Capitulo 8 Caireles de Oro

—¿Qué están haciendo? —repitió la voz, y automáticamente Hermione empujó al joven, quien acribillaba con la mirada a su compañero de casa.

—¡Largo de aquí ,pedazo de ...!

Pero antes de que pudiera terminar la oración , Hermione, con el sonrojo a flor de piel, salió corriendo de allí ,arreglándose la blusa.

—Lo siento, ¿interrumpí algo?—dijo burlón el recién llegado.

—¿Te das cuenta de lo que hiciste,Theo?

—¿Dejarte con ganas de “conocer a Granger muy a fondo”?

El joven slytherin suspiró cansado, y asintiendo contesto: —Eso  y, ¿sabes? Creo que la estoy convenciendo.

Theo le miró, confundido—¿De acostarse contigo o de darte una oportunidad?

El aludido rodó los ojos, molesto. Acto seguido, golpeó en la cabeza a su compañero—¡No seas idiota!—el slytherin agredido rió—Creo que haz pasado mucho tiempo con Blaise.

Se disponían a salir de la enfermería cuando Malfoy preguntó: —A todo esto, ¿dónde está Blaise?

El joven Nott se encogió de hombros y comenzó a contarle su encuentro con Luna, aunque Malfoy no le estaba prestando mucha atención.

Hermione se dirigía hacia la Torre de Premios Anuales ,con la cara roja de vergüenza.Se iba acomodando nerviosamente el uniforme. Hasta que, doblando en una esquina, se topó con Luna .

—¡Hola!—le saludó la ravenclaw con una sonrisa —El día es bello, ¿verdad?

La gryffindor opinaba todo lo contrario—Luna, ahora no tengo tiempo—dijo pasando de ella, aunque en el fondo sentía culpa por ignorarla.

—¡Nos vemos luego!—le gritó Luna alegremente, y continuó su camino.

Al llegar a la puerta de la Torre se encontró con Blaise ,quien la miraba a ella y alrededor. Eso no le dio buena espina.

—Si estás buscando a Malfoy …no está aquí.

—Lo sé—respondió Blaise, acercándose a ella—Te estoy buscando a ti.

Al oír esas palabras, sacó la varita de su bolsillo. Pero antes de que pudiera defenderse, un hechizo a sus espaldas la hizo caer de bruces al suelo

—¿Puedes parar tu parloteo?—gritó Malfoy hacia Nott, pues ya se había fastidiado de su relato con Luna.

El aludido cerró la boca y negó con la cabeza—Tú no me entiendes …ella es —dijo con ojos anhelantes, buscando la palabra correcta para definir a la chica.

—¿Chiflada?- aventuró Malfoy.

—¡Por supuesto que no!—contestó Nott,  molesto —Es ….es

—¿Desquiciada?¿Loca?

Theo le observaba, serio—Tú no puedes entender la complejidad de su naturaleza.

Draco estaba asombrado de ver a su amigo en ese estado de enamoramiento , ya que Theo siempre había sido un chico callado, y ahora no paraba de hablar de esa joven.

Siguieron caminando hacia la Torre de Premios Anuales en busca de Hermione, mientras Theo seguía relatando su encuentro con Luna.

El rubio se llevo las manos al rostro, frustrado —Si tanto te gustó la rarita esa…¿por qué no la haces tu novia?

Nott, ante el solo pensamiento de ello, tragó saliva y detuvo su paso. Draco se detuvo también—No es tan fácil.
Draco se rió, incrédulo —¿Acaso tienes miedo?

—¡Claro que no!— refutó el slytherin.

Malfoy observó hacia un punto detrás de su compañero y preguntó:—Así que si la ves venir, simplemente caminarías hacia ella y ..

—Caminaría hacia ella y le diría—le interrumpió tomando la palabra con la inspiración a flor de piel—hermosa diosa del Olimpo —Draco casi se atraganta al escucharlo—Hermosa diosa de caireles de oro :Luna Lovegood ¿Me harías el honor de ser mi novia, mi esposa ,la madre de mis hijos?

Se escuchó una risita detrás del joven Nott y él,  tragando grueso al reconocer a quien pertenecía esa risa ,se dió la vuelta y vio a la musa de sus  sueños, sonriéndole.

Draco miraba expectante a su amigo, quién había quedado pálido y de una sola pieza al ver a Luna y saber que lo había escuchado.

—Yo…este..yo—tartamudeó, nervioso y sin saber que decir.

Draco rodó los ojos y empujó a su amigo hasta la joven ,quedando a muy pocos centímetros de distancia.

Luna ensanchó su sonrisa y le tomo de la mano—Claro que acepto —dijo y el joven estaba que no se lo creía, hasta que ella hablo—¿Te gusta el pudin?

—Me encanta —contestó Theo,  devolviéndole la sonrisa.

Ambos jóvenes se sonrieron y, tomados de la mano, empezaron a caminar con rumbo  al Gran Comedor ,no sin antes notar que Malfoy se dirigía a la Torre. Luna se detuvo y le habló:

—Lo olvidaba...Dile a Zabinni que ya es tarde para visitas, y si mis compañeros prefectos lo ven hasta tarde se puede meter en un lío—expresó y Draco,  confundido, no supo a que se refería.

—Chiflada—dijo para sí,  observando como Theo y  Luna desaparecían de su vista.

Llegó a la puerta de su Torre y vio una nota tirada en el suelo. Se acercó y la levantó .

“Si quieres volver a ver a la sangre sucia, ven esta noche al bosque prohibido”.

Termino de leer la nota, la arrugó entre sus manos y con la ira emanando de su ser se dirigió hacia la torre de Gryffindor,donde pensaba informar a Harry y compañía. Al llegar ,el hombre del cuadro se negaba a dejarlo pasar sin la contraseña correcta.

—¡Que me abra, pedazo de lata!—le  gritaba Malfoy  al caballero del cuadro.

—Contraseña.

—¡Maldición, no la tengo!¡ Abra la maldita puerta, o sentirá mi furia!

—Sin contraseña no puedo abrirle.

El Slytherin  daba vueltas como león enjaulado —Entonces busca  a Potter.

—Contraseña

—¡Con un demonio!—se llevó las manos al rostro, totalmente frustrado, hasta que vio acercarse a Neville.

Rápidamente fue hasta  él y lo tomo de las solapas —¡Tú eres Gryfindor!—el chico asintió,  temiendo por la sanidad mental del joven—¡Tú..tú me ayudarás…dile a este viejo chiflado la contraseña y trae a Potter aquí.

—¿A Harry?¿Para qué?

—¡Tráelo, Frank!

—No me llamo Frank…soy Neville .

—Como sea—el chico lo soltó y lo llevo a rastras frente al cuadro—Vamos Frank, dile la contraseña.

El hombre del cuadro los miraba con curiosidad—No soy Frank—suspiró y habló—Pastel de nuez—y la puerta se abrió.

Malfoy bufó ante eso—¡Vaya contraseña!

Tras decir eso ,Neville entró a la sala común y la puerta se cerró.

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