Alicia

Suspire nuevamente, luego de hacerlo diez veces más antes de esa. Estaba arrechamente nerviosa, hace más de semana y media que mi niño había salido del hospital y hace cuatro dias tuvo que ir junto a su grupo de Set a México, si, Thomas también, a realizar algunas entrevistas de Maze Runner y su vuelo aterrizaba en...

Miré mi reloj

¡Coño e su madre!

Salí rápidamente del taxi tirandole los cobres al señor, el vuelo de Dylan estaba desembarcando lo que significaba que él seguramente estaría por aquí.

Adivinen ¿Quién se va a Venezuela mañana?

Ajá, y adivinen ¿Quién no le ha dicho a su novio que se va a Venezuela mañana?

Si, esta que está aquí porque hasta Teresa le había dicho a Thomas nawebona.

Pero coño marica, entiendanme, me daba vaina con él porque sabía que se iba a poner triste pero ajá, yo también porque me iba de regreso a mi country a ver a ese poco e' pejelagartos horrorosos teniendo como novio a Dylan O'Brien

Corrí a la sección de vuelos internacionales con mi lámina de papel bond super fancy que le había hecho a él ya que era el único pendejo que tenía el vuelo retrasado porque todo el mundo llegó ayer.

Al llegar me hice camino entre dos carajitas esperando también por él, quería sorprenderlo porque él creía que Thomas era el que iba a buscarlo.

Las cutie pies empezaron a gritar arrechamente casi dejandome sin oído por lo que supe que Dylan ya estaba aquí. En efecto, estaba cruzando la puerta aquella.

Marica alamierda, le dije que no se llevara esa funda de almohada, esa era la que más huecos tenía, parecía que hubiera ido a la guerra, Pero no! Dylan es necio nojoda.

Vi que empezó a buscar a Tommy con la mirada sin obtener resultados. Empecé a gritar su nombre y desenvolvi la lámina.

Ése mmaguevo sordo.

No tuve más remedio que atravesar la barrera que los de seguridad tenían para las locas que querían cruzar y tirarsele encima a mi novio cuando pasó una vaina.

Un malayo mmaguevo Guardia tiró de la parte de atrás de mi sueter casi ahorcandome con el cuello de éste pero aún así regresandome al montón de adolescentes fuera de control.

—¡Pero mira mmaguevo! ¿Qué es lo que te pasa a ti?

—No puede pasar.

—¡Claro que si, mardito Pelón! Vengo a buscarlo a él —señaló a Dylan.

El guardia negó.

—Niña, todas aquí vienen por él, no eres la única.

—¡Pero él es mi novio! —apreté los dientes, arrecha.

Él me miró de arriba abajo.

—¿Tu y el señor O'Brien? —rió— buen intento pero no te dejaré pasar.

Bufe, arrecha y saqué el teléfono.

—Vamos a ver si no me vas a dejar pasar cabeza e' webo —literalmente lo parecía, mmaguevo Pelón. Marqué el número de Dylan y a la segunda vez contestó— Mira tu, becerro, ven aqui y dile al maldito Toreto este chimbo que me deje pasar a verte.

Vi de lejos cómo Dylan fruncia el ceño pero aún así una pequeña sonrisa se coló por sus labios.

—¿Estás aquí? Pensé que Tommy...

—Sorpresa —dije— estoy a pasos de ti, date la vuelta y ven a decirle al maldito intento de Pitbull éste que me deje pasar.

Escuché una pequeña risa de su parte y le colgué. Vi cómo Dylan estiró el cuello para buscarme con la mirada.

Tuve que pararme de puntillas y empezar a saltar para que me viera, lo conseguí.

—Quita ésta mierda y déjame pasar pues —le dije al Guardia.

—Ahí te vas a quedar con todas las demás hasta que el señor O'Brien se vaya.

Lo miré mal.

—Tienes una suerte que no tuviera unos huevito e monos aquí pa lanzartelos y que explotes por pajuo nojoda, ¡Déjame pasar!

—De ninguna....

—Hola Bonita.

Sonreí ampliamente al ver a Dylan así que volví a escabullirme por la cuerda de seguridad para poder lanzarme sobre él y llenarle la cara de besos, que, gustoso recibió mientras me había atrapado en el aire.

—Te extrañé, Prince, nawebona. Te quiero, te quiero, te quiero Dylan.

Él rió.

Se escucharon gritos por parte de algunas chicas e insultos por parte de unas mmaguevas envidiosas, a mis cojones.

—¿Qué te dije de salirte del grupo? Lo estás molestando —se arrechó el guardia.

Verga, nawebona, ¿Es en serio?

—Verga marico pero ¿Es que tu no ves que yo estoy recibiendo a mi jevo? Que corta nota eres sh.

—Dejela oficial —sonrió Dylan aún cargandome sólo que ésta vez tuvo que agarrarme del culo cuando muy bien pudo agarrarme de los muslos para no caerme, mardito quesuo— es mi novia.

—¿Viste mmaguevo, viste? Lleva nojoda.

El carajo entornó la mirada.

—Lo siento, señor O'Brien.

Dylan le sonrió, me bajó de su torso y le dijo que no había problemas, pero justo cuando se dirigió a tomarse fotos con las fans le saqué la lengua al malayo mmaguevo.

—Tengo mi arma de choques eléctricos, no me obligues a usarla.

—Tengo una madre que tiene una chola más poderosa que el perol ése, no me obligues a llamarla.

(...)

Una hora marica, una hora estuvimos esperando por Dylan y que se apurara en firmar y tomarse fotos hasta con las papeleras del aeropuerto. Me había puesto a cantarme unas ahí de Eminem con John y James pero yo si goce con esa vaina, ya que ambos eran británicos hasta la médula y hablar rápidamente para ellos era casi imposible.

Aunque no sé qué tanta paja ando diciendo yo si ni yo misma entendía lo que estaba rapeando, nawebona, Eminem pareciera que se estuviera cagando de lo rápido que rapeaba.

—Aceptalo, te has perdido.

—Cállate nojoda James que tu fuiste el primerito, pajuo.

John se echó a reír.

—Aguanté hasta el coro. No cómo otras.

Lo fulmine con la mirada.

—Un día de estos vamos a ver cuál de los dos se sabe cantar más las Llaneras pa dejarte en ridículo.

Él sonrió con autosuficiencia.

—Acepto el reto.

Rodé los ojos divertida.

—Todo listo chicos —Dylan entró al carro y lanzó el morral atrás— tu ven aquí, quiero tenerte lo más cerca de mí posible, te he extrañado como un maldito lunático.

Sonreí ante aquellas palabras y fui a sentarme sobre su regazo mientras John arrancaba, si no fuera por Dylan, hubiera pegado la frente de un solo coñazo al asiento del copiloto.

—John, mmaguevo, yo sé que tas arrecho de que James y yo te ganamos pero bajale dos a tu intensidad.

James se cagó de la risa.

Admito que ésos dos eran muy panas en la vida, ratas los muy desgraciados. John era enorme marica, el obelisco pues, alto catire ahí de ojitos verdes y James era pelirrojo de ojos azules, ahora le tengo un aplique kike Ed Sheeran pero es que alv, eran igualitos sólo que James no tenía ni un tatuaje, su pelo parecía una combinación entre naranja y amarillo, casi rubio y a comparación con Ed, era un pelabola.

—¿Tienes hambre? —le pregunté a Dylan, eran al rededor de las nueve, casi diez de la noche.

—Demasiada, ¿Preparas aruepas, por favor Queen?

—Tengo algo mejor, estuve inventando en estos días y luego de regarle la cocina al Jorjius descubrí que puedo hacer pizza con espaguetis del día anterior.

—¿No vas a envenenarme, cierto?

Entorne la mirada.

—Si quisiera hacerlo, lo hubiera hecho aquel día en que dijiste que de no ser porque te dio ladilla, hubieras interpretado a Augustus Waters en Bajo La Misma Estrella.

Dylan se echó a reír.

—Definitivamente te extrañé, Queen.

(...)

—Jorjius, te recuerdo que es mi novio, no el tuyo.

—Verga, ¿Y es que acaso sólo tu tienes derecho a extrañar a Dylan? ¡Anda a lavarte ese culo! —volvió a abrazar a Dyl— hijo, yo a usted lo veo... no se, algo te habrás hecho en México porque aquí hay una vaina que no me cuadra.

Dylan se echó a reír.

—Oh, ya sé porqué —dijo— me he cortado un poco el cabello de abajo. ¿Se ve muy mal?

Yo iba a responder pero en lugar de eso, Brayan me interrumpió.

—Coño marico, no sé, a mi no me cuadra ese corte, es demasiado.... fuera de moda —hizo una mueca de asco— yo siendo tu me hubiese hecho la raya o una estrella.

Éste si es marico.

—¿Qué hablas, marico frustrado? —chilló Teresa— ese eres tu mardito tukky que te haces la raya porque tu tienes el pelo malo, en cambio aquí el cuñis tiene su pelo lisito y bien bonito para sucumbir a esas... atrocidades de la moda.

Alaverga, Teresa cuin. Se pasó de Rata.

—Yo opino que te ves demasiado bello en la vida —le dijo Marianna a Dylan mientras le sonreía.

Le sonreí.

—Es que yo sé que él es bello, amiwita. No tienes porqué recordarselo que él bien que lo sabe, para éso tiene una novia que se lo dice a menudo. ¿Verdad, Prince?

—Si, Princess.

Dylan intentó disimular sus ganas de reír, de verdad que lo intentó pero no lo logró.

Brayan rodó los ojos y siguió metido en Facebook.

Dylan iba a quedarse a dormir esta noche en casa del Jorjius ya que ésta era mi última noche en California hasta dentro de... ¿Una semana?...., ¿Diez días? Brode yo no sé, pero lo que si sé es que Dylan ni enterado estaba. El punto es que yo lo invité pues.

El Jorjius apagó las luces mientras Teresa buscaba en el baúl de las películas del Jorjius alguna buena para ver. Dylan había tomado asiento en la alfombra mullida recostando su espalda al mueble y entre sus piernas flexionadas, estaba yo rodeada por sus brazos vistiendo su buzo de los Mets.

—¿Dónde está tu mamá?

—Está arriba terminando de ordenar algunas cosas.

—Ordena un poco tu habitación, ya debe parecer un cuchitril de lo desordenado que debe estar.

Reprimi una sonrisa.

—¿Cómo lo sabes?

Sonrió. Se estiró un poco para dejar un beso en mi cabeza y acurrucarme más en sus brazos, extrañamente me sentía bien, ya saben, como la sensación que le da a uno cuando no hay luz, están solos en su casa de noche y están bajo las sábanas con el teléfono a 100%.

Me sentía segura.

—Porque conozco lo que tengo. Bonita y desordenada, demasiado desordenada.

Giré para mirarlo un poco mejor, no pude evitar mirar por un segundo sus labios.

—De igual manera no te importa. De lo contrario no serías tu quién recoge mis desastres.

—Realmente no me importaría seguir recogiendolos en un futuro lejano.

¿Eso fue una indirecta, chama?

Porque admito que me empezó a latir con rapidez el heart.

—¡Ajá! Mira lo que conseguí —exclamó Teresa con una carátula en sus manos.

Mi tia se la quitó

—No señor, carajita. Usted no tiene edad para ver 50 Sombras de Grey.

—Nawebona. Tia dale no seas pajua vale.

—No, dije. Esa es una película muy obsena.

—Nawara, te juro que no se ve nada, ¡Nunca se ve nada!

—Igualito, muestra muchas escenas eróticas que ni Marianna, ni tu ni tu hermana pueden ver.

Eso es verdad, yo nunca he visto un webo en mi vida...

Miré a Dylan. Quería reírse.

Éste marico lee mentes, Edward Cullen le dicen.

Teresa bufó.

—Verga, nojoda está bien. No vemos un cebo —se cruzó de brazos y se sentó en uno de los muebles— Me arreché

Se hizo un buen rato de silencio hasta que las luces de arriba se apagaron y se escuchó una puerta echarse seguro.

Mi tía se giró a Teresa.

—Listo, tu mamá ya se fue a dormir —sonrió— pon el beta ése.

Teresa rió

—Verga, te habías tardado

Teresa se apresuró a poner la película cuando el Jorjius regresó con las cotufas a la sala y dos Dorito's grandes.

Nosotros éramos arrechos, eran como las doce de la noche y teniamos que pararnos a las ocho para estar en el aeropuerto antes de las 10 y aquí estábamos desvelandonos viendo una película de... ay nojoda, perdí la concentración.

¿En qué me quedé?

Admito que se me fue la idea.

Bueno, equis. Tiré de una de las sábanas que habían en los gabinetes inferiores del mueble para cubrirnos a Dylan y a mi. Debía admitir que por una parte me sentía culpable ya que todo el mundo sabía que yo mañana regresaba a Venezuela menos Dylan, incluso había adelantado escenas de Teen Wolf para poderme ir dos semanas tranquila pero la pura verdad era que una parte de mí quería quedarse amarrada a una mata para no irse, y la otra quería regresar a Venezuela porque nawebona, había gente que me hacía bastante falta, no se crean, por ahí anda un ladilla que...

Me llegó un whatsApp.

Nawebona, lo reventé.

Le bajé el brillo a la pantalla y abrí el chat.

Chat
Marikito✨🍕

Marikito✨🍕: segurito no puedes dormir sabiendo que mañana a primera hora vas a verme luego de un mes, ¿Verdad?😌😌

Yo: verga, si, ¿Cómo sabías que tenía pesadillas?

Marikito✨🍕: pajuaaaa😒😒😒

Marikito✨🍕: tas clara que te mueres por verme.😌😌

Yo: tienes razón Guiñan, ¿Quién no extrañaría a semejante ladilla como voj?😒

Marikito✨🍕: 😱😱😒😒

Marikito✨🍕: estúpida

Marikito✨🍕: ¡Claro! Como ya me cambiaste por el mmaguevo catire aquel😒😒

Frunci el ceño.

Yo: ¿Qué hablas sh?

Marikito✨🍕: 😒😒

Marikito✨🍕: si si, hazte la loca, mmagueva😒😒

Yo: ay valeee, ¿Qlq?

Marikito✨🍕: el nombre Roy... Joy... Loyd...? Verga, no me acuerdo, por ahí iba la vaina. El punto es que me dejaste botado por ése catire.

Suspire pesadamente.

Yo: ahhh, Froy. Pero ¿Porqué te cae mal muchacho marico si él es chévere?

Marikito✨🍕: nada

Marikito✨🍕: igualitooo

Marikito✨🍕: traicionera🎶... en mi vida fuiste pasajera🎶 mentirosa... sólo quieres que de amo... iugh, asco mrc, amor no, fos.

Yo: ja ja😒

Yo: si eres estúpido sh.

Yo: tu sabes que yo te quiero, gafo💞. Dramático e' mierda.

Marikito✨🍕: ¡N A D A!

Marikito✨🍕: ¡Vete con el mmaguevo ese!

Marikito✨🍕: olvidame...

Rodé los ojos.

Yo: sigue así de estúpido y la Nutella que te iba a llevar se la voy a tirar a los perros.😒😒

Marikito✨🍕: ....

Marikito✨🍕: ...

Marikito✨🍕: y... ¿Qué haces, mejor amiga?😅😅

Puse los ojos en blanco.

Yo: aquí viendo 50 Sombras de Grey con el combo.

Yo: marico...

Yo: tengo una vaina importante que contarte.

Marikito✨🍕: dimee

Yo: me pica una teta

Marikito✨🍕: ¿Cuál? Si no tienes😂😂😂

Yo: después te quejas cuando te llamo pajuo😒.

Yo: P A J U O

Marikito✨🍕: mmagueva

Yo: pero ya en serio

Yo: ya vengo que voy a orinar.

Marikito✨🍕: nawebona

Marikito✨🍕: antojosa

Dejé el teléfono sobre la mesa y me levanté. Dylan me miró y no le bastó más que mirarme para saber a donde iba y le hice una seña de que me estaba meando.

Asintió y fui a hacer lo mio.

No había tardado mucho realmente, pero no sé porqué siempre tengo la costumbre de hacer un tour por toda la casa y al final nunca me acuerdo de lo que iba a hacer, ¿No les ha pasado?

Cuando bajé nuevamente con los demás para regresar a mi sitio, Dylan se había sentado en posición de indio y había cruzado sus brazos sobre su pecho. Podía ver la seriedad en su mirada, la manera en la que se notaba que estaba mordisqueando el interior de su mejilla, sus cejas fruncidas y aquella mirada fría.

Estaba molesto.

—Dy, ¿Sucede algo?

No me respondió. Creyendo que no me había escuchado a esa distancia, me acerqué un poco más para que pudiera rodearme con su brazo derecho, sin embargo, no lo hizo.

—Dylan, ¿Está todo bien?

Para mi sorpresa, ésta vez respondió, pero aún así hubiera preferido que no lo hubiese hecho.

—Creo que tenemos que hablar, Alicia.

—¿De qué...?

Negó para sí mismo.

—Cuando todos vayan a sus habitaciones.

(...)

50 Sombras de Grey había terminado. La cagada nojoda, quería echarle coñazo a Anastasia por pajua, por gafa, coño, ta bien que la caraja tenga amor propio pero nawebona.

CHRISTIAN TENIA UN ESTACIONAMIENTO DE PUROS CARROS PROPIOS Y UN HELICÓPTERO.

Gafaaa

Estúpida

Idiota

Bestia

Salvaje

—Bueno, todo el mundo pa su cueva —Mandó el Jorjius estirandose para luego mover a Marianna que se había quedado dormida en el mueble— ajá, parate pues vale, yo sé que el Gym me está favoreciendo pero lo que me puede es reventar la cervical si intento subir las escaleras cargandote.

Se pasó.

Marianna se incorporó y se despidió de todo el mundo para subir, Brayan la siguió después.

—Maythe tu también. Mueve ese culo

Mi tía no puso resistencia alguna ya que estaba lo suficientemente ocupada ladillando a Thomas para que moviera sus contactos pa ser ella la Anastasia de 50 Sombras Más Oscuras.

—No vale, tu lo que eres es una mardita loca —le dijo Teresa— tu lo que quieres es cogerte al carajo ese.

—No vale mija... ¿Cómo cre...?

—Ya va, perate ahí que saque una libreta pa anotar la coba que me vas a decir para que después la leas, te la aprendas y a ver si así te la crees tu misma.

Mi tía la fulminó con la mirada

—Ajá, cállate pues —bostezó— buenas noches, Dios me los bendiga a toditos. Tommy, ya te dije, no seas pajuo.

Thomas asintió y antes de subir con el Jorjius me dio un beso en la frente al igual que la Teresa recibió uno de Dylan.

Qué hablan? Somos el squad de relation and friendships más goals que hay

—Iré a tomar aire.

Dylan salió al patio trasero y el Jorjius y yo lo seguimos con la mirada, esa sensación de culpa volvió a albergarme, Dylan rara vez se comportaba de esa manera. Le di una mirada de soslayo a mi tío, éste se encogió de hombros.

—Tu jevo, tu peo.

Lo miré con ironía.

—Nawebona, ¿Ahora si es mi jevo, verdad?

Bostezó sonoramente.

—Ven aquí, mi cono e' transito —extendió sus brazos para rodearme con ellos y luego besar mi frente— Te quiero, ¿Lo sabes? Peeero, Dylan es mi yerno favorito pej, asi que todo peo que tengan me lo resuelven nojoda porque yo tengo que ser el padrino de la boda.

No si.

—Jorjius...

—¿Qué pashó?

—¿Tu eres marico, verdad?

Me miró con ironía para luego meterme un lepe tras la cabeza y separarse.

—Anda a buscar a tu macho pues. Saca tu perra interior pero si van a coger, metanse al cobertizo para que Paula no los vea.

Y sin decir más, subió las escaleras.

Miré al techo.

—Hablando claro tu y yo —le hablé a Yisus— ¿Verdad que el Jorjius es marico?

Porque verga chama, tenía todo para serlo, lo que le faltaba era el jevo y no, no podía empatarlo con mi suegrish porque no pues, Lisa me daría cosita porque si en verdad el Jorjius era marico, se lo tumba.

A ése no le tiembla el pulso a la hora de sacar su puta interior.

Cerré la puerta corrediza de cristal de la cocina tras de mi luego de apagar las luces de la sala y la cocina para que mami no tuviera motivos para bajar después. El frío de esa noche estaba más o menos por lo que me di a la obligación de esconder mis manos en el bolsillo del buzo de mi Dylan.

Empecé a buscarlo con la mirada. Estaba sentado en una de las sillas de extensión a la orilla de la piscina, y en sus manos había un...

Nawebona, Dylan O'Brien era demasiado perfecto para ser verdad.

—¿Estás fumando?

Su mirada llena de ironía me hizo querer repasar mis últimas palabras.

Yo si soy mongólica.

—No, dicen que si enciendes hierba podrás ver el futuro. ¿Quieres que vea el tuyo?

Lo miré mal.

—Mala mía pues —me quejé— no sabía que fumabas, no parece tan...

Levantó una ceja.

—¿No parece tan... Qué?

Me encogi de hombros un poco afligida ante su repentina frialdad.

Definitivamente algo ocurrió.

—No parece tan propio de ti.

—¿Y porqué no lo sería? —contraatacó— ¿El gran Dylan O'Brien debe dar el ejemplo? ¿El gran Dylan O'Brien no debería tener algún tipo de vicio que pueda ficharlo? ¿Acaso sudo agua bendita? Desde un principio te dije que no soy como las revistas me tachan Alicia, soy un idiota.

—Bajame el tono que yo no te estoy subiendo la voz —dije. Respiró más lento para calmarse— ¿Porqué lo haces?

—Para desestresarme, a veces por costumbre —miró el cigarro entre sus dedos de manera insignificante, hasta podría jurar que estaba vuelto un culo pensando que en realidad ni bola le estaba parando.

Me senté a su lado en silencio y por mi mente pasó nuevamente plantearle sobre mi viaje a Venezuela pero ver cómo se llevaba el cigarro a los labios, daba una fuerte calada y luego expulsaba el humo me distraia demasiado.

No lo aguanté y antes de que me diera por empezar a toser ya que esa vaina me hacía daño, estire mi mano para tomar la suya y quitarselo.

—Alicia.

—Eso daña tu organismo lentamente, no voy a dejar que enriquezcas a una compañía para obtener a cambio un buen cáncer de pulmón por pajuo.

No me discutió más por él así que lo lancé a la piscina. Volví a verlo y aún ese ceño fruncido seguía ahí.

—Amor... ¿Qué...?

—¿Porqué no me lo dijiste?

Frunci el ceño.

—¿Decirte, qué?

De su bolsillo sacó algo y lo encendió.

Mi teléfono.

Se lo quité y vi que el chat con Guiñan seguía abierto.

Marikito✨🍕

Marikito✨🍕: heeey

Marikito✨🍕: brode, dice mi mamá que a qué hora aterriza tu vuelo en Maiquetía

Marikito✨🍕: nawebona, ¿Te moriste cagando?😒

Marikito✨🍕: no, ya en serio. ¿Vas a hacer escala a Venezuela?

Ñeeeelda.

Con razón éste estaba arrecho.

—¿Estabas revisando mis mensajes?

—No, dejaste la pantalla encendida y no paraba de sonar. Estire el brazo para tomarlo y apagar la pantalla, ¿Y qué crees? —rió irónicamente— termino por enterarme que mi novia se va de Los Ángeles... por la mañana.

—Dylan.

—¿Porqué no me lo dijiste, maldita sea? —subió la voz a tal punto que di un paso atrás— ¿Qué, acaso era una forma indirecta de terminar conmigo? Porque si es asi, ésta es tu oportunidad, hazlo, pero sólo quiero una razón antes de hacerlo.

Frunci el ceño. Estaba arrecho, y bastante nawebona. Pero luego de analizar la vaina caí en cuenta de algo.

Una parte de él estaba asustado, seguramente creía que haría lo mismo que le hizo Britt.

A esa mmagueva me la voy a sonar, ya me traumó al muchacho.

—Dylan, no quiero terminar contigo, ¿Te pica ése culo? No te lo dije porque harías un río de una gota y al parecer tuve razón —rodé los ojos— tu te haz ido a New York y a México y me avisas ya cuando estás en el avión. No te arreches nojoda.

Suspiró fuertemente llevando sus manos a su cabello y revolviendolo un poco

—Si... pero yo sé que siempre terminaré regresando... —dijo— porque no hay noche en que no pueda dormir sin ti o día en que no pueda besarte... Alicia, soy adicto a ti, maldita sea, y no quiero dejar de serlo.

Mi corazón se aceleró.

—Y no lo harás —me apresure a decir— Sólo son un par de semanas porque según mami, no nos van a dar los papeles del liceo si no hago la labor social.

Hizo una mueca.

—Un par de semanas... —repitió— no creo poder con eso.

Suspire. Caminé la poca distancia que nos separaba y dejé un casto beso en sus labios. Sus brazos no tardaron en envolverme, acoplandose perfectamente a mí.

—Si yo pude esperar tres años para conocerte, créeme, un par de semanas no harán la diferencia.

Una débil sonrisa se curveó en sus labios.

—¿No puedo ir contigo?

Abrí los ojos por completo, éste será que se quiere morir.

—Te volviste loco chico, no, no, no, no. Definitivamente no.

Frunció el ceño.

—¿Porqué no?

—Porque la atracada que pueden hacerte no va a ser normal. Prefiero que te quedes aquí, sano y salvo.

—No va a pasarme nada.

—Prometo hacer video llamadas contigo Prince, pero insisto, mejor quédate aquí, mi país no está en su mejor momento ahora y quiero evitar a toda costa que me dejen sin novio.

Dylan desvió la mirada. Coño marica, a mi me daba cosita dejarlo, ¿Qué no daría yo para que fuera conmigo? Pero no vale, no lo voy a arriesgar a que me lo violen poray.

—Hey... ¿Qué pasa ahora?

—Nada, es sólo.... es sólo que, hoy llegué de México y te extrañé como un desquiciado. El saber que te vas, no lo sé.... duele.

Verga, ¿Qué habré hecho yo para que éste carajito me quisiera así cómo lo hace? Si yo soy una mardita plaste' mierda malasangre

—Estaré de vuelta lo más pronto posible ¿Okay?

Asintió. Sabía que no iba a pararme bolas porque no iba a entender pero de igual forma se lo dije.

—Te amo, Dylan.

Entonces como si de un secreto impactante se tratara, me miró con los ojos muy abiertos.

—Tu.... ¿Me amas?

A LA MOLLEJA ME ENTENDIÓ

YA VA

KHE

AWENA SAL.

DE TANTAS VAINAS QUE DIGO EN ESPAÑOL, ÉL ENTIENDE ES ESA.

—Yo... ¿Co... Cómo lo entendiste?

Entonces sus mejillas se pusieron coloradas. Como si de todo el tiempo que llevamos conociendonos, le diera pena conmigo por primera vez.

—Tyler me dio un curso intensivo de español mientras estuvimos en México —explicó mientras rascaba su nuca— no soy un experto hablando español pero si puedo llegar a entender algunas cosas... Y en estos momentos estoy agradecido que me haya obligado a tomarlo, porque sólo de esta manera puedo escucharte decir, por primera vez... que me amas, al igual que io Te Amo.

Me besó.

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Hola chicas, aquí su bella escritora.

Perdón por La tardanza, la yocsy está enfermita y la luz del teléfono me molesta arrechamente.

Whatever, aquí les dejo éste cap con esa sorpresota que todo el mundo en V.G.A se moría por leer.

¡DYLICIA DIJO TE AMO!

Ahora lo que viene es bueno mis chamitas.

No se pierdan el próximo capítulo de Venezuelan Girl Almighty.

A la molleja. Creo que este es el capítulo más largo de la novela con 4379 palabras

La yocsy se despideee