T2, Cap 16
¿Venís?
Capítulo 16 - Solo quiero conocerte
Escrito por Mioniii.
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El Juan suspira un momento.
— Nos dijeron que nos dejarían ir con la condición de que algo nos pedirán en un futuro, un favor grande. —
Derrepente el Alfred llega y se sienta al lado mío empujando al Martin sin darse cuenta.
— Boluuudo, ¿Qué te...?
— Chicos, necesito su ayuda. Sobretodo la tuya Manuel. —interrumpe al Martin completamente nervioso.
Me muestra su manga, la cuál contenía sangre. Yo abro mis ojos tragando saliva.
— Vi que a la niña de hace un rato le pasó lo mismo pero a mi me pasó en el baño, ¿Tienes idea de qué es esto, Manuel? —pregunta asustado.
— Eh... ¿Por qué me preguntai' a mí weón? —el Martin me interrumpe.
— Manuel, esto es mucha coincidencia, el Alfred sabe que vos sabés algo de esa enfermedad que están haciendo esos tipos y no puede ser que dos personas que ni siquiera se conocen estén haciendo lo mismo. ¿Esto tiene que ver con esa enfermedad?
Suspiro estresado.
— Si...
— ¿Por qué no me dijiste?
— Porque... Quería pensar que no era así y me dijeron que debería afectar en 2 semanas. —respondo desesperado.
— ¿Qué hago? —pregunta el Alfred super asustado.
— Primero cálmate, estar nervioso no te va a hacer nada mejor... Segundo, si quieres toser corre a un lugar dónde nadie te escuche... —el Martin me interrumpe.
— ¿No será mejor contarles, Manu? Para que le ayuden... —lo ignoro y pregunto al Alfred.
— Alfred, ¿Cómo te gustaría morir? Junto a gente "agradable" o junto a científicos metiéndote agujas o preguntándote cosas.
Se queda completamente callado.
— Me imagino tu respuesta.
Miro mi comida y digo.
— Ya no tengo más hambre, me voy a clases.
Me levanto y me dirijo hacia la parte donde se dejan las bandejas, para luego irme a mi cuarto.
***
Una vez dentro siento mi teléfono sonar otra vez.
Desconocido- Tranquilo, solo quiero conocerte:).
Manuel- Déjame tranquilo wn.
Desconocido- Vamos Manuel, ábreme la ventana, estoy acá afuera.
Me quedo paralizado al ver las palabras escritas en mi teléfono. Miro inmediatamente a la ventana y me acerco.
<Okay, Manuel, abre la cortina, apuesto que ni si quiera está. >
Abro la cortina y ahí está, el tipo casi idéntico a mí, me quedo completamente paralizado. Me hace un gesto de que vea mi teléfono y lo miro.
Desconocido- Abree.
Abro la ventana y le pregunto...
— ¿Qué haces aquí? ¿Quién eri'? ¿Qué eri'?
— Vengo a resolver todas tus dudas y a preguntarte cosas también. —dice y entra a la pieza, seguido de eso se sienta en mi cama.
— No tenemos mucho tiempo hasta que sepan que estoy aquí. A ver... —aclara su voz. — ¿Qué hago aquí? Ya te dije. ¿Quién soy? Me llamo Gabriel y ¿Qué soy? Un humano como tú pero con habilidades... —lo interrumpo.
— Especiales... O sea... ¿Hay más como yo?
— Como nosotros... Y si. cientos más, repartidos por todo el mundo. Algunos más jóvenes, otros más viejos y otros con tu misma edad. Pero bueno, ¿Qué haces aquí? ¿Por qué no has escapado? —pregunta confundido.
— Porque ya lo intenté y... Mi papá me traicionó. Aparte porque tenemos que hacer lo que digan si no al Martin no le entregarán la cura a la enfermedad y morirá.
— ¿El Martin? —pregunta confundido.
— Ah, es mi amigo que vive acá también.
— ¿Tú amigo? ¿No están saliendo? —eleva una ceja.
— Noo... Weón, ¿Cómo se te ocurre? —respondo con cierto leve tono rojizo en las mejillas.
— Hasta donde yo sé son la única habitación con las camas juntas... ¿No te has fijado?
Me pongo a pensar en como era la pieza del Juan y la Catalina, seguida de la del Alfred.
— ¿Debe ser porque somos hombres nos asignaron esta pieza? Nunca lo había pensando. De todos modos —cambio el tema. — Llegué acá por mi papá, mi... Papá me mencionó esta academia y ahora sé porqué.
— Bueno, de todos modos tu "Amigo" no puede morir. Ya he conocido a otro exactamente como él en Reino Unido, es exactamente como nosotros.
— ¿Qué? —pregunto impactado sin saber que decir.
Suena una alarma en su bolsillo.
— Se acabó el tiempo, debo irme... —dice y se dirije a salir por la ventana — Ah, antes de nada, gracias por dejarme entrar y... Créeme que he estado el suficiente tiempo aquí para saber que son la única habitación con las camas soldadas y no era así el año pasado. —comenta y sale por la ventana sin yo poder decir nada.
Repentinamente siento la puerta ser abierta, me escondo rápidamente pensando que sería los tipos buscando a Gabriel, miro por los agujeros del armario y es el Martin con el jefe de habitaciones.
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