HOOOLAAAAAAA genteeee!!!!!!

Hoooolaaaaaa de nuevoooo genteeee!!!! Aquí os dejo un nuevo capitulo por cumplir con la meta del capitulo anterior jaja. Disfrutadlo!!! jajaja

Votad, comentad y volved a por mas!!!!! jaja

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PVO Claus

-¿Cómo se encuentra señor?- abrí los ojos y le fruncí el ceño a quien estaba molestándome de nuevo.

-¿Cómo crees que estoy?- gruñí furioso.- ¡Nada salió como había planeado!

-Lo se señor, pero nadie sabía que tenían magos tan fuertes.- dijo en susurros.- Sobre todo ese tipo de cabello rosa.

-Ese desgraciado...- dije entre dientes furioso. Esa manera de tocar a Misaki y de mirarme me dejaba claro que para ese tipo Misaki era de su propiedad, pero eso no podía ser cierto.

¡Misaki era mía!

Esta vez no había logrado traerla a mi lado, pero la próxima vez sería la definitiva y Misaki volvería a ser mía. Le enseñaría a respetarme de nuevo y me encargaría de que nunca planease escapar de nuevo.

Estaríamos siempre juntos.

-Reúne a los ancianos.- dije sonriendo con maldad.- Tenemos que pensar como pasar sus defensas y lograr atrapar a Misaki.

-¿Qué aremos con su herma...?

-¡Yo no tengo hermanos!- grite enfurecido.- También tengo pensado librarme de ese traidor, pero antes le enseñare que a mí nadie me traiciona sin pagar un alto precio.

-Si señor.- hizo una reverencia y salió de mi cuarto.

-Pronto Misaki.- me dije riendo.- Pronto estarás a mi lado, y nunca nadie nos separara de nuevo.- y continué riendo mientras imaginaba lo bien que lo pasaría con Misaki a mi lado.

PVO Natsu

...Una semana Después...

-Voy a morir de aburrimiento.- escuche a Misa quejarse por décima vez.

-Lo se.- rodé los ojos.- Pero no puedo hacer nada.

-Puedes dejar que me vaya a dar un paseo con Daiki y...

-Para nada.- dije sin dudar.- Porlyusica dijo que te movieras solo lo necesario las próximas semanas.

-Que aburrido.- inflo los mofletes.

-Enana.- apreté sus mofletes deshinchándolos y reí divertido al ver su mirada asesina.- ¿Por qué no juegas con Daiki?

-Está durmiendo la siesta.- se quejó.- Y te recuerdo que no me dejaste despertarlo cuando lo intente hace un rato.

-Es verdad.- sonreí.- Pues relájate.- ella rodó los ojos.- ¿Cómo puede ser que te moleste tanto estar quieta?

-...- se quedo en silencio y me aparto la mirada.

-¿Misa?- pregunte confundido y preocupado.- ¿Ocurre algo malo?

-Estar sin hacer nada... me recuerda el tiempo que estuve encerrada.- la mire sorprendido.- Por eso siempre intento estar en movimiento, para que los recuerdos no me ataquen estando despierta.

-¿...Encerrada?

-No estuve en un cuarto de algodones ese tiempo Natsu.- susurro evitando mirarme.

-¿Puedes... puedes explicarme?- dije ansioso y furioso a partes iguales.

-... Supongo que si.- susurro.- Me ayudara a que el tiempo pase más rápido.- hizo el intento de sonreír, pero no le salió nada bien.

-Te escucho.- me senté a un lado de la cama, junto a ella y la mire esperando a que comenzara.

-Cuando me llevaron a ese lugar Claus intento ser amable conmigo, pero no se lo puse fácil.- susurro.

FLASBACK

-Este será tu hogar a partir de ahora princesa.- me dijo Claus con una sonrisa, como si todo esto fuera algo bueno.

-Lograre escapar de aquí.- dije con rabia.

-No digas eso princesa, o tendré que portarme mal contigo.- me miro serio.- Ahora eres mía, y tienes que obedecer lo que te diga.

-Nunca.- dije furiosa.

-Escúchame atentamente.- me cogió de la mandíbula con fuerza y me obligo a mirarlo.- No me hagas cabrear o te ira muy mal.

-Kurama te encontrara y acabara contigo idiota.- escupí.

-Nunca van a encontrarte y siempre vas a estar aquí conmigo, porque ahora eres mía princesa.- me miro con locura.- Por eso te recomiendo que comiences a portarte bien.

***                                ***                                ***

-¡Es la tercera vez que intentas escapar!- me dio una cachetada y me tiro al suelo.- ¡Esto se acaba aquí!

-¡Suéltame!- grite cuando me cogió del brazo.

-¡Te lo advertí la última vez princesa!- grito arrastrándome por largos pasillos.- ¡Ahora aprenderás a respetarme!

-¡Suéltame!- me revolví intentando soltarme, pero lo único que logre es que me goleara de nuevo dejándome mareada.

-¡Si no aprendes por las buenas aprenderás por las malas!

-¿A dónde me llevas?- grite al ver que comenzábamos a bajar escaleras sin parar.

-He decidido que cambiaras de estancia las próximas semanas.- temble al ver su mirada de loco.- A ver si así aprendes.

-¿De que estas hablando?- pregunte asustada.

Él no contesto y continuo bajando escaleras llevándome a rastras junto a él, y al final nos detuvimos en el subsuelo. Varios calabozos se extendían a lo largo del pasillo, pero Claus no se detuvo hasta que llegamos al último de ellos.

Este calabozo estaba separado de todo por varios metros, además de que su puerta no eran rejas, sino una puerta completa de hierro. Claus me dio un empujón y me encerró dentro, y de inmediato la oscuridad reino.

-¡Sácame de aquí!- grite desesperada.

-Te quedaras aquí un tiempo princesa.- lo escuche reír desde fuera.- A ver si cuando vuelva has aprendido a comportarte mejor conmigo.

-¡Sácame de aquí Claus!- grite de nuevo mientras golpeaba la puerta desesperada.

Pero la puerta no se abrió...

***                                ***                                ***

No tenía ni idea del tiempo que pase sumida en esa absoluta oscuridad, porque no era capaz de verme las manos. Ese calabozo solo tenía el espacio para un retrete (que se encontraba en una esquina) y para mí, que desde que había entrado me había sentado en el lado contrario.

No había espacio para más.

Podía escuchar a todas horas a las ratas andar por mí alrededor y el no verlas solo lo empeoraba todo. Las comidas eran una vez al día (o eso pensaba), y cuando me la traían solo tenía 5 minutos para comer. Si no acababa me la quitaban y tenía que esperar a la siguiente comida.

¿Cuánto más tendría que aguantar esto...?

¿...Cuándo lograrían encontrarme?

Flexione las piernas y escondí la cabeza en ellas intentando mantener a raya las pesadillas y todo lo malo. Y fue en ese momento cuando escuché la puerta abrirse, pero no me moví.

-Parece que estas más tranquila princesa.- seguí sin moverme.- ¿Ahora vas a ignorarme?

-Me das tanto asco.- susurre sin moverme todavía.

-¿Qué dijiste?- me cogió del brazo y me alzo a la fuerza.

-Te odio tanto.- dije con tranquilidad.- Y te tengo tanto asco Claus.

-Solo estas exagerando Misaki, yo sé que me quieres.- me sonrió, como si de verdad se creyese lo que decía.

-¡Estás loco!- grite arañándole la cara.- ¡Y no sabes cuándo te odio!- antes de darme cuenta le había escupido en la cara y de un momento a otro su expresión cambio, y al ver la furia que mostraba sentí miedo de nuevo.

-Te vas a arrepentir.- al contrario que las otras veces susurro y no grito, pero eso solo logro asustarme más. Clavándome las uñas en los brazos me llevo a otro de los calabozos donde me metió y me encadeno a unas cadenas que habían en él.- ¡Sujetadla!

Dos hombres me agarraron de los brazos y me colocaron para darle la espalda a Claus. Por el rabillo del ojo vi que cogía en sus manos una especie de látigo con unas pequeñas espinas.

-Suéltame Claus.- supliqué asustada.

-No has querido aprender a comportarte por las buenas.- sonrió con maldad.- Por eso te enseñare a comportarte por las malas.- movió el látigo haciéndome temblar.- Tu eres la culpable de esto.

Y golpeo.

Una...

...Dos...

...Tres...

...Cuatro...

...Y cinco latigazos que cayeron en mi espalda con fuerza.

-¡Esto te enseñara Misaki!- lo escuché gritar mientras reía como un loco. Yo mordía mi labio intentando aguantar los gritos por el dolor, pero cada vez era más difícil.

Los latigazos daban de lleno en mi espalda, impactando en las heridas que había dejado el latigazo anterior. No se cuánto duro aquello, y tampoco sé cuántos latigazos me dio por que por suerte logre abstraerme en algún momento de esa tortura.

Imagine que estaba en el gremio junto a Lucy, Kurama y Kaoru de nuevo. Todos riendo y haciendo misiones largas y divertidas sin preocuparnos de nada más. Incluso imagine que Natsu regresaba a Magnolia y de nuevo peleábamos como antes de que se fuera.

Pero la realidad era otra.

Cuando los latigazos se detuvieron estaba por desmayarme de dolor, pero pude escuchar algo más de Claus antes de desmayarme de nuevo.

-Esas marcas son prueba de que me perteneces princesa.- me dijo riendo.- Me encargare de que sean imborrables, para que siempre puedas recordar lo que te pasara cuando te portes mal.

Después de eso todo estaba oscuro de nuevo.

***                                ***                                ***

Cuando desperté de nuevo estaba en la absoluta oscuridad de nuevo, y eso significaba que Claus me había metido en el calabozo pequeño de nuevo. No tenía ni idea de cuando llevaba inconsciente, ni de cuanto llevaba encerrada allí, y menos sabia el tiempo que estaba desaparecida.

La espalda me dolía y escocia sin parar, y estaba segura de que las heridas no habían sido curadas. Intentando que la camiseta rota no rozase mi espalda me senté y encogí en el suelo.

No sabía si lograrían encontrarme o Claus me sacaría algún día de ese sitio, pero lo que tenía claro es que quería que todo acabase.

Estaba tan... cansada.

FIN FLASBACK

Cuando Misaki acabo de hablar me miro esperando a que dijese algo, pero yo era incapaz de reaccionar. Había olvidado como hablar y como moverme, y solo era capaz de repetir en mi mente, una y otra vez, todo lo que Misaki acababa de revelarme.

Estaba tan... enfadado.

PVO Misaki

-Después de eso estuve mucho tiempo encerrada en ese sitio.- susurre mirando a Natsu.- No sé el tiempo que pase allí, porque Claus nunca me lo dijo.

Los siguientes minutos ninguno de los dos dijo nada, Natsu porque estaba demasiado metido en sus pensamientos y yo porque estaba concentrada mirándolo para saber que estaba pensado.

Se encontraba con la cabeza agachada y no podía verle la cara, los puños los tenia apretados y los brazos los tenia posados en las piernas. Coloque una mano sobre la suya y apreté, Natsu me devolvió el apretón y comenzó a levantar la cabeza poco a poco.

-¿Estas...bien?- susurre al ver que su expresión se había oscurecido.

-Estoy bien Misa.- me miro intentando sonreír.- Ahora... continua.- susurro. Yo asentí y continué.

-Cuando me saco de ahí era incapaz de andar sola por que las heridas sin curar y la mala alimentación me tenían medio desmayada todo el tiempo.- explique.- Me llevo a la misma habitación del principio.

-¿Y qué paso?

-Me dio comida y me dijo que se encargaría de curarme las heridas.- evite su mirada.- Yo no tenía fuerzas, y no pude apartarme.

-¿Qué quieres decir?- me miro ansioso.

-Me hecho sal en las heridas.- susurre intentando apartar los recuerdos.- Él quería que las cicatrices de mi espalda no se borraran nunca.- le explique.- Y lo logro echándome sal en las heridas que estaban sin curar.

-¿Qué... Qué más?- pregunto. Por el rabillo del ojo vi que los puños le temblaban.

-Después de eso no intente escapar de nuevo, no tenía fuerza para continuar resistiéndome.- me lamente.- Solo quería que todo acabara, porque estaba tan cansada.

-¿Te rendiste?- asentí.- ¿Ya no volviste a pelear?

-Si pelee.- susurré apartándole la mirada.- Pero solo fue después de...- trague saliva.

-¿De qué?- me miró fijamente.

-Cuando me recupere de las heridas Claus vino a verme y comenzó a decir muchas cosas.- explique.- No le preste atención y lo deje hablar, además de que todavía estaba débil.

-¿Qué paso?

-De un momento a otro estaba acostado en la cama sobre mi.- sentí como mis ojos comenzaban a picar.- Me agarro del cuello y comenzó a decir que le pertenecía y...- me lleve la mano a la boca y varias lagrimas comenzaron a caer.

-Acaba de explicar eso Misaki.- me agarro de la mandíbula y me hizo mirarle.- Cuéntame.- su mirada era cálida y llena de ternura.

-Sus manos comenzaron a bajar e intentaron quitarme el pantalón.- le dije mirándolo fijamente.- Fue en ese momento en el que recupere el sentido.- solloce.- Yo... no quería que él se me acercara.- el acaricio mi mejilla.- No recuerdo exactamente como, pero logre golpearlo y dejarlo aturdido lo suficiente como para levantarme y salir corriendo.

-Y escapaste.- asentí.

-De algún modo logre salir de allí e inmediatamente comencé a llamar a Lucy y a Kurama por medio de la conexión de demonio.- le dije.- Estuve corriendo por horas y cuando Claus estaba por atraparme de nuevo Lucy y Kurama aparecieron con los magos de Fairy Tail y Dark Blood.

-Lo demás lo se.- susurro colocándose en pie y caminando de un lado a otro de manera nerviosa.

¿Qué estaría pensando Natsu?

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Y hasta aquí llego el capitulo gentee!!! ¿Que tal? ¿Os gusto? VOTAD Y COMENTAD!!!

Claus se prepara para dar el ataque final, ¿Quien llegara primero, Claus, o FT y DB unidos? Poco a poco estamos llegando al final jajajaja.

Y por fin Misaki ha revelado la verdad sobre sus años de encarcelamiento. Ahora Natsu sabe todo lo que Misa sufrió a manos de Claus, ¿Que hará? 

PD: Si queréis que suba el siguiente capitulo, llegad a los 10 votos y 5 comentarios!!! jajaja

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¡¡¡Leed, votad, comentad y volved mañana a por mas!!!