Tas Metio En Peos
Girl Next Door —Copperpot
Alicia
—¡La yocsy regresó señoras y señores! —chilló esta vez Teresa bajandose de las escaleras del avión— y esta vez me quedo para siempre nojoda.
Por vainas como éstas es que mami prefería dejarla encerrada y sacar a pasear a Firulai.
Admito que me cagué de la risa cuando fuimos a buscar las maletas porque el que nos atendió fue el mismo carajo de la otra vez.
—Muchisimas gracias dude, haces un gran trabajo —Teresa y su ya medio decente inglés dejó al carajo con la boca abierta— ou iea, la yocsy ya habla como ustedes los gringos, ¿Cómo te quedó el eye?
Rodé los ojos intentando no reír y le agradecí al pana.
Con Teresa fuimos a la zona de recepción en busca de John y James pero nos llevamos la sorpresa al ver sendo carro pararse al frente.
De éste se bajó un hombre flaco y canoso, rodeó el carro y abrió la puerta del copiloto dejando salir al Jorjius en toda su alta gloria con su mejor traje Armani y sus zapatos Gucci, quitó los lentes de sol que cubrían sus ridículamente bellos ojazos azules y los colgó en el bolsillo interior del saco para luego mirarnos por el rabillo del ojo.
No si, tas TAS
—Gracias Alfred —habló con un acento británico notoriamente fingido— puedes meter las maletas de mis sobrinas atrás.
Teresa y yo nos miramos y luego lo miramos a él, parecía gente.
—En seguida señor Peñalver —el hombre empezó a llevar las maletas de Teresa.
—¿Qué? —preguntó el Jorjius al ver que lo mirábamos tanto— coño e madres ¿Y es que ustedes no piensan saludarme o que lo qué?
Soltamos un suspiro de alivio. Ése era nuestro refinadamente ordinario Jorjius.
—Erga mrc nos habías asustado —Teresa lo fue a abrazar justo después que yo me le tirara encima— ahora pareces gente, ¿Quién te destruyó?
—Sigue que te estás ganando que te deje bota' aquí en LAX mardita.
Teresa rió falsamente mientras recibía un sonoro beso en el cachete de su parte.
—Marica admito que las extrañé burda nawebona, no vuelvan a irse porque me hicieron muchísima falta, estaba solito en la casa —nos apretó contra él— de paso el Brayan al fin se fue pa quel tío árabe ése, claro, como Alicia se había regresado a Venezuela no le quedó de otra que irse aunque yo no lo bote.
—Ajá Jorjius echame un cuento, ¿Quién es él? —señalé al señor que le abrió la puerta.
—Ah, él es Alfred mi nuevo chófer, ¿Verdad que está chévere?
Levanté una ceja.
—¿Alfred? ¿Como el mayordomo de Bruce Wayne?
—Eso no es peo tuyo chica, conformate con saber que no se van a ir a pie al liceo. Alfred las va a llevar en el Jorjius-movil.
Él definitivamente es marico.
El señor regresó por mis maletas pero lo frene antes de que las fuera a meter en el maletero.
—No señor gracias pero yo no iré con ellos.
El Jorjius frunció el ceño.
—¿Y para dónde te vas tu con el permiso de quién, carajita?
—Pa que Dylan esta semana.
El Jojius me miró.
—¿Que...?
Escuché una corneta, los mardetos aquellos habían llegado así que me apresure en hablar.
—Después te cuento el beta completo, err malayo punto es que el buena gente de tu hijo querido le dijo a Kaya, su amiguis que podía quedarse a dormir en el apartamento esta semana mientras su casa era fumigada.
El Jorjius peló los ojos.
—Ya va, ¿Cómo es la vaina? —chilló antes de agarrar mis dos maletas y encaminarse hacia la camioneta de los guardaespaldas— ¡No! Esto es inaceptable, ¡No! Qlq menores, abre esa vaina ahí —John le abrió el maletero y el muy coño e madre zumbó mis maletas a esa vaina sin importarle que se me dañara algo— tu te me vas pa esa mierda y en la casa no te quiero ver Alicia Michelle hasta que esa caraja se haya ido ¿Oyó? Yo tengo que ser el padrino de la boda Dylicia y ni esa mardeta ni nadie va a cagarme mi momento de Brillar.
Y sin dejarme terminar de hablar me tomó en brazos para meterme en el carro. Marica me metí fue sendo coñazo con los asientos por su malaya culpa.
Se asomó por la ventana
—Dios me la bendiga y me la favorezca meja —me lanzó un beso antes de indicarle a James que arrancara, de lejos escuché que gritó— ¡Dile a Dylan que yo también lo amo!
Suspire pesadamente dejándome caer en el asiento nuevamente.
—He vuelto a casa...
(...)
—¿Entonces quedamos para ver el juego siempre? —les pregunté cuando entramos al ascensor subterráneo con mis maletas.
—Desde luego señorita Alicia —habló James con su acento británico de verdad— pero, ¿Está segura que no habrá problemas con el señor O'Brien?
Frunci el ceño.
—No creo que a Dylan le moleste...
—¡No! —se apresuró a contestar James— no es que al señor O'Brien le moleste, es sólo que ver un partido con él es... —se estremeció.
Vacie...
—A lo que James se refiere es que... la última vez que vimos un partido de béisbol con el señor O'Brien pues... —pasó al apartamento cuando abri la puerta y fue directamente hasta el enorme ventanal de pared a pared de la sala— ¿Ves esta mesa ratona? —asenti— bien, porque lo acompañamos a comprarla justo el día siguiente de ver el partido de Red Sox y los Mets, los Mets perdieron y pues... pagó su enojo con la pobre mesa y el ventanal
Khe...
Nawebona se pasó.
Admito que esa vaina me hizo acordar a papi cuando iniciaba la temporada. A ése como que le picaba el culo, recuerdo que en una caravana de los Leones nos sacó a Teresa y a mi de la casa en pijama y en medias nada más por ir con el bochinche con los padrinos mios y cuando los cuando los Magallanes tuvieron la victoria esa única vez papi se fue para el monte con la escopeta arrecho y no regresó sino hasta el día siguiente y con un saco de veinte conejos y diez iguanas.
A papi le hubiera encantado Dylan.
—¿Todo bien, shama? —mrc es que James diciendo Chama con su acentico británico era lo best, voy a adiestrar a Thomas.
Asenti tratando de sacar los pensamientos de papi de mi cabeza. Luego de cuadrar con ellos para ver un día de estos algún juego prometiendo amarrar a Dylan en el mueble, aceptaron y se marcharon. Me pasé la tarde en pijama mirando ShadowHunters mientras me comía todas las naranjas que tenía Dylan en esa nevera, me jarte un kilo más o menos, ése ni cuenta se da, ya van a ver.
Ahora es que me cansé de mandarle mensajes. Intenté no pararle a la vaina porque seguro estaba en Palisades a esta hora así que me fui a hacer la cena, lo esperé para comer y nada mrc, tuve que comerme mi vaina y dejarle la suya en el microondas. Volví al mueble a estudiarme lo que me faltó estudiar en el avión del guión pero la verdad era que me estaba preocupando.
1 de la madrugada y el carajito no llegaba.
Le escribí a las tres comadres pero ninguno me contestó, por los estados de WhatsApp se veía que estaban rumbeando los coño e madres. Llamé a Dylan, nada. Me puse a llamar a las muchachas y nada marica.
Estuve esperándolo en el mueble hasta el punto en que ni cuenta me di cuando me quedé dormida y medio abrí los ojos cuando sentí que me estaba cargando entre sus brazos seguramente para llevarme al cuarto.
—Hmm... Dylan... —murmure medio dormida.
—Shh... aquí estoy, Bienvenida nuevamente a casa princess.
—Hmm... ¿Dónde estabas coño e tu madre?
—El trabajo se alargó y tuve que hacer otras diligencias —escuché que abrió la puerta del cuarto y cinco segundos después sentí el colchón en mi espalda— ahora sólo duerme cariño, mañana debes ir al set.
—Que ladilla... —bostece. Sentí cómo me acomodó y me tapó con las sábanas pero no se acostó conmigo. Me incorporé al ver cómo se levantaba de la cama— ¿Adónde vas?
Sonrió tiernamente.
—Tranquila Bonita, sólo me quitaré todo esto para estar más cómodo —se quitó la básica negra que tenía, erga, se veía burda de papi con ella, el pantalón y sus inseparables y cadarosas Adidas.
Ya cuando estuvo en boxer se metió en la cama conmigo y antes de que se enrollara en las sábanas le di vuelta y le monté la pierna.
—Hmmm... buenas noches.
—Buenas noches Princess...
(...)
—Maldita sea... —Finn aguantó la respiración— Jack, ¿Estoy viendo a quien creo que estoy viendo?
El gemelo miró en su dirección y en seguida aportó su misma expresión de boca abierta.
—Lo es hermanito... —chilló— ¡Es Holland Roden!
¿Adivinen quienes me estuvieron ladillando desde la mañana para traerlos? Verga, estos carajitos eran ladillas oyó, bien bonitos pero ladillas, nawebona dejé a Guiñan en Venezuela y me quedaron aquí dos igualitos a él.
¡AYUDA!
Les cuento chamas, la yocsy cuando se paró a eso de las diez no consiguió a nadie, Dylan como que había salido bien tempranito porque hasta desayuno me había dejado en la barra. Al menos produce. Estuve arreglandome y no sé porqué malayos se me ocurrió avisarle a los gemelos que estaba aquí y decirles que me iba a trabajar porque desde ahí empezaron con su ladilla de venir hasta que a eso de las 3:30pm tuve que pasar a buscarlos a casa de Patrick para traermelos al set porque nawebona de intensidad. Admito que estaba bien bonito el carajito oyó, y según los chismes... para no decir que fue Jack quien me lo dijo, kike tenía un queso con Brenda, ¿Se acuerdan de Brenda? La caraja malasangre que trabajaba con nosotros en el taller de Santa, la que tenía hermanitos cuatrillizos, si, esa misma, admito que quedé loca.
—Produce y ve a presentarnola —me pellizcó el mmaguevo de Jack.
Le metí un coñazo.
—Pellizcas duro coño e tu madre —me sobé el brazo— vamos pues, aprovechando que Jeff no está por aquí y la carajita esta desocupada.
Los gemelos prácticamente me llevaron arrastrada para que Holland marica porque ni caminar dejaban a uno. Ella estaba de lo más lai metida en su IPhone cuando nosotros llegamos.
—Que lo qué mi pelo e zanahoria, ¿Me extrañaste?
Al escuchar mi voz la caraja peló los ojos de verga dejaba caer el iPhone marica, yo la mato. Al buscar mi mirada con la suya su sonrisa se extendió mostrandome todos sus dientes así fancys y arrechos, sentí a los dos maricos que tenía agarrada de las manos, estremecerse.
—¡Lily! —gritó Holland y sin dudarlo vino a abrazarme— estás aquí preciosa, ¿Porqué no habías escrito? Nos tienes olvidados.
—Mardeta Banshee coño e tu madre, me vai a reventar el timpano —porque la mardita gritaba, claro, como ella es la Sayona en Teen Wolf, ya que, Sayona en francés era Banshee jejejejeje Alicia traductor— también te extrañe mrc, ¿Todo fine?
—Excelente, aunque ya hacías falta por aquí —sonrió.
Sentí un codazo en mi costado, Finn mmaguevo.
—Ah, menor ellos son...
—¿Los gemelos Harries? ¡Claro! —Holly les sonrió— ¿Cómo no conocerlos? Amo sus videos.
Marica al escuchar esa vaina Finn tuvo que sujetar firmemente a Jack porque el muy marico de verga no se desmayó con lo que Holly le dijo.
—T-tu... H-Holland Marie Ro-Roden me conoce... morí... —empezó a titubear Jack— Teen Wolf yo ver... es decir... Wolf Teen ver yo... ¡Es decir...! —cubrió sus mejillas rojas de la vergüenza. Alv, ¿Así fui yo con Dylan? Pasando pena— Hola, soy Jack Harries.
Holly le sonrió y le estrechó la mano.
—Holland Roden pero la mayoría me llama Holl, Holly...
—O pelo e' zanahoria pero así sólo le digo yo —agregué.
—Soy Finn, no sabes cuánto adoro el personaje que interpretas... —Jack lo interrumpió mientras le ofrecía una sonrisa coqueta a Holland.
—Pues yo amo a la chica y al personaje —le hizo un guiño a lo que Holland se puso burda de roja.
—Eh... gracias, supongo —rió un poco avergonzada por el comentario de Jack.
—Oye Holly, ¿Has visto a Dylan? —pregunté tratando de mirar tras de ella a ver si conseguía a Dylan pero ney.
—No, no lo he visto desde que regresó de Venezuela —me miró extrañada.
Ya va... khe
—¿Khe? Pero si ayer llegó a casa muy tarde con la excusa de que tenía mucho que hacer aquí y en Palisades
Ella negó lentamente.
—Alicia, nadie ha sabido de Dylan salvo por uno que otro meme que comparte en Twitter.
Admito que estoy estupefacta, él mo podría mentirme ¿O si?
No marica no, no puedo empezar a hacerme mentes porque yo soy una que me imagino diez y pego quinientas.
—Lily... ¿Todo bien?
Asenti mientras sacaba mi teléfono dispuesta a llamar al muy mmaguevo
—Espera, ¿Adónde vas? —escuché decir a Finn justo después que empecé a caminar para hablar en privado— ¡Pensé que esperariamos el momento perfecto para matar a Britt Robertson!
Yo amo a esos gemelos pero son unos cizañeros profesionales los muy coño e madres.
Jack le metió un manazo en el brazo para que se callara. Busqué entre mis contactos el número de Dylan y marqué.
Me mandó al buzón.
Marqué nuevamente.
Uno... dos... volvió a mandarme al buzón.
Volví a llamarlo.
—¿Alic...?
—¿Dónde coño e la madre estás metido Dylan Nicholas O'Brien Rhodes? —dije entre dientes tratando de no hacer un escándalo en el set.
—Estoy arreglando unos asuntos cariño, ahora no puedo hablar...
—¿Asuntos? Ah, eso quiere decir que estás en el set.
—Si, estoy en el set terminando un par de escenas y no puedo usar el teléfono... cariño Jeff me está haciendo señas de que cuelgue, prometo llamarte después ¿Si?
Jeff pasó junto a Lucinda y su malayo megáfono seguramente a continuar con mi escena de hace rato, me sonrió. Le hice una seña de que se acercara y así lo hizo.
Puse el teléfono en altavoz
—¿Estás seguro de que estás justo ahora en el set? —pregunté con ironía.
—Si Alicia, lo estoy, ahora en serio preciosa, Jeff va a aniquilarme si no corto la llamada...
—Aquí la que te va a aniquilar es Lily por mentiroso —se metió Jeff intentando no reír— Ah si, Hola Dylan, ¿Todo bien?
La linea se quedó en silencio desde su lado así que me dispuse a hablar yo.
—¿Te cagaste verdad? —reí con ironía— ¿Dónde coño e la madre...?
—Oye Dy, ¿Quieres apresurarte? —escuché una voz aterciopelada femenina del otro lado de la linea— debemos terminar de acomodar la habitación antes de que Clint llegue o juro que moriré de vergüenza.
—Kaya... sólo dame un minuto.
—Está bien, iré a guardar el resto, en cuanto termines acomoda la cama, está hecha un desastre por nuestra culpa... bueno, más tuya que mía.
KHEEE
Marica quejesto... ya va, qué....
No marica no, esto no es lo que parece, no creo que Dylan sea capaz... no...
—Alice, juro que esto tiene una explicación lógica.
—¡El webo mio tiene una explicación lógica! —gruñi— hablamos en la casa y más te vale que lo que tengas que decirme valga la pena o ahí no me va a importar quitarle al Jorjius su momento de brillar porque va a quedarse sin Dylicia que shippear.
—¡¿Qué?! ¡Alicia espe...!
Colgué la llamada y de no ser por que mi teléfono era un IPhone y no mi telepatria ya lo hubiese lanzado contra la pared.
—Lo oí —asenti— y también la oí.
—Uhmm humm...
—¿Quieres el consejo de una persona racional y para nada celosa?
Lo miré con una mueca.
—Te escucho.
Rió.
—Oh, no yo niña. A mi ni me preguntes porque mi consejo sería que mates a la zorra por tirarse a tu novio y luego lo mates a él por ponerte los cuernos, cortar su pene y dárselo de cenar a los tiburones del zoológico.
Erga
Lo miré mal.
—Jeff, no ayudas mmaguevo.
Intentó no reír.
—Sólo estoy jugando, la mala suerte de Dylan es colosal, seguramente llamaste en el momento equivocado y entendiste el concepto mal. Créeme, estuve mucho tiempo pensando si ése chico y Hoech tenían una relación, porque, ¡Vamos! ¿Los has visto últimamente? Parecen gays, y te lo está diciendo un gay, siempre los veo en el momento y la manera menos oportuna.
—Repito, no ayudas pero voy a darle el beneficio de la duda.
Jeff dijo que lo mejor sería continuar con las grabaciones para no pensar tanto en el peo y en las mil y un maneras en las que podría mocharle el pipi a Dylan. Los Twins miraron las grabaciones desde las sillas de descanso junto a Jeff y no paraban de babear por Holly, admito que me quise cagar de la risa cuando Finn y Jack quedaron frente a frente con Max y Charlie ya que las tres comadres a llegar con su ratón quedaron peor, el pobre Daniel creía que estaba mareado porque estaba mirando doble.
Al marcar las 7:30pm James y John pasaron por nosotros a los estudios y tras comprar dos combos en McDonald's, un McFlurry a parte para mi y dos cajitas Feliz para los maricos estos los fuimos a dejar a su casa. Estuve todo el camino arrecha jartandome mi helado que los pobres guardaespaldas no preguntaron un coño de mi estado, buena de ellos. Cargué con mis corotos en el ascensor luego de despedirme de ellos e intenté sacar las llaves de mi bolsillo. Un olor a carne llegó a mi nariz... marica Dylan no sabe cocinar...
Me apure en abrir esa mierda y lo primero que vi fue a Dylan sentado en el mueble en pijama y con mi hijo en sus piernas. Tobías al notar mi presencia corrió a mi encuentro llamando la atención de Dylan quien en seguida se paró del mueble y le colocó pausa al televisor.
—Alicia...
El olor a carne se intensificó.
—¿Estás cocinando carne? —pregunté extrañada, uno de los dos combos era para él.
—Yo...
La puerta de vaivén de la cocina se abrió. Miré hacia su dirección y Kaya care' tuqueque Scodelario salió con una bandeja en las manos que traía un refresco, una hamburguesa, papas y salsa que dejó sobre la mesa ratona frente a Dylan.
—¡Oh! Tu debes ser Alicia ¿Verdad? Soy Kaya —me sonrió mientras acomodaba su bata de baño, porque de paso la mmagueva estaba en MI bata de baño— Dylan me ha hablado mucho de ti, ¿Eres latina verdad? Dicen que los latinos son agradab...
—Ya va, ya va, ya va —erga, la marica era un radio sin botón de apagado— antes de que empieces de Jala Bolas quisiera saber qué estás haciendo así y justo aquí.
Kaya extrañada miró a Dylan.
—¿No le dijiste?
Dylan suspiró y caminó hacia nosotras dos muy pendiente a que en medio de mi ataque de arrechera no le lance la llave del apartamento en la cabeza que era lo que tenía a mi alcance.
Erga, ahora entiendo porque mami nos pegaba con cualquier vaina sin importar lo que fuera. No sé marica, eso hace sentir como que poderosa a uno.
—Amor... —Dylan se acercó a mí con cautela— te dije que Kaya se quedaría por esta semana mientras su casa en Santa Mónica era fumigada, ¿No lo recuerdas?
—Pues a mi no me parece que la... amiguita tuya ande paseando por toda la casa en paño mientras tu estás aquí, y de paso mi bata marico, buscando que me entre una infección en la qk o una sarna arrechisima por su culpa —amo poder hablar dos idiomas.
Kaya se sonrojó.
—Oh, esto —rió— lo siento, Dylan tenía hambre, fui a prepararle de cenar y mientras la carne se enfriaba y las papas se freian fui a darme una ducha, y... esto... olvidé que las papas estaban en el sartén y prácticamente salí disparada de la ducha.
De paso le cocina.
No si, que bello pues, bien bello.
—¿Lo ves? —preguntó Dylan señalando la situación— Un mal entendido.
Miré mal a Dylan.
—¿Y qué hay de lo que escuché por teléfono? Porque yo no soy estúpida nojoda, me vas diciendo de una vez qué hacías tu metido en el cuarto de la mmagueva esta.
Kaya frunció el ceño.
—¿Qué significa mmagueva?
Dylan se apresuró a responder.
—Significa Chica, de donde Alicia viene así se le dicen a las chicas —Quisiera verlo decirle así a mami es lo quej— Tu y yo, a la habitación, vamos a arreglar esto en privado.
—No, aquí es que vamos a arreglar esto, ninguna habitación er coño.
Es que yo estoy clara en cómo vamos a terminar «Arreglando» la situación marica, es que yo lo sé pero no, yo soy más arrecha que él y a mí él no me va a venir a porfiar.
Dylan suspiró y acarició sus cienes en señal de que estaba cansado de la vaina.
—Estaba terminando de ayudar a Kaya a empacar y por eso estaba en su habitación.
—Pero ella dijo que destrozaron la cama —contraataque— tu y yo nunca la destrozamos para que lo sepas.
La escoñetamos más bien, papix
Kaya se echó a reír.
—Ah eso, la casa está plagada de ratas y cucarachas por unas sobras que dejaron mis hermanitos extraviadas por la casa la última vez que me visitaron. Pues Dylan y yo estabamos terminando de empacar cuando...
—Por favor no le digas, me va a molestar con eso —le rogó.
Kaya le hizo un ademán ordinario para que se callara.
—Una rata pasó corriendo por mis pies, me asusté y por impulso me paré sobre mi cama, él —señaló a Dylan— como nunca es de ayuda, se echó a reír mientras yo gritaba que la sacara de ahí, pues el karma lo traicionó y no se fijó en la cucaracha que estaba reposando sobre su hombro.
—Kaya...
—Cállate Dylan —le dijo— cuando la vio se puso pálido y empezó a gritar incluso aún más agudo que yo y de no ser poque me sostuve casi me bota de la cama para que la cucaracha no lo atrapara...
—¡La muy desgraciada sabía volar! ¿Qué querías que hiciera?
Kaya rodó los ojos.
—¿Y qué me dicen de Clint?
Ambos se miraron y luego empezaron a reír.
—Clint es el exterminador y... mi futuro suegro.
Frunci el ceño.
—¿Futuro suegro?
Dylan tomó la muñeca de Kaya y puso su mano cerca de mi rostro sólo para observar tremenda pepa de diamante de compromiso.
Qué....
Entonces eso significa que....
—Eso quiere decir...
Dylan asintió
—Kaya está comprometida.
¡Nojoda mmaguebo eso no!
¡Eso significa que no he llevado cacho!
Verga, menos mal porque ¿Ustedes saben qué sería arrecho? Esto
Soy es yo mrc, ¿Qué hablas?
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Hello people! Feliz #8YearsOfOneDirection wa iora.
Le dedico este capítulo a mis bebés de las escaleras, ¿Los conocen? Porque yo crecí con ellos y me vacile sus audiciones más el programa y todas sus mariqueras desde el 2010
De paso también me dedico esta vaina a mi misma porque ya mañana su escritora aka la yocsy se les gradua de bachiller.
Eso es maricas, yo soy indestructible, qué hablan? Lara no pudo conmigo becerras, ya estoy esperando a que me inviten a entrar a los Avengers.
Sin más que anunciar la yocsy se despide.
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