Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

13


Yeonjun se recuesta en la cama, quitando su propia camisa. Soobin quiere tirarse sobre él y besarle hasta que no sienta los labios y los pulmones le ardan ante la falta de oxígeno, pero se recuerda que necesita calmarse.

Pronto, el omega siente como su ropa interior se moja, quedando húmeda por su lubricante natural. Soobin se posiciona sobre él, apoyándose en sus brazos para no lastimarlo y el calor que recorre por su cuerpo es tan sofocante que teme perder el control con el omega que está gestando su cachorro.

—Yo... Quiero...

―Haz lo que quieras —le susurra, besando su rostro desorientado y sosteniendo sus mejillas.

Soobin le quita los pantalones de pijamas, ya húmedos, casi arráncandolos. Hace lo mismo con la última prenda inferior faltante, dejando al descubierto su completa desnudez. Yeonjun se queja, el frío acaricia su sensible y erizada piel, pidiendo por el calor del alfa.

—A-Ah, Soobin ―jadea.

Una mano traviesa del alfa se abre paso entre sus glúteos, sus dedos acarician la carne bajo su tacto hasta llegar a su entrada, caliente y mojada, ansioso por tenerlo dentro. Soobin gruñe con el pensamiento de ser apresado por las paredes internas del omega. Él también se quita la ropa sin cuidado y lo más rápido que puede.

―Tranquilo ―Yeonjun le dice entre una risa baja, acariciando los brazos del azabache.

Parece no escucharle. Sus pupilas dilatadas brillan bajo una cortina húmeda de lágrimas y de entre sus labios sumergen unos colmillos.

Soobin abre las piernas del omega, su boca recorre una hilera de besos por el interior de sus muslos blanquecinos y ver la cantidad desbordante de lubricante le hace saber que no será necesario prepararlo. Yeonjun gime ante las sutiles caricias que la lengua del otro le brinda y aprieta entre puños las sábanas que están debajo de su cuerpo. Mira a un lado, viendo al alfa tomar su miembro entre sus manos. No lo recordaba tan grande.

Soobin cae sobre sus labios, besándolos con disfrute y gruñidos incluidos. Yeonjun envuelve sus brazos en el cuello del alfa y jadea entre el desordenado beso cuando lo siente entrar en él.

―Tan bueno... —gime con los ojos cerrados y la cabeza hacia atrás, y el azabache comienza a moverse en su interior.

Soobin mordisquea su cuello, su lengua recorre con gula el contorno de sus clavículas y desea romper la piel del omega hasta hacerla sangrar, pero su lobo le recuerda que podría ser malo.

―Me alegro que seas tú quien haya aceptado mi nudo ―el alfa habla entre dientes, sin dejar embestir contra las caderas del omega―. Joder, me alegra saber que llevas a mi cachorro dentro ―gruñe al sentir el abrazador calor apretarse en su vientre bajo y sabe que pronto se vendrá―. Mío.

Yeonjun no aguanta mucho y se corre con el atisbo de un gemido placentero en su boca. No tarda demasiado cuando el nudo de Soobin comienza a hincharse en su cavidad inferior hasta dejarlos unidos, derramando el caliente semen en su interior.

―Shhh... ―Soobin lo arrulla cuando una mueca de dolor surca por el rostro de Yeonjun, y seca las pequeñas lágrimas que caen por sus mejillas―. Sólo espera y no te muevas ―lame las marcas que le dejó en su cuello, buscando curarlas.

           
           

           

          

— ♡︎ —
          

          

          
        

Para cuando el alba ilumina la silenciosa habitación, Soobin ha anudando a Yeonjun unas 4 veces más en todo lo que ha llevado la noche. Éste era el primer celo donde no se le hacía tan doloroso de pasar, pero sí donde se sentía más necesitado. Ni siquiera en el anterior estuvo así.

―Tenemos que comer, Soobin ―el omega habla en susurros con el alfa temblando a su lado.

Hace al menos 3 minutos su último nudo se había deshinchado y aún seguía bajo los efectos de la excitación.

―No quiero comer.

―Debes comer.

―No. Quiero estar aquí, contigo.

―Aunque sea agua.

―Dije que no. Quédate aquí ―no mide la fuerza con la que dice sus palabras y se arrepiente, aclarando su garganta―, por favor...

―Bien ―se recuesta a su lado, escondiéndose entre los cálidos brazos del alfa. Coloca su rostro ladeado sobre su pecho, oyendo el fuerte latir de su corazón―. Soobinie...

―¿Qué?

―Cuando... Cuando decías que yo no era tu omega, ¿no lo sentías?

―Sí. Mucho ―confiesa.

―¿Entonces...?

―Ya lo había sentido antes, pero resultó no ser mi omega..

―¿Creíste que sería lo mismo ésta vez?

―Sí.

―Y... ¿Quién era?

Yeonjun siente por una milésima de segundo a Soobin tensarse, pero éste se recompone rápidamente, y no sabe si continuar por el rumbo que está tomando la conversación.

―Alguien.

―Soobin ―le reprende con voz cansada, luego bosteza― dime.

―Fue hace dos años, déjalo pasar.

―No quiero.

―Eres tan odioso, omega.

―Así me quieres.

Soobin no contesta a eso, y aunque no lo mira, sabe que está sonriendo.

―Fue hace dos años, cuando aún estaba en la otra escuela cerca de mi hogar. Tenía 16 años cuando me presenté como alfa y pasé por mi primer celo, estuve solo, fue el peor ―detiene su relato, tragando un poco―. Después de eso conocí a alguien, se llamaba Hwang Yeji estaba en mi clase y me gustó...

Innecesariamente, Yeonjun siente celos, y más de que fuese una mujer.

―Yo sentía que era mi omega, a pesar de que mi alfa nunca reaccionaba cuando estaba con Yeji. Para mi segundo celo, lo pasé con ella y yo había cumplido 17 ―sin ser muy consciente, aprieta más a Yeonjun contra él, para acariciar sus brazos mejor―. Nunca la marqué porque no sentía que fuera el momento correcto. A las dos semanas me dijo que estaba embarazada. Le dijimos a mis padres y a los de ella, y se molestaron, diciendo que aún éramos muy jóvenes, aunque acabaron por aceptarlo.

―Entonces-

―Déjame terminar ―blanquea los ojos, besando fugazmente la coronilla del omega con cariño―. Pasaron dos meses y tuvo un aborto natural. No pudo resistirlo porque no estaba marcada y... No era mi omega.

―Lo siento mucho, Soobin...

—Está bien ―murmura, pero no lo está. Aún sigue doliendo, no tanto como antes, pero el sentimiento continúa latente en su interior.

Yeonjun no vuelve a hablar, se queda callado, escuchando como la respiración del alfa comenzaba a calmarse y finalmente se queda dormido, poco a poco.

Se aleja, parándose de la cama. Necesita tomar una ducha y comer algo, también traería agua y unos supresores para aliviar el dolor del celo para Soobin. Busca una camisa grande del alfa para ponérsela después de la ducha.

Abre la regadera y el agua cálida moja su cabeza, recorriendo su cuerpo con rapidez.

¿Fue aquello lo que volvió a Soobin una persona tan retraída, arisca y cerrada? Yeonjun se pregunta. Y lo entendía, el alfa temía por volver a caer en lo mismo y que al final, tampoco sea lo que esperaba. Pero él estaba feliz de ser el omega de Soobin. Lo era, siempre lo supo y lo sintió.

Y estar embarazado de 6 meses sin una marca, lo confirmaba.

Después de unos minutos, se sobresalta cuando escucha la puerta del baño abrirse, revelando al alfa con sus iris dilatados y el cuerpo sudado de excitación.

Mierda.

— ♡︎ —

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro