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Jimin no entendía, ¿Cómo es que todos los animales le obedecen, le entienden y lo prefieren a él?

Toda, sin excepción, hacían lo que él decía y no estaba seguro si realmente los animales lo comprenden, pero al menos, cuando le dijo a Romeo que siguiera a su presa, que era Taehyung, este lo hizo.

Cuando le dijo que se detuviera, lo hizo y ahora que los envío a sus jaulas, también lo hicieron.

- ¿Cómo diablos hiciste eso? - Cuestionó Taehyung - ¡Son mis animales! - El león le rugió y Tae calló.

- Te sugiero que no me levantes la voz frente a ellos, además, tampoco yo lo sé, ¿Y quien te dijo que podías hablarme? - Dijo Jimin.

- ¿Ahora es prohibido hablarte? ¿Que te crees? - Taehyung se acercó y Jimin suspiro, cansado de ese niño.

- Alejate de mi. Deja de provocar más problemas y más vergüenza para ti, sigo sin entender como es que Yoongi te sigue hablando o protegiendo después de que ayer intentaste matarme, pedazo de inútil - Jimin se dió cuenta que Taehyung no respondió.

Solo se mantuvo callado, con sus manos frente a él y luego bajo la mirada. Entonces Jimin lo comprendió, se volteó y ahí estaba Yoongi, detrás de él, dejando la escopeta a un lado y acercándose.

- Me voy - El rubio hizo el intento de irse.

- No, Jimin, espera por favor - Pidió Min pero Jimin se safo del agarre.

- Suéltame y no te atrevas a tocarme más. Tú y tu amiguito ese al cual se supone que quieres como a un hermano, me tienen arto, los odio, los detesto a ambos - Escupió el menor y se retiró.

El rubio no pretendía seguir soportando aquel par, estaba cansado, ¿Desde cuándo se deja de la gente? Sí, efectivamente Jimin siempre fue un chico altanero, grosero, mal hablado con algunos y mucho más. ¿Por qué no se había defendido lo suficiente desde que llegó aquel mugriento lugar?

Estaba cansado de tener que soportarlos. A los únicos que les debe su respeto, admiración y agradecimiento, es a Heize, Mark y aquellos animales, después de ellos a nadie más.

Así que si querían conocer al Jimin grosero, así sería. Después que no intenten corregirlo, por qué ellos mismos se lo buscaron.

Entro a la caravana de Heize, luego intento lavar los platos usados y aunque sus manos dolían horrible, pues lo logro.

- Jamás en mi vida creí que haría esto, todo es nuevo para mí - Suspiro.

Luego de terminar y notar que nada estaba desordenado y que incluso tendió la cama, suspiro y se sintió un poco aburrido. Aunque quisiera irle a dar de comer a los animales, no podía, su cuerpo aún dolía horrible. Apenas y pudo ayudar a Mark a meter en su jaula al resto de animales.

Se fue hasta la parte delantera del autobús, al cual ya acostumbraban a llamar caravana, pues en sí, es un enorme autobús equipado con todo lo necesario.

Tomo asiento en el área de copiloto y subió sus piernas al nivel de su pecho, las abrazo con cuidado de no lastimar sus rodillas y suspiro. Desde ese punto podía ver todo lo que hacía afuera.

Vió a Yoongi pasar evidentemente molesto y con un Taehyung detrás, aparentemente rogándole. Jimin bufo y luego rodo los ojos, detestaba aquel par más que nada.

- Quisiera poder verte, abrazarte y pedirte que me ayudes, que me saques de aquí... - Susurro. Para luego cerrar sus ojos un par de minutos y pensar en aquel hombre al cual jamás pudo ver en persona pero que lo enamoro en cuestión de días.

Acaricio el anillo que colgaba de su cuello, era un anillo de promesa, el cuál su amado le envío después de tener un mes de relación a distancia. Su amado hombre le prometió que iría por él cuando terminara unos trabajos, que se casarían y se irían juntos al país del mayor. Jimin atesoraba aquel anillo y no era uno cualquiera, era un hermoso anillo con un diamante en tono rosa, bastante delicado y brillante.

Suspiro y un par de segundos después escucho la puerta de la caravana ser abierta automáticamente pensó que era Heize, así que comenzó hablar.

- ¿Eres tu Heize? - No recibió respuesta, abrió sus ojitos y suspiro - Bueno, me alegra que estés bien. ¿Puedo confesarte algo? - Siguió sin parar - Quisiera irme de aquí... Yo... Tenía un novio, me iba a casar con él, lo amaba, lo extraño y... Solo quisiera verlo, para pedirle que me saque de aquí, pero no puedo, ahora estoy casado con un hogro de hombre, un imbécil que solo a sabido tratarme mal, que no soy su prioridad, jamás seré su debilidad o su fortaleza como lo era de mi novio, jamás me verá como a su pareja y no es que lo desee, solo... Al menos quisiera que muestre interés o no lo sé. Pero que si de verdad valora al menos un porciento de mi vida... Me deje libre.

Jimin suspiro por enésima vez y revolvió un poco su cabello rubio, se vio al espejo que estaba frente a él, para acomodar su cabello y se espanto.

- ¡Oh demonios! - Salto del susto - ¿Qué diablos haces ahí Min? - Cuestionó, después de ponerse de pie.

- Venía hablar contigo - Yoongi empuñó sus manos - Pero creo que ya escuché suficiente.

- Al menos ya sabes cuales son mis deseos - Respondió el menor.

- Claro, ¿De verdad crees que dejaré que te vayas con otro? - Rio con gracia el mayor - Debes estar loco Jimin, eres mi esposo ahora y no permitiré que estés con nadie más. ¿Entendiste?

- Claro - Jimin respondió - Solo sera un año, ¿No? Debo soportarte un maldito año y después de ello... Iré en busca de mi verdadero amor - Recalcó el rubio.

- Sí, ¿Pero eres consciente que no pasarás aquí todo ese año no es así? En algún momento Hoseok regresará, debe estar aquí con Heize y tú debes irte conmigo, a mi lado, dónde es tu lugar. Además... No olvides que al ser mi esposo, debes cumplirme, aún no hemos consumado nuestra noche de bodas...

- Sueñalo Min, por qué eso no sucederá jamás. Ni aún estando ebrio o en mi maldito celo, pienso acostarme con un patán, bueno para nada, un imbécil y tan poco hombre como tú - Jimin estaba molesto.

- ¿Poco hombre? - Yoongi rió - ¿De verdad quieres que te muestre lo poco hombre que soy? - Se acercó amenazador al Shifter gatito.

Bastante cerca para el gusto del rubio y entonces... Jimin se sintió embriagar por el exquisito aroma de Yoongi, ¿Por qué le encantaba tanto? ¿Por qué se sentía en el maldito delirio cuánta vez Min estaba cerca de él? ¿Por qué su cambia forma aclamaba por besarlo, por sentirlo, por tocarlo y sentirse suyo? ¿Por qué demonios tenía todas aquellas emociones positivas por Min?

Yoongi acerco su rostro al del rubio y también se sintió desfallecer por el exquisito aroma del menor, le encantaba tanto, que se recriminaba a si mismo el tratarlo mal cuando él... Sí sabe lo que significa el deseo tan grande que siente por Jimin.

Y al parecer de los dos, él es el único que lo comprende. Min Yoongi, sí sabe que Jimin es su destinado, él si sabe que aquel hermoso chico es el que la madre luna eligió para él. Entonces... ¿Por qué lo trata tan mal?

Los dos estaban tan cerca uno del otro, que la tensión de podía palmar en el aire, incluso Heize había entrado y al ver el aura tan intensa de aquel par, decidió retirarse y darles su espacio.

Lentamente, Yoongi llevo su fuerte mano hasta la fina cintura del rubio, lo acercó más a su pecho y Jimin entre abrió sus labios. Bajo su mirada de ojitos azules a los delgados labios de Min. Se sentía tan pequeño entre los fuertes brazos de aquel hombre y es que lo era. Yoongi era mucho más grande, fuerte y musculoso, en cambio Jimin, es pequeño, delicado, fino, pero con un cuerpo de infarto.

- Un poco hombre... También es aquel que no afecto, protección o cariño hacia su pareja y aunque deteste decirlo... Pero tú Min Yoongi, lamentablemente eres mi esposo y... Soy al único al que le deberías demostrar respeto, fidelidad y lealtad y fallaste desde el primer día de matrimonio al dormir con Taehyung, así que... Sí, eres un poco hombre, un hombre despreciable para mí... Aunque mi cambia forma... piense todo lo contrario.

Yoongi reforzó el agarre en la cintura del menor. Llevo sus labios hasta la comisura de los labios del rubio, dejo un suave beso en aquella zona, que hizo a Jimin suspirar, cerrar sus ojos y abrirlos lentamente cuando los labios del shifter tigre se alejaron. Jimin no se dió cuenta en que momento comenzó a retener el aliento.

- Perdón... - Susurro Min y dejo un segundo beso en la comisura del menor - Lamento... Haberte fallado la primera noche, lamento... No darte tu lugar como mi esposo, lamento... Ser un mal hombre y mal esposo - Decía y en cada disculpa dejaba un beso en la comisura del Omega, ya sea del lado derecho, izquierdo o en su mejilla, nariz - Por favor Jimin... Perdóname cariño, vente conmigo, ¿Sí? Te prometo que trataré de ser el mejor esposo para ti, haré... Lentamente que olvides a quien sea y que te centres solo en mí, pondré todo de mi parte, para que me veas únicamente a mi y que nuestros cambia forma cumplan su deseo de estar juntos así... Cómo yo deseo estar contigo.

Min, bajo sus labios hasta el blanco, fresco y hermoso cuello del Omega, dejo un húmedo y acalorado beso en la zona, logrando que Jimin soltará un suspiro lento y entre cortado, mientras mantenía sus ojitos cerrados y sus manitas tomando los brazos fuertes del mayor.

- Vamos mi amor... Dime qué sí por favor - Rogo Min.

Y Jimin... Cayó.

El shifter gatito cayó rendido ante el tigre y no es que solo su gatito haya logrado convencerlo, o las palabras del mayor, es que su corazón es débil. Él también siente una gran atracción hacia aquel hombre, por qué debe admitir que desde la primera vez que lo vio, le encantó.

Y aunque muchos digan que no tiene voluntad o que muy fácil cayó, lo cierto es que Jimin no sabe sobre el amor. No sabe sobre lo que está bien o está mal, él solo desea sentirse querido, amado, deseado valorado. Y en ese instante, Min Yoongi le hizo sentir, todo lo que él tanto anhela.

- ¿Prometes... Alejarte de Taehyung y... Centrarte solo en mí? - Susurro Jimin.

- Lo haré mi amor, te lo prometo. Pero no me alejes más de ti, por favor - Pidió Min y Jimin suspiro tembloroso.

Sus piernas temblaban, se sentía tan pequeño entre los brazos de aquel hombre que sentía en cualquier momento se convertía en gelatina y se derretiría luego.

- Tú... Eres un tramposo - Susurro Jimin y ladeó el cuello ante los besos constantes de Min - Pero... Me gusta - Suspiro.

- ¿Te gustó yo cariño? - Dijo con voz ronca el azabache mientras besaba sin parar el cuello del hermoso chico entre sus brazos.

- Sí... Y mucho - Respondió Jimin.

- Tu me gustas a mi - Respondió Min.

Jimin mordió su labio inferior y sus piernas le fallaron, así que Min lo tomo entre sus brazos, lo alzó e hizo que el rubio enrollase sus piernas alrededor de sus caderas. Jimin así lo hizo, no se nego y solo se dejó llevar.

Mientras el mayor lo tomo firmemente y lo llevó a la cama, obviando que es la caravana de Heize. Lo recostó delicadamente, siendo Min quien quedó entre las piernas del rubio y este gimió tembloroso al sentir a Min encima de él y entre sus piernas.

- Eres el chico más hermoso que mis ojos hayan visto jamás - Susurro Min.

Jimin llevó una de sus manos al mentón del hombre y acaricio, admiraba el rostro de Min y se encantaba con lo que veía y tenía entre medio de sus piernas. Estaba fascinado.

- Yoon... - Susurro sin poder resistir más.

- ¿Me permites amor mío? - Pidió Min, acercado sus labios a los del menor y dejando solo un centímetro de espacio.

- Hazlo - Murmuró el rubio.

Y así sucedió. Min tomo los labios de su esposo, y los dos sintieron una conexión inexplicable al sentir sus labios unidos, ambos suspiraron satisfechos y encantados, los dos sintieron sus espinas dorsal con una corriente eléctrica fascinante.

El beso inicio lento, pues él inexperto era Jimin, pero rápidamente se acoplo a los deliciosos labios del mayor, lo beso y quedó maravillado, en cada movimiento lento y desesperante al mismo tiempo, se degustaban y amaban la sensación.

Entonces Jimin lo entendió. Comprendió aquella conexión tan grande con el Shifter tigre, que se aterró, pero al mismo tiempo le fascinó y solo penso... Que pase lo que tenga que pasar.

Min no podía soportarlo más. Presionó su hombría sobre la del menor y ambos gimieron entre medio del beso, encantados y maravillados entre medio del beso. Yoongi simuló unas pocas embestidas y Jimin disfruto cada una.

El beso se rompió por falta de oxígeno y se separaron lentamente, pero sorpresivamente, fue Jimin quién quien tomo los labios del mayor una vez más. El beso fue igual o más intenso que el anterior, hasta que tuvieron que separarse una vez más.

Ambos se robaron un par de besos uno del otro, encantados con aquella conexión tan increíble que había explotado en sus pechos desde que unieron sus labios.

- Solo... No me vayas a fallar Min, es lo único que te pido - Susurro Jimin, robando un beso más de los labios de Yoongi.

- No lo haré mi amor, te lo prometo - Respondió Min y robo un par de besos más del menor.

Ambos sonrieron, como dos bobos enamorados y es que... Eso es exactamente lo que sucede cuando dos destinados se conocen.

Se enamoran perdidamente uno del otro.

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¡Hola amigos!

¿Qué les pareció este capítulo?

Espero que haya sido de su total agrado. Aún nos queda un capítulo más para esta pequeña maratón. Así que sigan dándole todo el amor del mundo.

¡Nos seguimos leyendo mis chiquillos!

Los amo💜

No olviden dejar su estrellita si les gusto el capítulo ⭐