Capítulo 11.
Desperté en el dormitorio, aunque en la cama de Jae, con Jae increíblemente.
No es que no me guste, porque lo considero un hermano mayor, pero en estos países la homosexualidad no es que los acepten mucho, y cualquiera que nos vea juntos diría otra cosa.
¿Y porque no se había mudado ya? Qué yo sepa las bandas viven juntas en una casa separada de la empresa.
Ya se lo preguntaré cuando despierte.
Ahora el problema es: safarme de el y ver qué hora es.
Cuando estaba intentando salír de la cama noté que se despertó.
Se sentó y me miró un tanto serio.
— ¿Sabes que me iré pronto no? — Susurró esas palabras mientras miraba a una esquina. —Me lo suponía— respondí yo.
— ¿Me ibas a dejar durmiendo solo incluso después de que te cargue hasta aquí? — respondió indignado. — ¿Hiciste eso enserio? — pregunté muy curioso sobre la situación.
—Te iban a despertar en la entrada, pero justo iba llegando yo y nadie te quiso despertar— respondió el.
—Si no fueras mi hermano mayor esas cosas me enamoraría ¿Sabes? — dije subiendo de tono sarcásticamente la escena. — ¿No qué eras heterosexual? — preguntó intrigado.
—Desde que te maquillan eso no es tan seguro— respondí en broma. — ¡Pilluelo! — Dijo dándome un pequeño golpe en el hombro.
Logrando alegrar un poco el ambiente me dió tiempo para ver la hora, eran las 4:03AM
— ¿Qué te parece si ambos nos tomamos el día libre? No he estado contigo mucho desde que te traje, y no falta mucho para tu audición— propuso.
—Me parece una excelente idea— respondí animado.
Volvimos a dormir, pero cada uno en su respectiva cama. Son pequeñas, y dormir abrazados después de mucho molesta.
Despertamos a las 9AM, bueno, yo desperté a esa hora, Jae un poco más tarde con mi ayuda.
Cómo quería agradecerle por el favor que me hizo y un tanto por felicitaciones de su debut le llevé el desayuno a su cama.
Es curioso que éramos cercanos, pero, al venir aquí y mezclar nuestras vidas en aún más ámbitos nos volvimos mucho más cercanos. Aunque en ciertos puntos nos descordinamos, cuando estamos sincronizados somos como uno solo.
No había notado como su cabello empezó a tener las características raíces negras, eso le pasa por elegir rubio.
Ni tampoco que ahora su rostro esconde la sorpresa del cansancio sin la capa de maquillaje de la que use para burlarme de el, estaba trabajando duro por su sueño.
Pensé todo eso mientras dudaba de en qué momento despertarlo. Aunque no lo necesite, se despertó solo.
— ¿Tengo algo en la cara? ¿Me la marcaste con marcador? — preguntó haciendo tacto en su rostro.
—Tranquilo, come, ahí está el desayuno— respondí viéndolo descuidadamente.
— ¿Desde cuándo tan servicial? — preguntó, frotándose un ojo, el característico movimiento cuando se está semi despierto.
—Solo come y después vemos que haremos rubio oxigenado al que deberían de volver a aplicarle tinte— dije. Dichas esas palabras lo deje solo y fuí a desayunar yo, puesto que increíblemente no desayuné primero, teniendo cantidad de olores distintos mientras paseaba con la bandeja de Jae por el comedor.
Ya en el comedor, me encontré con Chan y unos cuantos amigos más de él que también estaban en nuestras clases, Jisung, Felix, Woojin y Hyunjin, me senté con todos y después de socializar un rato puede que hasta lleguemos a ser amigos la verdad. A primera vista se veían tranquilos, pero solo era la primera vista.
Después de desayunar una profesora me pidió seguirla, reconocí el camino, iría a ver JYP.
¿Qué hice mal ahora? O más bien ¿Qué no he hecho? Las dudas sobre mis acciones son muy grandes como para determinar de qué lado son.
Al llegar me indico que tomara asiento.
—Bien, te traje aquí hoy porque quiero ver hasta dónde llega tu potencial musical— dijo estableciendo su liderazgo frente a mi.
—Irás con la persona que está afuera al estudio de grabación y crearás una canción en dos horas, yo mismo iré al terminar el tiempo—
— ¿Algún estilo pensado, señor? — pregunté.
—No lo sé, aquí tú eres el genio, solo sorprendeme— dijo indicándome la salida con una sonrisa. Una sonrisa que ultimadamente me da miedo.
¿Me llamó genio? Seguí sus órdenes y fui con la persona que me indico.
En el tiempo que estuve ahí realmente estaba algo inspirado.
Aunque se me había olvidado Jae y "nuestro día libre"
Una hora paso y prácticamente tenía la canción terminada, lo bueno de estar en un estudio completo, en el sentido de la palabra es que había instrumentos los cuales facilitaron la composición.
Tuve incluso tiempo de pensar en porque no me regañó por subirme al escenario y cantar y bailar con las chicas.
Me estaba imaginando la letra de la que sería posible en la canción, obviamente el coreano aún era demasiado para plasmarlo en una canción, por lo que use el inglés de toda la vida.
"Se que he estado alejado últimamente"
"Sé que ha sido difícil amarme últimamente"
"Sé que esto se vuelve cancino"
Era parte del inicio. Quizá lo escribí pensando en alguien. No lo sé.
Lo que se es que últimamente sentimentalmente he estado muy distraído, no se que pensar.
Pasó la siguiente hora y JYP llegó al estudio, tenía el setenta y cinco porciento de la canción compuesta y escrita, porque dos horas para una canción es demasiado poco. Tres minutos pueden llevarte incluso una semana cuando tienes sequía creativa.
Aunque, dentro de los productores experimentados, media hora podría ser suficiente para crear una base entera, el problema radicaba entre encajar una letra y los tonos de esta.
Al escuchar lo que tenía solo indico al encargado unas cosas y me dijo que podía irme, Jae me estaba esperando.
Y eso hice, aunque esta vez me llevo el, íbamos al mismo lugar de todos modos.
Al llegar nos bajamos y le hice una pequeña reverencia, el siguio su camino y yo fui a buscar a Jae.
No se hizo muy díficil de encontrar, puesto que casi estaba en la entrada.
—Bien, ya el me dijo el porqué así que sigamos con el día libre—
Visitamos tantos lugares de Seúl que perdí la cuenta, parques, cafés, centros comerciales, todo lo que Seúl de día podía ofrecer lo vimos, increíblemente para ambos la mayoría era nuevo, no habíamos visto mucho por estar ocupados.
Aunque estábamos un poco cansados de caminar aún teníamos ganas de ver esta gran ciudad.
Tomamos un taxi hasta una parte alejada en donde teníamos una gran vista, como ya empezaba a oscurecer pudimos ver las vistas de cómo Seúl encendía sus luces.
Hermoso se quedaría corto.
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