Incluso Mangel aceptaba que Lolito saliera con sus amigos, aunque casi siempre trataba de acompañarle, y al pelirojo no parecía molestarle.

Las cosas parecían estar mejorando, y que los gritos, las peleas y los celos habían quedado como un mal capítulo de su historia, y que todo iba y seguiría mejorando... O eso pensó Lolito.

Era de noche, estaban teniendo una noche de películas. Todo estaba bien, hasta que Lolo recibió un mensaje en su celular. Tomó el aparato, y respondió. Mangel, a pesar del fuego en su estómago, trató de contenerse, repitiéndose a sí mismo que todo estaba bien.

Pasaban los minutos, y Lolito no soltaba el teléfono, la gota que colmó el vaso fue que comenzara a sonreír más de la cuenta. Mangel no pudo más, le arrebató el aparato de las manos y lo arrojó lejos con todas sus fuerzas.

- Mi niña ¿que te pasa?- Preguntó totalmente desconcertado el oji-verde.

- Perdón, no me pude controlar.- Se disculpó su pareja.

- Mangel, dijiste que ibas a cambiar.- Dijo mientras lágrimas caían de sus esmeraldas.

- Lo sé, Lolo, lo sé. Pero le lo haces tan difícil...- Se excusó el de lentes.- Ya, hombre, no te pongas así por un puto celular.

- No es el celular, Mangel.- Sollozó el pelirojo, abrazándose a sí mismo.- Es el hecho de que no estás cumpliendo tu palabra.

- Ya te dije que lo siento.- Contestó un tanto alterado.- Pero es que no dejabas de ver ese celular y de reírte, y... Me molesté, ¿ya?

- ¡Pudiste haberme dicho qué te molestaba y lo hubiéramos solucionado juntos, Mangel!- Lloró asustado.- No había necesidad de ser tan violento.

- Lo siento, Lolo.- Le abrazó para tratar de calmarlo.- Fue un maldito impulso que no pude controlar, lo siento. Mañana te compro otro, y hagamos como que ésto no pasó, ¿si?- Le dijo limpiándole las lágrimas.

- Está bien.- Dijo un poco más relajado.

- Gracias, cariño.- Susurró para después besarlo.

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro