Mav estaba muy entrada en su libro de Química, al parecer no daba una en esa materia pero tenía sus razones, el profesor llegaba a la clase como si uno ya supiera todo y además de eso la clase le parecía suuuuuper aburriiiida. No solo ella, Fanny también había reprobado, pero Fanny era Fanny, le daba igual hacer un exámen bimestral que uno recuperatorio o bueno, al menos eso aparentaba con su actitud tranquila. Perl Mav no quería ser así. Aunque siempre era tranquila bajo presión cuando estaba sola no resistía el impulso de tirar todo lo que encontrara en su habitación. Estaba estudiando en el lugar secreto pero solo lograba leer la primera frase de su libro y al poco rato se le olvidaba. Estaba maldiciendo el día en que a alguien se le ocurrió inventar lo que llamamos ciencia, cuando escuchó que alguien entraba. De seguro era Fanny ya que habían quedado de estudiar juntas pero se sorprendió al ver que el que entraba era Federico.
-¡Ey! Mav. ¿Qué haces aquí?-Preguntó confundido y un tanto nervioso.
-Estoy viendo cómo llamar a mi unicornio de colores,¿Tu qué crees?-Preguntó Mav un tanto irritada y señalando de manera obvia el libro.
-Ya entiendo. No era necesario contestar con sarcasmo. Hieres mis sentimientos.-Dijo en tono bromista y con una hermosa sonrisa en su rostro que podría derretir a cualquier chica.
Mav soltó una risita tonta y aventó el libro como quien avienta una bolsa de papas al piso.
-Qué delicada y cuidadosa eres con tus cosas.
-Me tenía harta ese libro de mi*rda.
-Ya sé por qué estás así. ¿Reprobaste cierto?
-Sí. Y no quiero ir a clases extra. Soy una persona artística y que disfruta estar al aire libre patinando y tomando fotografías o dibujando pero no en un salón estudiando unas estúpidas fórmulas de no se qué cosas.
-Te ayudaré. No lo escuchaste de mi, pero va a haber una feria de ciencias o algo así. Trabajan en parejas y presentan un proyecto. Un millonario desconocido va a financiar el premio de los ganadores. Nadie sabe quién es pero el premio consiste en ir a N.Y a conocerlo y hacer una pasantía pagada por todas las vacaciones de verano. Además de que con eso pasas con diez en química y matemáticas.
-¡Genial! Pero no han dicho nada los profesores.
-Porque se supone que este concurso por así decirlo es para dar una oportunidad a los chicos que reprueban pero siempre le dicen a los inteligentes porque así tienen la seguridad de que levantarán el prestigio de la escuela ya que, como dije, son los inteligentes.
-Qué padre. ¿Y tú por qué sabes?
-Digamos que soy parte de la élite de los inteligentes.
-Eres un...
-¿Un qué?
-Vamos. Admítelo...
-Está bien. Soy un nerd. Ya... Lo dije. ¿Contenta?
-Sí ,un poco.
-Ahora ponte a estudiar porque quiero que seas una competencia digna.
-Descuida. Me encargaré de patearte el trasero.
Ninguno de los dos se dio cuenta de que estaban demasiado cerca. Fanny, que ya estaba ahí desde poco después de que Federico entrara decidió romper la burbuja.
-Le patearemos el trasero, querrás decir Mav.
-¿Desde cuándo estás ahí?
- Entré casi detrás de ti. Por poco me cierras la puerta en la cara.
Conversaron un rato hasta que el reloj que habían puesto en la habitación marcó que era hora de volver a clases.
Federico fue el primero en irse pues de seguro Leonardo, o peor aún, Saúl iban a interrogarlo sobre su ausencia en la hora del descanso y de seguro Saúl empezaría a molestarlo shippeandolo con alguna "misteriosa chica" como cada vez que huía al lugar secreto a estudiar.
Mav y Fanny se quedaron pensando en qué harían como proyecto para la feria de ciencias pero como esa no era su materia obviamente estaban en blanco.
Mav solamente hacía bocetos de vestidos en la clase de química pues se había resignado a reprobar. Fanny leía algunas cosas sobre máquinas y herramientas, a veces sobre fórmulas químicas con Mav pero a ninguna le servía eso pues no llevaban la materia de laboratorio sino de física.
Entraron al aula de clases mientras seguían discutiendo sobre si se inscribirían al concurso o se quedarían horas extra para el exámen recuperatorio. Entró la maestra de matemáticas y ninguna de las dos prestó atención pues seguían en lo mismo.
-Se supone que tú eres la creativa. Piensa en algo.
-Fanny. Lo único que tengo son estos bocetos pero no creo que unos vestidos diseñados con muy buen gusto nos ayuden ahora.
-¡¿Me pueden explicar lo que acabo de decir señoritas?!
Las dos voltearon con cara de desorientadas.
-¿Qué tienen ahí? Expliquenle a la clase de lo que están hablando.
La maestra tomó los bocetos de Mav y ésta se apresuró a hablar.
-Nos preparábamos para la feria de ciencias maestra.
-Unos vestidos no son ciencia niñas.
-Es que planeabamos hacer algo así como la armadura de un super héroe. Algo así como un traje que se vuelva invisible.
Mav volteó a ver a Fanny cuando la escuchó decir eso con unas ganas de querer matarla por decir semejante cosa. Toda la clase volteó a verlas con sorpresa y algunas, como Linda y sus amigas, con cara de burla.
-Solo espero que no denigren a esta escuela señoritas. La feria de ciencias no es un jueguito absurdo. Pero bueno. Si ustedes están en el concurso deberían empezar a armar su proyecto en el laboratorio. Vayan.
Mav y Fanny salieron directo al laboratorio, ya estaba decidido, entrarían al concurso ese y demostrarían a todos que los alumnos promedio y los reprobados también tenían cerebro. Solo por el pequeño detalle de que tenían que hacer que un objeto se volviera invisible.
-¡Porqué dijiste que haríamos un traje invisible Estephany!
-No sé. Sólo se me salió y ya.
-Yo me encargaré del traje pero tu mo harás invisible.
-Y yo por qu...
-¡Porque tu abriste la bocota!
-Pero fue para salvarnos de la situación en que nos metiste por no saber susurrar sino que te pones a gritar.
-Ese no es el punto.
-Nada ganamos con quejarnos Mav.
-Tienes razón. Ahora hay que ver cómo rayos hacer un vestido digno de un super héroe.
-¿Oye y quién crees que sea el millonario ese?
-Fanu controla tus hormonas y ponte a pensar en qué hacer.
-Oye. Ahora que lo pienso. La mayoría de los inscritos son de nuestro año. Osea que no llevan química sino física por lo tanto podemos presentar un trabajo de química y en eso sabemos que somos buenas.
-Si pero no justifica el que debamos hacer un vestido INVISIBLE.
-Te pones histérica. Me das miedo.
Llegaron al laboratorio y todos se sorprendieron al verlas ahí. Federico más que sorprendido solo sonrió de esa forma tan hermosa para Mav y siguió trabajando con su compañero. Al parecer estaban haciendo un tipo de dron. Entraron sin darle mucha importancia a los demás y se sentaron en una mesa del laboratorio bastante lejos de los demás. Mav sacó algunos de sus bocetos pero antes debían tener una idea clara de lo que haría el traje.
-Mav, leí en una revista sobre algo llamado retroreflectores que practicamente son como una especie de espejos que hacen "invisible" al objeto que los tiene.
-Entonces podemos usar eso para el vestido pero ¿con qué los hacen exactamente?
-Con hierro y titanio
-Fanny ¿te imaginas a un superhéroe con un traje super pesado por ser de metal?
-Pero podemos alterar su composición química por algún otro metal. Que sea más ligero.
-¿Quién eres chica inteligente y qué le hiciste a mi amiga?
-Mav. Se supone que eres la optimista.
-Está bien. ¿Pero qué metal podría ser lo suficientemente ligero y duro a la vez?
-Vibranio.
-Fanny no seas estúpida. Está bien que nos obsesionen los cómics de superhéroes y en especial el de Capitán América pero eso es una locura. No existe tal metal.
-Pero podemos crearlo. Por alguna razón hay elementos sintéticos.
-Suponiendo que lo creemos....
-¿Qué tienes Mav?
- Podríamos incluir más cosas al traje como el ocultar cosas como dagas o cuchillos.
-Ahora me estás asustando en serio.
-Puedo coser un vestido que oculte esas cosas y por lo que sé el Vibranio se supone que es ligero y resistente a la vez por lo tanto, además de ser invisible puede bloquear balas y eso.
-Para crearlo debemos tener dos metales diferentes, uno super ligero y otro super resistente.
-El traje de Iron Man. Fanny. Era de oro y titanio y esquiva balas.
-¿Iron Man? No he escuchado de un superhéroe que se llame así. ¿De dónde es el cómic?
-No es un cómic. Hace poco salió en el noticiero sobre un tipo con un traje de metal en Los Ángeles que salvó a unas personas.
-¿Un superhéroe entre nosotros?
¡AAAAAAAAAAAA! las dos gritaron emocionadas y todos voltearon a verlas. No tenían ni siquiera un cuaderno fuera. Solo las habían visto platicando.
-Ok. Luego te cuento de eso. Ahora hay que ganar ese concurso Fanny.
-Sí. Yo te ayudo a hacer el vestido sólo dime qué hacer.
-Tenemos un problema. ¿Cómo rayos pondremos metal en un vestido?
-Podemos crear una tela.
-Todo lo quieres crear Fanny.
--Tu no tienes ninguna idea
-Espera. Tu sabes sobre máquinas y eso.¿Hay alguna máquina que corte telas?
-Sí ¿por? Es obvio.
-Creamos el Vibranio y mientras esté en proceso de fundición podemos cortarlo como una tela de encaje. No importa de qué grosor sea, el vibranio siempre será resistente.
A pesar de que parecía una locura el plan fue armándose hasta que faltaba una semana para la feria de ciencias.
Los compañeros de Mav y Fanny las miraban raro pues solo las miraban cosiendo en lugar de verlas con fórmulas de química o alguna maqueta de un volcán de lava ya que las creían así de mediocres. Federico no dudaba nunca de sus amigas, menos de Mav pero en ese momento se empezaba a arrepentir de haberles dicho sobre el concurso.
Mav y Fanny trabajaban en las tardes con el Vibranio y en el laboratorio con el vestido pues querían sorprender a sus compañeros.
Lograron, después de días sin dormir y de investigación, crear un tipo de encaje hecho con vibranio, añadieron un poco de tecnología y con solo oprimir un botón se activaron los retroreflectores y los vestidos (sí, hicieron dos porque eran amigas y si una se destaca, la otra también) practicamente desapareció. Ocultaron dagas en el vestido de Mav y al de Fanny le añadieron una especie de raysho láser (me acordé de Monsters Inc. Jajaja). Además de que portaban como accesorios unos aparatos que activaban retroreflectores en las partes del cuerpo visibles. Un día antes del concurso los probaron para saber si funcionaban. En la habitación de Mav, se pusieron los trajes y los activaron.
¡WOW! Fue lo único que lograron decir las chicas al ver cómo sus reflejos desaparecían del espejo pero ellas sí se podían ver a sí mismas. No sabían cómo era eso posible. Oprimieron de nuevo el botón de sus trajes y se hicieron visibles de nuevo.
-Deberíamos ganar un premio Nobel o algo así ¿no?
-Ya lo creo Fanu.
Se quitaron los trajes pues no querían dañarlos. Fanny se quedaría a dormir en casa de Mav y juntas se irían a la escuela. No habría clases pues todo el día estaría dedicado al concurso. Mav no esperaba que sus padres fueran, ya estaba acostumbrada a que la ignoraran. Además Megan tenía un estúpido baile en la primaria que justamente coincidió con el día de el concurso de Mav. Estaban cenando tranquilamente ya que tenían invitada y por lo tanto Megan hacía lujo de sus modales, el padre de Mav llegó de trabajar, traía un regalo para Megan, un peluche en miniatura como los que últimamente le llevaba. Dio un beso a la madre de Mav y se sentó en la mesa.
El ambiente estaba tenso debido a que nadie hablaba hasta que el padre de Mav decidió hablar.
-Querida, mañana no podremos asistir al baile de Megan.
-¡¿por qué No?!
-Un socio que vive en Nueva York vendrá a un concurso que se llevará a cabo en la escuela a la que asisten Mav y su amiga. Es un poco excéntrico ese tipo, además de que no sé como describir su sentido del humor. Parece un adolescente. Casi obligó a todos a ir con él mañana, creo que a los chicos que ganen se los llevará con el durante las vacaciones a Nueva York.
Ni Mav ni Fanny lo podían creer, el tipo del que estaban hablando probablemente sería con el que pasarían todas las vacaciones de verano. El sólo pensar en cómo lo describió su padre, hacía que Mav quisiera que el tiempo avanzara más rápido para conocerlo.
Al fin de todo, mañana no sería un día tan malo. Les restregaría en la cara a sus padres que tenía cerebro y talento y que su sueño de ser diseñadora sí la podía llevar a ser una persona exitosa.