Girl Next Door —Copperpot

Alicia

-Tengo frío, ¿Podrías apagar el aire? -me removi entre sus brazos para alcanzar el control del aire pero él me lo impidió- hey, ¿A dónde vas? No me dejes solito.

-Me dijiste que te apagara el aire porque tenías frío.

-Pero no quiero que te alejes de mi -me apretó contra su pecho- además, ya tengo calor.

-Está bien.

10 minutos después.

-Está haciendo frío, ¿Podrías apagar el aire?

Me incorporé ésta vez y fui a tomar el control del aire.

Lo apagué.

-Pensándolo mejor, prendelo. Si está apagado me dará calor.

Lo prendi.

-¿Ya está?

-No, subele la temperatura, esta haciendo frío -le subí cuatro grados- le subiste demasiado, ahora tengo calor. Bajale -le bajé dos grados- no, asi no me gusta, si la habitación está fresca de igual manera sudare, subele. -le subí dos grados- no, mejor bajale, ya me decidí -gruñi para mis adentros y le bajé dos grados- perfecto, gracias, Bonita.

Quedó en la misma temperatura en la que había estado cuando me paré.

Volví nuevamente a la cama y me acurruque con él mientras veíamos la última película de Star Wars, a la cual, no le paré bolas.

De hecho, no le paré a ninguna, no entendí un coño y perdí medio dia de mi vida en esa vaina.

-¿Soy yo, o está haciendo calor aquí?

Entorne la mirada. Tomé mi propia almohada y la puse sobre mi cara para ahogar un grito.

(...)

-¿A dónde vamos? -preguntó Dylan por décima vez mientras yo me encargaba de acomodarle sobre la cabeza un gorro negro de lana y sus Raybans.

-Vamos a salir.

Él hizo una mueca de fastidio.

-Pero cariiiiiño -se quejó- me siento pésimo para manejar y tu no tienes 25 años para usar ni el Jeep ni el Porshe y mucho menos el Audi

-Tu tampoco y aún así lo haces.

-Es porque requiero de una, y porque tengo contactos.

Rodé los ojos y me puse las converses luego de pasarle su buzo de los Mets ya lista para irnos.

-Bien, entonces iremos en taxi.

Y antes de que replicara, lo jale del brazo.

Luego de tomar un taxi, le pedí al señor que nos llevara a la clínica. Dylan no había parado de ladillar con que no quería ir, que se rehusaba, que pediría el divorcio antes de habernos casado por obligarlo a venir, ay nojoda.

Era una vaina tan arrecha que no había terminado de cerrar bien la puerta del taxi cuando el muy viejo verde picó caucho contra el asfalto y ni nos cobró.

Miré a Dylan

-Tu eres más fuerte que el odio, nawebona.

Dylan sonrió sarcásticamente.

Entrelace nuestras manos y juntos entramos al edificio. Admito que teniendo a Dylan aquí y a la gente correr de aquí a allá por algún paciente me hizo recordar a Teen Wolf.

Melissa, llegate.

-Buenas noches -le sonreí a la menor del mostrador- por favor, para una consulta.

La pana imitó mi sonrisa.

-Desde luego. ¿Nombre completo del paciente?

-Dylan Nicholas O'Brien Rhodes.

-¿Edad y dirección?

-18 años pero cuando le pega la mariquera, tiene la edad de un espermatozoide -rodé los ojos. Dylan me dio un leve empujón- ah, y en Beverly Hills.

La señora rió por lo bajo y siguió anotando en una plantilla.

-Bien, sientense por allá que en lo que la señora que está con el doctor Wendell salga, les haré una señal para que entren.

-Okay, gracias.

Arrastre a Dylan hacia las sillas de la sala de espera. Nawebona, yo no sabía que se portaba como un carajito cuando estaba enfermo. Ya entendía porqué los mmaguevos esos me colgaron

Ingratos.

-Me está empezando a dar hambre

-Iremos a cualquier lugar luego de aquí, lo prometo.

-Pero yo tengo hambre ahora

-Primero vamos a que te revisen, después iremos si tu quieres a Beacon Hills pero primero esto.

Escuché un fuerte suspiro de su parte.

Se quedó quietecito un buen rato mientras jugaba Mario Kart en su iPhone. Esa vaina bendita sea marica porque no lo escuché como por media hora.

Hasta que....

-Maldición, se me ha decargado el teléfono y dejé el cargador en casa.

Señor, LLÉVAME CONTIGO PO FAVOOOO

(...)

-Adelante chicos, tomen asiento por favor.

Pasamos al consultorio, Dylan se aferró fuertemente a mi mano y aminoró su paso hasta tal punto que tuve que empujarlo para que se sentara sobre la camilla

-¿Tu eres Dylan? -el marico asintió- me gustan tus películas, sobretodo la nueva del laberinto, buen trabajo.

-Gracias.

-Así que cuénteme -acercó un banquito hasta la camilla y agarró una libreta pequeña para tomar apuntes- ¿Porqué estás aquí?

-Porque me obligaron, ya dije que estoy bi... Ah... ah ... ¡Alicia!

Dejé de pellizcarlo

-Esta mañana despertó con fiebre, sudando y ni siquiera voy a preguntarle pero algo me dice que también le duele la garganta.

-Humm... -anotó- ¿Pasó algo anteriormente que crean que pudo haber afectado en su salud?

-Bueno, ayer Dylan y yo asistimos a una barbacoa realizada por nuestro jefe y como a eso de la madrugada a los chicos le resultó gracioso lanzarme de cabeza a la piscina pero como yo no sé nadar, seguramente lanzaron a Dylan para que me sacara de la profundidad.

El pana asintió y siguió anotando.

-Seguramente debe ser un resfriado -el doctor me miró- ¿Está estornudando cada tanto?

-No lo ha hecho, sólo la fiebre y el sudor en exceso.

-¿Eres alérgico a algo?

-Es muy sensible al algodón, a la pimienta, los olores fuertes y el polvo.

Dylan me miró.

¿Qué? Cuando alguien acosa a su crush, debe hacerlo bien papa.

Es más, a mi deberían nombrarme es jefa del CICPC y del FBI.

-¿Ha tomado algo antes de venir?

-Le di una pastilla para el dolor de cabeza pero estoy empezando a dudar si esa vaina le quitó el dolor de cabeza o lo está ayudando a provocarme dolor de cabeza a mi.

Dylan rió sarcásticamente.

-Tiene cáncer -al escuchar esa vaina, a Dylan se le fueron los colores- o al menos eso es lo que dice Google.

Entorne la mirada

-¿Qué cáncer va a tener piazo e loco? A ver -le quité la libreta- no escribiste un cebo.

-Me quedé sin tinta.

-Vámonos negro, tu lo que tienes es amigdalitis, ya lo dije, Alicia pal premio Nobel en medicina.

Tomé de la mano a Dylan para sacarlo del consultorio ese. Hice más yo que el doctor, nawebona.

Un momento, parate ahí

Me devolví y asomé la cara por la puerta para preguntarle algo al estafador ese.

-Mi pana ¿Tu eres venezolano, verdad?

-Si, ¿Cómo lo supiste?

NAWEBONA JAJAJAJA CON RAZÓN.

-Intuición, marico. Ahí los vidrios.

(...)

Habíamos tomado otro taxi a la farmacia debido a que habíamos llamado a John y a James para que nos hicieran la vuelta, había omitido la parte que decía que su jefe querido estaba enfermo para que no se negaran a buscarnos.

¿Qué pasó?

Los muy rolitroncro e mmaguevos en lo que me vieron salir de la clínica con el carajito, aceleraron, dieron una vuelta en U tan arrecha que dejaron los cauchos marcados en el pavimento y le metieron chola a fondo hasta desaparecer del estacionamiento.

Moral estaba de que me les pegaba atrás para que me llevaran con ellos y no seguir calandome más a Dylan

Autzilio

-¿Qué es eso?

-Esto es Tantum, es para quitarte el dolor de garganta y las pastillas son para bajarte la fiebre.

-Pero yo no me quiero tomar eso.

Giré mi cabeza con la arrechera corriendome por el ADN

Dylan sonrió nerviosamente.

Lo jale de una de las patillas pa que le doliera.

-Mira coñoetumadre, ya me has hecho arrechar hoy más que todo el mes que llevo conociéndote, no te mato por el simple hecho de que estoy enamorada de ti así que usted se toma ésta mierda porque o sino te voy a hacer ver el diablo en pantaletas.

Dylan me miró sorprendido. Miedo no me tenía, porque de ser así no me hubiera visto como lo estaba haciendo justo ahora.

-¿Porqué me estás mirando así?

Él no respondió. No entendía el porqué su silencio tan de repente hasta que descubrí que no me miraba a mí. Estaba mirando por sobre mi hombro izquierdo.

Giré en busca de aquello que lo había hecho callar tan de repente.

Allá, sentada en la mesa junto al ventanal de aquel McDonald's había una caraja catirisima, sus hoyuelos eran muy notorios, incluso hasta más que los míos y tenía una sonrisa espectacular.

Estaba hablando con un chamo ahí y él se veía muy felíz.

¿Esa no era la protagonista de Tomorrowland? Más bien, ¿No era la que hizo The First Time con mi chamito?

-¿Esa no es...? -empecé a preguntar pero al girarme vi que Dylan había empezado a caminar hacia la esquina, dirección contraria a donde estábamos- ¡Dy! ¿Adónde vas?

Ni siquiera volteó a mirarme y siguió caminando. Se había subido la capucha del buzo y sus manos las había metido en su bolsillo. Parecía un malandro con mucho estilo.

Metí rápidamente los medicamentos a mi bolso y luego traté de llevar el mismo paso que él.

-Hey... ¿Qué pasó? -pregunté, no obtuve respuesta- Dy... -nada- Dylan. ¿No era ella la de...?

-Si, lo es, ahora por favor, ¿Podríamos regresar de una maldita vez a la casa? Estoy cansado, tengo hambre y siento que me ha subido la fiebre.

Frunci el ceño.

A verga.

-Escuchame bien, tu conmigo no vas a venir a pasar tus arrecheras nojoda, yo sólo te hice una maldita pregunta.

-Alicia, no empieces, no quiero soportarte ahora.

Khe

Detuve mi paso.

Se va a joder.

-¿Soportarme? -repetí con una sonrisa cínica- ¿Acaso me estás llamando, Tu, ladilla, a mi? Chévere.

Me acomode el morral para empezar a sacar la bolsa de sus medicamentos, se la puse en sus manos.

Después saqué la llave del apartamento de mi bolsillo y también se la puse en sus manos.

-Espera... ¿Qué haces?

-Me regreso a casa de mi tío a esperar a mi familia. No pienso calarme más éste webo pelao.

Di medía vuelta y empecé a agarrar camino hacia la parada de la farmacia a agarrar un taxi para casa del Jorjius.

-¡Bien! Vete y molestate, es lo mejor que sabes hacer

-Ya te veré yo jalandome bola cuando éste pequeño berrinche se te pase, gafo, y ¿Sabes quién te va a perdonar? La mamá e Tarzán.

-Alicia -gruñó- mejor... olvida lo que dije y regresa. No quiero dejarte sola allá.

-Nací sola, llegué a Los Ángeles sola y me voy a morir sola, es el ciclo de la vida.

-No seas infantil, maldita sea, regresa aquí.

-Mamate un webo, pajuo.

-¡Alicia Michelle!

Le metí la mano a un taxi que iba pasando, por suerte estaba vacío.

-Te estoy mandando algo, maldita sea, ¡Regresa aquí!

Arrugue la cara al escuchar esa vaina y le dije al menor del taxi que se esperara ahí.

Me giré hacia Dylan.

-¿A ti te pica ése culo? -reí sarcasticamente- tu a mi no me vas a mandar nada nojoda, ni a mami le paro bolas pa venirte a hacer caso a ti, ridículo. Soy tu novia, no tu hija.

-Eres mi novia... y por eso quiero que regreses.

Su voz había bajado ese tonito altanero pero de igual manera no me gustó lo que había hecho, se había pasado horrible marica.

Negué y me metí en el taxi.

-Me llamas cuando se te pase esa arrechera tuya, carajito, porque tu no eres así -negué para mi misma decepcionada- y veremos si me da la gana de contestarte.

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Hello carajitas de mi laif, aka la yocsy les trae su capítulo

Y como bien dice una ahí: a mi me encanta ver el mundo arder >:3

A muchas de ustedes les encantó el Questions And Answers que se realizó con el cast así que he decidido hacer otro. Pónganme las preguntas de una vez aquí, y pregunten bastante nojoda

Ah, pregunta rápida: ¿Cuál es su shipp favorito?

A mí en particular me gusta Dylicia, Jefflan, Jhomas, Dorgius y Jaslicia

Ah, y Froylicia

¿A quién engaño? Shippeo todo lo que respire.

Déjenme en los comentarios cuál es su shipp favorito de ésta vaina :3

Ya saben, compartanme la historia asi como brollean en clases haganme spam, quien lo haga tendrá dedicatoria ;3

Ah, otra cosita.

Necesito que me digan sobre quién quieren el próximo capítulo.

#Thomresa
#Dylicia
#Froylicia
#Finnlicia

La yocsy se despide, ahí los vidrios.