Knox casi se queda dormido en mi casa de no ser porque le recordé que como no volviera ya, se llevaría un buen castigo por escaparse de Welton y le quitarían por ejemplo el derecho a asistir a la actividad de hijos de antiguos alumnos, sencillamente un privilegio que tienen algunos pocos alumnos ejemplares que como requisito deben ser hijos de un antiguo alumno de la escuela.

Además, yo también tendría un buen castigo, porque Riff y Velma conocen bien la cara de Knox y ninguno de los dos saben que él sabe sobre todo este asunto.

Así que sencillamente estuvimos hablando entre susurros en la cocina, habitación que estaba en la planta baja y lejos de los cuartos de los adultos, hasta que su nariz dejó de sangrar y finalmente le di un enjuague bucal para quitarle el aliento a alcohol y le di un pequeño sobre con una aspirina dentro para que se lo tomase por la mañana en el desayuno.

A la mañana siguiente tuve suerte de que Riff suspendió el entrenamiento, porque sinceramente era incapaz de levantarme tan temprano ese día para hacer ejercicio como una loca y elegantemente; así que me levanté directamente para darme una ducha, desayunar e irme a ensayar al Henley Hall.

Esta vez me puse unos pantalones largos, con una camisa con una rebeca de lana encima y mi abrigo para finalizar el conjunto. Me monté en la bici y pedaleé hasta el Henley Hall.

El ensayo fue más rápido de lo que esperaba, así que Neil, David y yo nos quedamos hablando en un parque que había por la zona. Estábamos riendo de forma ruidosa, principalmente porque David tenía sed y se puso a beber de una fuente, pero Neil y yo pusimos unas muecas un tanto extrañas y se le salió el agua por la nariz, por lo que se empapó entero y le dejé mi pañuelo para secarse un poco.

Así que mientras Kelly se secaba en el sol, Neil y yo nos sentamos en un banco y aproveché para preguntarle si pasó algo interesante en la reunión de ayer.

—Bueno, pasaron cosas, sí... Como por ejemplo que Charlie se ha cambiado el nombre a Nuwanda.

Abrí los ojos como platos y empecé a reírme de nuevo —¿Nuwanda? Suena muy ridículo, jajajaja.

—Vale, me alegra de que te rías, pero lo que te voy a contar ahora no te va a hacer ni pizca de gracia. Ayer, Charlie, salió fuera de la escuela antes de la reunión y se trajo con él a dos chicas mayores, muy guapas, o-obviamente no tanto cómo tú.

—Me da igual si eran más guapas que yo o no, ¿cómo diablos hizo para meter a dos chicas sin que le descubrieran?— miré a Neil ligeramente enfadada —Hay algo más que no me has dicho, ¿cierto?

—P-pues diría que una de las dos chicas se excitó mucho cuando Charlie le recitó poesía que "supuestamente había creado exclusivamente para ellas", si no recuerdo mal creo que citó a Shakespeare.

Puse los ojos en blanco y suspiré —Eso sólo me demuestra que las chicas tienen como mucho tres neuronas, primero por seguir a un idiota con cara bonita a un bosque en mitad de la noche y luego creerse que ha creado un par de poemas sólo para ellas, cuando fue creado por un célebre autor, aunque he de decir que en parte Shakespeare estaría orgulloso de él, quiero decir, las sedujo con sus poemas. ¿Algo más?

Neil respiró profundamente —Meeks me contó sus sospechas hacia ti y le dije que dejase ese tema a un lado, que si sus sospechas sobre tu género fueran ciertas, que lo son, tendrías tus razones por hacerlo.

Sonreí y abracé a Neil —Gracias Neil, te debo una bien gorda.

—Mejor agradéceme cuando asegures tu puesto en Welton después de lo que te voy a decir ahora.

Dios, ¿tanto pasó en una sola noche?

—Charlie ha colado un artículo de forma clandestina en el que dice que admitan a chicas en Welton, sigue obsesionado con la chica que escuchó cantar, osea tú, y quiere que dejes de esconderte y además, el artículo será publicado en nombre del club de los poetas muertos. En estos momentos debe estar imprimiéndose.

Fruncí el ceño —¡¿ES IDIOTA O QUE LE PASA?! ¡No sólo se pone en peligro a sí mismo, sino que también a todo el club y sobre todo a mí! No quiero sonar egoísta pero es la verdad. ¡Es un estúpido engreído que sólo piensa en sí mismo!

Neil me agarró por los hombros —Victoria, intenta tranquilizarte, Charlie puede ser un idiota, pero ten por seguro que si hay alguna sospecha por alguno del grupo, él se delatará y no contará nada del club ni de la misteriosa chica. Eso sí, ten bien claro que el lunes habrá asamblea a primera hora, necesitan que todos los alumnos estén presentes, no eres la única que vuelve a casa los fines de semana.

Lo mejor será que Riff y Velma no se enteren de nada hasta que pase todo este asunto y si salgo delatada, pues adiós Welton, adiós Delaware y de vuelta a New York.

[ ... ]

Al llegar el domingo de nuevo a Welton, no fui capaz de dirigirle ni una sola mirada a Charlie, de hecho vino muy efusivo pensando en que yo le apoyaría en todo este asunto, ya que usualmente suelo estar de acuerdo con sus opiniones, pero me fui directa a mi cuarto, me puse el pijama, me quité la peluca, cerré con pestillo la puerta, no había problema por hacerlo ya que cada estudiante tenía una copia de la llave de su cuarto.

El artículo ya se había publicado y seguramente toda la escuela lo haya leído, incluido los profesores y el señor Nolan.

Estuve en posición fetal en mi cama, hasta que escuché como abrían y cerraban la puerta.

Noté como mi cama se hundía por el peso de alguien sentándose en ella.

—¿Cómo estás?— preguntó Knox.

—Decepcionada y asustada por lo que nos espera mañana, seguro que hacen una asamblea a primera hora de la mañana para averiguar quien escribió el artículo y qué rayos es el Club de los Poetas Muertos— me pegué a la pared para dejarle hueco a Knox para que pudiera acomodarse.

Knox se tumbó a mi lado y me abrazó, quedando mi cabeza encima de su pecho.

—Que sepas que no pienso llamarle Nuwanda a ese idiota, primero porque como ya he dicho, es idiota, segundo porque es un nombre muy ridículo.

Hundí mi cara en el pecho de Knox —Gracias por estar conmigo Knox, realmente necesitaba un abrazo en estos momentos.

—Te lo debo, tú estuviste para mí la otra noche— Knox, quien miraba al techo, bajó la mirada para verme pero yo me encontraba dormida y él se acomodó mejor para dormir esa noche conmigo —Buenas noches Victoria.

A la mañana siguiente durante la hora del desayuno, Nolan se puso en pie y anunció que había asamblea después del desayuno, se volvió a sentar y siguió desayunando.

Le di una mirada furtiva a Charlie, quien la captó y sonrió con sorna dando a tener que tenía un plan para salir de esta. Knox me dijo al despertar que Neil vino a la habitación anoche cuando yo ya estaba dormida y resulta que este le dijo que Charlie había estado pensando, desde que vio mi cara de decepción, un forma de que nadie saliera perjudicado por el artículo. Gracias a eso y a su sonrisa me sentí ligeramente más tranquila.

Todos nos encontrábamos sentados en bancos, Pitts, Knox y yo nos sentamos juntos, por otro lado podía identificar a Meeks, Todd y Neil en el mismo banco y a su lado, quien parecía ser Cameron, justo en el banco que tenía delante tenía a David y casi al final de la sala, se sentó Charlie, solo.

Esperamos en silencio a que Nolan hablara.

—En el último número de "El Honor de Welton" ha aparecido un artículo profano y no autorizado. Antes de perder mi valioso tiempo buscando a las personas culpables, y les aseguro que las encontraré, prefiero pedir a aquellos alumnos que tengan que ver con dicho artículo se den a conocer, aquí y ahora— se quedó en silencio por un momento y continuó — Sean quienes sean los culpables, es su última oportunidad de evitar su expulsión es esta escuela.

Un teléfono comenzó a sonar, toda la sala estaba desconcertada mirando hacia todos lados, el ring paró y una voz que conozco bien comenzó a hablar.

—Academia Welton, ¿dígame?— Charles Dalton fue quien descolgó el teléfono —Sí, aquí está— siguió hablando con total seriedad por teléfono aunque cientos de ojos estuvieran mirándolo directamente —Un momento.

Charlie se levantó de su sitio con el teléfono en la mano y se dirigió directamente al director —Señor Nolan, le llaman a usted, ¡es Dios! Y dice que debería haber chicas en Welton.

Mientras todos reían, yo miré a Knox con cara sorprendida, Charlie acaba de vender su alma al diablo y probablemente nosotros iríamos detrás y yo volvería a New York. Sólo tenía ganas de llorar, estaba totalmente en shock, si Charlie se hubiera callado, probablemente con el tiempo hubieran olvidado el asunto y volveríamos a reunirnos de noche de forma clandestina con algo más de cuidado y sigilo que antes, pero ya está todo perdido.

Se llevaron a Charlie al despacho del director y a los demás nos mandaron dispersarnos y no molestar, parecía como si hubieran olvidado que teníamos clase con todo este asunto.

Knox me metió en la habitación para tranquilizarme.

—Tranquila, ahora estarán interrogando a Charlie, pero conociéndole seguro que no cuenta nada... Probablemente acabe llevándose azotes con la pala de madera, no deja marca, pero tendrá en culo rojo y adolorido durante varias horas.

—¿Y él cree que merece la pena haber escrito el artículo y haber montado todo eso teniendo en cuenta las repercusiones que habría después?

—Sabes bien que tiene una mente rebelde y revolucionaria, muchas veces lo hace sólo por tener el gusto de hacerlo. 

Una vez estuve más tranquila, ambos salimos al pasillo para hablar con los demás entre susurros sobre el tema, la mayoría de nosotros pensábamos que Charlie sería expulsado.

Al cabo del rato Charlie llegó al pasillo con ojos llorosos, caminando a paso lento como si estuviera teniendo mucho cuidado de no hacerse daño al andar. Iba directo a su habitación, incluso Cameron se echó a un lado para dejarle pasar sin que Dalton tuviera que decirle algo.

Neil y yo nos acercamos a él antes de que se encerrase en su habitación para pasar un tiempo a solas y se recuperase del daño que le habían hecho.

—¿Te han echado?— preguntó Neil.

—No.

—Pues, ¿qué ha pasado?

Charlie se paró en la puerta y suspiró —Tengo que delatar a todos, pedir disculpas a la escuela y todo será olvidado— dicho esto siguió caminando para recluirse en la intimidad.

Di un paso adelante para hablar —¿Y qué tienes pensado hacer? ¡Charlie!

Se dio la vuelta para mirarme —¡Maldita sea Victor! Me llamo Nuwanda— su sonrisa y sus ojos mostrabas que estaba a punto de soltar echarse a llorar en cualquier momento.

Yo sonreí también a punto de llorar, en parte por saber que él se encontraba mal y no podía hacer nada para que se sintiera mejor y por otra parte, porque demostraba que nos era leal, a nosotros, a sus amigos, y que se sacrificaría por nosotros si hiciera falta, aunque ha llegado a esta situación él sólo, pero son detalles sin importancia, sobre todo, ahora que sabía que todo estaba arreglado y que mi posición estaría a salvo.

Charlie cerró la puerta de su dormitorio y miré a Neil, quien también sonreía.

Empezó a salirme un puchero de los labios y entré a mi habitación porque sabía que estaba a punto de llorar. 

Neil entró y cerró la puerta acogiéndome entre sus brazos y así ahogué mis sollozos en su pecho.

[ ... ]

Las clases de por la tarde resultaron algo intensas, pero nada que una ducha y pasar tiempo de calidad con los amigos no pudiera remediar.

Estábamos en la sala común, alrededor de Charlie, que estaba sentado en un cómodo sillón de cuero, con las gafas de sol puestas y los bongós entre sus piernas, todos escuchábamos atentamente su relato de cómo fue el interrogatorio de Nolan.

—Ñii— ¡Pum! le dio un golpe al instrumento —Se acercaba caminando por mi izquierda, ñii, ñii. Adopte la posición señor Dalton— imitó a Nolan.

La mayoría se dispersó cuando el señor Keating entró en la sala, yo me quedé de pie, a la derecha de Charlie, que era justo donde estaba mientras escuchaba su relato.

—Bueno, señores.

Charlie se levantó las gafas de sol y sonrió —¡Señor Keating!

El Capitán se acercó a él caminando tranquilamente, con las manos en los bolsillos —Señor Dalton. Su pequeña gracia de hoy ha sido una estupidez.

El chico frunció el ceño sorprendido —¿Está de parte del señor Nolan? ¿Qué hay de carpe diem y de extraer el meollo a la vida y lo demás?

—Extraer todo el meollo a la vida no significa meter la pata. Hay un momento para el valor y otro para la prudencia, y el que es inteligente los distingue.

Charlie bajó la mirada, ser reprendido por una persona a la que admiraba y respetaba hizo que tuviera un ligero arrepentimiento por todo lo sucedido —Creí que le gustaría.

Keating negó —No... Hacer que le expulsen de la escuela no denota valor, sino estupidez, porque se perderá ciertas grandes oportunidades.

—¿Ah, sí? ¿Cuales? 

—Para empezar, la oportunidad de asistir a mis clases— Charlie sonrió junto a Keating —¿de acuerdo campeón?

Asintió —A la orden Capitán.

El adulto susurró —No pierda la cabeza— se giró para ver a los demás —Y eso va por todos.

—¡Sí Capitán!— contestamos todos.

Se fue alejando hacia la puerta —Una llamada de Dios... Si hubiera sido a cobro revertido.

Todos reímos, imagínate tener que pagar una llamada del Señor, seguro que te quedabas sin sueldo para toda la vida.

Los chicos se volvieron a sentar cerca de Charlie —Anda, continúa— dijo uno de ellos.

Sí, sí, ya lo sé, no actualizo desde octubre creo, lo siento, es que el mes pasado he estado muy ocupada entre trabajos de la universidad y ensayos de baile, además de que pillé un resfriado, pero bueno, no pasa nada, aunque actualice de forma lenta juro por Tom Hiddleston que acabaré esta historia.

Tenía pensado hacer un especial de Halloween, pero me pilló un poco mal para escribirlo, así que haré un especial de Navidad usando la idea que más o menos tenía para la de Halloween, tranquilos, se puede adaptar perfectamente la idea así que no habría problema.

También llevo un tiempo pensando en comenzar a escribir otro fanfic, uno de Roger Taylor, que es quien toca la batería en la banda Queen, pero aún tengo sólo algunas ideas generales y no sé cómo podría empezarlo. Además, quiero centrarme en terminar este fanfic, porque me estoy pasando un poco de tiempo. Y poner temas sobre algo que escribir, porque no sé aún si el fanfic de Roger es seguro que lo escriba.

Luego, me gustaría que comentéis algunas sugerencias e ideas sobre como mejorar la historia, porque siempre ando pensando que voy a tener que editar algunas cosas cuando acabe de escribir para que algunas partes tengan más sentido ya que siento que algunas cosas no cuadran del todo con la historia y que a lo mejor sobran o faltan otras.

Y eso es todo, a decir verdad no creo que queden muchos capítulos para que acabe la historia pero no pasa nada, haré capítulos especiales como el de Navidad que he mencionado antes. Espero que el siguiente capítulo sea publicado dentro de poco, lo siento mucho mis queridxs lectorxs.