Girl Next Door —Copperpot

Alicia

Marica wa llorar, a la verga señor ¿Porqué yo tengo el novio más bello y cabrón de todos?

Ya va, perense ahí, el más cabrón es el novio de la Teresa, veda.

Ahí estaba, ofreciendome una sonrisa espectacular mientras sostenía mi mano contra su pecho y sus ojos me miraban como si fuera lo más preciado de su vida. A la verga, la ultima vez que alguien me había mirado así había sido... había sido mi papá.

—Un aplauso por favor a la Bella y la Bestia aquí presente —pidió aka mi bello Shawn a lo que todos le hicieron caso— familiares y amigos más cercanos, ha llegado la hora del brindis, les invito a todos a tomar asiento y a su real majestad, por favor acompañenla al suyo.

Loca de pana que aún no supero que el Chon me trate como una Queen.

Dylan me ofreció su brazo para guiarme y yo lo acepté encantada. Yo estaba creída que nos íbamos a sentar en la mesa más cercana al escenario, pues no, por allá venían Colton y Hoech con un par de tronos.

Me incline un poco a Dylan tratando de disimular.

—A la verga, de pana que te luciste con todo esto, cariño.

No tenía que mirarlo a la cara para saber que había sonreído, lo conocía tan bien.

—Nada es suficiente Princesa, disculpa a este pobre idiota si no puede bajarte la Luna ya que, por muy romántico que sería, es totalmente imposible y tras pasar un par de horas ibas a ladillarte de jugar con ella.

Marico me reí horrible oyó.

—Te amo.

Me ofreció una tierna sonrisa y gracias a la maldita luz no pude ver muy bien pero supe que se había sonrojado.

Al llegar a los tronos Colton me ofreció una sonrisa y yo se la devolví porque ajá, no lo conocía de nada pero de nada está de más ser panita. Dylan ocupó el puesto de al lado y entrelazó nuestros dedos.

Los meseros se acercaron con sus bandejas y en éstas traían listas las copas pero uno en particular se acercó con un par parecidas a un cáliz, tipo la copa mortal de ShadowHunters, dandola pues, admito que me encantó. Dylan y yo agradecimos con un asentimiento y el pana se retiró.

—Bien —Shawn habló por el micrófono— ya que todos tenemos una copa en la mano podemos iniciar, el micrófono está libre para el que quiera empezar.

La primera en subir había sido mami.

—Ante todo muy buenas noches, bebé, desde que llegaste al mundo has sido una bendición —me miró desde el escenario— te has convertido dia a día en una mujer fuerte e independiente, talentosa y coño, desde chiquitita has sido un terremoto al igual que tu hermana y por culpa de ustedes con 33 años ya tengo inicios de canas fluorescentes —si ajá, 33 pero en años perro— pero equis. Bebé Mírate, ya tienes dieciocho, recuerdo que cuando eras una triponcita soñabas con tener esta edad, aunque soñabas más bien con tener esta edad para que no tuvieras que pedirme permiso pero enterese carajita, usted en el fondo de mi corazón... —marica se le quebró la voz— siempre serás mi carajita sometida. Ojalá Luis Fernando estuviera aquí para verte hecha toda una mujer y con tremendo macho, claro, luego de amenazar a Dylan con dejarlo como un colador si llega a hacerte daño, estoy segura que le pediría que te cuidara tanto como él lo hubiese hecho. Papi estaría orgulloso de ti, lo está bebé. Feliz cumpleaños.

Mami bajó tratando de limpiarse las lágrimas. Admito que ya tenía un nudo hecho en la garganta, hoy más que nunca me hacía falta papi.

Vi que el Jorjius miró el micrófono al igual que mi tía, se miraron. Marica esos pegaron la carrera al escenario para ver quien agarraba primero el micrófono haciendo reír a esta gente como si es que ellos estuviesen haciendo eso de broma. Pasando pena alv.

Al final luego de meterle un empujón a mi tía que de verga no fue a dar de jeta fuera del escenario, ganó el Jorjius. Listo, ya voy a pasar pena en esta mierda.

—Marica bueno, ¿Por dónde empezar? —Acomodó su corbatin, de pana que no sé de qué se disfrazó ese menor, si no era Chaplin o Cantinflas no se qué coño era— Lily es una chama que alv, es ella en la vida, no se deja joder por nadie, es inteligente aunque a veces me haga dudar de eso —todo el mundo se rió. Ese mmaguevo— Brode, yo les seré sincero, desde que esa carajita nació yo la he querido como si fuese mía y desde que Luis Fernando, aka mi fancy cuñis nos dejó, he tratado de ser otra figura paterna tanto en su vida como en la de aquella carajita que está allá, si, esa que no se puede esperar a que uno hable para empezar a jartarse las salchichitas de banquete —ay loco, se pasó— bueno equis, hace más de diez años me mudé a Estados Unidos por una gran oportunidad de trabajo que me ofrecieron y pues, ¿Qué más? Me tocó irme pero nunca dejé de ver por mis carajitas... porque eso es lo que mi convi Luifer hubiese querido... ya va marico que se me metió un beta en el ojo —el gafo estaba llorando— y bueno ajá, loco ver que esta coñoemadre ya está grande me pone nostálgico pues, porque parece como si hubiese sido ayer que en el Kinder le cayó a coñazos a la maestra porque le picó el ojo a su tio todo bello y precioso aka yo —todo el mundo se echó a reír— y mirenla ahora, casi es bachiller, con dieciocho y de paso actriz sin mencionar sendo macho que se encaletó, por cierto, Dylan hijo, te amo —le lanzó un beso y Dylan lo atrapó. Maricos los dos— estoy orgulloso Lily, todos lo estamos.

—¡Ya roba Show, bajate de esa vaina que vengo yo!

—Ajá, cállate pues, envidiosa —Le gritó a mi tia, ay no— A la verga, se me olvidó lo que iba a decir, ¡Esto es culpa tuya, mardita! Equis, lo dejo hasta aquí porque la bicha de Maythe hizo que se me olvidara. Posdata: brode, ¿Verdad que mi hijo se lució con ésta rumba? Yo siendo ustedes shippeo Dylicia, no sé, sólo es una sugerencia. Jorjius fuera

Me eché a reír.

—Él nunca cambiará —Dylan vio cómo mi tío le pasó el micrófono a mi tía en plan de «Agarra tu mierda, nojoda» nos echamos a reír horriblemente.

Negué para mi misma hasta que por casualidades de la vida vi a Hoech y me di cuenta de una vaina.

Volví a llamar la atención de Dylan y éste me hizo una seña de «qlq»

—Echame un cuento, ya que tu y yo somos la Bella y la Bestia... —él asintió— ¿Me parece a mi o Hoech está disfrazado de Gastón?

Dylan volvió su vista a Hoech, en efecto, iba de Gastón. Sus mejillas de a poco empezaron a teñirse de rojo gracias a que él estaba claro que lo iba a empezar a joder.

—No empieces, no fui yo quien le dijo que se viniera así...

Me eché a reír.

—¿Sabes qué es lo más arrecho? Que yo estoy clara que uno es casualidad que me digas Beauty, dos es coincidencia que me hagas una rumba con estilo Disney... pero marico, ¿Hoech disfrazado de Gastón? ¿De pana? O eso ya es un patrón o el universo me está diciendo algo —se echó a reír— de paso estoy clara que en este lado de la historia el marico de Gastón no le echará los perros a Bella

Dylan rodó los ojos para si mismo.

—Sterek no existe... —lo miré— Newtmas tampoco.

—A la verga, ¿Viste cómo eres tu, sh?

Sonrió y apretó un poco mi mano con la suya antes de dejar un suave beso en ella.

—Está bien, ¿Quieres la certeza de que alguno de los shipps es real? —sostuvo mi mentón con su dedo índice— pues Dylicia es más real que mis ganas de llenarte completamente, de los pies a la cabeza de besos.

Escuchamos un 'Aww' y ambos volteamos hacia los demás. Shawn habló intentando no reír.

—Su Majestad, eh... —aclaró su garganta— aún trae encima el micrófono de manos libres.

—Marico en pocas palabras todos escuchamos el full queso que le tienes a mi hermana —Teresa se cagó de la risa— que marvada soy.

—Dirás tu mija, yo lo único que escuché es que ¡Dylicia es más real que el queso que le tiene mi hijo a la carajita aquella! —ese Jorjius es un marico— pero obvio, yo ya lo sabía, yo todo lo sé, ustedes son los sorprendidos, no yo.

—Ajá, callense pues que voy a hablar yo —No si, mi tía es arrecha— quisiera agradecer a todos los presentes por haber asistido al evento organizado por el pretendiente de mi sobrina con el motivo de sus dieciocho años de vida. Alicia, cariño desde que eras así de pequeña recuerdo que siempre disfrutabas que te sacara a pasear por el parque o te llevara al circo...

—¡Habla bien nojoda, que tu eres más tierrua que yo! —ese es un coñoemadre— y kike parque y circo. ¿Estás hablando de la plaza esa de la casa de Titi y la casa del Chino cuando compró aquél mono horroroso ese?

—Mamate tu peso en hectáreas de webo Jorge Simón —rodó los ojos— aja bueno, te gustaba que te llevara poray, para mi trabajo a echar varilla y a que mis panas doctores te brindaran porque tu estabas bien clara que de chiquita eras adorable y te aprovechabas de eso. Al pasar de los años dejaste de acompañarme porque te daba ladilla salir de la casa, creciste chama. Siempre tuviste en mente que nadie podía meterse con ustedes porque yo empezaba a repartir coñazo y eso me conmovia, confiabas en mí, confiabas en que nada malo iba a pasarte mientras yo estuviera a tu lado —a excepción de aquella vez que me dejó botada en el superLider— Dios no me ha dado aún un macho para tener mis hijos pero no importa, ya bastante que tengo contigo y la Teresa para calarme a otro escuincle pero ajá, las quiero very very much. Pilas, he dicho que no tengo macho no que no quiero uno —le picó el ojo a uno de producción, no si— Te adoro mucho mi Lily, Feliz cumpleaños.

Le sonreí.

Algunos habían pasado a decir algunas palabras, incluso Froy subió y todos estallaron en carcajadas cuando contó cómo nos conocimos y lo celoso que había estado Dylan el día que me invitó a salir. Subió Jeff, las chicas, las comadres hasta que fue el turno de Teresa que esa estaba disfrutando haciéndome pasar pena.

Marvada.

—Y ajá pues, chamo yo me acuerdo cuando Alicia y yo estábamos en la fiesta de Navidad de los Harries, cuando Dylan la besó por primera vez, dude eso fue brutal y más aún la cizaña que le metimos a Dylan —se echó a reír— cuando llegó a la casa veía colores y corazoncitos de tremenda chupada de muelas que le diste Dydy... —acaricie mis cienes— digame cuando...

—Suficiente, cariño... —Tommy le quitó el micrófono al ver mis mejillas rojas. Me hizo un guiño— bien, les hablaré de una de las personas más importantes para mí, MI mejor amiga —Verga, lo único que le faltó fue señalar a Froy para que agarrara la indirecta— desde que la conocí he tenido la certeza de que está mal de la cabeza, en serio, pero la adoro. Es una de las personas más divertidas con las que he tratado y me he abierto en tanto tiempo, conoce todo de mí, hasta el más insignificante detalle y yo lo hago de ella. Sé que odia que le toquen la panza cuando tiene el periodo, no le gusta que le toquen o jueguen con su cabello, ama con locura las Oreos, odia que Dylan se haga el despistado a la hora de lavar los trastes —todos rieron al ver que Dylan se hizo el loco— también que le encanta cuando Dylan intenta cocinarle airepas... —¿Ustedes creían que Aruepa era la peor forma de decirle a la arepa? Vean— y si algo compartimos a tal punto de volverse obsesión es Pretty Little Liars. Alicia es de esas personas que podrían escucharte por horas con mucha atención, puedes desahogarte con ella, te aconseja y te reprende, pega fuerte eh —reí— agradezco demasiado haber encontrado a unas personas tan maravillosas como lo son ella y su hermana, mi preciosa chica. Las quiero a las dos, son mi adoración, feliz cumpleaños cono de tránsito.

Tan bonito que le había quedado y viene a cagarla de último, nawebona.

—Bien, creo que es mi turno —Dylan soltó mi mano y se levantó frente a mí para poder mirarme, no necesitaba ir hacia el escenario por el micrófono, ya ocupaba el manos libres así que no hizo más que acomodarlo— no soy muy bueno dando discursos ni nada que se le parezca pero en algo en lo que sí soy bueno es hablar de mi chica. Recuerdo cuando la vi por primera vez. Yo entraba apresuradamente al salón del evento gracias a que me había retrasado vistiéndome en casa y miraba por todos lados en busca de John o James, mis guardaespaldas porque si alguna fan llegaba a verme a la deriva completamente solo, terminaría con el resto sobre mí. Fue entonces cuando la vi, estaba observando uno de los brazaletes que daban en la entreda y en sus labios había una preciosa sonrisa, me preguntaba si quizás una parte de ella se debía a mí y todo el cast porque... demonios, era tan preciosa. Su rostro estaba desnudo y su cabello... bueno, Alicia siempre ha sido amante del cabello despeinado —ese mmaguebo— jamás había visto a una chica tan Bonita como ella.

»Estaba demasiado distraida mirando ansiosamente el escenario que ni me notó que estaba en el pasillo junto a ella —KHE— no paraba de mirarla en todo el panel, quería hablarle pero no sabía cómo, entonces fue ahí cuando la oportunidad me cayó del cielo... o más bien atravesó las cortinas del Backstage con gritos al pobre Henry. Thomas quedó encantado con Tessa, no le importaba si Kaya había faltado o no... lo siento Kaya —rió— la invitó a quedarse pero Tessa no sabía hablar inglés, me llevé una gran sorpresa al ver que había llamado a la chica bonita para que le tradujera, literalmente estaba que gritaba por dentro cuando ambas aceptaron quedarse. En el Backstage recuerdo que se acercó a decirme que irían por un baño y que ya regresaban, parecía el propio idiota, no podía pronunciar palabra y al ver que ella se iba hice lo primero que mis impulsos decidieron, fue la primera vez que tomé esta mano —tomó mi mano y acarició el dorso— ella me miró y lo primero que se me pasó por la cabeza fue preguntar su nombre para justificar que había tomado su mano. Alicia, habían pronunciado sus labios, ese nombre no había salido de mi cabeza en toda la noche, me había dejado completamente flechado.

»Quisiera contarles toda la historia, de verdad, pero si lo hiciera de igual manera quedarían hambrientos por el final, y todas las historias lo tienen menos la mia y de Alicia. Estoy malditamente enamorado de esta chica, en verdad, ¿Todas las Venezolanas son Asi de preciosas? Porque de ser así, ¿Qué he estado haciendo todos estos dieciocho años que no había conseguido a una venezolana solo para mí? Chicos, ahora que la tengo no pienso dejarla ir, la necesito como mis pulmones necesitan el aire. Ella es lo que le da esencia a mi vida, razón a mi cabeza y latidos desenfrenados a mi corazón. Realmente agradezco a todo lo bueno que éstas dos se hayan colado en la Comic-Con aquel dia —se me fueron los colores y él al darse cuenta se echó a reír— si, sé lo que hicieron tu y Tessa par de pillas, lo sé todo.

Busqué al Jorjius con la mirada y movi mis labios.

Esto es culpa tuya coñoetumadre

Se empezó a reír.

—Se siente tan increíble conocer a alguien quien te acepte tal como eres, tus problemas, tus errores, tus cicatrices y aunandole a ello todo este mundo loco de fama y rumores. Se siente tan increíble ver como permanece ahí a tu lado apoyandote en las peores y siendo tu animadora número uno cada vez que cumples otro logro. Pero con Alicia siento más que eso, no puedo describir con exactitud cómo es y eso me fascina, cada día es una nueva aventura que muero por descubrir. Amo a esta chica como no tienen una idea y brindo por ella... —levantó su cáliz indicándole a los demás a levantar las copas— por todos y cada uno de los años de su vida y por los que vendrán, brindo por su felicidad eterna... brindo por nuestro amor, porque él también sea eterno. Salud.

Levanté mi cáliz al igual que los demás. Alv, todo el mundo dándome ganas de llorar pero él es el único que logró hacerlo.

Bebí del champagne y disimuladamente lo volví a escupir en el cáliz porque a mi nunca me había gustado beber esa vaina, aska.

La fiesta inició y todo el mundo vino a felicitarme. Marica quería llorar, estaba abrazando a Shawn y de paso el coño e madre olía riquísimo.

—Okay, okay amigo —Dylan palmeó su hombro— vas a hacer que mi novia se desmaye.

Shawn se echó a reír.

—Me han hablado mucho de ti Alicia, ¿Venezolana?

Asenti debido a que mi cerebro no podía articular una palabra coherente y menos sucia para que mis labios las pronunciaran.

—Genial, esto es increíble, Sabrina va a llevarse de maravillas contigo —frunci el ceño.

—Oh, amigo no le he hablado de Sabrina.

—Ah, bien no hay problema —revolvió su cabello— Alicia, Sabrina en mi novia.

—Ya va ¿Tu qué? —nawebona, lo único que pude decir desde que el muchacho me dijo Hola.

Marica me voy a morir, aiuda.

Shawn tiene novia.

Ambos chicos se echaron a reír.

—Mi novia.

Alv, clavame un cuchillo mejor mardito.

Traté de no poner la cara de tragedia que sentía.

—Alicia va a colapsar —Dylan se echó a reír y para tratar de reconfortarme besó mi frente— cariño, la novia de Shawn es venezolana y es una buena chica, te va a caer bien.

—Venezo... ya va, ¿Sabrina dijiste? —Shawn asintió— ¿Sabrina Durvelle? ¿La Miss International?

—Así es, esa es mi chica.

—Marico khe, alv, te la comiste no si, esa caraja es alta fancy, dandola horriblemente.

Shawn y Dylan compartieron una mirada y cinco segundos después se echaron a reír. No entendí pues.

—Son tal para cual —se burlaron.

No sí.

—Ajá, no sé, digo yo pana —hice una seña despreocupada— ahora que tienes una novia venezolana me imagino yo que esta vez darás fechas para Latinoamérica ¿Verdad Mister no doy fechas para Latinoamérica? Porque a ti lo que te gusta es puro Gringolandia, Europa y Chinolandia.

—Si, puede que sí. Sabrina ha estado convenciendome asi que lo más seguro es que si

—A la verga, es que te vas a antojar cuando yo estoy en Estados Unidos ¿Verdad? Coño e la madre Shawn pero contigo yo nunca pego una.

Puso los ojos en blanco.

—Te pareces tanto a Sabrina...

—De bola mrc, quizás se deba a que ambas somos bien fancy y arrechas.

—No, porque no las entiendo a ninguna de las dos.

No si.

Estaba por preguntar cómo fue que se conocieron y del porqué yo no me había enterado de ése beta cuando por allá llegó el Jorjius.

—Marica ven acá que te voy a presentar a alto pana mío —Dios, no sé ustedes pero este man cada vez se está volviendo más malandro, no sé— este es mi be efe efe de toda la vida, emigró de Venezuela no hace mucho, no sé si te acuerdas de él, yo me lo llevaba a la casa a ver el juego con tus tíos.

Nawebona de macho, marica era demasiado bello en la vida, ¿Jorjius who? A este sí provocaba pedirle la bendición, de paso creo que venía disfrazado del genio de Aladdin.

Y el Jorjius verga, o es Chaplin o Cantinflas alguna vaina de esas.

—¿Cómo se va a acordar si la última vez que la vi tenía al rededor de seis años? —me sonrió y me extendió la mano. Marica siento un sismo, este man huele riquísimo oyó— Jason Neville.

Le sonreí.

—Mucho gusto —Alicia, Dylan es tu novio y lo amas, estás encabronada, el Sebin es peligroso y todo lo ve...— y no, lástima no lo recuerdo.

Jason hizo un gesto restándose importancia. Marica parecía gente seria y tranquila... demasiado tranquilo para ser el be efe efe del marico este, aunque cuando nosotras llegamos a gringoland él era burda de quietecito, ahora es senda loca desatada.

—Pana él es mi hijo adoptivo, te lo presento —jaló a Dylan del brazo— su nombre es Dylan y es el jevito de Alicia.

Dylan le estrechó la mano.

—Ya va, yo a ti te conozco —achinó los ojos— ¿Eres actor, verdad? En algún lado debo haberte visto.

—Pues...

—Maze Runner, Teen Wolf, The Internship, The First Time donde sale la chiruza esa de la ex de él —lo interrumpió— ay no mrc le tengo una arrechera a esa desgraciada que no juega carrito.

Marica no pude evitar soltar una risa de marrano, yo amo al Jorjius.

—Verga, ¿Qué te habrá hecho la pobre carajita? Porque tu te picas con todo mrc —le respondió— Estás igualito a la mujer mía, todo el tiempo con una arrechera

Njd, el mardito era casado.

But eso no me importa jejeje yo tengo mi macho.

—Quiso interferir en mi Shipp mrc y no pues, no me parece.

—Mandala a robar entonces —Coño JAJAJAJAJAJAJA. Jason sacó su teléfono— ya va, deja que le pregunte aquí a la hija mía a ver si el que era culito de ella tiene un Malandro's Squad aquí en Estados Unidos porque uno nunca sabe.

Empezó a teclear algo en el teléfono, ay no, ya les estoy viendo el parecido.

—Ve, dame razón de Andreina y las muchachas —le dijo el Jorjius.

—Bueno, Andreina allá está en la casa, le metí una coba de que venía al consultorio porque ajá marico después me hace pasar pena frente a esta gente con lo lambucia que es, ay no —me empecé a reír, ése es un coñoemadre— y bueno, las muchachas están bien, la Sofía anda un poquito Sad porque dejó a Lucía la carajita amiga de ella por allá botada en Venezuela pero ajá, yo sé cómo es esa carajita, es más pegoste que el coño, le voy que ya para la próxima semana está instalada en la casa —rodó los ojos para sí mismo— ah, y de paso ¿Tu te acuerdas que yo a ti te dije que a Sofía le gustaba el carajito este...?

—¡Andres! Marico también los shippeo, basta.

—Pues arrechate, Andres por fin le paró bola y como la carajita no es salada... aquí estamos —intentó no reír— y bueno, Laura con una buena curda y un culito es felíz, tu sabes cómo es todo, que viva la puteria y el zorrismo

No si, este debe ser alto Lacra como papá pero tiene pinta de que no puedes contarle un brollo.

—¿No le han dicho que tiene cierto parecido con Ryan Gosling? —le pregunté, alv, es que era igualito.

—¿Qué hablas? Yo soy más bello que ése carajo chica, tu a mi no me vas a venir con esa.

No si, arrecho pues.

Miré al Jorjius y les juro, no me aguanté.

—Marico de pana que te veo y te sigo mirando pero aún no descubro de qué coño e la madre te disfrazate —acaricie mis cienes— pareces no sé, al webo enmascarado, a Cantinflas, a Mr Bean, a Chaplin o a los testigos de Jehová, nada más te falta la biblia, el maletín y los folletos de autoayuda.

Él entornó la mirada y Jason por otra parte se echó a reír.

—Esta carajita es alta coñoemadre, igualita a Maythe.

No si.

—Para tu información mardita, yo vengo disfrazado del tipo más arrecho que ha tenido toda la industria.

—¿El Chacalito?

Yo amo Disney, pero lo estoy jodiendo.

—¿Qué...? Pero si.... —suspiró— Soy es Walt Disney o sea, ¿Qué hablas? El más arrecho de esta mierda.

NO SI. ES ÉL EN BANDERA

—¿Tu eres marico? —Jason lo miró de manera incrédula.

—Verga, al fin alguien a parte de toda América que comparte el mismo pensamiento —hice chocalas con él.

Marica ahí estuvimos un buen rato hablando con Jason, era demasiado pana en la vida pero no, marica esta vaina me dio fue miedo oyó, igualito de intenso que el Jorjius.

Dy llamó mi atención.

—Ven conmigo, quiero presentarte a alguien que según Tessa te encantará conocer —susurró en mi oído.

Su aliento estaba tibio y les juro que no pude evitar mirar sus labios que estaban ligeramente rosados. Me sonrió.

—¿Qué piensas, Bonita?

Me acerqué a su oído para asegurarme que nadie pudiese escucharnos, menos mal que se había quitado el micrófono.

—Tengo unas ganas brutales de besarte así tu sabes, tu y yo solitos sin toda esta gente —acaricie los cabellos de su nuca mientras le hablaba al oído— como bien han dicho todos ustedes, soy su real majestad. Haz lo que te he ordenado.

Pude admirar la sonrisa en sus labios.

—Bien su alteza, ¿Qué propone?

Sonreí de manera cómplice

—Deberíamos estrenar tu camerino

Dy me devolvió la sonrisa.

(...)

—Er webo e judas nojoda —gruñi.

—Vamos Princesa, solo aguanta por tres dias y medio y se te pasará —se sentó en la otra silla junto a la peinadora.

Su cabello estaba revuelto y sus labios ligeramente hinchados sin mencionar las marcas de labial por toda su cara y sendo chupón que le había dejado bajo la camisa, mentira, tampoco así, era chiquito.

—¿Te parece poco, nojoda? —suspire— en mala hora me vino la mmagueva regla, viva Trump

Dylan frunció el ceño.

—¿Qué hay de Chávez y Maduro?

—Mijo, como ya eso no es asunto mio sino de los chavistas de mi país que ellos se mortifiquen porque ahora el que va a llevar mis maldiciones que jode va a ser Trump.

Dylan se echó a reír. No entendía cómo podía estar así de lo más normal si ése estaba igual de quesuo que yo, alv, ¿Ven de lo que les hablo cuando digo que en mi cumpleaños siempre me pasa una vaina? Dylan y yo ibamos a hacer un rapidito ahí todo calidoso en su camerino y no se pudo porque me vino la tipica hemorragia mensual de la qk, que arrechera. No y lo peor es que si podemos tirar así e incluso sin condón y no tener riesgo de embarazo pero ajá marica que asco pues, no.

Dylan tomó mis manos y dejó un pequeño beso en ellas antes de obsequiarme una de esas tiernas miradas que sólo él sabía dar. Tiró de mi silla gracias a que esa vaina tenia rueditas y dejó su rostro a escasos centímetros del mío.

—Cariño, no sólo tu quiere volver a hacerlo créeme, te necesito, necesito hacerte mía preciosa —susurró sobre mis labios— pero me temo que tendremos que esperar un poco, yo... puedo esperar, ¿Qué son un par de días?

—Tres días, no dos.

—Quería ser positivo, Alicia Michelle.

Reprimi una sonrisa.

—Bien —Bufe, y él me miró para que continuara. Rodé los ojos— puedo esperar, es sólo... —solté un suspiro, irriada— ¿Sabes lo bien que se siente... cada vez que me acaricias como lo haces? ¿Lo que me encanta cada vez que me das tanto cariño de esa manera? Tipo Morrocoy en patines, coño. Sentir tus manos tratarme como lo más preciado para ti, tus besos quemándome la piel porque sé que jamás tendré suficiente de ellos porque, Dylan, jamás podría cansarme de ellos, es como un vicio en el que me he visto hundida. Tu eres una obsesión para mí cariño, todo tu eres perfecto, de pana que aún no sé cómo pudimos terminar juntos.

Sonrió tiernamente y no pudo resistir dejar un corto beso sobre mis labios.

—Te amo, Alicia.

Acaricie su rostro y con mi pulgar intenté quitar las marcas de labial que le había dejado porque o sino le iban a echar bastante vaina. Mis ojos se distrajeron en sus cejas pobladas, descendieron por sus ojos claros y sus preciosas pestañas de niño que tanto amaba, su nariz respingona y pequeña, sus labios rosados y tan cuchis, sus mejillas de Chips Ahoy que me encantaban, verga marica, todos esos lunares le quedaban demasiado bien.

—Mi Dylan...

—¿Si...?

—Sé que tuviste un coñazo de mamaguebas que te dijeron lo contrario pero eso es porque no han conocido al verdadero tu y estamos claros que esas perras hasta el día de hoy se arrepienten de haber dicho lo que dijeron —acaricie su cabello mientras una mano descansaba sobre su mejilla— Dylan, eres hermoso... ¿Okay? Te lo juro, jamás había conocido a alguien tan increíble como lo es Dylan O'Brien, como lo eres tu, cariño. Disney no pudo darme el príncipe que tanto soñaba pero algo si te aseguro: Lisa O'Brien recompensó todas esas decepciones creándome un Dylan O'Brien.

Sus ojos mantuvieron la mirada puesta en mí pero su rostro no expresaba más que ternura, como si estuviese ido, no estaba mirándome a mi, estaba teniendo una lucha mental consigo mismo.

—Sabía que no me había equivocado contigo.

—¿Qué quieres decir con eso?

Dylan suspiró.

—¿Recuerdas anoche cuando me encontraste en mi sala de entrenamiento hablando por teléfono con Britt?-—asenti— Pues... esa no había sido la primera vez que ha llamado, han sido varias ya.

Cuénteme mijo para anotarlas porque se las tengo toditas contadas y la cuenta se va a pagar en coñazos.

—¿Qué es lo que le pasa a la mmagueva esa pues? ¿No anda con el chamo aquel?

Dylan asintió aunque pude ver cómo los musculos de su mandíbula se tensaban por unos segundos.

—Lo está... es sólo, es sólo que ya no está sintiendo lo mismo por Scott, ¿Irónico verdad? Además ha visto cómo mis Cuties te adoran, de verdad, ha visto las publicaciones que he hecho de ti y todo lo que te he hecho desde que te pedí que fueras mi novia en el Madison Square Garden, dice que jamás hice algo así por ella o algo que se le pareciera.

Rodé los ojos.

—Bebé, sólo es envidia, no tienes por qué...

—Lo cierto del caso es que ella tiene razón. Es decir, desde que empecé a salir con ella en esos dos años me limitaba a hacerle detalles pequeños pero que a ella le gustaran: le regalaba flores, dulces, peluches e incluso intenté cocinar para ella en una de las ocasiones que se quedó en casa —rió pero su risa no parecía verdadera— en cambio a ti: viajé a New York para comprarte un presente que yo mismo mandé a hacer, te he llevado a celebrar navidad y año nuevo en casa de mis padres, te besé a las 12 en Times Square, viajé a otro país el cual ni conocía sólo porque no contestabas mis mensajes, mandé a un grupo de trabajadores, recreadores e incluso me vestí de payaso para ir a animar a los niños en tu trabajo comunitario, hice que Ed Sheeran cantara para ti, te pedí que fueras mi novia en un juego de los Knicks cantando una canción en español que estuve aprendiendo por Skype con mamá durante tres semanas y aunandole a ello soy un maldito timido, jamás en mi vida había cantado para tantas personas, ni siquiera estando en Slow Kids At Play... pero aún así lo hice, porque todo aquello era para ti. Organice una enorme fiesta de cumpleaños y traje más sorpresas que unos premios VMA's, volví a cantar para ti en español...

—Cariño, a mí no me importa todo aquello... o sea, ajá, no puedo negar que me encantan tus sorpresas porque las adoro pero si supieras que lo que más me hace felíz es tenerte a ti, a mi hijo y a mi en la cama con un coñazo de cucherias viendo cualquier serie en Netflix. No necesito cosas tan arrechisimas, te necesito a ti.

Acarició mi mejilla.

—¿Aún no lo has entendido verdad?

—¿Entender qué?

—Que cuando Britt y yo saliamos éramos más internos, a ninguno de los dos le gustaba volverlo publico en especial a mi, no quería que las Cuties empezaran a molestarla o a insultarla —miró mis manos por un buen rato intentando reprimir una sonrisa— pero a comparación contigo... no lo sé, me dan ganas de gritarlo a los cuatro vientos Princesa, me dan ganas de que todos y cada uno de los individuos sepan que estoy totalmente, completamente y ridículamente enamorado de ti.

No llores menor, te vas a joder el maquillaje, no llores.

—Verga, ¿Porqué tu eres así sh? Que molleja, me vai a reventar la chequera de labias.

Se echó a reír.

—Andando, hay alguien que quiere conocerte —se incorporó en su asiento y me ayudó a levantarme.

—¿Quién será ésta vez? Seguramente es Obama, ese es al único que me falta conocer nawebona.

Ambos salimos de su camerino.

—No —Sonrió traviesamente— es una persona que has querido conocer desde que tenías ocho años.

—¿Niall Horan?

—Casi, curioso... en parte tiene que ver con él —rió— digamos que siempre ha sido su cantante favorito.

Marica de verga no me orine.

No... él no me estará hablando de quien yo creo...

—¿Amor? Andando, Justin espera.

No me aguanté

—Alv, cOÑO E TU MADRE, ¡¿DE DÓNDE TU CONOCES A JUSTIN BIEBER?!

Se encogió de hombros.

—Premiere de Spider man y un concierto al que fui obligado por Holly a asistir, Starbucks, Donkin Donuts...

—No si, bien bello pues, el que se consigue a Justin Bieber por todos lados, conoces a más gente que la caraja esa que ha tenido más fotos con un coñazo de famosos.

Alv marica esa tipa daba miedo, pareciera que les hubiera hecho un amarre a todo el mundo, uy sape gato. La veo con Dylan y lo que le puedo es echar agua con la manguera.

(...)

Regresamos a la fiesta tomados de la mano y hablando animadamente de los betas estúpidos que hicieron mientras decoraban, alv, kike que pegaron el culo a Tyler en una silla de madera con pegamento industrial y lo intentaron despegar con todo pero ney mrc, tuvieron que cortarle los pantalones y que se fuera así mismo a su casa pero conociendolo ese no le paraba bola a nada, Ty era demasiado antiparabolico en la vida. Dylan empezó a buscar a Justin con la mirada hasta que lo consiguió en la mesa de dulces con una chama ahí.

—¡Jus! ¿Cómo estás Bro? —hicieron ese típico saludo que toda la población masculina conocía como por instinto.

—¡Dyl! Todo bien, todo bien —le sonrió. Entonces me miró... marica Justin me estaba mirando— ¿Ésta es tu chica? Es una belleza —marica Justin me estaba abrazando....— es todo un placer, Justin.

Balbucee como la propia marica mientras asentía, alv Dylan un día de estos va a hacer que me muera de un ataque de fan.

—¿Recuerdas que te dije que Lily era fan?

Justin se rió.

—Ah ya, que alivio —Sonrió apenado— pensé que traía algo en la cara por como me miraba.

Si traes algo papi, belleza

—Chamo es Justin Bieber... —murmure, broder, les juro que no hallo manera de no pegar un sendo grito— loco es Justin Bieber menor.

Dylan y Justin se echaron a reír.

—Cariño respira, no es un espejismo —Dy me abrazó desde atrás lo más probable para no caerme de un sólo coñazo porque de pana, siento que se me bajó la tensión— ¿Verdad, Jus?

Justin negó con la cabeza.

—Feliz cumpleaños por cierto —volvió a hablarme— Dy ha tenido que llevar mi regalo a su departamento, no quería que se estropeara.

Ya va... JusTIN BIEBER ME DIO UN REGALO?

Ay nojoda, listo, aquí llegué yo señores.

—¿Tu... T...Tu regalo?

—Si, descuida te va a encantar. Una personita me ha ayudado a elegirlo

—Oh, ¿Dónde está Daniela, por cierto? —preguntó mi novio.

Justin señaló la mesa se dulces que, yo estoy clara que voy a mandar tanto a las tres comadres como a mis chamas a recolectarme de toda vaina en una bolsita negra para jartar mañana en la mañana. En la mesa había una caraja jartando con otra chama, ¿Lo mejor? Tenían una bolsita. Listo, esta es mi gente.

—¡Oye Dan! —Justin la llamó y la chama volteó junto a la otra. Marica esas dos a penas nos vieron a Dylan y a mi de verga no se les salen los ojos— ven aquí linda, Val tu igual.

Las chamas se acercaron así emocionadisimas, tu sábes.

—Marica, ¿Estoy viendo a quienes yo creo que veo? —habló una tocandole el brazo a la otra.

La otra chama trató de articular palabras. Ya va, dijo marica.

¡Marica esta caraja dijo marica!

—¡Mayor, son Dylicia! —chilló— listo, wa iorar, el malayo de Ian y el malayo de Adam no me lo van a creer, jskjskjsk triunfó el mal, estoy frente a uno de mis shipps favoritos, ¿Qué hablas?

—Maricas, no me digan que ustedes también son venezolanas... —las carajas asintieron— no si me encantó, soy Alicia.

—Marica lo sabemos, shippeamos Dylicia —listo, estas ya les cayeron bien al Jorjius y eso que ni lo conocen— yo soy Daniela y ella es mi hermana mayor la Valeria.

—Marica, ¿Ustedes son maracuchas verdad? Admito que me encanta su acento.

—Ay marica gracias, ¿Tu de dónde eres chica?

—Marica yo soy de Coro, pa' ya pa Falcón, ¿No ves lo negra que estoy?

Se echaron a reír.

—Marica, ¿Qué hablas? Más negra andamos nosotras, ve esta vaina —Valeria se apartó un poco el tirante del vestido dejando ver una marca blanca— acordate que allá el sol y el calor es bien pullúo.

—¿Podrían dejar de decir Maruica? —preguntó Justin— Estoy empezando a sentir celos.

Daniela y Valeria se echaron a reír al ver mi cara de negra confundida

—No le pares bola —me dijo la Daniela en español tratando de no reír— el gafo este cree que Marico significa cuchi o lindo.

Marica me reí horrible.

—Coño e su madre mardita sea —me reí— cuando Dylan y yo estabamos en nuestra fase de cuadres me preguntó qué significaba Ladilla y le dije que era decir hermoso.

—No si, trimardita.

—Échale bolas, yo estaba creída que esa vaina se le iba a olvidar, hasta que por mensajes en un intento de ser romántico dijo que era la chica más ladilla que había conocido en su vida.

Marica estas tipas se me van a orinar, Qué hablas.

—Menor, nosotras nos vamos a llevar burda de lo fine.

Chocamos los cinco.

—Si creyeron que yo era panita deberían conocer a la mamarracha de la Teresa, es alta lacra.

Dylan se metió.

—Eh... chicas, perdón por interrumpir su animada conversación pero no sé si aún no lo han notado, Justin y yo no les entendemos un carajo.

Nosotras nos intercambiamos unas miradas cómplices.

Justin tocó el hombro de Dylan.

—Amigo, ¿Porqué siento que vamos a lamentar haberlas presentado?

Daniela le apretó un cachete

—Eso mi Marico, es porque nosotras a partir de ahora vamos a ser el squad más arrecho y se va a llamar «Er Diablo en patines»

No sí.

—Corrijo, empezaremos a lamentarnos desde hoy Dylan.

Estaba por decirle por primera vez a Justin Bieber marico pero la Teresa tuvo que venir a interrumpir.

—Como yo me muevo, no se mueve nadie... —me hizo twerking, ay no señor

—Ve, carajita satánica, esa vaina no es de Dios

Teresa dejó de bailar.

—Más care' tabla no puedes ser Alicia Michelle, le voy a que ni a Dylan le puedes hacer un twerking tan arrechisimo de los que yo hago.

Levanté una ceja.

—Auch —Thomas ya empezó con la cizaña.

—Que molleja, no me la calo.

Ay basta, amo el acento de los maracuchos.

—¿Estás poniendo en duda mi puteria, Teresa Carlota?

—Sólo hay una forma de saberlo.

Asenti.

—Si va, vamos pues —Jale a Dylan del brazo y lo arrastre hasta la pista. Miré quién estaba operando el tablero del Dj y me llevé la sorpresa de que era Froy. Le silbe— ¡Epa, tu! ¡Catire!

Froy desvió la mirada de los controles y se sacó los audífonos antes de sonreirme.

—Hola su majestad, ¿Disfrutando de la fiesta, eh?

—Pásate ahí un micrófono chamo chamito —le pidió la Teresa y Froy se lo acercó para después bajarle a la música llamando la atención de algunos que estaban bien inspirados bailando, entre ellos mi mamá e Ian quienes por cierto venían de Jasmin y Aladdin, que goals— atención gente, hola vale qlq. Chamos aquí se va a resolver una disputa entre la mongolica del cumpleaños y la yocsy —esa mardita tiene pinta de que se estaba empezando a poner curda— todo con una competencia de twerking

—Ajá, pero que yo sepa para hacer twerking primero hay que tener culo y eso fue lo primerito que la patria se les llevó a ti y a tu hermana.

Teresa y yo pusimos los ojos en blanco.

—Mami no ayudes demasiado, nawebona —se quejó— bien, esta vaina se va a prender, Froy, ponte un beta bueno ahí para mover el toto... no, mejor dale chance a mi tia, esto se va a resolver a la antigua del venezolano

Teresa le hizo seña a mi tía quien por cierto estaba disfrazada de Cenicienta y la instaló en el tablero. Bajó del escenario y se ubicó con Thomas junto a Dylan y a mi mientras los demás iban a sentarse para que todos pudieran ver.

—Ajá pana, pero tenemos un problema aquí —señalé mi fancy vestido. Teresa bufó y tiró de mi mano— ¿Adónde vamos?

—Tu sólo camina.

—Ya va, antes que nada, ¿Eres una Guajira?

Teresa puso los ojos en blanco.

—Soy la malaya Pocahontas mardita, y el marico del jevo mio es John Smith.

Igualito parece una Guajira

(…)

Teresa había registrado un coñazo de vestidores ajenos hasta que le traqueleamos una falda de cóctel a Holland y una blusa fancy ahí mientras hacíamos nuestra vaina, ya después íbamos a devolver todo eso.

Si ajá, esto me queda es arrecho y aquella tiene cobre, que se compre otra vaina porque esto ta chiwireado.

Ambas regresamos a la fiesta y mi tía informó que ya íbamos a empezar asi que todos volvieron a sus asientos mientras que Teresa fue a buscar arrastrados a los jevos nuestros, Dylan estaba que se encadenaba a la silla porque él no sabía bailar esa vaina y no quería pasar pena y bueno, el Thomas me imagino que aquella le dijo que le iba a recostar el tostón porque la que terminó siendo arrastrada a la pista, fue ella. Nawebona.

—Lily... sabes que yo... —marica mi carajito tenía pena oyó

Rodé los ojos y me acerqué a su oído.

—Tu de lo único que tienes que preocuparte es que no se te pare ese bowe porque tu eres muy quesuo en la vida. La verdad era que íbamos a hacer todo lo contrario que le había dicho, pobrecito mi bebé.

Teresa y yo nos volvimos a ubicar en el centro de la pista mientras le dábamos la espalda al inglés y al americano.

—¿Listas, marditas? —escuchamos al Jorjius por el micrófono, ay no.

—Marico esta vaina se va a prender, ¿Qué hablas? —A la verga, ¿Jason también?— sueltala ahí chama.

Mí tía puso el himno del Twerking venezolano.

Culiki taka.

Levanté ese culo con Teresa pero todo el mundo se empezó a reír horrible. Nos volteamos y les vimos la cara de tragedia a los dos maricos estos. Estos no van a resistir mucho.

—Alicia no me vayas a hacer sufrir al muchacho por favor, ve que tu eres senda desatada—el Jorjius habló por el micrófono— de Thomas no me preocupo tanto porque Teresa está como el burro de planchar, plano y llevao' por la vida.

Rodé los ojos. Mi tía volvió a poner la canción y nosotras empezamos, wera, la Teresa y yo éramos unas diablas bailando tambor, tu tas loco pero nos ponemos a bailar tambor y los matamos.

Culiki taka ta, culiki taka ti
Culiki taka ta

Moví las caderas bruscamente contra Dylan. Marica hasta que el trabalenguas de esa mierda llegó y ahí fue cuando todo se prendió. Traté de moverme más que la Teresa, de pana y lo estaba logrando que era lo más arrecho.

—Maldita sea... —le oí murmurar a Dylan. Reprimi una carcajada. Me incline un poco hasta sostenerme en mis rodillas sin dejar de moverme aún— Alicia Dios...

Me eché a reír en lo que sentí esa vaina atrás. Levanté la mano indicándole a mi tia que le pusiera pausa a esa mierda.

—Llora pues —le dije a Teresa

—Nojoda chica, eso no se vale —se quejó al verle la erección que se le había formado a Dylan y que el pobrecito trataba de disimular— Él es un mardito quesuo.

Me encogi de hombros.

—Nada marica, les gané borralo.

La gente empezó a aplaudir pero Teresa pidió silencio.

—No no no menor, quiero la revancha pero bien —esta cuando se pone curda es una arrecha— ¡Mami!

Vi que mami rodó los ojos y se paró de la silla, le hizo una seña a Jason, al Jorjius y a mi tía para que bajaran del escenario y se llegaran, mi tía antes de bajar le dijo un beta a Froy y después señaló la computadora. Él asintió.

—Se me va quitando la triponera de aquí pues —pidió del Jorjius corriendonos de la pista mientras se quitaba el saco y se lo lanzaba a la tía de Dylan, tan bella, se había disfrazado de la bella durmiente— aqui se les va a enseñar cómo es que se baila una vaina buena, digalo ahí mano.

Jason imitó su acción y se quitó el saco tirando esa mierda por ahí, no si.

—Vayalo.

—¡Dale ahí catirito! —le gritó mi mamá poniéndose frente al Jorjius y mi tía frente a Jason, las dos se quitaron los tacones.

Froy puso la canción y le subió todo el volumen a esa mierda.

¡LEO LEO LEEEH, LEO LEO LAAHH!

¡LEO LEO LEOO, LEO LEO LAHH Y GOLPE...!

Nawebona, los cuatro coño e madres nos dejaron en ridículo a nosotros.

(...)

Brode estaba demasiado curda, nawebona. Me puse en plan de convivir con todo el mundo y tal, claro, hasta que me puse a pararle bola a los gemelos que me decían «Un tequila y ya, este es el ultimo» mañana voy a amanecer vuelta mierda oyó, de paso los mariquitos esos disfrazados de los gemelos de Alicia en el pais de las maravillas, no si. Pero ajá, lo que más me encantó fue que mi carajito no bebió para cuidarme.

Eso y según él: no quería que le fuera a hacer twerking a alguno de los muchachos aunque yo estoy bien clara que le tiene alto pique a Froy y a Finn.

Marica ese carajito mio se ve burda de lo bello cuando se arrecha.

—Menor ya va... —a verga, ¿Porqué arrastro las palabras pues? Miré a Dylan— ¿Qué iba a decir?

Esa gente se empezó a reír.

—No sé menor, estabas hablando con Tommy y te empezaste a reír —me recordó Teresa medio despierta y medio dormida recostada del pecho de Thomas.

—¡Ah! Ya me acordé —miré a Hoech— mira mamabicho, ¿Porqué tu me querei quitar a mi macho?

Hoech frunció el ceño y se echó a reír.

—Dy, Alicia ya está lo suficientemente borracha.

—Nononono... caiate que yo no estoy borracha —lo apunté con mi dedo— Dile ahí papi Stiles,  dile a Derek que yo no estoy borracha.

Dylan reprimió una carcajada.

—Alicia no está borracha —respondió— sólo se intoxicó con el alcohol.

—Sisi, eso mismo —le hice un guiño— Tu si sabes, Daddy Stiles.

Él se sonrojó.

—Llevala a casa —le pidió Holl— te aseguro que mañana despertará con una fuerte resaca.

—Shh shh... ¡SH! —la señalé— tu a mi no me le vas a decir qué hacer a Stiles, eso lo hago yo nojoda, allá tu que no le paraste bola en estos tres años, Lydia... ¿O eran diez? Estoy casi segura que eran diez.

—Preciosa, ella es Holland, no Lydia.

—Cállate Stiles que yo no estoy hablando contigo mmaguevo —toqué sus labios— marico, ¿A ti no te han dicho que te pareces arrechamente a Dylan O'Brien? Nawebona, el parecido es arrechisimo.

Él intentó no reír.

—Vamos, hora de ir a casa.

—¿Tu eres loco, marico? Dylan te cae a coñazo —negué— no, tu me dejas aquí esperando a que mi macho venga a buscarme, ve que ese sabe AMM y lo que te puede es escoñetar.

Los chicos se echaron a reír.

—Amor, soy Dylan...

—¿Qué es voj? Tu a mi no me vas a ver la cara de pendeja, eres Stiles —lo callé— Ahí están Lydia, Scott, Kira, el care' culo de Derek, Allison y Isaac, así que tu eres Stiles.

—Déjala que piense lo que quiera, amigo —Jack se rió— estará contigo y ya para mañana no recordará nada de lo que diga o haga esta noche.

—Soy yo ¿O estoy viendo doble? —señalé a Jack junto al reflejo se su lado, parecía tan real...

—Bien, vamos a casa —se levantó de su asiento y me ayudó a pararme.

Empecé a replicar y a pisar fuertemente el piso.

—No marico ¡No! —me queje— yo quiero torta, de esta mierda no me iré hasta jartar torta.

—Va a hacerte daño Cariño, prometo que comerás mañana... —negué, arrecha— Alicia, ¿Qué quieres que haga? No me obligues a cargarte porque sabes que puedo hacerlo.

—Quiero torta.

Dylan suspiró y miró a los demás.

—Deja que corten el pastel y luego llevas a la malcriada —Thomas se encogió de hombros.

—¿Cómo que malcriada, mmaguevo? —intenté ir hacia él pero no podía mantenerme de pie con esos tacones, parecía a Bambi dando sus primeros pasos— ¿Tu quieres que te explote a coñazo? Vente pues mmaguevo, ¡Vente!

Dylan me retuvo entre sus brazos.

—Está bien, cortaremos el pastel y luego nos iremos.

Sonreí para mi misma con autosuficiencia.

—La yocsy siempre consigue lo que quiere.

(...)

—Cumple...años... a mi, cumpleaños a ¡Mi! —canturree mientras Dylan entraba conmigo siendo cargada de forma nupcial por el marco de su habitación— cumpleaños becerros cumpleaños a mi.

Dylan me dejó sobre la cama y guardó los tacones en el armario luego de sacar uno de sus pijamas para mi.

—Tus baterias son infinitas, Bonita. Voy a matar a los gemelos por incitarte a tomar.

—¡Dy! ¿Dónde estabas? Marico no te vas a creer a quién me conseguí —me sacó la blusa y me colocó su camisa holgada.

—¿A quién te conseguiste?

—A Stiles, a la verga, igualito a ti pero tu eres más bello —me sacó la falda y me coloco el mono a cuadros de su pijama

Me miró aguantandose una risa.

—¿En serio? —asenti. Se echó a reír— vamos a dormir bebé. Mañana seguramente querrás arrancarte la cabeza, has vomitado tres veces desde que nos vinimos y todo por comer pastel en este estado.

Solté un gruñido fastidiado

—Tu si jodes, naweboba —me queje— mejor sube aquí y tirate conmigo... en la cama —me eché a reír— ¡Chinazooo!

Dylan suspiró agotado y se sacó la ropa. Le empecé a silbar.

—¡Eso Daddy! To' esa vaina rica es mia, fiuufiuu.

Tomó asiento junto a mi en boxer, me incorporé ignorando las horribles punzadas en la cabeza y me senté en su regazo.

—Lily... ¿Q...Qué haces...? —soltó un fuerte suspiro al sentir el contacto de mis labios sobre su cuello.

—Jugando pelota contigo, mongolico ¿Qué no ves?

—Ahora eres sarcástica, bien bien.

Me encogi de hombros.

—¿Qué puedo decirte? Mi novio es Dylan O'Brien.... —sonrió— Yo adoro a mi Dylan, me enseñó a decirle a la gente lo incompetente que es por medio del sarcasmo

Dylan se echó a reír. En un suave movimiento me recostó junto a él en la cama y me dejó sobre su pecho.

—Te amo, malcriada.

—Malcriada er webo mio —achine los ojos— me la cortaste feo mardito.

Acarició mi cabello.

—¿Porqué, princesa?

—Porque ése era el momento de brillar y de que me llamaras mami —le hice un guiño

Se sonrojó pero trató de ignorarlo.

—Tienes el periodo, estamos en abstinencia por al rededor de tres dias, ¿Recuerdas?

Gruñi.

—Hombre valiente no teme ensuciar la espada de sangre.

Nawebona, yo soy marica y lo demás es cuento.

Dylan se acercó y dejó un casto beso en mis labios.

—Descansa bebé, Te amo.

—Yo no tengo.... —bostece— yo no tengo sueño...

Dylan se estiró y apagó la luz de la lámpara y luego se ubicó de tal manera en que sus brazos me envolvieran completamente.

—Feliz Cumpleaños, Alicia...

Murmure un gracias antes de quedar dormida. Papi Chiabe, tenme piedad con el ratón de mañana, amén.

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Nawebona, el capiluto más largo que he escrito en mi vida con 9209 palabras

Con esto termina el especial del cumpleaños de mi esposo adorado aka Dylan O'Brien.

De pana que estoy burda agradecida con Lisa Rhodes por haber tenido a alguien tan increíble como lo es Dylan para mi, en verdad, él es para mí lo que es One Direction para muchas de ustedes, esos chamos cambiaron mi vida al igual que lo hizo Dylan. En verdad no hay persona con la que me identifique más de lo que lo hago con él, es tan parecido a mi en todos los aspectos, hasta en el físico, tengo varios lunares en donde él los tiene xd

Amo a ese marico como no tienen ideay agradezco que esté con una persona como Britt Robertson, esa chama es buena oyó, demasiado cuchi en la vida, no como la perra que interpreta su papel aquí, a esa mardita si la odio. De pana que me gusta para él. A partir de hoy les pediré un favor a aquellas personitas que tengan Twitter, felicitenme al carajito con el Hashtag #DylanVGA y denle mucho amor please.

Ah, otra cosa, quisiera didicarles el capítulo a dos altas panitas mías que les pareció buena idea aparecer algunos de sus personajes en VGA, ellas son Luisana la escritora de la trilogia venezolana de Harry Styles que todas aman (Mi chica Venezolana, Venezuelan Lucky y After All) las que no las han leido por favor lean esa vaina, es demasiado buena, el perfil de Luisana es @SlayingHxzz

Y bueno, otra menor que me cae super bien y es una de mis lectoras más frecuentes, vayan a leer su historia, es de Justin Bieber, se llama Venezuelan Girl, de pana que les va a encantar, yo de verga no me orino en plena noche leyendo esa vaina, su perfil es @arepabiebs

Ah, Byron también te lo dedicooo

Bueno, sin más que decir la yocsy se despide. ¡Besos!