La yakuza es el equivalente del crimen organizado; es una mafia japonesa que data del siglo XVII.

—¡ Nos vemos mañana , Rai-Rai !—

La menor de los pelinegros sonrió más viendo como su amiga le enseñaba el dedo medio y seguía con su camino , dando la vuelta sobre sus talones y entrelazando sus brazos con los de sus hermanos , saliendo del edificio lleno de sus desalmados compañeros y acto siguiente , moviendo sus pies hacia el coche en negro.
Los tres sonrieron al sentir los asientos blandos de cuero y saludaron con la misma alegría de siempre al señor Mori ; Dai quitó la pierna de Seina de encima de su regazo y pasó su mano por su pantalón , quitando la suciedad que su hermana había dejado en sus pantalones.

—No seas así , Dai—

Hideki rodó los ojos oyendo como sus hermanos comenzaban a tener una de sus mini peleas , respondiendo con una sonrisa a su mensaje esperado y dejando su teléfono de lado , para dar unas palmadas al aire captando la atención de sus hermanos menores.

—Adivinad con quien tenemos reunión a parte de nuestra propia familia~—

Tanto Dai como Seina rogaron a su hermano mayor que de su boca saliese la frase "Era una broma" pero no , el joven se mantuvo callado , oyendo los lamentos de los pelinegros menores.

—¡ Malditos sean los viernes !—

Cada viernes , era tradición que los Kurosawa se reuniesen con las dos familias vecinas a ellos , los Kurosaki y los Hayashi ; y como no , ellos estaban obligados a ir a la aburrida reunión vestidos de manera formal y con más que buenos modales. Maldecian los viernes.

Los tres entraron en la gran casa , oyendo ya varias voces desde el jardín , sus pasos siendo dirigidos hasta allí , encontraron a la familia.
El escenario era el muchas veces repetido pero que de alguna manera se las arreglaban para hacer diferente : su madre entablando una conversación con la suya propia y la madre de su marido , su padre y tío oyendo hablar a uno de sus primos mayores sobre el nuevo tatuaje que había obtenido completando así ambos de sus brazos y espalda completamente tatuados al igual que sus mayores , y por último sus primos pequeños , practicando con sus pequeñas espadas de kendo. Y sin faltar todos enfundados en sus kimonos.

—¿ Porqué tenemos que ser unos yakuzas con más estereotipos ?—

—¡ Mis príncipes y mi princesa !—

Su madre se levantó rápidamente de la silla acercándose a ellos , dejando un beso en la frente de cada uno -ignorando el hecho de que sus hijos mayores eran mucho más alta que ella- y dejando que el resto de la familia les saludase.

—Ahora todos a ponerse el kimono de las reuniones , los Kurosaki y los Hayashi llegarán en cualquier momento—

Seina soltó todo el aire retenido por su nariz , siendo la primera en ir a su habitación para quitar el uniforme de la escuela y comenzando a cambiarse ; no le importaba dejar la puerta abierta mientras tanto , sacando el kimono de color rojo y negro , colocandolo en su cuerpo como debía.
Salió de su habitación encontrándose a su primo más joven con su pequeño ceño fruncido mirando al final del pasillo.

—Jun ¿ Ocurre algo ?—

El pequeño de cinco años se abrazó a las piernas de su prima y le miró desde abajo.

—Sei-chan , Hideki—

Seina sonrió con ternura y agarrando su pequeña mano , le llevó hasta la habitación del mayor , oyendo las risas de ambos al cerrar la puerta. Seina siguió recorriendo los pasillos de la casa hasta para frente a uno de los espejos , ajustando la tela que hacía de cinturón alrededor de su cintura ; la tela roja y sus decoraciones en el mismo tono le hizo recordar unos ojos recientes.

Los ojos rojos del chico malhumorado de UA.

La pelinegra sonrió con gracia recordando el rostro del rubio cenizo y lo avergonzado que parecía , pero sin embargo era un rostro que deseaba volver a ver ; tristemente tendría que esperar todo el fin de semana.

—Querida , creo que te tienes que repasar un poco el de la espalda—

Seina miró detrás de ella , encontrándose a uno de sus tíos con quien había intercambiado una reverancia en ese momento.

—¿ En que pensabas , Seina ?—

Preguntó el hombre de unos cuarenta y tantos años , sentándose en una silla más para decoración y miró a su sobrina menor , la cual simplemente negó con su cabeza y sonrió con tranquilidad.

—No pensaba en nada , tío , hoy fue un día ajetreado que con gusto contaré luego—

Dijo dejando su brazo entrelazado con el del hombre y llendo a la sala de estar , donde ya podían oír la voz del cabecilla de los Hayashi.

"Hasta dentro de dos días , ojos rojos"

En el hogar del peli ceniza , el chico respiraba tranquilidad mientras sus padres estaban en la cocina y él tenía su cuerpo cómodamente extendido en el sofá , hasta que su progenitora quitó sus piernas para sentarse ella , admirando a su hijo con una sonrisa ; Katsuki alzó una de sus cejas y miró a su padre en el sofá del frente , éste sólo alzó su pulgar con una sonrisa.

—Con que una chica de Villain High dijo que tus ojos le gustan—

El oji carmín , sin querer decir una sola palabra , cubrió su rostro con uno de los cojines en un intento de para la vergüenza que le comenzaba a comer por dentro.

—¡ Pero Katsuki , si no es tan malo que una chica te diga cosas bonitas !—

—¡ No es eso , vieja bruja !—

Mitsuki fruncio el ceño , al igual que Masaru , porque si el joven no mostraba tanta vergüenza por el comentario que había recibido de Seina , su hijo les estaba ocultando otra razón.

—¿ Cómo es ella , Katsuki ?—

Preguntó Masaru a si hijo , intentando no presionarle y que se abriese poco a poco por él mismo.

—Tiene el pelo negro...o violeta...no lo se , los ojos iguales y cuando usó su quirk le salieron orejas de gato y se le puso el pelo blanco y más largo de lo que lo tenía , y los ojos se le pusieron amarillos—

La rubia ceniza sonrió con malicia al ver como su hijo se quedaba observando un punto fijo en la sala de estar , sin darse cuenta de que el rojo de sus mejillas comenzaba a abarcar todo su rostro.

Katsuki se sentía atraído físicamente , definitivamente sabía reconocer la belleza cuando la veía.