(...)

Alicia

Salí de la cocina luego de dejar el vaso en su lugar. Eran alrededor de las tres de la madrugada y me había parado a orinar pero después me dieron ganas de beber agua, la misma verga porque después me volvieron a dar ganas de orinar.

Mi inestabilidad es una verga arrechisima.

Cuando salí del baño del pasillo pegué un grito al chocar con el pecho de un desconocido. Pero ajá, cuando vi que se estaba riendo caí en cuenta que era Dylan y le metí su coñazo.

-Pero weno vale, ¿Tú eres marico? -le di un manazo en el hombro- eso no se hace, mmaguevo.

-¿Qué haces despierta a ésta hora?

Entorne los ojos.

-Oh, ya sabes -bufe- fui a jugar fútbol al baño.

Él me miró con ironía.

-Aún no logro entender porque adoro tanto ese sarcasmo.

-Pana, es que tu tienes que entender que yo soy irresistible. O sea tas tas.

Rió. Su mano acarició suavemente mi mejilla. Estaba demasiado cerca hasta que caí en cuenta que aún seguíamos en la misma posición en la que habíamos chocado. Incluso su brazo derecho me estaba abrazando de la cintura.

-Eso lo sé, Bonita.

Me quedé quieta cuando vi que había empezado a acercarse. Marica, admito que tenía una lucha mental entre besarlo o no besarlo.

Si lo beso creerá que así se me quitará la arrechera.

Pero si no lo beso aumentará más.

Khe dezirthe.

-Yo no podía dormir porque no estabas ahí -susurró en mis labios. Menor, no siento los pies- porque no estabas abrazandome, porque no tenías tu pierna sobre las mías y no me diste un beso de buenas noches. No puedo dormir porque te extraño hasta en mis sueños, mi amor.

No si.

Ladillo hasta en sueños, soy es yo.

Jejejejeje

-Mala tuya, Dylan José -toqué sus labios y con mi pulgar los acaricie. En parte porque aún estaba con mi lucha mental y en parte porque ajá, los extraño- tu la cagaste, tu te jodiste. Debiste pensarlo antes de hacer lo que hiciste.

Su cara borró la sonrisa. La mano que sostenía mi mejilla sujetó la mano que tenía acariciando sus labios y después la besó.

-¿Cómo puedo hacerte entender que sólo te prefiero a ti Lily? Sólo a ti, no a ella o a cualquier otra, a ti.

-Tiremos y lo pensaré.

Los ojos de Dylan se abrieron de la impresión por alguna razón y yo frunci el ceño

-Espera, ¿Acaso dijiste...?

Pele los ojos.

AY MARICA LO DIJE EN VOZ ALTA NOJODA.

Sacudi rápidamente mi cabeza.

-Lo siento, fue un autoreflejo -me excuse- Teresa me carga con el mojón mental de tu y yo tirando. Y bueno ajá, se me salió.

Rió pero aún así no se despegó.

Pasando pena, alv, llevaba tiempo sin saber qué era eso

-Descuida, no es la única.

Mardito Thomas.

Rodé los ojos.

-¿Podría yo hacer...? -murmuró mientras se acercaba nuevamente.

Volvemos a lo mismo.

Entré en pánico cuando ya había cerrado sus ojos. Osea marica.

Besarlo o no besarlo. Si o no, no o si.

No si, jejejeje

¡Verga, yo no soy seria!

Sus labios rozaron con los mios.

Hacerlo o no.

Hacerlo o no

-¡El coño e su madre! -lo jale de la pijama para atraerlo a mí y poder besarlo.

Verga menor, osea, hasta que por fin pej.

Pero lo que más me encantó fue ese beso, osea menor, quedé fue loka. Tu sabes que ajá, la vaina empezó ahí masomenos pero el niño como que ajá, me acercó de coñazo y esa mierda se prendió, se prendió horrible. Yo empecé a jugar con el cabello de su nuca, sentí como se le puso la piel de gallina y me emocionó saber que fui la causante de ello. Avanzó aún sin despegarse de mí hasta que sentí cómo separó mis piernas y las enrollo en su torso para poder cargarme.

Caminó conmigo hasta el mueble sin despegarse y se sentó haciéndome quedar a horcajadas sobre él para una mejor comodidad. Abrazó mi cintura para atraerme más a él.

Tomé sus mejillas y me despegue rápidamente consiguiendo un jadeo.

-¿Si sabes que...? -respire agitadamente por la falta de aire- ¿Si sabes que aunque esto esté pasando, yo aún sigo arrecha contig...?

Reprimio una sonrisa y volvió a besarme.

-Lo sé.

Volví a separarme.

-¿Y sí sabes que...?

-Sólo cállate y Bésame mientras estemos bajo la estupidez que le da a una persona despierta en la madrugada. Ya mañana no me permitiras hacerlo.

No no no, bueno si.

-Buen punto.

Y volvimos a besarnos así a lo arrechisimo.

(...)

Había despertado cuando escuché la ducha. Con una ladilla universal me removi en la cama de Dylan.

Si menor, la cama de Dylan.

Pero no, por muy horny que nos pusimos luego del corte de escena, no hicimos nada pej.

Sólo dormimos así que no, por ahora el sueño de Thomas, Teresa y América Latina no se cumplió.

-Buenos días -murmure rascandome el ojo cuando vi a Dylan salir del baño.

-Querrás decir Buenas tardes -sonrió- fui a comprar el desayuno. Ve, está sobre la barra.

Asenti y salí de la cama. Tobías me siguió. Dylan se acercó y dejó un casto beso en mis labios.

-Ese niño, el de ayer.

-Froy.

Rodó los ojos.

-No te estaba preguntando su nombre -no si, arrecho- te estuvo buscando.

-¿Si? ¿Le dijiste que estaba durmiendo?

-Si.

Lo miré fijamente. Su mirada inmediatamente se desvió pa todas partes fingiendo interés por su entorno más que por la conversación.

-Dylan...

Bufó.

-Le dije que regresaste a tu casa en Checoslovaquia.

-Que molleja, voj -él sonrió burlonamente. Rodé los ojos- iré a tomar una ducha y me arreglaré para salir con Froy.

Inmediatamente tomó mi cintura.

-¿Qué? -chilló- ¡Oh vamos! ¿Él? ¿Porqué él?

Alguien está celoso.

-Porque fue amable y me invitó.

Además, ta weno.

-Pero no lo conoces, Alicia. Puede ser peligroso, un asesino o un violador.

Intenté no reir.

-Froy no es capaz de matar a una mosca, es adorable.

Y ta weno.

-Eso dijo alguna niña en algún lugar del mundo antes de ser asesinada.

Rodé los ojos.

-Iré a alistarme.

-¡Alicia! ¿Acaso sabes lo que puede pasar si sales con él?

Voltee y Levanté una ceja.

-¿Qué? ¿Que te mueras de la arrechera?

-¡Si! Es decir... ¡No!

-Nos vemos Dylan. Chao cheo saludos a chucho

-¡Alicia!

Entré al baño para darme una ducha mientras escuchaba a Dylan tocar la puerta frenéticamente mientras me daba 13 razones porqué no debería salir con Froy, y doce de ellas era porque no le agradaba y la última era porque no.

Este si es arrecho.

(...)

Terminé de comer y tomé mi bolso para salir, Dylan me miró rogando por última vez e intentó atravesarse en la puerta pero yo salí antes de que lo hiciera.

-Alicia, regresa aquí en este instante -señaló al piso desde el marco de la puerta. Lo ignore y entré al ascensor- ¡Alicia!

Le sonreí e hice un ademán de despedida.

-Eso es pa que seas serio, becerro.

Las puertas del ascensor se cerraron y yo me empecé a reír como la propia Mongolica. Marica es que verga, lo que es igual no es trampa y él quiere dárselas de arrecho dejándome a mi como la propia cabrona. Está muy equivocado.

Ya en la ultima planta empecé a buscar a Froy con la mirada y salirnos del Hall antes de que a Dylan se le ocurra la brillante idea de seguirnos.

Lo busqué un buen rato hasta que lo conseguí cerca de la puerta con su teléfono escribiendo.

Bufo al ver algo y luego medio arrecho, lo guardó.

-Hey, parece que hoy no es tu día.

Él inmediatamente giró del susto. Su cara cambió a una sonrisa muy cuchi.

-La neta que no, morra, ¿Cómo estás? -me dio un pequeño abrazo y luego fruncio el seño- ¿No estabas camino a Checoslovaquia?

Sonreí.

-Es una larga historia. ¿Aún sigue en pie lo del batido?

Él asintió aún sin quitar la sonrisa y juntos empezamos a caminar al Starbucks.

Me empezó a contar que era Mexicano pero vivía en California y que estaba aquí visitando a sus abuelos para las fiestas. Ya luego de año nuevo regresaría a la escuela. Tenía dieciocho y además una hermanita muy cuchi y un hermano revoltoso. Yo le conté de mi y que estaba aquí para acompañar a Dylan.

-¿Qué se te antoja, chula? -preguntó ya cuando estábamos en el mostrador.

Miré la cartelera del menú y vi el que estaba de temporada.

-El Mocca Frapucchino de chocolate blanco y Java Chips.

—Eso sonó tan gringo —se echó a reír.

—En mi tierra fácilmente hubiese pedido un papelón con limón pero hay que adaptarse a los cambios, ¿No crees?

Él asintió y me pidió el favor de buscar una mesa mientras él hacía los pedidos.

Mi teléfono sonó con beeps constantes.

-Verga, ¿Quién será la ladill...? No me sorprende.

Mensajes.
Dylan💩💖

Dylan💩💖: Aliciaaa😭😭

Dylan💩💖: regresa 😭😭

Dylan💩💖: Soy un idiota, lo sé pero regresa💔😭

Dylan💩💖: no confío en él, es un completo desconocido😒😒 lo sé.

Dylan💩💖: ¡Aliciaaaa! 😭😭😭😭😭😭😭😭😭😭😭😭😭😭😭😭😭😭😭😭😭😭😭😭😭

Dylan💩💖: ¡No me dejes en visto! Eso es malo.

Dylan💩💖: ¡Responde mis mensajes, demonios!

Yo:

Yo: vuelvo en un rato, deja la vaina chico.

Y el marico siguió escribiendo, lo dejé en visto para que dejara de joder. Eso es para que sea serio, ahora que empiece a jalarme las bolas de oro.

-Un mocca frappuchino de chocolate blanco y java chips para la chula más bonita de aquí -anunció el catire dejando el batido frente a mi.

Sonrei.

-Gracias, vale.

Él tomó asiento frente a mi mientras bebía de lo suyo y dejaba sobre la mesa una bolsa de oreos americanas.

-¿De qué parte de Checoslovaquia eres, morra? -Empecé a reír en lo que preguntó esa vaina- ¿Qué?

-No soy de Checoslovaquia.

-No mames. Pero Dylan dijo...

-Está celoso y no quería que saliera contigo, por eso dijo eso -hice un ademán restandole importancia- soy de Venezuela.

-¡A su madre! —exclamó— ¿Así que eres latina?

Pele los ojos cuando escuché ese beta en español.

-Nawebona, amo tu acento, basta.

Él sonrió así muy cuchi.

-Ya te dije que tengo orígenes mexicanos y viví unos cinco años en Guadalajara -respondió- pero ya después regresé con mi mamá a Estados Unidos.

-¿Así que también eres bilingüe? -él asintió- verga, menos mal, al menos alguien a parte de Tyler para hablar en español porque el verbo to be ya me tiene arrecha.

Froy empezó a reír.

-Eres muy chistosa, Morrita, chula.

-Pues gracias, catirrucio —sonreí con orgullo, al menos ser payasa es algo que si me salía bien— me lo dicen muy seguido chamo -reí- entonces ¿Vives en el edificio de Dylan o...?

-No, mis abuelos lo hacen. Yo vivo en California.

Baia Baia.

-Qué bien  vale -demasiado bien- yo quisiera vivir en Estados Unidos pero para eso hay que echarle bolas.

Él rió.

-Si, he visto las noticias, órale, no está nada bonito por allá -hice una mueca- pero ya verás que todo saldrá bien.

Ajá.

Estuvimos un buen rato hablando, incluso pedimos otra ronda y unos ponquecitos de chocolate para que no nos corrieran de esa vaina por acaparamiento de espacio. Froy era super panita, además me contó que tenía una novia, Cara, y era también de California. Por mi chévere porque ajá, igualmente no pensaba cuadrar con él pero prefería callarme la jeta para hacer arrechar a Dylan un ratico más.

-Cuenta, chula. ¿Tú y ese Dylan O'Brien están saliendo? -preguntó luego de comerse mi ponquecito.

Mmaguevo.

-Marico, es que ni yo misma sé qué coñoelamadre tenemos, así que háblame un mes después y te respondo esa mierda.

El mardito se empezó a reír.

-No manches. Recuerdo cuando Cara y yo pasamos por eso antes de salir, era un caos, la fastidiaba pero no me gustaba ver que le sonriera a otro morro y que a mí lo más afectuoso que podía hacerme era sacarme el dedo del medio o darme de trancazos.

Reí.

-Verga, pero es que Dylan ya es una vaina sería, te cuento -y le conté el beta. El marico se cagó de la risa cuando le dije lo de las carajitas y el taxi- y ahí está, tuve que apagar el teléfono porque no paraba de mandarme mensajes.

-Está hasta la madre de celos-carcajeo- entonces esa era la razón por la que ésta mañana me miró como un perro rabioso cuando le pregunté por ti. Un poco más y luego luego llamaría a control animal.

Rodé los ojos divertida.

-Si es malasangre.

-Deberías dejarlo sufrir un poco, total, no tiene porqué mirar tetas ajenas teniendo las de su novia para mirar.

-No si -me empecé a reír, estaba rojisima.

-A ver, niegamelo.

-¿Pa qué decirte que no? Si si.

Ambos reimos.

Salimos de Starbucks como a eso de las seis y como nos dio hambre, compramos para llevar en McDonald's ya que también debía llevarle a sus hermanos. Luego de comernos las hamburguesas regresamos al edificio cagaos de la risa porque un estúpido se echó sendo coñazo al caerse en la calle por estar mirando el teléfono.

Este carajito y yo nos estamos volviendo uña y mugre y eso que ayer lo conocí.

-Venga, entra que hace frío -me invitó luego de abrir la puerta del apartamento.

-¿Cómo crees Froy? Me da pena con tus abuelos.

Bufo restandole importancia.

-Oh vamos, a mi mamá Cece le agrada todo el mundo y mi Papancho igual.

Hice una mueca.

-Mejor otro día, Dylan ya va por el mensaje número 80, debería regresar.

-Bueno, bueno, sólo dame un segundo que deje la comida sobre la mesa y te llevo a tu cantón.

Asenti y decidi esperar afuera por él. Como a los cinco minutos salió con una niña de masomenos seis o cinco años en brazos.

-Lo siento, Ella quería venir.

-No importa.

Froy se acercó con la niña y la carajita cuando me vio ocultó su cara en el pecho de Froy.

Awww, coshita.

-Ella, ella es Alicia, saluda a la visita, morra -animó a la niña y ésta de verga me vio y movió su mano en un ademán de saludo- esta morrita ueq ves aquí es Ella, mi hermana menor.

-Hola nena, ¿Cómo estás? -la niña rápidamente se volvió a ocultar en el pecho de Froy- o soy muy fea o no le agrado, una de dos.

Él rió.

-No es eso, sino que es muy tímida. Te presentaría a Cody pero me caíste muy bien como para,hacerte esa maldad -cerró la puerta tras de si- vamos a dejarte a tu cantón.

Volvimos a tomar el ascensor ya que los abuelos de Froy vivían en el cuarto piso y Dylan en el sexto. Intenté hablar con la carajita pero no me quería parar bolas así que mentalmente la mandé a comer mierda. Al llegar, abrí la puerta y en seguida escuché los ladridos de bienvenida de Tobías. La carajita se emocionó y prácticamente obligó a Froy para que la bajara y salió volada dentro del apartamento.

Froy intentó detenerla.

-¡Chamaca! No mames, ¡Regresa aquí!, es casa de los vecinos hay que respetar -la llamó. La niña no le paró bolas.

-Déjala, está muy entretenida con Tobías -dejé las llaves en la pecera.

-Ama a los perros, son su cosa favorita en el mundo pero no por eso puede pasar a una casa ajena sin permiso.

Ambos vimos cómo la niña se sentaba en la alfombra mullida y Tobías jugaba con ella.

-Pues, puedes traerla cuando quieras para que juegue con Tobías, parece que le agrada.

Froy asintió.

-Debo regresar, Ella tiene que cenar y si no despierto a Cody no dejará de joder toda la noche -rodó los ojos y luego se acercó a besar mi mejilla- nos vemos, Alicia. ¡Chamaca! Hora de irnos, princesa.

Ella no tuvo más remedio que obedecerle a Froy y se despidió del perro para luego regresar a nosotros y que él la cargara.

-Dile adiós a Alicia, morrita -la niña se despidió con la mano y luego ocultó su rostro en el pecho de Froy- bueno, algo es algo.

Reí levemente.

Cerré la puerta luego de que se marcharan y casi me cago del susto al ver que el marico de Dylan estaba tras la puerta pegado como el propio tuqueque.

-Marico ¿A ti te pica ese culo? -lo regañe- ¿Qué hacías espiandome?

-No estaba espiandote.

Lo miré con ironía.

-¿Ah, no? ¿Entonces qué estabas haciendo?

-Pues es muy obvio porque en realidad, la verdad es que sinceramente siendo totalmente honesto sin el afán de alargar esta conversación y olvidar este tema, siempre usando los términos correctos sin decir mentiras y usando un vocablo altamente defi...

-¡Dylan! ¿Tu eres marico?

-¡No! -chilló- Si fuera maruico no estaría aqui, mordiendome las uñas y mirando el reloj de pared cada tres segundos desesperado para saber a qué hora pensabas llegar mientras estabas con ese... ese... ¡Con ése! Y yo aquí muriendome de los celos... ¡Si, celos! Lo he dicho y para de reírte. Porque luego de un rato se me pasó el enojo al recordar que él puede invitarte muchos batidos, pero no puede hacer esto....

Ay maricaaaa

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La yocsy quisiera dedicarle este capítulo a la chama que nos hizo la nueva portada.

ARIANNA

menor eres tu en tus mejores momentos, me encantó horrible esa vaina.

Digalo, esta bella. Aquí les dejo la imagen

Bueno, sin más que decir, me despido porque nojoda, son las tres de la madrugada y tengo sueño, menores