Capítulo 39
Narra Lauren:
- No te preocupes Dinah, si algo me ha servido todo esto es en dejar los errores atrás, yo no soy la misma que era y sé que Camila tampoco lo es... eso quedó en el pasado – dije sin saber que me tragaría mis palabras ese mismo día...
- Eso espero Lauren – dijo con algo de resignación.
Toda la actitud de la rubia me parecía extraña. Pero lo relacionaba con la presencia de Normani. Realmente parecía que algo estaba ocurriendo entre ellas dos, demasiadas miradas, demasiadas sonrisas y esas palabras que me dijo parecían ser no solamente destinadas a mí, sino a alguien más.
No quería preocuparme por eso, estaba feliz por mi amiga. Pero algo me decía que algo no iba bien.
- Y bueno... ¿Crees que regrese? Me gustaría hablar sobre Lisandro con ella – pregunté refiriéndome a Camila.
- Tal vez su reunión se extendió. Salió temprano, probablemente debieron haber terminado ya de comer. Así pasa veces, hay que seguir las negociaciones por un largo rato – contestó la rubia.
- O sea que se fue a algún bar con el tipo inversor a "cerrar el trato" – dijo Normani con tono sarcástico, ganándose una mirada asesina tanto de de mi parte, como de Dinah – no me digas que no lo pensaste – se dirigió a mí y probablemente sí lo había hecho, pero que lo pensara no significaba que pudiera creer que realmente podía ocurrir.
- No digas eso Mani – se quejó la rubia con tono molesto, haciendo un gesto desagradable y apretando con sus dedos al puente de su nariz. Parecía haberle molestado mucho la broma de la de piel oscura.
- ¡Que humor! – bromeó mi amiga tratando de aligerar el ambiente tenso que se había creado.
- Estoy bajo mucho estrés ¡y no he tenido sexo en muuuucho tiempo! – comentó tapando los oídos de Alejandrito.
- Eso es verdad ¿Dónde está Alejandro? ¿Por qué no cumple con su papel? – pregunté.
- Él está en la capital, haciéndose cargo de la empresa de sus padres... Desde lo de Sinu se han alejado del negocio – dijo refiriéndose al intento de suicidio de la madre de Camila – Mila dejó bien claro que no quería tener nada que ver, él está tratando de aprender para en el futuro poder manejarla...
- ¿Por qué no quiere involucrarse? – pregunté curiosa.
Todo el tiempo que estuve con Camila había tenido una relación "buena" con sus Padres. Al principio rechazaron nuestro amor, y la trataron muy mal, pero después parecían haberse esforzado por entender a la morena. El intento de suicidio de Sinú había sido tiempo después de que nosotras terminamos. Por supuesto que me enteré, pero en ese entonces yo no tenía ningún tipo de trato ni comunicación con Camila.
- Han tenido muchos problemas desde lo de Sinu. Incluso ella y Alejandro se han alejado mucho. Antes no podían estar separados ni un día y ahora llevan meses sin verse... - explicó.
- ¿Y tampoco lo ves? – insistí con las preguntas. Pues si estaba pasando algo entre ella y Normani quería asegurarme de que nadie saliera perjudicado.
- Yo quería formar mi propia empresa como Camila, por eso decidimos arrancar con esto juntas y eso ha hecho que no nos podamos ver mucho, pero luchamos para mantener la llama encendida... el tiempo de espera solo hace que la emoción se acumule ¿entiendes? – claro que entendía, más de un año tuve una relación a distancia con la morena, donde los kilómetros que nos separaban, lejos de apagar la pasión, la encendía mas... al menos antes de que todo se fuera a la basura.
- ¿Qué opinan si vamos a comer y seguimos hablando? Creo que esto está bastante entretenido – propuso Normani y estuve de acuerdo, la única que parecía tener inconveniente era Dinah.
- Vamos a un lugar para niños – dije al ver la cara que había puesto la rubia.
- Quiero beber alcohol, no ir a un lugar de juegos. Necesito un poco de tiempo para mí – dijo de manera fastidiada – pronto sabrás lo que se siente tener un hijo – me dijo con tono amenazante y trague saliva. No me gustaba pensar en lo que iba a perder al estar con Lisandro, me gustaba pensar en las cosas buenas que iba a obtener a su lado – voy a llamar a la nana que venga por él.
- ¡Bien! Tendremos una tarde de chicas – sonrió Normani mirando coquetamente a Dinah.
Pensé entonces que lo correcto era solo pasar un pequeño rato con ellas y después excusarme con una mentira para dejarlas solas y que hicieran lo que tuvieran que hacer. Eso hace una buena amiga.
- Sí, quiero emborracharme y quien sabe comer un poco de chocolate... - contestó la rubia de la misma manera. Y hasta yo, que no suelo ser buena entendiendo las indirectas sabía lo que eso significaba.
Un rato después la nana de Alejandrito llegó y el pequeño se fue con ella. Nosotras salimos de J&C con una gran sonrisa y nos montamos a mi challenger. Parecía que la íbamos a pasar muy bien, me recordaba mucho al instituto y nuestras antiguas salidas donde todo siempre terminaba con muchos enredos y problemas.
Llegamos a un bar-restaurant cercano a la zona. Parecía bastante decente, no extremadamente elegante, de hecho bastante casual y agradable. Dinah comentó que era uno de sus lugares favoritos y que no siempre iba ahí.
Al entrar de inmediato nos ofrecieron uno de las mejores mesas, pero preferimos estar en la barra cerca del karaoke, quien sabe, tal vez podríamos cantar algo juntas. Las tres lo hacíamos muy bien.
Apenas pedí mi primera cerveza junto a algo de botana y pude ver como Dinah miraba hacia un rincón del lugar tomando de inmediato su celular y marcando a alguien. Dirigí mi mirada hacia donde mismo. No parecía haber nada especial especial, ese sector está un poco más oscuro que el resto del bar. Entonces la vi...
Una hermosa rubia de cabello hasta los hombros, bastante alta. Me parecía muy familiar por lo que la observe más tiempo tratando de reconocerla... Sentí un gran golpe en el estómago cuando finalmente me di cuenta de quién se trataba, por un momento me quedé sin respiración y justo entonces ella conectó su mirada con la mía. También me reconoció... Nos miramos unos minutos que parecieron eternos.
Era Taylor... La chica con la que Camila me había sido infiel.
Dinah seguía tratando de comunicarse con alguien, y aunque mi mente ya había sacado todas las conclusiones, esperaba estar totalmente equivocada.
- ¿Ella es...? – me preguntó de pronto Normani. Parecía haberse dado cuenta la situación, pues la rubia no había sido nada discreta al tratar de ocultar su nerviosismo.
- Si – contesté tajante.
Estaba rogando internamente que no se apareciera Camila en la escena. Las coincidencias existen y tal vez Taylor está aquí por casualidad y no porque Camila trabaja cerca.
Mis ruegos no fueron escuchados... La morena iba saliendo del baño, tenía una copa en la mano. Estaba bebiendo. Se dirigió hasta la delgada rubia sin darse cuenta que nosotras estábamos ahí.
Un nudo en mi garganta se estaba formando. El pasado se estaba repitiendo, yo desesperada por Camila y ella buscando consuelo en otros brazos, en los mismos brazos por los cuales me había traicionado.
La morena se sentó a su lado y la chica pasó un brazo por su cintura acercándola a ella. Camila no se resistió en ningún momento, incluso parecía disfrutar de la cercanía. Y ahí estaba mi corazón rompiéndose nuevamente a causa de la única chica que he amado.
- Me voy... - avisé sabiendo que no tenía por qué decir mucho más. Había visto suficiente.
Antes de llegar a la puerta me quede unos segundos de pie mirando a Camila y como si hubiese sentido que la observaba, de pronto sus ojos se conectaron con los míos.
Ella bajo la mirada...
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3/3
Me encanta el drama.
Besos.....
en la qk
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