Humillar en publico.
Narra Alberto.
Era un día normal, típico en esta isla estúpida, iba de la mano con mi querido Luca, el se veía muy tierno, estaba callado y nervioso, amo esas facetas de el, de vez en cuando apretaba su mano con tal de ver sus expresiones de dolor, se veía tan exquisito...ahora que lo pienso, hace mucho no tenemos sexo.
A; Ya llevamos...manzanas?
L; Si...
A; Pescado?
L; Si
A; Pasta?
L; Si...tu comida favorita...
Narra Luca
Estábamos en el mercado comprando cosas para comer, ahora Alberto no me dejaba salir solo, a lo lejos escuche una voz conocida, busque con la vista y lo encontré...Ercole, mis mejillas se tiñeron rosa de inmediato pero sentí un apretón que me saco de mis ideas.
A; ¿A quien mierda miras asi?
L; A-A...nadie...
Alberto me jalo del brazo y me llevo hacia donde estaba Ercole, esto sera malo, muy malo pensaba.
A; Hey tu!
E; Mh? Alberto.
A; Quiero que te alejes de mi esposo.
E; Ja...Ja... y si no que?
Alberto y Ercole comenzaron a pelear en el mercado, gano Ercole...
E; Nadie, repito nadie, ni siquiera el estúpido marido de MI Luca, me alejaran, nadie!
A; Tsk...Vamonos.
L; P-Pero faltan las...
A; VAMONOS IDIOTA
Otra vez me tomo de la mano con fuerza, dejando a un Ercole furioso y preocupado, al llegar a casa, Alberto me tiro al sofá y comenzó a quitarme la ropa.
A; Porque recalco el mi? Tuvieron sexo? Es tu amante?
L; N-No...suéltame...
Alberto comenzó a morderme y no eran esas mordidas, lindas y de juego, eran unas mordidas horribles, llenas de odio...me clavaba los dientes haciéndome sangrar, esto era como una maldita película de terror.
Luego me soltó, dejándome cansado y llorando como un bebe.
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