Me dolió que Dante no se haya despedido de mi. Digo, ese día en el bosque me dijo que se iría pero no creí que fuera de inmediato. Solamente dejó una carta abandonada en mi cama.

La verdad es que las cartas no me agradan demasiado, hacia ya algún tiempo que no las recibía; desde que P.R me dio la última. No podía compararlos, así que leí la carta de Dante intentando olvidar las demás.

Victory,

No sabes cuanto lamento no poder despedirme de ti. Eso me haría mucho daño, renunciar a ti teniendote enfrente.
Ojalá podría explicar  lo que sentí la primera vez que te vi, en aquel callejón. Beber tu sangre y tocarte despertaron sentimientos en mi que creía extintos.
Tu no tienes idea de lo que significas para mi, como todo mi ser quiere tenerte. El punto es que Jamás podría despedirme de ti, porque no se si algún día logre olvidar todo lo que siento.
Me voy porque es mejor estar lejos que estar ahí mientras quieres a alguien más, al menos así uno de los dos puede ser feliz.

Hasta nunca, mi princesa.

Te ama, Dante.

Después de leer eso me sentí mal y que haya puesto "hasta nunca", reveló en mi una incertidumbre al no poder verlo que no creí posible.

Las palabras de Dante volvían a mi cabeza.

Tú no tienes idea de todo lo que significas para mí.

Todo mi ser quiere tenerte.

No se si algún día podría olvidar lo que siento.

No pensé me quería así, de esa manera, tan profundo. Al menos eso parecía.

Yo... Tengo a Derek y él, con él tenemos algo real.

Mi móvil suena y lo saco del bolsillo de mi chaqueta. Era un mensaje de Amanda.

Amanda
Amiga! Ponte tu mejor
atuendo, que sea algo elegante
pero no demasiado.

A las 20 p.m paso por ti.

Yo
¿Qué, por qué?
😯

Amanda
Por favor, estoy muy ocupada
no puedo contarte ahora.
En el camino te cuento
¡Dale! 😡

Yo
Estas loca...
Pero esta vez lo haré.

Amanda
¡YAAAS! 😋😊😚🤑

Miré el reloj de lo más tranquila y me alarme cuando noté que eran las 18:15 p.m.

¡Mierda! Hasta tengo que bañarme. Sin mencionar que después me tengo que secar el pelo, buscar que ponerme, maquillarme, y peinarme. No soy de preocuparme por el maquillaje o el peinado pero no se adonde iré con Amanda y es mejor estar preparada.

Me alegré al darme cuenta que como vampiro, y siendo mucho más veloz que los humanos, podía hacer todo eso fácilmente.
A las 18:30 p.m ya estaba lista.

Me puse un monito con detalles de encaje color negro transparentes. Pero en mis pechos y en las partes de abajo estaba cubierto por una tela blanca. Me peine muy simple, con una trenza.

Antes de bajar las escaleras me tomé una foto y la subí a instagram. Si, como todavía no tengo que esconderme por tener quien sabe cuantos años y verme igual, puedo usar redes sociales.

Ahora solo debía esperar a las ocho a que venga Amanda, y pienso lo estúpido que fue apurarme ya que falta más de una hora.

(...)

Bajé al escuchar la bocina de Amanda.

Abrí la puerta de su auto pero antes de que me siente me observó detenidamente. Se encontraba muy linda, traía un vestido azúl oscuro y el pelo suelto con algunas ondas.

—De eso hablaba, muchacha —me giña un ojo y arranca el auto.

Le devolví el cumplido y comencé a preguntar—Ahora explicame que sucede.

—Esto sonará loco, procura calmarte — vacila junto a un suspiro—. Hay una estirpe de vampiros que controla Yorkshire y algunas ciudades más.

Siento ganas de reírme de lo tonto que suena, pero se que es real, aquí este mundo está lleno de secretos.

—Uno de ellos fue a buscarme, se enteraron de que eres nueva en la comunidad y en la ciudad.

—¿Cómo supieron eso? —contraja las cejas y pensé en la poca privacidad que tengo.

—No lo sé, pero se que están en época de reclutamiento. Buscan a los vampiros más fuertes de la región y los unen a su clan.

—Espera espera, primero yo no soy fuerte.— a miré con mala cara.

—Eso, suelen decirlo ellos.

—Segundo —proseguí—¿Y si no quiero ser parte?

—No hay opción, ellos te tomarían como una desertora y estarías acabada.

—¿Acaso no eres mi guardiana? ¡Esto peligra mi vida! ¿Cómo puedes llevarme allí? —la marica que hay en mi tomó el control

—¡Tranquilízate! —elevó la voz más que yo.—Hubiera sido peligroso si nos negabamos a ir. Nada te pasará, además son de tu especie.

Mi especie.

Eso no significaba nada, no es más agradable compartir historia con alguien solo porque es como tu.

Giré mi cabeza para mirar por la ventanilla. Me encontré con un castillo grande y muy bonito. Sabía que Yorkshire era un lugar con antigüedades así, pero no creí que habría tan cerca.

— ¿Te imaginabas tumbas y cuervos?— dijo burlona, escondiendo otra carcajada.

—Callate.

Rió—Está es la fachada del clan, si viven en ruinas llamarían la atención pero en cambio así pasan a ser miembros de la sociedad.

(...)

—Mi señor enseguida baja —dijo, una joven vestida de servicio. Amanda y yo solo asentimos.

Estaba muy nerviosa, de repente sonó mi móvil provocandome un susto, Amanda se rio de mi.

—Hola amor —una voz ronca y profunda salía por el teléfono.

—Hola Derek, estoy ocupada ¿Sucede algo?

—Ya lo noté —dijo con voz tensa—Vi tu foto.

Le quité importancia a su llamada cuando alguien comenzó a acercarse.

—Deja mi foto en paz —colgué la llamada y guarde el móvil en mi cartera.

Amanda se levantó de la recepción —Señor—hizo una especie de reverencia.

—Buenas noches —dije simple. Al ver la cara de Amanda, supe que debía imitarla—, señor.

—Una híbrida, que apasionante —besó mi mano.

Su frialdad me dio escalofríos, el contacto con su piel y su rostro me hizo pensar que ya lo conocía ¿Donde podría haberlo visto?

Era un tipo que expresaba poder y te hacía sentirlo, con su mirada, con su cuerpo tenso capaz de cortarte. Aparentaba de unos 25, con unas facciones realmente bellas.

—¿Qué? —dije preocupada al darme cuenta que sabe que soy híbrida.

—No deberías sorprenderte, yo se todo de ti.

Tregué saliva y mi mente quedó colapsada de inquietudes.

(...)

Nos encontrábamos en una mesa de esas largas, igual que en las películas antiguas.

Todos quedaron en silenció observándome cuando Francisco, el rey o líder del clan, me preguntó algo.

—Cuentame Victory ¿Cuál es tu don? —el silencio invadió el salón cuando soltó su pregunta. Él ya lo sabía, porque dijo que sabía todo de mi. Pero entonces, quería que le contara a los demás.

Sentí nervios al darme cuenta que todos me miraban —Controlo los elementos, todos.

Todos se miraban entre sí y murmuraban.

—Que maravilla —dijo Francisco.

Todos dejaron de prestarme atención cuando se abrió la puerta del salón.

—Llegaste algo tarde —habló el líder.

—Lo siento, tenía muchos asuntos.

Esa voz se me hacía tan familiar. Mi piel se erizó al oírla, me volteé de inmediato.

Nuestras miradas chocaron y creo que alguno que otro se dió cuenta de la mala cara que me puso.

No creo que le guste la idea de que termine reclutada en este lugar.

—¿Qué hace aquí? ¿Todo esto no era para reclutar vampiros? Él ya lo es hace rato —  susurré a Amanda.

—Son grandes amigos. Además la familia Devonshire es antigua y respetada —respondió Amanda—, pilares en la comunidad.

—Es de mala educación hablar en secreto — susurró Francisco acercándose a nosotras.

Funcí el ceño —Tengo una duda ¿Cómo se enteró de mi existencia? Ni siquiera hablo con otros vampiros.

—Los rumores recorren como viento este lugar, muchos hablaban de la híbrida con grandes poderes. Nos importas. La ultima persona como tu en la Estirpe, que tuvimos—se detuvo—, olvidalo, eso es todo —tocio y se quedó en silencio.

(...)

—Eso fue abrumador —le hablé a Amanda largando un fuerte suspiro.

—El aún no terminó contigo —estábamos de camino al auto pero Derek se plantó frente a mi.

—Puedo llevarte a tu casa y de camino me cuentas como llegaste aquí.

—¿Qué no sabes? Están reclutando —hablé sarcástica.

—Que graciosa linda, pero quiero saber más que eso —asentí, rendida.

Me esperaba un largo camino a casa.