Capítulo 32
[ Día 4 ]
Clementine Tweed siempre soñó con enamorarse algún día.
Creció a sus padres viendo todos los días con amor, así que también aspiró poder tener ese amor. Pero todos sus sueños se vieron destruidos cuando leyeron su nombre en la cosecha, dejando a Clementine sin su sueño.
Pero hubo un poco de esperanza cuando finalizó el desfile de tributos, cuando a lo lejos vio a un chico que parecía un príncipe salido de los libros de cuentos que su abuela tenía escondidos.
Cuando preguntó a su mentor Woof quien era el chico, el señor Woof dijo que era el tributo del Doce e hijo de la vencedora de ese distrito.
En los entrenamientos, Clementine lo vio de lejos mientras ayudaba a su compañera de distrito. En las entrevistas se entristeció un poco cuando Icarus dijo que tenía novia y le dedicó una hermosa, pero a la vez pudo comprender.
Un chico tan lindo como él por supuesto que tendría una novia esperándolo en casa.
Clementine era buena tejiendo, y para distraerse en los días de entrenamiento se tejió una pulsera de margaritas blancas, las flores que crecían en un pequeño arbusto cerca de su casa.
En el Distrito Ocho hay la costumbre que las chicas regalen algo tejido o borado al chico que les gusta, y Clementine estuvo tentada a darle su pulsera a Icarus, pero se acobardó, incluso ahora que ella estaba sentada junto a él mientras esperaban que el conejo que cazó estuviera ya listo para comer.
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Julius estaba viendo los juegos con algunos compañeros de la Academia.
Nunca fue partidario de los Juegos, pero mantuvo su boca callada y fingió aceptarlos delante de todo mundo, pero odia ver como cada año un velo de dolor atravesaba los ojos castaños de su mamá.
—Es un chico apuesto — dijo Jennifer mirando embobada la pantalla que mostraba a Icarus Denim tejer una red junto a la niña del Distrito Ocho.
—Carajo— Icarus Denim se quejo del dolor de hombro, en el mismo lugar que Dawson del Dos lo hirió. Una parte de la camisa estaba manchada de sangre.
—Debes estar herido — dijo Tweed del Ocho dejando de lado la red que tejían para rebuscar en la mochila que le había robado a los profesionales.
La niña sacó una caja e Icarus Denim se quitó la camisa.
Se escucharon jadeos en la sala donde estaba Julius con sus compañeros de clase.
—Por las gemas de Panem — dijo Allison completamente sonrojada.
Julius miró a sus compañeras de clases. Todas ellas estaban viendo con los ojos de chicas enamoradas, con las mejillas sonrojadas y una de ella se mordía el labio ante la imagen que proyectaba la pantalla.
Se notaba que tuvo una crianza privilegiada porque se notaba bien alimentado y que entrenaba por la tonificación de sus brazos y abdomen.
Era claro que el chico tenía belleza, todo el Capitolio por años han comentado la belleza de Lucy Gray Everdeen Nee Baird.
Con el torso tonificado y como colgaba un anillo sobre su pecho.
Era un deleite visual para las chicas y los chicos sexualmente confundidos. Como lo podía ver por la expresión de su compañero Jonathan.
—¿Tu lo conoces? — preguntó Jessica a Julius.
—No — negó Julius — Al menos no en persona.
—Si Icarus sale de la Arena, le pediré a mi padre que me consiga una cita con él — sonrió Allison viendo con codicia la imagen de Icarus Denim siendo curado por la niña del Ocho.
—Es Icarus Denim — corrigió Julius.
—¿Qué? — dijo Allison mirándolo.
—Su nombre completo es Icarus Denim, no solo Icarus — contestó Julius — Es un nombre Covey, se pronuncia junto.
—Bueno, no importa — Allison volvió su mirada a la pantalla viendo como Icarus Denim se ponía de nuevo la camisa — Si sale de la Arena como vencedor, conseguire una cita con él.
—Tiene novia — le recordó Julius.
—¿Y eso me debe importar ? — preguntó Allison y Julius vio su actitud de prepotencia —Su novia estaría en el Doce mientras yo estoy con él.
—Suerte con eso, Allison — dijo Julius — Porque conociendo por quien fue curado, jamás volvería a ver a otra chica que no fuera su novia.
Julius Snow se deleitó por el rostro de ira de Allison.
[ Día 5 ]
Durante la madrugada del quinto día, Icarus Denim escuchó un cañón.
Hasta el momento había escuchado un total quince cañones, por lo que quedaban un total de nueve tributos aún con vida.
Icarus Denim logró acabar con dos profesionales.
Con Dawson, del Dos, no sabía que lo poseyó. Solo quería dejarlo herido para que pudiera huir y ponerse a salvo, pero su mano descendió a morningstar tres veces más sobre el cráneo de Dawson partiéndolo, dejando que sangre y masa cerebral se derramará sobre el piso terroso.
Mientras observaba a Clementine dormir, se agarró el cabello pensando en que tenía sangre en sus manos.
Dawson y Olson.
Dos vidas acabadas por las manos de Icarus Denim.
Su madre, su amada madre lo vio asesinar a un chico con sangre fría y brutalidad, no quería ver los ojos de mamá irradiando decepción.
Y Calla Violet, su amable y hermosa novia. Ella debía estar horrorizada ante él.
Podría comprender si ella se aleja de él, si es que él regresaba al Distrito Doce.
Cuando amaneció, llegó provisiones.
Un suplemento en polvo para mantener a Icarus Denim y Clementine hidratados. Con las instrucciones de verter en el agua y agitarla.
"Cuidate.
Con amor, Mamá"
Los dos tenían dos cantimploras, así que Icarus Denim usó el polvo en la cantimplora de Cementine y en la de él tendría agua fresca.
Clementine se levantó y le dijo que ahora ella tomaría la guardia. Icarus Denim durmió alrededor de una hora.
Cazo un par de ardillas y los dos comieron mientras hablaban.
—¿Sabías que Clementine es el nombre de una canción? — preguntó Icarus Denim a su pequeña aliada.
—Lo sé, es la canción favorita de mi abuelo materno — contestó Clementine — Pero nadie de su familia sabe la letra. Mi abuela materna sabía que murió cuando era bebé.
—Yo sé la letra de la canción — dijo Icarus Denim.
—¿La puedes cantar? — pidió Clementine con ojos de cachorro — Por favor.
—Los ojos de cachorros me convencieron — sonrió Icarus Denim.
In a cavern in a canyon, excavating for a mine,
Dwelt a miner forty-niner, And his daughter Clementine.
Oh, my darlin', Oh my darlin', Oh my darlin' Clementine.
You are lost and gone forever, Dreadful sorry Clementine.
En estos momentos Icarus Denim desearía tener su guitarra para acompañar la canción.
Light she was and like a fairy, And her shoes were number nine
Herring boxes without topses, Sandals were for Clementine.
Oh, my darlin', Oh my darlin', Oh my darlin' Clementine.
You are lost and gone forever, Dreadful sorry Clementine.
Clementine sonrió con los ojos brillantes mientras lo veía cantar. Sus adorables ojo verdes parecían cobrar vida con cada estrofa que cantaba.
You are lost and gone forever, Dreadful sorry Clementine.
Drove she ducklings through the water, Every morning just at nine.
Hit her foot against a splinter; Fell into the foaming brine.
Oh, my darlin', Oh my darlin',...
Su canto se vio interrumpido por el sonido de un cañón.
Icarus Denim se puso de pie con su arco y una flecha lista.
—Ya son dieciséis cañones — dijo Clementine mirando al cielo — Quedamos ocho aún con vida.
[ Día 6 ]
Al anochecer del sexto día, Lucy Gray vio cómo su hijo estaba despierto mientras la pequeña Clementine dormía a su lado.
Ya eran dieciocho tributos muertos y una parte de Lucy Gray se sentía aliviada que su hijo aun respiraba y su corazón latía mientras otras dieciocho madres lloraban por la muerte de sus hijos.
Se sentía repugnante ante su alivio mientras otras madres querían morirse junto a sus hijos.
—Deberías comer algo, Ma — dijo Haymitch deslizado un plato con pollo y vegetales.
—No tengo hambre — respondió Lucy Gray mirando a su hijo montar guardia con el arco en sus manos y una flecha lista.
— No has comido bien desde que comenzaron los juegos — insistió Haymitch señalando el plato — Aunque sea la mitad.
Ella miró sus ojos que la miraban con preocupación,suspirando cogió los cubiertos dispuestos a comer un poco.
N/a: Básicamente Clementine le salvó la vida a Icarus Denim porque tiene un crush en él. No la juzgo, le salió lindo el niño a Lucy Gray.
Nos acercamos cada vez más al final de los Juegos.
*Icarus Denim se quita la camisa para curarse la herida*
Las chicas y los chicos sexualmente confundidos del Capitolio:
El brazalete que lleva Clementine:
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