—¿En qué momento llegamos a este punto? —emite Aylin en voz bajar al estar rodeada de vampiros en un mismo espacio reducido, exactamente la habitación del Rey. Todos con opciones distintas, formas de ser y pensar siendo un mismo tema a discutir. Y ahora es uno de ellos y sus problemas son los de ella.

Tan solo pensar en la presencia de Derek y su creación en el Castillo, ya afecta a todos.

Aylin no deja de ver a cada uno, sin intervenir mucho prestando atención permaneciendo situada a un lado de ese rey vampiro.

—Debemos hacer algo, debe haber una manera de evitar que lleguen hasta aquí —espeta Mía sin dejar de morderse sus largas uñas haciéndolas más puntiagudas y filosas.

—No hay nada que se pueda hacer nena. No deben tardar en aparecer —le responde Esteban cruzandose de brazos.

—Debiste evitarlo y esto no estaría pasando —emite Ashley en voz baja sin embargo fue suficiente para captar la atención de aquel rubio vampiro.

—¿Te atreves a culparme bombón? Como les conté a todos, prácticamente me mataron. Estoy arriesgando mi eternidad por todos aquí.

—Sigues existiendo Esteban, no exageres —Owen toma asiento en la cama sin dejar de verlo —aunque no por mucho tiempo si es cierto lo que dices. Vas a morir con esa vampiresa —hace una corta pausa, sonríe burlón al causar su mirada asesina — por eso apoyen mi idea, para derrotar a Derek y a su creación solo es cuestión de derrotarte a ti.

Obtiene su silencio

—No van a dañar a Teban, debe haber otra manera de detenerlos.

—Mía —Drake la tranquiliza al sostenerla del hombro —controlate pero Owen tiene razón. El Castillo se salvará solo si ese vampiro y su hija son destruidos —fija la vista en Esteban— deja la cobardía y sé el héroe. Que la eternidad de todos permanezca si te sacrificas. La muerte de un solo vampiro será la salvación del resto.

—A eso yo le llamo traición y a este punto tan solo escucharlos, no sé que es peor —sus colmillos comienzan a sobresalir— Yo si valoro mi eternidad y no voy a sacrificarme por nadie y mucho menos para salvar a un par de desgraciados como ustedes —observa a Drake y después a Owen —además que no pienso dejar solo a Noah. Esa no es una opción.

Los tres vampiros gruñen y dejan de verse

—Y yo no voy a permitir que usen a Esteban con esa mala opción. Nadie tiene que morir, nadie de aquí —Aylin se atreve a hablar en voz alta captando la atención de todos.

—Mi madre tiene razón. Él no puede morir porque se llevará a mi creadora al mismo destino y no pienso perderla otra vez —Ana Liz se acerca tres pasos a ella y cruzada de brazos se voltea hacia el resto— recuerden que todos se vinculan.

—Entonces ¿cuál será la solución? ¿Esperar a que estén aqui y maten a todos incluyendo a nuestras creaciones? —le responde Drake en tono molesto— yo apoyo la idea del sacrificio.

Ana Liz le lanza una mirada fulminante

—No vas a matar a mi madre —rápido es detenida por Owen del brazo al levantarse con rapidez. Ella luciendo su apariencia de vampiresa bruscamente se safa de su agarre—y tu no me toques, por respeto a Mía y a Dean, no te mato Drake. De ellos a ti, prefiero a que tu te sacrifiques.

—Concuerdo, no sería alguien que se extrañaría —responde Esteban con disfrazada burla.

—Basta, es obvio que todos aquí estamos muy estrasados. No estamos pensando bien la situación. Ana tiene razón, no es esa la opción pero si me preocupo por los niños y mi hijo. Llevan muy poco tiempo en la eternidad.

—Tranquila Mía, ya están a salvo en los calabozos, en la celda oculta —le responde Ashley —Jonathan, Lezy y Dean protegerán a Alina y a Noah. Van a estar bien.

—Sigo pensando que ese no es buen escondite.

—Es lo más cercano a su salvación Esteban. Si ellos llegan, la salida será cerca y los sacarán del Castillo.

—Insisto con la idea —canturrea Drake y otra vez Ana Liz es detenida por Owen.

Aylin niega y gira a ver a Darren que inexpresivo se mantiene de pie e inmovil. Sin dejar de escucharlos.

—No se dan cuenta que esto nos está poniendo en contra de nosotros mismos.

—No soy quien quiere la muerte de otros  nena para salvarse a si mismos.

Drake da un paso adelante

—Aunque no lo digan en voz alta, todos piensan que tu muerte es la solución ¿o acaso me equivoco?

En la habitación reina el silencio

—Traidores —masculla Esteban entre dientes.

—Silencio todos —resuena la voz de Darren y capta su atención—esa no será opción, nadie de aquí va a decidir sobre la eternidad de Ayline porque la involucra así este unida al maldito de Esteban. Nadie —repite y observa a cada uno— no se atacará a Derek hasta destruir ese vínculo quien lo intente será el primero en morir por mi.

—Entonces ¿qué vamos a hacer Darren? —le pregunta impaciente Ashley— todos corremos peligro por esa vampiresa. Tampoco quiero ver morir a Aylin o a Esteban pero todos tememos por nuestra propia eternidad.

Darren da un paso adelante

—Se buscará el maldito hechizo que rompa el vínculo. Aunque no exista se creará. De otra forma no se atacará a Derek, no usando a Ayline o a Esteban.

Causa el silencio de todos y en algunos la molestia.

—Tenemos una ventaja, puedo evitar que nos ataquen cuando esa maldita requiera la sangre de Esteban —continúa Darren— esa si es una opción y forma de negociar.

El rubio frunce el ceño

—No seré tratado como una bolsa de sangre. Me niego a alimentarla sea cual sea el acuerdo que llegues con él —gira a verlo— no lo seré de ella, siendo otra vampiresa, no me importaría pero su creación es de lo peor.

—Ya lo decidí Esteban

Él gruñe en respuesta

—Es la peor decisión como Rey, Darren. Si no me sacrificas a mi tampoco lo harás con Esteban —le dice Aylin captando su mirada—sé que la situación es crítica pero no tenemos que recurrir a esas dos opciones. No sacrificios, no que uno de nosotros cargue con todo.

Los vuelve a invadir el silencio por eternos segundos.

—No le encuentro una solución a esto —habla Ashley acabando con el silencio.

—Siempre hay una, voy a solucionar esto y evitar... —Darren guarda silencio y gira a ver hacia la puerta. Al instante su apariencia de vampiro es visible.

Cada uno se alerta al un sentir un distinto poder.

—Llegaron —anuncia Esteban—y solo tuvimos unas horas de paz.

—Darren...

Aylin guarda silencio al ver a ese vampiro avanzar hacia la puerta.

—Iré solo, todos quédense aquí y actúen si es necesario evitando dañar a ciertos conectores.

—No puedes ir solo Darren —Aylin avanza dos pasos, él se detiene cerca de la puerta y se da la vuelta— te acompaño.

—Eres la menos indicada pequeña cuando ambos estamos en desventaja —le dice Esteban sin verla.

—Dije que iré solo

—No, yo si puedo ir. Si te atacan, tu creación te ayudará. Será exactamente igual —espeta Ana Liz decidida.

Aylin niega varias veces

—Que Darren vaya solo y se encargue. Es su deber como rey.

—Owen calla —le advierte Ana Liz molesta

—No necesito la presencia o compañía de ninguno. Conmigo solo hablarán —dicho esto y Darren se da la vuelta hasta salir de la habitación dando un portazo.

Ana Liz gruñe en respuesta y se da la vuelta mientras Aylin no deja de ver hacia la puerta.

Nadie menciona palabra siendo un silencio abrumador.

Los próximos minutos transcurren con lentitud y empeora la situación.

—Siguen en la sala, son dos y el poder de Darren —agudiza Esteban su audición e informa en voz alta al resto.

Aylin intenta profundizar su sentido auditivo. Sin embargo falla.

—Ay no —exclama Ashley

—¿Qué pasa? ¡No escucho nada! Solo voces mezcladas de todos los vampiros afuera —emite alterada Ana Liz estando en la misma situación que su progenitora.

—Eso diferencia a un purasangre de un convertido.

—Y por eso son los principales en estar en peligro —le responde Owen sin dejar de ver desafiante al rubio vampiro.

No obstante, un golpe en la puerta capta la atención de todos y algunos se dan la vuelta.

—¿Quién abrirá? —cuestiona Mía sin embargo nadie se mueve.

Otro golpe en la puerta y es suficiente que uno de ellos se dirija a abrir.

—Ten cuidado Nik

Dominik, el vampiro más cerca a la puerta se acerca cada vez más. En todo momento no intervino, permaneció como una estatua en la esquina de la habitación.

Cuando abre la puerta, se encuentra con la presencia de Darkiel del otro lado.

—Permiso —se adentra a la habitación con las manos detrás de su espalda y busca a una vampiresa en especial —mi Señor solicita la presencia del alma del rey en la sala y por obligación es mejor que cooperen así como su sobrino lo hizo.

Aylin se tensa al instante al recibir su mirada.

—No te la vas a llevar a ningún lado

Esteban baja sus brazos y se mantiene alerta a una distancia más cerca que él. Rápido Ana Liz llega hasta su madre y se coloca al frente de ella. Sin embargo Aylin se inclina un poco.

—Descuide señor Williams, le doy mi palabra que no se le hará daño. Si estamos aquí no es para atacar, es todo lo contrario. Presentar y hablar —amplia su sonrisa luciendo sus colmillos puntiagudos— solo vengo por ella, si la señorita Elizabeth lo requiere, vendré por usted.

—Esteban —lo detiene Aylin al verlo dar un paso adelante —estaré bien. Iré con él —comienza a avanzar— quédense aquí. Estaré bien —repite cuando llega a situarse a su lado y comparte una mirada con su hija.

—Más le vale o de lo contrario por mí madre, los va a atacar todo el Castillo.

Ashley se acerca a Ana Liz y coloca su mano en su hombro.

—Vete tranquila Aylin pero si es necesario, dañate a ti misma para escapar.

Darkiel sonríe con burla y se da la vuelta

—Siganme —se convierte en cuervo y sale volando por la puerta.

—No se preocupen por mí —Aylin asiente y retrocede sin dejar de verlos y al final usa su velocidad para llegar a la sala después de ver a ese cuervo ser el primero en entrar.

Y en efecto, Derek se encuentra presente, de pie cerca del trono y enfrente de él a pocos metros de distancia, se encuentra Darren cruzado de brazos.

Y a medida que Aylin se adentra y se acerca a Darren, observa a Darkiel en su forma normal tomar lugar a una lado de una vampiresa que le da la espalda. Ella sin dejar de ver con asombro la decoración en un punto hacia arriba.

De reojo Darren observa a Aylin situarse a su lado a un reducido espacio. Ella alerta al ver a esa vampiresa presente. Presta más atención en ella que en su creador aunque ambos le causan esa sensación extraña.

—Señorita Elizabeth, le presento a la señorita Valentains, el alma del rey.

Entonces ella deja de ver hacia arriba y se da la vuelta.

Aylin observa con asombro su apariencia. Frente a ella esa vampiresa luce totalmente recuperada, delgada, demasiado pálida, más alta que ella a la misma altura que Darren. Su cabello es de color negro, lacio más abajo de los hombros cortado en línea recta con un flequillo en su frente sin embargo dos pinzas en su cabello sujetan la parte alta. Pero llama más su atención su rostro, luce joven apesar de la antigüedad. Sus labios rojizos se curvan en una media sonrisa dejando visibles sus colmillos. Además que posee ese tono carmesi en sus ojos.

Aylin no deja de analizarla por completo. Elizabeth luce un vestido color crema demasiado antiguo, de mangas largas y de encaje, que se le ciñe a su cintura y brazos. Parece una vampiresa de otra época al llevar guantes blancos cubriendo sus manos.

Cada vez su poder incrementa y es más fuerte que todos.

—Un gusto conocerla Aylin —su voz suena débil y lenta. Hace una corta pausa y con elegancia hace una reverencia al agacharse un poco y apoyar sus manos a los costados de su vestido— mi padre me contó todo— se endereza— usted fue mi reemplazo.

—Nunca lo fui —se atreve a hablarle Aylin— fui cruelmente engañada por un eterno tiempo. Me alejaron de todo.

—Conozco esa sensación de vacío —Elizabeth desvía la vista— para mi todo este mundo es nuevo. Volví a despertar —fija la vista en Darren— y cuando mi padre me contó que tengo más familia, no dude en venir.

—Y aquí no es bien recibida —le responde Darren con frialdad.

—Pero... pertenecemos al mismo linaje —frunce el ceño— somos Valentains y creí que era la única hace tantos... Siglos —hace una corta pausa— Eres mi familia.

Ella levanta su brazo en su dirección dejando el dorso de su mano expuesto.

—No te considero nada mío. Ni tampoco soy de ese maldito linaje.

Elizabeth lo ve con confusión y baja su brazo.

—Tú actitud —entrelaza los dedos de sus manos, apesar de llevar guantes de seda se distingue su anillo— me parece tan... extraña. Su rechazo... Sus palabras cuando puedo saber que me teme... —ladea un poco la cabeza— teme que dañe a su alma... Sus pensamientos son tan confusos.

Aylin entre abre sus labios y gira a ver a Darren. Él inexpresivo mantiene la vista al frente.

—No somos su enemigo, no atacare... solo quiero conocer un mundo que se me prohibió... Conocer todo —borra su sonrisa— nunca dejé de ser un peligro y causar temor por quien soy.

Darren deja de verla y concentra la vista en su creador.

—¿A qué vinieron exactamente?

Derek ensancha su maliciosa sonrisa

—A presentar a mi hija, merece otro trato y aceptación a este mundo vampírico. La situación es tan fácil sobrino —sus colmillos crecen cada vez más— todo implica cambios.

Aylin de reojo lo observa sin embargo mantiene la vista clavada en ella.

—Solo di lo que tengas que decir Derek y largate llevándote a tu maldita creación.

—Le exijo respeto a mi creador —rápido Darkiel intervine y extiende su brazo como barrera a que avance. Elizabeth al darse cuenta pestañea varias veces ocultando el tono oscuro de sus ojos y baja la vista y sus brazos —conozco el daño pero no es esa la forma.

Rápido se da la vuelta dándoles la espalda.

—No la provoque que la señorita Elizabeth sigue bajo el efecto del despertar. Sus sentidos son demasiados sencibles.

—Una excusa más que debieron tomar en cuenta antes de venir. En primer lugar no debieron traerla.

—Darren, su presencia es necesaria. Como bien sabes, es mi descendiente y aun hay temas a tratar que la incluyen —Derek hace una corta pausa— comenzando por informarte que el primero cambio sera con la nueva Corte Real.

—¿Nueva Corte? —le pregunta Aylin confundida.

—Es una clase de autoridad que siempre a permanecido desde hace muchos siglos. Por supuesto, seré su principal líder.

—Mi señor quiere que la Corte se mantenga, aunque esta vez con nuevos integrantes. Él merece ser el líder y el resto que ya estaba. Gabriel, Luckian y Bkackniells sin embargo serán controlados y obligados a un vínculo con él. Es su castigo y a la vez el precio por su eternidad. Han sido ya informados y solo esperan el nombramiento oficial.

Darren enarca una ceja

—Entonces toda la Corte se vinculará a ti.

Derek asiente

—No espero otra traición de lo contrario será el mismo castigo. Es mi medida de protección permaneciendo por más siglos —hace una corta pausa— pero la Corte será siendo formada por el mismo numero de vampiros. Si estoy aquí es para buscar y encontrar al último integrante. Tengo un vampiro posible candidato que será anunciado en la ceremonia cuando presente a mi creación. Como su rey, te exijo esa reunión hoy mismo, con todo el mundo vampírico. Además que otro cambio será la nueva coronación.

Los invade el silencio en la sala, Darren baja sus brazos y hace sus manos puños.

—Mi señor nombrará a la señorita Elizabeth como la nueva reina del Castillo. La única líder.

La susodicha se da la vuelta mostrando su sorpresa.

—Y tú serás sustituido. Tu tiempo culminó sobrino, tendrás que elegir. Tu muerte o eterno descanso pero ambos es un bajo castigo por ser una simple creación de Salvatore.

Aylin avanza un paso adelante y decidida coloca su mano en su cuello.

—No será ninguna. Darren no tiene que pagar ese alto precio —lo mira de reojo— lo atacan o le hacen algo y tendré que actuar —guía el filo de sus uñas a su garganta— probaré que ese tonto vínculo con ustedes los puede dañar. Lo voy a hacer Derek para detenerte así tenga que dañar a tu hija.

Ninguno se inmuta

—Aleja tu maldita mano Ayline. Ni te atrevas —le advierte Darren sin dejar de verla.

Ella retrocede tres pasos y apenas siente el filo rozar la piel de su cuello.

—No lo haga, no funcionará —le responde Darkiel— no forma parte del vínculo —tanto Aylin y Darren confundidos giran a verlo— los únicos vinculados con mi señor es su propia hija, el señor Vlad, lo será el resto de la Corte y culmina con el señor Williams por la señorita Elizabeth —baja la vista— tuve que mentir para evitar que interviniera en los planes de mi Señor. Su alma era lo único que lo detenía.

—La usaste en mi contra —espeta Darren  con molestia y con velocidad lo sostiene del cuello clavandole las uñas. Darkiel sin luchar le sostiene la mirada.

Aylin se demora en reaccionar pocos segundos después.

—¡Darren sueltalo! —se acerca y lo obliga a soltarlo sin embargo falla. Le cuesta incrementar su fuerza e igualarla por temor a descontrolarse.

Elizabeth al ver la situación, levanta su mano y cierra los ojos.

—¡Darren escuchame! ¡Darren tienes que...! —Aylin retrocede al ver que lo libera sin embargo se alerta y rápido se coloca enfrente de él al verlo quejarse al colocar sus manos en su cabeza— ¡¿qué... qué tienes?! —gira a ver a Elizabeth, esta vez esos ojos carmesi no dejan de verlo en ningún momento— ¡no le hagas nada! ¡Sea lo que le estés haciendo...! —hace una pausa al ver la línea de sangre deslizarse por su nariz— por favor...

En dos segundos más, Elizabeth lo libera. Darren deja de quejarse, gruñe y la observa con molestia mientras se limpia con el dorso de su mano.

—Y es poco con lo que le puedo hacer

—Y lo voy a permitir sobrino, no controlare a mi hija si quiere atacar.

Aylin molesta se da la vuelta

—No es necesario que lo haga. No queremos una guerra. Si quieren una nueva corte, bien. Si quieren que todos la conozcan, de acuerdo pero que no dañe a nadie. Nos deben asegurar no atacar —inquiere Aylin desesperada— ni mucho menos dañen a Darren.

—Padre, estoy de acuerdo con su petición —Elizabeth gira a verlo— lo siento pero me niego al cargo de líder de este Castillo. No lo quiero —capta su atención— no estoy lista. No sé cómo hacerlo. Apenas me siento extraña en este lugar, por fin soy libre por completo. Sigo muy confundida... —presta atención en Darren y Aylin— tal vez lo considere más adelante pero no ahora. Prefiero que él siga siendo su rey. Ya no existen los que deseabamos venganza.

Chasquea sus dedos e increíblemente tanto Aylin y Darren permanecen inmóviles. Sin hablar, sin moverse, congelados como estatuas. Apenas sus dedos por rozar.

Elizabeth avanza, los rodea y se voltea quedando al frente de su creador.

—Tengo demasiados dones que no quiero usar en tu contra padre. No me obligues —le medio sonríe— Solo quiero una aceptación, disfrutar mi eternidad en este nuevo mundo para mi. Déjame gobernar contigo desde Rumania... Recuperar esos siglos, no quiero estar más aquí.

Sin embargo recibe su eterno silencio y su desaprobación al negar.

—Mi Señor, su hija tiene razón. No está lista aún.

—Por tu poder, por ser mi creación te pertenece el liderazgo, pero si te niegas...

Ella baja la vista y al escuchar sus pensamientos de aprobación sonríe ampliamente.

—Gracias padre —alza la vista y le hace una rápida reverencia.

Entonces se voltea y vuelve a chasquear los dedos despertando a Darren y a Aylin de su hechizo de inmovilidad. Ambos confundidos, con un dolor de cabeza, sin dejar de verlos mientras sienten la línea de su propia sangre deslizarse por su nariz hasta sus labios.

+++

—Entonces, quieren una ceremonia —habla Aylin apenas ella y Darren se quedan solos en la sala. Tras escuchar sus peticiones y ver como Derek y su creación se marchaban. Elizabeth llevándose a Darkiel en su forma cuervo en su hombro.

—Eso parece —Darren observa las yemas de sus dedos sin rastro de sangre.

—No se irán hasta que lo que quieren, pase

—No hay forma de evitarlo Ayline. Solo hay que avisarle al resto. Estamos en desventaja con ella, ni unidos le ganaremos —gruñe y baja su mano— Solo hay que evitar que se haga más fuerte.

—Con la sangre de Esteban.

Él asiente

—Será difícil Darren, lo obligarán —agrega ella.

—De todos es el único que puede un poco controlarla. Cuatro vampiros en nuestra contra y ella vinculados y solo Esteban que si forma parte, a nuestro favor.

Aylin se cruza de brazos

—Está bien pero jurame que vas seguir respetando tu decisión. No vas a dañar a Esteban aunque yo no este vinculada a ellos. Él es importante. No podemos usarlo en su contra.

Darren desvía la vista

—No hasta que se encuentre el hechizo. Darren juralo.

—¿Y si se tarda demasiado? —gira a verla— entre más tiempo, más Derek se volverá difícil de vencer y su creación se recuperará del todo y se volverá más fuerte —pausa— no pensaba hacerlo porque te involucraba Ayline pero no lo estás. Entonces Esteban podría...

—No, ni lo pienses, ni lo digas

—Detenerla evitando darle su sangre. Es lo único que podemos hacer por el momento.

Aylin asiente

—Aún así hay que vigilarla. Si respetan el acuerdo, se irán en cuanto todo esto acabe.

Darren asiente, se da la vuelta y avanza a la salida. Enseguida Aylin lo sigue.

—Sabés, aún sigo confundida con lo que pasó, me sigue doliendo la cabeza. No recuerdo nada es como si nos hubiera dejado en trance. Nos demostró su poder y lo que es capaz de hacer.

Él rápido se detiene y se da la vuelta

—Y de eso ninguna palabra a nadie Ayline. Solo nosotros dos podemos saberlo —le dice en voz baja inaudible para cualquier vampiro cerca.

Al notar su seriedad termina asintiendo

—Sabes que soy mala para ocultar secretos Darren. Simplemente, no puedo.

Dicho esto y pasa por su lado. Con velocidad sale de la sala con un vampiro detrás de ella.

(...)

—¿Qué pasó? —pregunta Ana Liz por todos apenas los ve entrar de regreso a la habitación donde el resto los esperan impacientes —lo que escucharon, no me dan mucha información.

—Ni siquiera escuchamos más criatura. Lo impidieron por alguna barrera.

Ambos se detienen frente a todos

Aylin luce inquieta al notar sus miradas

Darren primero gruñe al verse obligado a explicar y con detalle lo hace.

—... Presentación a esa vampiresa ante el mundo vampírico, una nueva Corte y nombramiento del quinto y nuevo integrante y un baile real basado en la época antigua. Además quiénes sí forman parte de un mismo vínculo —cita Ana Liz al entender mejor y estar al tanto— y la Coronación a la nueva reina ¿Algo más?

Darren niega

—Como les dije, solo será hasta esta noche. Por la madrugada se irán. Por el momento no podemos atacar a Derek, ni a su hija ni debilitarlo —gira a ver a un rubio vampiro en especial— y tu evita darle su sangre a su creación.

—No es que se la vaya a servir en una copa.

—Bueno, al menos estaremos un poco a salvo pero hay que estar alertas y más de esa vampiresa.

—No parece tan mala. De hecho se nota pérdida y confundida. Se le hará difícil adaptarse.

—No dejes salir tu humanidad pequeña, no es el momento. No pueden confiar en ella cuando es peor que su creador.

Aylin le da una mala mirada

—Y a todo esto, si entendí bien. Seguirás siendo el rey Darren —menciona Mía— pero no me quedó claro lo de la coronación ¿Será Elizabeth la reina?

Darren niega varias veces.

—No, la nueva reina seré... yo —pronuncia Aylin captando la sorpresa de todos.

—¡¿Tú serás nuestra reina?! ¿Y lo aceptaron? —Aylin asiente ante las dos preguntas— ¡Eso es genial! ¡Esa si es una buena noticia de todas! —expresa Ashley con emoción — Aylin felicidades, eres la reina que tanto este Castillo esperaba tener.

—La indicada Ana

Ella incomoda les sonríe a ambas vampiresas.

—El cargo empeora cada vez más aunque me sorprende que la reina sea una convertida recordando que fuiste humana y ahora líder de todos los vampiros. Tienes suerte estorbo.

—Owen —le advierte con la mirada Ana Liz y gira a ver a su creadora con una amplia sonrisa — Lo mereces mamá, me alegro mucho por ti. Con más razón debes lucir presentable. Nosotras te vamos a ayudar, debes cautivar.

—No es para tanto, no es el momento de celebrar algo así cuando no tengo la menor idea de como ser una reina.

—Sabrás serlo pequeña, apesar de todo felicidades. Es bueno que lo seas y que no formes parte de este molesto vínculo —Esteban posa la vista en Darren— al fin tendrás a la reina que querías.

Él lo ignora y gira a ver a Aylin

—Les avisaré a todos, solo prepárate para esta noche.

Dicho esto y es el primero en marcharse sin demostrar su emoción.

—No me alegro pero al menos se controló la situación —emite Drake— solo no abuses de tu cargo o mejor dicho, favoritismo.

Es el segundo en salir, en silencio lo sigue Dominik.

—En nombre de Nik, en el fondo te felicita Aylin.

Ella medio sonríe ante las palabras de Ashley.

—Les ayudaré en lo que pueda, pero antes iré a revisar que los niños estén bien —anuncia Mía y se marcha pasando a un lado de Esteban.

—Voy por Alina

Y dicho esto, Owen es el ultimo en salir de la habitación.

Entonces, el único vampiro presente se acerca a Aylin.

—Doblemente felicitaciones pequeña

—Resolveré tu situación rubio, no estarás atado a ellos. Te prometo que...

—Shhh, no pienses en eso ni jures. Prepárate para tu coronación —le sonríe y coloca su mano en su hombro. Sin embargo, rápido la aleja borrando su sonrisa.

—¿Qué pasa?

—Nada, no te alteres —Esteban retrocede un paso —esa vampiresa me está buscando y no sé como tiene un poder sobre mi y entró a mi cabeza —mueve su mano aun confundido— y me hizo ver recuerdos con Nohemi.

—¿Cómo es qué...?

—Debo irme pequeña —Esteban gira a ver hacia la puerta y usa su velocidad para huir por el balcón.

—Eso fue raro —inquiere Ashley.

De pronto, escuchan un golpe en la puerta

Las tres vampiresas se observan entre ellas y finalmente, Ana Liz quien está más cerca se atreve a abrir. Y cuanto abre la puerta se encuentra con Elizabeth frente a ella. Ambas se observan de pies a a cabeza.

—Uy tan pronto te conozco

En una pose recta, Elizabeth le medio sonríe.

—Permiso

Ana Liz lo duda un instante sin embargo al final accede y se aleja dejándola pasar. En cuanto entra, cierra la puerta.

Elizabeth avanza sin dejar de ver con asombro cada rincón de la habitación.

—Con que tu eres Elizabeth, la antigua vampiresa que todo el mundo... habla.

—Teme, esa es la palabra clave —ella fija la vista en Ashley —un gusto en conocerla Ashley Collins, no me tema.

Ella se cruza de brazos y la observa con seriedad.

Aylin al ver la situación incomoda, carraspea.

—¿Qué hace aquí?

—Puedo ayudar en lo que pueda aunque no tengo la menor idea... Mi padre me autorizó ambular por el Castillo y creí que... podría... buscarte...o ayudarte.

Luce confundida

Aylin le medio sonríe

—Puedes —ignora el gruñido de Ashley— mira ella es Ana Lizbeth, hija mía y de Darren —la señala.

—Prefiero Ana Liz, sabes, te ves rara —la observa con una ceja levantada— tu forma de hablar y vestir es.. Raro y me gusta lo raro.

—Me siento atrapada en una época que desconozco. Todo es tan diferente al año 1590, lo poco que permanecí despierta.

Aylin la observa con detenimiento y aunque se niega, la entiende.

—Te vamos a ayudar

Elizabeth concentra la vista en ella y asiente.

Ambas vampiresas se observan frente a frente, cada una siendo muy distintas a la vez.

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Nota de autora:
¡Holaa! ¿Me extrañaron? Lo sé, a pasado tanto tiempo en actualizar pero como dije, ya mi tiempo es escaso pero hoy me di el tiempo, ya tenia ganas de escribir y más sobre esta historia y continuar con VE... Gracias por la paciencia y el apoyo... Espero hayan disfrutado tanto este capítulo... Se viene lo interesante...

Pronto cambiaré la portada de VIDA ETERNA y sabrán el porque... Estamos por llegar a la parte clave de la historia... Coronación de la reina Aylin (tose)... Estoy tan emocionada...

Nos vemos espero pronto en otro capítulo y le dejo estas fotos que encontré. Es un parecido a algunos personajes o los principales en este capitulo... Ya saben que se los pueden imaginar como quieran, son libres pero me baso en un modelo los que ya he mencionado o han visto a lo largo de la Saga y ahora estos... (si quieren ver de más personajes me lo hacen saber en los comentarios y los buscaré y subiré por aquí ) Son bellos 😍🖤🦇