Habia vuelto a ir a la clinica por el resultado de mis estudios, al parecer no debe haber una complicación para que me embarace, aparte de que me quitaron el DIU, fue algo rapido. Después de eso tuve un poco más de trabajo ya que James salio de viaje y me dejo a cargo, cosa que a Nataly no le agrado mucho, lo bueno es que estaba teniendo experiencia en esto de los negocios, ya tenía algunos días que no había vuelto a ver al señor Naylor, igual teníamos más trabajo últimamente y andaba ocupada.

-Señora Brightwell.-dijo Nataly entrando a la oficina.

-Te he dicho que toques antes de entrar.-dije sin mirarla ya que estaba más concentrada en llenar unos papeles.

-Lo siento.-dijo entre dientes.-Venía a informarle que el señor Naylor llamo y dijo que quería que usted y el señor Brightwell asistieran a su casa hoy.

-¿Hoy?.-alce la vista.-¿Hace cuanto llamo?

-Acaba de hacerlo, dijo que es urgente.

-¿Te explicó el motivo?

-No, solo dijo que los quería a los dos esta noche.

-Intenta buscar dos vuelos disponibles entonces, y de preferencia con regreso mañana temprano que aún tenemos otra reunión aquí.

-Señora, el señor Naylor tiene una casa aquí, y ahí fue donde los citó, aquí les a note la dirección.-me entregó un papel.

-Mejor para mi, en cuanto James regrese avísale, tengo hacer unas llamadas.

Nataly salió de la oficina y yo terminaba de arreglar algunas cosas con unos clientes, luego de unas horas James llego haciendo preguntas sobre el porque quería vernos el señor Naylor, después de mil veces de decirle que no sabía nos concentramos más en los proyectos que teníamos para no atrasarnos en nada.

-Esto es un desperdicio de tiempo.-dijo James sin dejar de mirar el camino.

-No te enojes, no es tan malo.

-¿No es tan malo? Espero que sea algo he valga la pena, tenemos demasiados pendientes, tenemos entregas que deben ser revisadas, papeles que tienen que ser firmados y volver a verificar que todo este en orden ¿Continuó?

-James, relájate. Ya no tienes solo a Nataly me tienes a mi, seremos 3 personas revisando los negocios, será menos estresante para ti.

-Aún así no quiero que algo salga mal.

-Nada saldrá mal, ya lo verás.-le sonreí.

Llegamos a la casa del señor Naylor, se sentía el frío por el cambio de estación, James me sujeto de la cintura para caminar hacia la entrada, tocamos y uno de los trabajadores abrió la puerta dejándonos pasar. Nos dirigimos al comedor para encontrarnos con el señor Naylor.

-Me alegra que hayan venido.

-Gracias por invitarnos.

-Tomen asiento por favor.

-Me gustaría preguntar el motivo de esta cena.-comentó James apenas y nos sentamos.

-Después de cenar las dudas serán aclaradas, paciencia señor Brightwell.-le sonrió amistosamente.

Pero ahora lo que James tenía era todo menos paciencia, para aligerar el ambiente decidí comenzar una charla con el señor Naylor sobre sus negocios y eso, después comenzamos a hablar de cosas triviales hasta que nos sirvieron la cena, al terminar James ya no estaba tan tenso como antes pero aún así se notaba que quería irse en ese momento.

-Podría decirnos ahora, ¿Para que nos citó está noche en su casa?.-comentó un poco impaciente.

-Supongo que es tiempo de hablar acerca de eso.

-¿Que es lo que tiene que decirnos?.-me animé a preguntar.

-Es algo relacionado con su esposa señor Brightwell.

Me tense al oír esas palabras, James me miro confundido y yo no sabía que decir, ¿Acaso hice algo mal? ¿Lo había ofendido de alguna forma?

-No comprendo.-dije finalmente.

-Yo tampoco lo comprendía, pero desde que te conocí es extraño el sentimiento que me llega cuando te tengo cerca.

-¿Que trata de insinuar?.-el tono de James era molesto, apretó sus puños sobre la mesa y yo cada vez entendía menos.

-Nada malo, tranquilo.-comentó el señor Naylor con un tono relajado.-Tengo algo que decirte Eileen.

Se levanto y tomo un sobre que estaba arriba de un mueble cercano a la mesa, me lo tendió para que lo tomará, así lo hice bajo la mirada de el y de mi marido, con curiosidad lo abrí, saque la hoja y la desdoble lo primero que pude leer en la parte superior de la hoja fue:
Compatibilidad:99.9%

-¿Que...que significa esto?.-pregunte con el corazón latiéndome con fuerza.

-Tú madre, ¿Nunca te hablo de mi?

-Esto... es...-no pude continuar hablando porque sentí como mis lágrimas comenzaban a caer, James me atrajo a el para abrazarme, acaricio mi espalda para tratar de calmarme ya que no dejaba de sollozar. ¿Era algún tipo de broma? ¿Por que nos citó para esto?

-Tenemos que hablar hija.

-No...no me diga...así.-dije entre sollozos, me aferré más al cuerpo de James, le susurré un "vámonos" solo para que el escuchara, me limpió las lágrimas y se levanto de su asiento.

-Debemos retirarnos señor Naylor gracias por la invitación.

-No pueden irse, Eileen tienes que hablar conmigo.

-No quiero hablar con usted por el momento.-trate de decir lo más firme que pude.

-Comprendo, sé que tienes mucho en que pensar ahora pero de verdad necesitamos hablar.

No comente nada, James me tomo la mano y nos encaminamos a la salida, una vez que estuvimos en el auto, condujo durante un buen rato antes de llegar a la casa estaciono el auto, las calles estaban solitarias solo las iluminaban las lámparas que se encontraban ahi.

-¿Hablaras con el?.-pregunto cauteloso.

-Mi madre dijo que el nos había abandonado.-susurré.-Que el no quería que yo naciera, y por eso se fue.

-Tu madre te ocultaba muchas cosas Eileen.-suspiro.-Pero eso no me corresponde decírtelo.

-No quiero volver a verlo.

-¿No le darás la oportunidad de acercarse a ti?

-No, no puedo el me mintió.

-Los estudios eran recientes, eso quiere decir que al igual que tú se acaba de enterar.

-¿Lo estás defendiendo?

-Siempre va a haber dos versiones de la historia y ambas merecen ser escuchadas.

-No me interesa escuchar la suya.

-Todos merecen segundas oportunidades.

-El no.

-¿Y yo si?

-¿Que tratas de decir?

-Me acerque a ti con engaños, y después de que me conocieras te enamoraste de mí, si no me hubieras dado una segunda oportunidad no seríamos felices como lo somos ahora.

-El puede mentirme igual que mi madre.

-Tú madre te alejo de el.

-¿Como lo sabes?

-Ella me lo confesó, no sé nada acerca de los detalles de esa historia, pero supongo que el señor Naylor si.

-¿Y deberé creerle?

-¿Crees en lo que te digo?

-Si.

-Entonces estoy seguro de que el te hablara con la verdad.-suspire.

-Quiero ir a casa.

-Está bien.-volvió a encender el auto retomando el camión.

-James.

-¿Si?

-Te amo.

-Y yo a ti amor.

Sonreí y apoye mi cabeza en la ventana, tenía ciertas dudas con el señor Naylor, es cierto que habrá dos versiones de cada historia pero, ¿Cuál de ellas es la verdadera? Solo espero que si realmente el quiere que tengamos una relación de padre e hija, no me abandone igual que mi mamá... ¿Que habrá sido de ella? ¿Será feliz? ¿Estará bien? ¿Vivirá bien? Aunque estoy segura que ella no se preocupa por mi, aveces yo pienso en ella, preguntándome la razón por la cual no me quería, y lo que la llevo a venderme como si fuera cualquier cosa, aunque cierto es que me tocó un buen marido a pesar de todo, tal vez no fui feliz al principio pero ahora no cambiaría mi presente por nada del mundo.

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