「ღ」Capítulo 24.
Luego del incidente de la comisaría los cargos de Eliot fueron retirados, tal y como habían prometido los abogados de Ivan, esto no se hizo público. Al cabo de unas horas ni la prensa ni mucho menos los magazines de chismes del espectáculo hablaban sobre el tema. Posiblemente la agencia Golden había desembolsado una fuerte cantidad de dinero para cubrir todo el escándalo.
Mi padre seguía molesto conmigo, lo primero que hizo al llegar fue contarle a mi madre, ambos pelearon, era la primera vez que los veía así de enojados y estuvieron casi una semana sin hablarse.
Caro me había dicho que a raíz de este problema terminó con Victor, la veía afligida y muy triste. No pude evitar sentirme culpable por todo lo que se había desencadenado, pero por más que me empeñé en decir que yo me encontraba bien, me pidió que respetara su decisión ya que era algo que necesitaba hacer.
Volví a observar mi celular esperando un mensaje de él, pero lo único que llegó fue una notificación de Twitter donde informaban que él sería el nuevo protagonista de ZombieWorld. Le había ganado el papel a Victor.
Entré a mirar la nota de prensa y se mostraba una gran expectativa, Victor era un icono protagónico en las series y películas adolescentes, y que un novato de la misma agencia le hubiera ganado el lugar era algo increíble que había tomado por sorpresa a muchos.
Cuando terminé volví a entrar a su chat, lo felicité por el enorme logro, sabía que había practicado mucho para la audición, pero nuevamente el único check me indicó que él seguía sin conexión.
—Ey ¿Quieres ir por un helado?
Eliot se encontraba en el umbral de mi puerta, yo estaba echada sobre mi cama abrazando uno de mis peluches mientras continuaba observando la pantalla, quería llorar, pero volteé a observarlo para luego tomar asiento sobre el colchón.
—No creo que me dejen salir —le informo.
—Cierto, olvidé lo del castigo —contesta mientras se acerca con cuidado—. Escucha, he tratado de ubicarlo, pero... parece que se ha tomado un receso, o al menos es lo que me ha dicho el mono con traje que lo sigue a todos lados, y según he investigado, parece que mis tíos vinieron a raíz del escándalo.
—Gracias —le dije mientras me sentaba al borde.
—Mira, necesitas salir un poco, estar encerrada te hace daño, iremos a la tienda de la esquina, yo le diré a tu mamá que no tardaremos.
Eliot acarició mi rostro, yo lo observé y asentí. Ambos bajamos la escalera, mamá estaba en la sala colocando algunos adornos de Halloween. Estaba un poco más delgada, si bien papá y ella ya hablaban se notaba que todavía seguían molestos el uno con el otro.
Convencer a mi mamá no fue difícil para él, bastaba con que Eliot hiciera gala de su carisma para obtener lo que quisiera así que en poco tiempo estuvimos de camino al pequeño supermercado que quedaba a unos minutos de mi hogar.
—¿Cómo pudiste entrar a la agencia sin él? —pregunto ya que era algo que me había llamado fuertemente la atención.
—Creo que nunca te dije en qué trabajo, bueno en realidad qué es lo que hago con Ivan —responde mientras guarda las manos dentro de sus bolsillos—. Cuando él entró era más una compañía para él, pero Ivan se encargó de conseguirme un trabajo dentro, le doy clases de composición a los nuevos ingresos, no es algo que me emocione demasiado, créeme que hay gente muy mala y se nota que su fuerte es solo cantar lo que uno les compone, pero ayuda a pagar el mantenimiento de mi moto entre otros gastos.
—Pensé que con la venta de... —Eliot me observó entendiendo lo que quería decir.
—Tengo una deuda que pagar —me dice con calma—. Eres la primera persona a la que le confiaré esto, Ivan no cuenta ya que estuvo metido en este problema ¿Bien? —asiento luego de escucharlo para que continúe— ¿Ivan te ha contado algo acerca de su infancia?
—Sí, me dijo bueno... que prácticamente estuvo solo hasta que fue a vivir con ustedes.
—Correcto —dice mientras continúa observando al frente—. Mi padre y Bertrand, el padre de Ivan que es el hermano mayor, llevaban muchísimos años peleados por una herencia que dejaron mis abuelos, prácticamente desde antes que yo naciera ellos dejaron de hablarse y es por eso que cuando era tu vecino jamás se habló de él.
La herencia en cuestión era la mansión a la que fuiste durante el velorio... mi padre amaba ese lugar porque fue el hogar donde creció, y Bertrand siempre quiso vender el terreno para obtener más dinero, cuando mi abuelo falleció le dejó todo el dinero a él, pero la mansión quedó a nombre de mi padre, y bueno, Bertrand siempre ha sido de las personas acaparadoras y tengo entendido que llegó a querer denunciar a mi padre por "manipular" a un anciano para que le deje esa propiedad.
Ahora bien, cuando mi padre se enteró de la situación de Ivan fue el momento donde decidió prácticamente adoptarlo, por eso nosotros nos mudamos, Ivan estaba acostumbrado a cierto tipo de vida acomodada, retirarlo de allí hubiera sido algo impensable o al menos eso le explicó el psicólogo a mi padre, y enviarlo con sus padres hubiera sido peor aún, ambos nunca han sido demasiado paternales y lo hubiéramos condenado.
—Me dio esa sensación cuando él me lo contó.
—Bertrand firmó la tutela sin pensarlo, no iba a arriesgarse a una denuncia y posterior escándalo. En ese momento estaban junto a su esposa dando muchos conciertos por Europa y llevar a Ivan con él hubiera sido sacrificar muchos eventos sociales a los que debían asistir —Eliot me observó atento, mi cara era todo un poema en ese momento, no podía creer que alguien fuera tan malo con su propia sangre—. Para serte franco adaptarme a él fue demasiado difícil, los primeros años lo odiaba y lo culpaba por el giro que dio mi vida, en especial por haberme alejado de ti, pero llegué a entender su situación y con el tiempo nos volvimos inseparables —él suspiró pesadamente—. Cuando el accidente pasó tengo entendido que ellos me llevaron al extranjero y se encargaron de buscarme los mejores doctores y hospitales. Ahora, quizás te estés preguntando "¿Por qué después de todo ese tiempo ellos aparecieron cuando no lo hicieron ni siquiera por Ivan cuando los necesitaba?". La respuesta simple, yo quedé como heredero de esa propiedad.
A los días de despertar él fue a verme, y aunque trató de mostrarse amigable, no tardó en pedirme que firmara los papeles para cederle el terreno. Fingí que lo haría una vez que sanara, pero como entenderás, cuando todo pasó era aún menor y dependía económicamente de ellos. La deuda creció y creció a medida que los meses pasaban, pero siempre me enfoqué en que debía mejorar para huir.
Me dolió mucho vender la propiedad porque era el último recuerdo que me quedaba de mi padre, pero no iba a dejar que Bertrand se saliera con la suya, el condado me ofreció una fuerte cantidad de dinero por ella, querían volver el lugar un museo de la música donde no solo aparecería mi padre, si no también donde se realizarían clases para las personas que quisieran desarrollar ese talento, así que accedí.
De alguna forma sentí que su legado iba a permanecer, y en lugar de tener aquel lugar abandonado, quiero que las personas puedan disfrutarlo con algo que él siempre amó. La música.
—¿Qué pasó cuando el padre de Ivan se enteró?
—Se puso furioso —él rió—. Pero al ver la jugosa cantidad de dinero en su cuenta dejó de molestar, aunque claro, aún tengo un saldo importante que saldar. Quizás pienses que es mejor dejarlo así y que debería continuar con mi vida sin saldar esa deuda, pero los conozco lo suficiente como para saber que si trato de trabajar en este rubro, harán lo que sea para impedir que pueda desenvolverme en el medio.
—Que horror, no puedo creer que sean capaces de hacer eso.
—Créeme que son personas con las que no quisieras tratar.
Al llegar al supermercado nos dirigimos de inmediato a la sección de los helados, tomamos un enorme tarro de chocolate con trozos de galleta y lo metimos dentro del carro. Mi madre me había enviado un mensaje para que comprara otras cosas que faltaba para la cena, y luego de que metimos todo lo que nos pidió, comenzamos a caminar hasta la caja.
—Oye, quiero darle algo a tu mamá por su cumpleaños ¿Qué le gusta?
—Cualquier cosa que no sea para la casa —contesto con una sonrisa—, mi mamá disfruta cocinar pero odia que le regalen cosas para el hogar.
—Buen dato, ¿le servirán estos rizadores de cabellos? Me he dado cuenta de que el que tiene está un poco viejo.
—Sí, creo que está bien, la oí decir que iba a comprar otro de todas formas.
Ambos caminamos hasta la sección de electrodomésticos, Eliot caminó hasta un andén que tenía algunos puestos y una vendedora prácticamente corrió para poder atenderlo. Se notaba que la chica quería vender el producto para ganar una comisión, pero a su vez era muy notorio que se había interesado por él.
Eliot me observaba con ganas de matarme por dejarlo solo. Me gustaba molestarlo, así que dejé que ella se encargara de darle miles de datos sobre las funcionalidades de los productos.
En cuanto pasé por los televisores vi el nuevo videoclip de Ivan siendo transmitido y no pude evitar volver a ponerme triste, quería saber si estaba bien, era consciente de que el problema en el que estuve metida podía afectarlo, Benjamin lo había dejado muy en claro la última vez que nos vimos.
—¿Escuchaste la noticia? —escucho que pregunta la vendedora de los juegos para consolas de videojuegos a su compañera que estaba reposada sobre el mostrador mirando su celular.
—¿Cuál?
—La de Ivan y Camille.
Me frené en seco luego de escucharlas, terminé escondiéndome en la sección de tostadoras en un ángulo estratégico en el que no pudieran verme.
—Ah ¿el chisme ese?
—Yo creo que está confirmado —contesta mientras le enseña algo en su celular.
—Mira, un usuario de twitter subió esta foto hace algunos minutos y la cantidad de gente que le ha dado Retweet es increíble, parece que las últimas noches ha estado durmiendo en su apartamento.
—¿Ella no es la chica que será su coestrella en la serie Zombieworld?
—Sí, llevan conociéndose desde su lanzamiento por lo que he investigado —añade mientras le enseña algo más en su teléfono—. Corre el rumor de que ya había evidencia antes pero que Golden había desembolsado mucho dinero para evitar que las fotos se filtraran, pero ahora la que subió este usuario se hizo tan masiva que ¡Boom! El internet ha explotado.
—Bueno, eso diría porque le ganó a Victor en la audición.
—Ya supéralo Ana, Ivan es superior en todo sentido.
—Es demasiada coincidencia que duerma en el apartamento de su co estrella ya confirmada, y que hoy hayan anunciado que ganó el papel —dice ella con un deje de molestia—. No sé, pero para mí que le hizo algún favorcito —tras decir esto coloca los dedos en forma de uve en la boca y hace un gesto obsceno.
—Por dios, eres una enferma.
—Solo digo los hechos —añade con desinterés—. Espera, ahora que recuerdo, ¿él no estaba con...?, ¿Cómo se llamaba esa chica, la loca de su club de fans?
—Sky Walker —contesta la muchacha mientras se apoya en el aparador—. Yo pensé lo mismo, pero no se ha vuelto a mencionar nada de ella desde el meet and greet que hubo hace varios meses, me metí incluso a espiar su twitter pero solo repostea cosas de Ivan, no hay indicios de que tengan o hayan tenido una relación. Además... no quiero sonar cruel, porque soy mujer y odiaría que me pasara, pero Camille Reinolds es muchísimo más guapa, no hay punto de comparación, lo normal sería que hayan comenzado a salir juntos.
Comencé a retroceder y terminé golpeando el estante, una de las tostadoras cayó hacia atrás y las muchachas me observaron. Estaba pálida, sentía que mi cuerpo temblaba, las chicas se acercaron al verme tan descompuesta y Eliot no tardó en aparecer junto a mí.
—Zoey ¿estás bien? —pregunta.
—Llévame a casa, por favor —contesto con la respiración agitada.
Dejamos las compras del supermercado sin pagarlas, Eliot tomó un taxi afuera de este y llegamos a casa en menos de unos minutos, prácticamente me estaba cargando en cuanto entramos por la puerta, Eliot llamó a mis padres pero ninguno estaba en ese momento.
La sensación asfixiante en la garganta no me dejaba ni hablar, Eliot terminó cargándome y me llevó a la ducha del primer piso, se metió conmigo dentro y abrió el agua fría pero nada parecía mejorar.
Las palabras de aquellas mujeres resonaban en mi cabeza sin descanso, trataba de repetirme una y otra vez que no podía ser verdad. Sabía cómo eran los chismes de la farándula, miles de veces había leído sobre rumores de los artistas que seguía y estos terminaban siendo falsos, pero algo muy dentro de mi me decía que esta vez todo era diferente.
—Zoey, respira, vamos tú puedes, por favor respira, esto pasará, tú puedes —dice él mientras sujeta mi rostro con ambas manos—. Por favor mi vida, tú puedes, esto pasará.
Eliot había comenzado a hablarme de la misma manera en la que lo hacía como cuando éramos niños pero nada funcionaba. Finalmente él terminó besándome, lo hizo una y otra vez, y en cada beso me brindaba una bocanada de aire, solo en ese instante pude respirar un poco mejor, al cabo de unos minutos oyó la puerta y comenzó a llamar a mis padres con desesperación.
Al llegar mi madre corrió hacia el botiquín de emergencia y tomó unas gotas relajantes, le pidió a Eliot que me las diera, Eliot lo hizo, y luego de un tiempo mi cuerpo comenzó a relajarse mientras comenzaba a tener mucho sueño.
Pude sentir como él me subió por las escaleras, mi madre me cambió la ropa, y los tres se quedaron allí hasta que finalmente pude dormir.
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro