Actualidad.
(Dentro de la línea temporal de la historia)

— Chaeyoung —

"Chaeyoung…" unos susurros ajenos a mis fantasías empezando a hacer eco.

Esa voz traía recuerdos.

Poco a poco mi mundo somnoliento y ambiguo se empezó a fundirse enteramente para recrearse a su imagen…

Todo conllevó a una gran caída libre.

Era como si estuviera flotando, quedé atrapada entre el suelo y el cielo.

Cuando pude abrir los ojos aún sentía la sensación de caída libre.

Ambas nos asustamos.

"¡¿Estas bien?!"

"Si… solo fué una pesadilla"

"Lo siento… ayer no pude llegar más temprano"

"No te preocupes… un día no me matará" me senté en la cama, de la misma manera que ella.

Desde hace algunos años dormimos juntas.

Muy pocas veces no lo hacemos, solo cuando nos separan muchos kilómetros.

En caso de que no podamos dormir juntas ella al menos me despierta.

Desde el día donde ella afirmó nuestra relación, todos estos años ella es la que me despierta.

Tal y como el primer día.

Y hoy no era ni fué la excepción.

"Lo lamento… tuviste una pesadilla por mi culpa" bajó un poco su cabeza en señal de derrota.

Tomé su mentón con mi mano y le di un pequeño beso.

Es mejor nunca perder las costumbres incluso en las peores situaciones.

"No te pongas triste, sabes que me gusta más que sonrías…"

"Tonta" poco a poco empezaron a brotar pequeñas lágrimas.

"¡Minari no llores, estoy bien!"

"¡Lo siento!"

"No debimos de haber visto esas películas antes de que te fueras de vacaciones…"

"¡Tu cállate, ahora abrázame!"

"Lo iba a hacer de todos modos"

Nos quedamos ahí, varios minutos, ella desahogandose.

Al pasar el lento recorrido de los años a su lado, que, aunque lento no significa que hayan sido malos de ninguna manera, aprendí que es mucho más sensible de lo que parece y demuestra incluso con las demás.

Aún así, su voz puede romper mis huesos.

Si ella lo quisiera podría romperme el corazón con menos de cinco palabras.

Pero tal parece que ella me demuestra que no lo hará, y que ella es capaz de romperse el corazón ella misma con sus pensamientos.

Cómo Mina se quedó en cama con una caja de pañuelos aún con problemas en cuanto a parar sus lágrimas yo hice el desayuno.

Con el tiempo nos logramos mudar a un conjunto de departamentos, dos, siendo exactos.

Esto con la nueva administración de TN en la empresa, nunca le dijimos que queríamos más privacidad, pero el solo llegó, nos dió la noticia y a la semana ya teníamos una habitación todas las parejas.

Algo un poco surrealista, siendo sincera.

Al igual que la que esté cocinando sea yo y no ninguna de las mayores…

Y hablando de ellas, estábamos de vacaciones y las demás no estaban. Mina recién había llegado.

A ritmo de compás, con música iba preparando unas tortillas de huevo.

— Mina —

Bien… tengo que calmarme.

O al menos intentarlo.

Salí de la habitación con una toalla, los pañuelos, aunque eficaces no duran tanto.

Aunque mi llanto había cesado, no podría decir lo mismo de mi nariz.

Así que solo iba caminando por inercia con los ojos irritados y la toalla en la nariz.

Un aroma distintivo de café se esparcía por todo el pasillo y sala del departamento.

Cuando llegué a la esquina de la cocina y el pasillo pude ver la cosa más tierna que he visto en la vida.

Chaeyoung bailando mientras cocinaba.

Estuve todo el tiempo escondida detrás de la pared, de no ser porque no tenía la más mínima idea de dónde se encontraba mi celular la habría grabado.

Una mezcla de sentimientos entre ternura, tristeza y algo de adrenalina.

Eso último por su temperamento de vez en cuando.

Cuando ví que terminó de cocinar y se dirigía a la habitación salí corriendo cuanto mis piernas pudieran ser rápidas como silenciosas.

No tengo la más mínima idea de cómo no pido darse cuenta de que la estaba espiando.

Quizá tantos años practicando la danza sirven de algo.

Cuando cruzó el umbral de la puerta pensé que todo estaría bien, pensé.

"¿Te divertiste viéndome?"

"¿Ah? Qué cosas dices…"

"Te faltó grabarme… por cierto, tu celular lo tenía yo, por si te lo preguntabas, con eso escuchaba música"

Dejó el plato en una estantería y podía sentir el peligro acercarse.

Poco a poco mi miedo se iba incrementando.

Así como eran sus pasos de pequeños debido a sus cortos pies iba creciendo el miedo.

Unas horas después.

"Aún no siento varias lugares de mi cuerpo"

"Eso te lo ganaste tú"

"¿Cómo fuiste capaz de hacerme tanto daño con una almohada?"

"Yo no soy muy fuerte por mi tamaño, pero para el tuyo eres muy débil"

Entiendo lo de su tamaño, pero lo del mío no.

"¿Ah?"

"Te lo podría explicar otra vez, pero no creo que tú cuerpo resista"

"Inténtalo" susurré.

"Tengo buenos oídos, estás acabada" tomó uno de los suaves cojines de la sala y ahí terminó mi vida.

Más o menos…

Mientras Chaeyoung me estaba golpeando con la almohada increíblemente me sentía alegre.

Todo esto no sería posible sin la intervención de una persona.

Gracias…

En China:

"¡ACHUU!"

"Salud"

"Gracias…"

"¡Si sabe chino! Kris devuélveme mis 500 yuanes"