Mientras la siniestra lucha contra Shinigami se llevaba a cabo, las hermanas Oni Nara y Yumei Douji tenían una intensa luchar contra el Shikigami más poderoso de Malice Mizer, Bishamonten. Mientras el Shikigami y Nara peleaban, su hermana menor la apoyaba desde la distancias, flotando en su arena dorada.

https://youtu.be/zN2D_VMOInw

—¡Jujutsu: Araarashiku Atsuki Ai no Shakunetsu no Ha! (Técnica Maldita: Cuchilla Ardiente del Amor Rudo y Pasional).

Envolviendo su naginata en llamas infernales, Nara cortó sin piedad al Shikigami, ralentizando su regeneración un poco gracias a las quemaduras que le provocaba. Sin embargo, rápidamente tuvo que evitar una estocada directa a su corazón que si hubiera llegado a conectar hubiera sido letal, Bishamonten era capaz de extender el rango de su lanza hasta el infinito.

—¡Jujutsu: Naraka no chissoku suna! (Técnica Maldita: Arenas Sofocantes del Naraka) —conjuró Yumei.

Un gran tsunami de arena dorada fue directo hacia Bishamonten, la ola dorada era el doble de su tamaño. Bishamonten sonrió con aire de locura, ya que con un poderoso corte de su lanza, el tsunami fue partido a la mitad y deshecho por completo, esparciendo escarcha dorada por toda la isla. Nara aprovechó la distracción de su hermana para acercarse lo suficiente por la espalda y cortar al Shikigami por la cintura, pero este último giró trescientos sesenta grados nada más que con su torso y le conectó un poderoso derechazo a Nara que la hizo estrecharse con docenas de árboles de la jungla.

—¡Jujutsu: Ōke no Tani no Herusutōmu! (Técnica Maldita: Tormenta Infernal en el Valle de los Reyes).

Una lluvia de cientos de flechas cayó sobre Bishamonten, empalándolo en la tierra. Yumei quería destrozarle la cabeza con otra de sus flechas ahora que estaba inmovilizado. Bishamonten tomó una gran cantidad de aire y lanzó grito supersónico que destruyó el terreno junto con los tímpanos de la Oni de cabellos dorados. Esto le dio el tiempo suficiente para liberarse de las flechas, queriendo matar a Yumei, pero antes de que pudiera conectarle un golpe, Kirei le cortó la mano con sus tijeras gigantes haciendo que su lanza caiga al suelo y permitiéndole a Yumei golpearlo con un puño gigante de arena.

Bishamonten observó como su mano no se regeneraba, por lo que se cortó el brazo por completo, eliminando por completo la maldición impuesta por la Jujutsu de Kirei, tomando su arma de regreso.

—Te has vuelto un ser sumamente molesto, Bishamonten, dios de la victoria —dijo Yumei, tensando su arco en guardia junto con Yumei.

—Yo soy Bishamonten, castigador de los malvados. No Thor, ni Horus, no soy un dios, solo soy un justiciero —replicó con una voz distorsionada.

—Para ser un justiciero, estás sirviendo a alguien muy malvado, ¿qué sucedió con Saneyoshi Nobunaga? —interrogó Kirei, frunciendo el ceño.

Una terrible jaqueca invadió a Bishamonten al escuchar ese nombre y su color de cabello cambió momentáneamente a verde.

—¡Date por vencido, Shinigami! ¡Mi maestro no se rendirá fácilmente ante tí! —exclamó con una intensa mueca de dolor, emitiendo una voz mucho más normal.

—¿Quién te dio permiso para revelarte, Bishamonten? Yo soy tu maestro ahora, tienes que obedecerme sin rechistar, ¿entendiste? Saneyoshi Nobunaga ya está muerto.

El color del cabello de Bishamonten desapareció y volvió a su sonrisa llena de locura.

—Y yo que pensaba que el diálogo podría funcionar en esta situación —comentó Yumei, con algo de humor.

—¡Jujutsu: Katakurizumu! (Técnica Maldita: Cataclismo)

Nara disparó desde su boca una esfera de lava, Yumei conocía perfectamente la técnica, por lo que se apresuró a proteger a Kirei con su arena dorada antes de que un gran explosión de llamas cubriera cerca de cien metros de la isla.

—Espero que te esté gustando mi sauna de lava, Bishamonten —dijo Nara, con una sonrisa sádica en el rostro.

El Shikigami emergió de entre los escombros, provocando terremotos cada vez que chocaba sus armas con Nara.

Nuevamente, sus brazos fueron cortados de forma limpia. Yamiko, Akira y Rai llegaron transformados en su formas Kamui. 

—¡Hora de ejecutar el plan, Rai-kun! —exclamó Yamiko, con una sonrisa siniestra— ¡Técnica del Estilo Tsukuyomi № 22: Jauría de Lobos de las Tinieblas!

Yamiko convocó a cientos de lobos hechos de sombras, los cuales medían cuatro metros cada uno. La jauría de lobos se abalanzó hacia Bishamonten, mordiendo y desgarrando su cuerpo para imposibilitarle el escapar de la zona, todo para que Akira pueda dar el golpe de gracia.

—Es mi turno —musitó Rai, con una ligera sonrisa—. Susanō-ryū Kyūkyoku no Waza: Aisuru Kyōdai ni Sasageru Arashi (Técnica Definitiva del Estilo Susanoo: Tormenta en Honor a mis Amados Hermanos).

Rai fue envuelto en una intensa aura eléctrica, lanzándose hacia Bishamonten a la velocidad del rayo, cortándolo un total de mil veces por todo su cuerpo. Todo esto fue hecho para abrumar su factor regenerativo, lo cual empezó a ocurrir debido a la devastadora técnica de Rai.

—¡Oye cuñadita, es hora de que cubras a todo el mundo! Me parece de destructivo ¡zehahahahahaha! —advirtió Akira, con euforia mientras se elevaba en el aire.

—¡Entendido! ¡Jujutsu: Sei Suna Sekkan! (Técnica Maldita: Sarcófago de Arena Dorada) —conjuró con un gesto manual.

Todos los miembros del Equipo Kuroneko fueron envueltos en la arena dorada de Yumei, la cual adoptó la forma de una pirámide egipcia y se endureció por completo.

Los cielos de la isla de las Filipinas brillaron en el arrebol divino en el que estaba envuelto Akira, mientras una sonrisa de diversión adornaba su rostro.

—Amaterasu-ryū Kyūkyoku no Aaza: Aisuru Imōtoyo, Shi o Motarasu (Técnica Definitiva del Estilo Amaterasu: Mi Amada Hermana, Trae la Muerte).

Un poderoso rayo de fuego igual de caliente que el sol fue disparado contra Bishamonten, generando una explosión casi comparable a una bomba atómica, calcinando por completo una enorme parte de la jungla. El Shikigami más poderoso de Malice Mizer había sido reducido a cenizas.

Akira descendió del cielo y se reunió con el resto de sus compañeros, tanto él como la pareja de espadachines desactivaron el Kamui, sintiendo una sensación de cansancio y mareo momentáneo.

—¿Creen poder seguir? —preguntó Tsukiyomi, manifestándose junto a Amaterasu y Susanoo.

—Eso creo... tenemos que ayudar a los demás con Shinigami —respondió Yamiko, llevándose la mano a la frente.

—Traten de abstenerse de volver a usar el Kamui otra vez hoy, no querrán que pase lo mismo que ocurrió con Ibaraki Douji —advirtió Susanoo, cruzado de brazos.

—No lo haremos, Susanoo-dono —aseguró Rai, asintiendo con la cabeza.

La batalla contra Shinigami seguía sin descanso, la Encarnación de la Muerte usó su Umbrakinesis para crear dos clones suyos, armándolos con los otros dos Tesoros Sagrados de Malice Mizer, Daikokuten y Benzaiten. Los dos clones de Shinigami eran igual de fuertes que él y se movían independientemente de su invocador.

El clon armado con el martillo estaba enfrentando a Shawn y a Samuel, mientras que el que estaba armado con el biwa empezó a tocarlo con todas sus fuerzas, generando todo tipo de terremotos en la isla.

El Shinigami original estaba enfrentándose cara a cara contra Sara García, los dos estaban completamente igualados, Shinigami por sus habilidades con la espada y experiencia milenaria y Sara por sus habilidades como Wandering.

—De entre todos los payasos aquí reunidos, tú eres la más peligrosa junto a mi padre, por eso te mataré primero —dijo Shinigami, a medida que lanzaba cortes y cortes contra Sara.

—Perro que ladra, no muerde —replicó con una sonrisa burlona.

El Colmillo del Murciélago empezó a levitar fuera de las manos de Sara, defendiéndola de los ataques de Shinigami sin que ella mueva un solo dedo.

—¡Fuego Purificador: Fuego del Exorcismo! 

Sara lanzó una llamarada de fuego dorado que por poco conecta de lleno contra Shinigami, viéndose obligado a usar Luto para poder esquivarlo y conectarle un corte a la chica a un costado. De haber recibido ese ataque de lleno, ya hubiera perdido.

—Sin duda debo matarte primero —musitó con una mueca de desagrado— ¡Sucker for Pain!

Con su diabólico conjuro, Sara sintió en toda su alma el dolor de recibir en su intimidad una pera de la angustia, desgarrándole todo su interior y dejándola paralizada mientras sudaba frío.

—¡Mierda! ¡Un golpe en mis senos duele menos que esto! —pensó con ambas manos en la entrepierna mientras se mordía el labio inferior.

Shinigami se apresuró para intentar cortarla por la mitad con su nagamaki, pero su ataque fue detenido por el ante brazo de Raguel, el cual estaba recubierto por Energía Kundalini en forma de guantelete.

—¡Aléjate de ella, sobrino de mierda! —gritó la virtud de la generosidad, con sus ojos brillando de dorado.

Raguel bombardeó al samurái negro con un combo de golpes verticales en todo su torso, destrozándole todos los huesos de la caja torácica y mandándolo a volar con un golpe en su plexo solar con que lo hizo vomitar sangre. Pese al dolor, Shinigami contraatacó con una sierra de sombras, obligando a Raguel a elevarse en los aires con sus alas para evitarla, pero nadie le daría ningún descanso.

Ada Lovecraft envolvió sus brazos con Strangers in the Nigth, convirtiéndolos en látigos cuyos golpes provocaban un dolor sin igual. Cada golpe que recibía Shinigami de la chica gótica era similar a ser quemado vivo, por lo que volvió a usar Luto para para atacarla de lleno con sus flamas azuladas. Ada quedó prendida fuego en esas infernales flamas, gritando de dolor. 

La virtud de la generosidad llegó a su rescate, neutralizando las llamas con su magia y usando Buena Samaritana en ella para curar sus heridas.

—La situación está escalando rápidamente de dificultad, todavía no usaré mis armas secretas, las reservaré cuando sea estrictamente necesario —pensó Shinigami, viendo venir hacia él a Tomoe, Azrael y a Gabriel—. Sin embargo, si quiero deshacerme de ellos rápidamente, será mejor que use mi Hechizo de Campo. Aunque claro, existen riesgos, no afectará a todos ellos, sobre todo a mi padre. Aún así, me servirá para poder reducir el número de mis enemigos.

Justo cuando trazaba su estrategia, fue atacado nuevamente por Koda Iyotanka, quien le lanza golpes y patadas sin parar a una velocidad alucinante.

—¿Otra vez tú, saco de pulgas? Veo que no te bastó ser cortado por mi Tesoro Maldito —dijo Shinigami, sintiendo asco hacia el chaman que estaba enfrentando—. Espero que te guste recibir la tortura del Toro de Falaris. ¡Sucker for Pain!

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Shinigami pensó que gracias a su Arte Místico tendría vía libre para atacar y debido a su exceso de confianza, recibió de lleno un golpe en su sien izquierda que le destrozó esa parte del cráneo y de haber sido un humano normal, hubiera muerto. Para su fortuna, su manipulación de las almas le permitía regenerarse de ello.

Esta era la técnica del Arte Místico de Koda, Hunting Bear: Protection of Spirits (Protección de los Espíritus), la cual le permite repeler los ataques de otros Artes Místicos con la condición no poder usar cualquier otra técnica mientras tenga activada esta.

—¡Esto es por Grace Cormac! —exclamó con una ferocidad animal.

Koda agarró a Shinigami de la cara y le conectó un cabezazo tras otros, dejándolo desorientado por completo. Esta era la oportunidad que estaba esperando Koda por completo.

—¡Hunting Bear: Punishment of the Ancestors! (Castigo de los Ancestros)

Tras darle un golpe de palma en el pecho, Shinigami fue testigo de como se le quedó grabada la marca dorada de una huella de oso, sintiendo como toda su Energía Kundalini y Miasma desaparecía por completo.

—¡Carajo! ¡Es una técnica de sellado! —dijo para sus adentros, palideciendo de miedo

Con sus dos energías selladas, sus clones de sombra desaparecieron junto con los Tesoros Sagrados de Malice Mizer.

No solo eso, sino que también, el control sobre las almas de Shinigami se debilitó.

Dentro de él, en un espacio hecho de cristal morado, estaba prisionero el alma de Saneyoshi Nobunaga. Ese fue el espacio en donde Shinigami lo confinó al obtener el completo control de su cuerpo. Anteriormente había intentado por todos los medios salir de aquella prisión y detener a Shinigami, pero todos sus intentos habían sido inútiles hasta ahora. 

Nobunaga sentía como la fuerza de Shinigami disminuía, por lo que decidió hacer otro intento y golpeó la pared de cristal con todas sus fuerzas, logrando crear algunas grietas en su superficie.

—¡Si! ¡Solo un poco más! —exclamó mientras continuaba golpeando la pared de cristal—. No dejaré que lastimes a nadie más, Shinigami, debemos de pagar por todo el daño que hemos provocado. Yo... ya no merezco reunirme con Kanae y tú ya no mereces estar vivo.

La situación lucía desesperada para Shinigami, todos los hechiceros y arcángeles se le lanzaron encima y para empeorar las cosas, el Equipo Kuroneko llegó a escena.

—¡Mierda! ¡Oye, Biggie, es hora de matar a todos estos putos! —exclamó Shinigami, desesperado.

—¿"Biggie"?... ¡Maten al Malebranche, no hay tiempo! —advirtió Tomoe, sabiendo lo que estaba planeando la Encarnación de la Muerte.

El antiguo Malebranche de Miyamoto Musashi apareció y buscaba venganza por la muerte de su señor, por lo que le otorgó a Shinigami el Cetro de Coga, el Tesoro Arcano de Olorun. Gracias a ese Tesoro Arcano, fue capaz de liberarse de la técnica de sellado de Koda y aumentar sus reservas de Energía Kundalini.

—¡Hahahahahaha! Se acabaron los juegos, los ejecutaré aquí y ahora —dijo entre risas neuróticas, realizando un mudra al cruzar sus dedos índice y medio de su mano derecha—. Take my hand through the flames (I torture you). I'm a slave to your games. I'm just a sucker for pain. I wanna chain you up, I wanna tie you down (ooh-ooh). I'm just a... Sucker for Pain.

El Hechizo de Campo de Shinigami se manifestó, creando por todo el campo de batallas, decenas y decenas de instrumentos de tortura y métodos de ejecución antiguos. Inmediatamente, en la mente de todos los presentes (menos Tomoe) apareció la información del Hechizo de Campo. Los brazos sombríos que se extendían desde aquellos instrumentos tratarían de atraparlos para ser torturados o ejecutados y estos, tenían una mayor preferencia en usuarios de Energía Kundalini que en usuarios de Miasma, como una condición de Shinigami para potencia aún más aquella técnica y la segunda condición que aumentaba su poder, es que todos aquellos afectados por la técnica recibirían toda la información en sus mentes. 

—Esto no es bueno —dijo Raguel, sudando frío.

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Las manos negras fueron como balas queriendo capturar a casi todos los presentes. Samuel tuvo que usar a Demons Punisher para poder protegerse de estos con su All We Need is Blood; Shawn utilizó a Gungnir para crear un escudo a su alrededor con las cientos de cuchillas en las que se podía dividir; Raguel usó su magia para crear un escudo de fuerza alrededor suyo; Gabriel decidió activar de una vez la Armadura de Fuego Celestial para que las manos fueran incapaces de tocarlo; Azrael utilizaba Luto; los tres espadachines del Equipo Kuroneko usaban las habilidades de sus espadas para poder repelerlas; Ada se protegía a ella y a Koda gracias a la barrera de Strangers in the Nigth; quienes la tenía más fácil eran Sara, Kirei, Nara y Yumei, quienes al tener Miasma, los tentáculos no iban tras de ellas con tanta insistencia como con los demás y en cuanto a Tomoe Gozen, estos la ignoraban por completo al no tener ni Energía Kundalini ni Miasma.

Las cuatro mujeres fueron todas en contra de Shinigami, quien dejó atrás su Tesoro Maldito para luchar con el Cetro de Coga y con el Anzuelo de Maui. Con toda la Energía Kundalini corriendo por sus venas, se había vuelto aún más fuerte. Nara y Yumei fueron cortadas a la mitad por Shinigami quien ahora era capaz de moverse a la velocidad del rayo y Tomoe casi pierde la vida de no ser porque usó el Fumetsu para protegerse, quedando malherida en la tierra, la única que pudo reaccionar al ataque y bloquear fue Sara, gracias a sus nuevas capacidades físicas y al Tercer Ojo y Kirei, al hacerse intangible a tiempo, atravesando el suelo.

Shinigami agitó el Cetro de Coga y del cielo cayó un gigantesco rayo que por poco da de lleno a Sara, contraatacando con el Fuego Purificador, lanzando una serie de patadas al estilo del Kalaripayattu, pero Shinigami podía esquivar cada uno de sus ataques a la perfección.

—¡Hahahahahaha! ¡Hasta luego! —exclamó Shinigami, con una sonrisa neurótica— ¡Sucker for Pain!

La Encarnación de la Muerte provocó que Sara sintiese en toda su alma el dolor de recibir mil latigazos, pero esto en vez de dejarla paralizada, solo hizo que la chica de cabello arcoíris sonriera con locura antes de lanzarla una drop kick en toda la cara que le destrozó casi todos los huesos del cráneo.

—Adelante... sigue usando ese maldito Arte Místico tuyo —dijo Sara, siendo rodeada por una oscura aura de Miasma—. Recibiré ese dolor con gusto y me volveré más fuerte.

Sansaar. Naraka Saamraajy (Samsara. Reino del Naraka), una de las nuevas habilidades de Sara como Buda. El Reino del Naraka le permite a Sara convertir el dolor en poder y placer, similar a la adrenalina. Con esta habilidad activada, la única manera de derrotar a Sara es matándola.

—Sigamos bailando hasta que alguno quede muerto, Shinigami —desafió Sara, sonriendo con aires de locura.