10 de noviembre de 1962

Me agaché para dejar un ramo de flores silvestres donde se encontraba descansando Neil.

—Feliz cumpleaños Neil, ya tienes 20 años— sonreí. —Quiero que sepas que finalmente he conseguido un papel en Broadway y como protagonista, en "My Fair Lady" Eliza Doolittle.

Aparté la nieve que había encima de su tumba y me senté sin importar que me manchara el abrigo —Hace poco más de un año me volví a encontrar de casualidad con Todd, finalmente ha salido adelante después de todo, le costó mucho superar que te marcharas. Por suerte me contaron los chicos que lo cambiaron de habitación y lo pusieron junto a Knox.

«Hablando de Knox, hace poco me llegó una invitación a su fiesta de compromiso con Chris. Al parecer quieren esperar a celebrar la boda para cuando Knox se gradúe de la facultad de derecho y sea abogado.

—Desgraciadamente hace mucho que no sé nada del señor Keating, tampoco sé nada de Cameron desde que me fui de Welton. ¡Oh, pero sé que David se graduó el año pasado y le pidió salir por fin a nuestra tímida amiga francesa!

Saqué una botella de vino de Oporto y dos copas de mi bolso.

—Brindemos Neil— eché vino en ambas copas. —Felicidades, el año que viene traigo un pastel y vendremos todos a visitarte...

Bebí de ambas copas.

—O eso espero— suspiré. —Meeks se ha alistó al ejército y se ha ido a Vietnam hace no mucho, intentamos convercerlo entre Charlie y yo, pero fue imposible. Por favor cuida de él, tengo miedo de que no vuelva.

Se me escaparon varias lágrimas. —Lo siento, estamos celebrando tu cumpleaños— me limpié las lágrimas.

—Pero hay más buenas noticias, Pittsie tuvo una hermanita hace un añito, se llama Penélope, pero todos la llamamos Penny o P. Es muy linda.

«Y además, Charlie viene a recogerme vamos a ir a cenar para celebrar tu cumpleaños. Espero que cuando te felicitó esta mañana lo hiciera como era debido— sonreí. —¿Sabes? La navidad justo después que te fueras le regalé un guardapelo con una foto tuya dentro, siempre vienes con nosotros a donde quiera que vayamos.

Guardé las copas en mi bolso, cerré la botella y la dejé junto a su lápida.

—Mañana me va a presentar a sus padres oficialmente como su novia, sí, les habló de mí, pero como vivo en Brooklyn, no he podido conocerlos aún, así que, deseame suerte.

«Te echamos mucho de menos, Neil— le di un beso a mi mano y lo deposité en su tumba, luego mandé un beso al cielo.

—Adiós Neil.

Eso es todo, la historia terminó, publicaré con tranquilidad los especiales y una vez que lo haga editaré la historia.

Espero que os haya gustado, es el primer fanfic que acabo, aunque me haya llevado bastante tiempo, pero bueno, mejor tarde que nunca. 

Le doy gracias a una amiga por ayudarme a editar la foto.

Voten y comenten sus opiniones, os leo. <3