Hola, Bartolomé Branford reportando de nuevo a cualquiera que pueda leerme la mente.

Han pasada al rededor de ocho meses, y comienzo a pensar que no soy un perro normal, o mis padres también para el caso.

Y te preguntaras; ¿por que piensas eso, Bartolomé Branford?

Y yo te responderia; woff woff grrr wooof.

Un poco gracioso si no puedes entenderme, pero volvíendo al punto.

Han pasado ocho meses y mi pequeño cuerpo no ha cambiado mucho, bueno, no más allá de que ahora soy capaz de levantarme en mis cuatro patas, que ahora tengo dientes relativamente nuevos, y que los ladridos de mi madre y padre cada mañana suenan menos como, bueno, ladridos, y mas como palabras.

...

Aun tengo el cuerpo de un cachorro relativamente enano a mis ocho meses de vida, que hasta donde se, eso sería el equivalente a nueve años caninos.

Hmm ...

Esto es un poco preocupante, no eh visto a ningún humano desde que llegue al mundo, cosa extraña por que actualmente mi cama, y la de mis padres, está en un armario repleto de ropa.

Uno pensaría que en algún punto los humanos dueños de esta ropa, abrirían el armario donde duermo y tomarían alguna prenda al azar, para laborar, ir a comer, jugar bádminton, o simplemente seguir mi ejemplo de mis días como humano, y guardar toda tu ropa limpia tan pronto como toques los confines de tu hogar, lo que se traduce en desnudarte tan pronto como llegues a tu casa, apresurarse a sus respectivos sótanos antes de que lleguen sus respectivas madres o padres y les ordenen que se encierren en el sótano por que esta tendra visitas, y no quiere tener que volverlos a encadenar al calentador de agua.

Extraño ese sotano

Y mis cosas

Bueno, aún es extraño que no me haya encontrado con ningún humano.

Todo con lo que me eh encontrado son; mi madre, mi padre, y de lo que por el momento sólo puedo encontrar dos teorías,

1:son mis hermanos, que venían constantemente cuando mi madre se retiraba.

2:son extraños experimentos, de algún bicho raro que se dedicó a clonar perros hasta el cansancio.

Rezó por que no fueran la dos, dios sabe que mi autoestima ya es muy baja, no nesecito, ni quiero, que me digas que soy parte de un experimento que se dedica clonar perros mas longevos.

Haci que los llamare hermanos por ahora.

Mis hermanos parecen tenerme cierto tipo de miedo. aunque me es desconocido que podria haber desencadenado ese miedo, digo, alfin y al cavo, no soy más que un pequeñito cachorrito que disfruta ver a sus dos hermanos mayores golpeandose con un pollo de goma.

Mis hermanos son taaaan extraños.

Es decir, no es que yo sea un experto en familias, todo mi conocimiento de las familias normales por lo general aun es un revoltijo de pensamientos aleatorios, que actualmente mi pequeño cerebro está tratando de armar, adaptar, y traducir a la vida de un perro.

Por todo lo que se, en algún punto en el futuro de mi vida de perro, tendre que retar a mi padre en un épico duelo de sables de luz dentro de una estación espacial que está a punto de destruir el mundo, todo eso mientras mi hermano mayor también esta en una cruzada para eliminar a todos los miembros de nuestra familia, por que eso de alguna manera evitara una gerra civil.

Ahora mi cabeza duele, yay.

"Te lo digo Dolly, Dewey no es normal"

Oh, ¡tengo compañia!

"Dylan, estas sobrepensando esto demaciado" Dijo Dolly, desestimando las preocupaciones de Dylan.

¿Están hablando sobre mua?

"Dewey no es diferente a Dorothy, ella también solia llorar mucho cuando mamá no estaba cerca"

¿Dorothy? Quien es, ¿es acaso mi rival? Deberia empeñarme en llorar mas fuerte para que no me comparen con esta tal Dorothy.

"No me refiero a eso Dolly, anoche lo encontré flexionando su patas frente a su hocico ... con miedo"

¡Hey! No era miedo, solo me sorprendio saber que tuviéramos dos pares de pulgares.

"Dylan, tal ves el sólo tenia curiosidad, es decir, estoy bastante segura de que todos emos echo eso alguna ves"

"Dolly, el vomito por ver sus propias patas"

Culpable, despues del shock inicial de descubrir que mis patas tienen pulgares, me entró un asco increíble al pensar que era un perro con algún tipo de deformidad.

"Si Dylan, me es muy difícil olvidar esa noche, Dewey lloro toda esa noche"

Solo me tranquilize un poco cuando nuestro padre llego, note que el también tenía pulgares, y comenze a tomar nota, que de echo, muchas de las patas delanteras de mi hermanos tenían pulgares.

"Pero recuerda lo que mamá nos dijo, hermano, Dewey es especial"

Disculpa, pero ...

>¿como me llamaste?<

"Lo se, lo sé Dolly, pero incluso tu debes admitir que algo extraño esta pasando con Dewey"

¡A quien le importa eso!
Nesecito contexto
¡Contexto!
¿¡por que soy especial!?

"Bueno, te dare esa hermano, Dorothy tambien fue un nacimiento unico, pero incluso ella no se apego tanto a mama como lo hace Dewey"

¡Oh no!
Usaron la palabra:
¡único!
Ahora soy
especialmente
Unico

Eso solo se puede traducir en una cosa:

O peor

Modo desbloqueado:
¡Supersayajin Fase 3!

(Cambio de punto de vista)

"¡Nnnoooooooooooo!" se escucho un alarido proveniente del armario.

Dicho alarido, asustó en gran medida a dos perros que pacientemente hacían guardia fuera de dicho armario.

Dolly Dalmata, coqueta ocasional, amante del parkour, le gusta patinar, y actualmente tiene un enamoramiento de patas sudadas por cierto husky de ojos azules.

Dylan Dalmata, le gusta la astrología, quiere visitar el espacio, jugador de rol experimentado, perro inventor, y ama de casa.

Ambos, Dolly y Dylan, se abrazaron el uno del otro, al escuchar dicho alarido proveniente del armario donde el menor de sus hermanos reside, donde previamente se teorizaba estaba dormido.

"Dolly?"

"Si, hermano?"

"Dewey, ¿hablo?"

(Prologo 2)