Narra Camila:

Observaba la pantalla de mi celular mientras escuchaba algunas de las propuestas de Alejandro. Esperaba poder tener algún mensaje de Lauren, pero aún no había recibido nada, ella había estado trabajando mucho los 2 últimos días y realmente extrañaba noticias de ella.

- Eso sería estupendo – dije bloqueando la pantalla de mi teléfono y colocándolo sobre la superficie de madera de mi escritorio – de hecho ese había sido el plan desde el principio, que tu tomaras parte con nosotras – le comenté ante su sugerencia de invertir en mi empresa. Desde el día que llegó a San Luis P. comenzó a proponerme algunas negociaciones, y desde hace unas horas estábamos acordando las cifras necesarias para sacar a flote nuestro negocio.

Su idea de invertir me beneficiaba desde distintos puntos de vista, comenzando porque él era una excelente empresario, muy dedicado y comprometido, podría ayudar a sacar a flote la tambaleante economía de J&C, claro que yo contaba con otras opciones además de él, pero no eran tan convenientes, entre ellas estaba Taylor, pero eso me supondría problemas con Lauren y es lo último que quiero, hace unos meses estaba a punto de aceptar la proposición de mi ex novia por lo desesperada que estaba acerca de la situación de mi empresa, pero hoy había algo más importante, estaba el amor de mi vida por medio y también el que desde hace mucho tiempo consideraba mi hijo.

- Quiero el 30% de las acciones – comenzó a negociar.

- Lamento decirte que eso no será posible, si, es una gran suma de dinero la que invertirás, pero el valor de J&C es mucho mayor, simplemente al activo fijo supera cinco veces lo que vas invertir. Te ofrezco el 12% - contrapuse a su propuesta, no debía olvidarme que esto eran negocios, no importa si era mi hermano, yo debía pensar con la cabeza fría.

- Voy a abandonar la empresa de mis Padres ... De nuestros Padres – puntualizó con tono serio – si quieres que apoye tu empresa y me dedique al 100% en ella necesito tener un porcentaje que me respalde para el futuro – dijo mirándome a los ojos directamente, sus cejas formaban una línea recta, su rostro era casi indescifrable. Era un gran negociante.

- Se te olvida que éstos son negocios hermano, y no me volví la empresaria que soy hoy en día por dejarme llevar por sentimentalismos – dije con una sonrisa triunfante, yo tenía la razón por completo – te ofrezco el 14% por consideración, no te daré ni un poco más, además recuerda que Dinah tiene el 30%... – comenté tajante – pero siempre contarás con mi apoyo como Hermana, ese nunca lo perderás y no importa la situación que pases, ni siquiera sí es un asunto de muerte... Sabes perfectamente que soy capaz de recibir una bala por ti, no tienes por qué preocuparte de tu futuro, mientras yo pueda ayudarte lo hare... - dije sinceramente, pues aunque los negocios no se mezclaban con los sentimientos jamás iba abandonar a mi Hermano, lo consideraba prácticamente mi única familia.

- Veo que sigues implacable – dijo mostrando una sonrisa – Será un placer hacer negocios contigo – estiró su mano por encima del escritorio para cerrar el trato – ¡ah! Y yo también recibiría una bala por ti Camila... - utilizó ese tono dulce que tanto me gustaba.

- Lo se... - acepte estrechando su mano con fuerza, es realmente extraño poder describir la relación y el lazo que nos une. Se supone que cuando mi madre se embarazó él y yo éramos uno solo, mi corazón era su corazón, mi cerebro era el suyo, toda yo... era el... Después por algunos procesos que sinceramente no entiendo, de uno sólo se crearon dos personas, pero al parecer la unión que un día tuvimos sigue ahí, no importa que tan lejos estemos, no importa los problemas que travesemos, siempre seremos uno solo – si quieres puedes dar una vuelta y comenzar a conocer a los empleados... sé que tardaras un mes o dos en arreglar los asuntos de la empresa de papá y en comenzar aquí, pero realmente creo que es necesario tener un buen ambiente laboral y si vas a ser el nuevo jefe quiero que ellos vayan identificando te dé una vez – le sugerí respecto a los trabajadores del almacén, nunca había compartido las ideas tan estrictas que manejaba la empresa de mi Padre, esas reglas habían logrado que nos distanciáramos al sumirlo en el terreno laboral hasta el punto de hacer que olvidara prácticamente a sus hijos.

- Me parece bien y aprovecho para pasar un tiempo con Dinah – comentó y aunque trataba de no meterme entre ellos dos la duda me estaba matando.

- Oye Alejandro ¿todo está bien con ella? – pregunté tratando de no sonar muy entrometida.

- Si... - está mintiendo – la distancia a causado algunos problemas, pero trato de solucionarlo, y en unos meses estaré aquí... es donde debo estar, con mi esposa y con mi hijo – parecía más sincero.

- Y conmigo... - añadí.

- Y contigo... - aceptó – bien Mila, te veo luego – respondí solo con un gesto de mano tomando mi celular y esperando tener noticias de la ojiverde.

Quería verla, las cosas habían estado muy bien entre las dos, casi todos los días me quedaba a dormir en su casa y no se sentía extraño, al menos de mi parte, pues me encantaba poder estar con ella y con mi pequeño el mayor tiempo posible. No me gustaba pensar que ella podría sentirse invadida por mí, después de todo el comenzar a vivir con Lisandro era una gran responsabilidad en su vida y añadir mi constante presencia no debía ser fácil para ella. Al menos sus nulas llamadas los últimos días me indicaban eso...

Con algo de indecisión decidí llamarle, si la montaña no viene a Mahoma hay que ir a la montaña. Marqué su número y nada, no contestó, era probable que no escuchara su teléfono, decidí hacerlo de nuevo.

- Hola Camz... - me contestó después de 5 tonos justo cuando estaba por colgar - ¿Cómo estás? – se escuchaban personas a su alrededor, probablemente de su trabajo.

- Bien ¿estas ocupada? – pregunté con una ligera incomodidad, sentía que la estaba interrumpiendo.

- Un poco, pero no para ti mi amor – no pude evitar sonreír como adolecente enamorada.

- Bueno, es que no me has llamado y comenzaba a preocuparme – le comenté tratando de disimular la emoción ante el par de palabras que me había dicho.

- He tenido mucho trabajo, justo ahora tengo que ir por Lisandro a la escuela y no sé de dónde sacar tiempo para todo – dijo y realmente se escuchaba preocupada.

- Yo puedo ir por el – le propusé, tenía muchas ganas de verlo y así tenía una excusa para poder verla a ella aunque sea un momento – tengo tiempo libre...

- No lo sé Camz... se supone que tengo que poder hacerme responsable y hacer todas esas cosas yo misma – expresó y sentí su tono de tristeza.

- Hey... que yo vaya por el hoy no te desacredita, Lauren... yo te he dicho que quiero ser parte de tu vida y la de él, en serio quiero ayudarte hoy mañana y hasta que él llegue a la universidad – le dije en tono tierno, tratando de mejorar su ánimo y recalcando las intenciones que dentro de mi había.

- Te amo... - susurró y podría jurar tenía una sonrisa en el rostro – ¿podrías traerlo al estudio?

- Yo también te amo y si, lo recojo y lo llevó contigo – acepté.

- Umhh está bien, aquí te espero – su tono tenía dudas, no quería alarmarme de más, pero algo estaba pasando, la conocía muy bien – tengo que colgar... te veo más tarde – dijo a modo de despedida.

- Esta bien... suerte en tu trabajo – finalice antes de colgar.

Miré mi reloj y casi era la hora de que Lisandro saliera de clases, rápidamente busque mis cosas y salí de J&C en busca de mi camioneta para ir en busca de mi pequeño. El tráfico como siempre era un poco más cargado a estas horas, solía invadirme algo de furia cuando iba al volante, la paciencia era algo lo que aún me faltaba trabajar mucho, y ese pequeño presentimiento en mi pecho de que algo estaba pasando respecto a Lauren tampoco me dejaban en paz. Luego de unos 20 o 30 minutos de camino finalmente llegue al colegio donde me pidieron algunas identificaciones para poder llevarme a Lisandro.

- ¡Camila! – gritó el pequeño cuando me vio e inmediatamente corrió mis brazos, obviamente lo recibí encantada.

- ¡Hola mi amor! – lo saluda dejando algunos besitos en sus mejillas - ¿cómo estás? ¿Listo para irnos? Voy a llevarte con Lauren, ella está algo ocupada – le expliqué a tomando su mano y dirigiéndose a mi camioneta.

- Si, lo sé, ayer se quedó despierta hasta muy tarde en su computadora editando fotos – me comentó y sentí un poco de pena por la ojiverde, debe estar cansada.

Durante el camino al estudio de Lauren seguimos hablando, pero esta vez sobre su escuela, qué tal la había pasado, si tenía tarea y sobre sus nuevos amigos. Volvió a hablarme de Ángela, su amiga del orfanato, él estaba muy preocupado y constantemente me pedía ayuda para encontrar una familia para la pequeña, poco podía hacer yo pues desde que lo intenté adoptar había perdido el derecho de participar cualquier otra adopción.

- Voy a hablar con algunas personas ¿ok? – en mi mente había contemplado a Dinah, pero dado los problemas que estaba pasando con mi hermano no me parecía la mejor opción.

- Esta bien – aceptó tranquilamente mientras desabrochaba su cinturón de seguridad para entrar juntos al estudio de Lauren.

Carolina me recibió con cara poco amigable, pero parecía entusiasta por hacerme llegar hasta donde estaba la ojiverde, ni siquiera le avisó que nosotros habíamos llegado, simplemente nos condujo hasta uno de los cuartos donde Lauren fotografiaba.

- Gracias – dije una vez que la secretaria se fue y pude notar como Lisandro tenia los brazos cruzados sobre el pecho y sus cejas formaban una línea recta. Parecía enojado, me pareció gracioso, me recordaba a mí misma cuando estaba celosa, dirigí mi vista hasta donde el observaba y una sorpresa desagradable me esperaba.... Lauren estaba con Lucy...

Ahora comprendía a Lisandro, yo también comenzaba a sentir como el enojo y los celos se apoderaban de mi cuerpo.

- ¡Lauren! – la llamé fuerte para que pudiera escucharme, ella de inmediato hizo contacto visual conmigo y Lisandro por unos segundos para después cerrar fuertemente los ojos, sabía que estaba en problemas...

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¡Hola chicos! ¿Cómo están?

Estoy aquí para hablarles de un nuevo proyecto que tengo junto con una amiga, ella se llama Yaireth y probablemente algunos la conocerán ya que ella es la autora del fic "After Falling", pueden encontrarla con su usuario LaurenzoTopsForevah, y lo que estamos planeando es hacer una colaboración que se publicará en mi perfil (porque la historia es mía), serán actualizaciones rápidas y la temática es un poco fuerte.

Solo un capitulo por hoy...

Besitos!

En la qk