Jimin no sabe cómo explicar la felicidad que siente cuando ve la facilidad con la cual YoonGi se ganó a su padre. El omega le había expresado sus notables nervios sobre conocer al mayor de los Park, pero para su sorpresa, aunque sabía muy bien de todo lo que su omega sentía, Min YoonGi dio una excelente imagen frente a su padre.

— Te dije que lo lograrías. — Mencionó feliz el alfa cuando vio a su omega. YoonGi sonrió feliz de haberlo logrado.

— Tu papá es diferente a ti, ¿de dónde sacaste esas mejillas tan bonitas? — Preguntó el pálido. Jimin negó abochornado.

— Papá dice que me parezco a mamá. — Sonrió el peli-naranja. — En algunas fotos que tenemos guardadas puedo ver el parecido que tenemos.

— ¿Tu mamá murió? — Jimin negó. — ¿Entonces dónde está? — Cuestionó curiosamente. El semblante del alfa cambió rápidamente y YoonGi se maldijo al ver la incomodidad en el rostro de su pareja. — No es necesario que me digas si es algo difícil.

— Mamá se fue de la casa, papá pasaba mucho tiempo dentro del juzgado en lugar de estar en la casa y mamá no lo soportó. — Mencionó el menor de ambos mientras tomaba la mano de su omega. — Se fue del país y pocas veces hemos hablado, supongo que tiene cosas mejores que hacer. — Mencionó encogiéndose de hombros.

— Nada es más importante que los hijos Jimin-ah. — Mencionó el omega. — Tu padre nos invitó a cenar y le dije que sí. ¿Tienes algún problema por no habértelo consultado antes? — Jimin negó con una sonrisa en su rostro.

— Vamos a ayudarlo en la cocina, él realmente no es bueno cocinando. — Y al término de aquellas palabras un quejido de dolor se escuchó provenir desde la cocina. Jimin empezó a reír mientras YoonGi lo arrastraba dentro de la casa.

Aquello se sentía realmente bien.

...

Un mes más de relación y Jimin siente todo el cambio grato que ello ha traído a su vida. Irónicamente se había vuelto muy buen amigo de JungKook y ambos solían reunirse de vez en cuando para pasar el rato juntos y charlar sobre sus respectivos omegas.

Ese día sin embargo, la conversación giraba entorno a YoonGi y sus raras acciones.

— Nunca lo he visto de esa forma. — Mencionó JungKook mientras se llevaba la cerveza a sus labios. Jimin frunció el ceño en preocupación. — Parece muy celoso con su espacio personal, hoy entró un alfa a la librería y YoonGi no quiso que se le acercara.

— Quizás le dio desconfianza. — Mencionó Jimin recordando algunas cosas que YoonGi le había contado. — Hoy me pidió una de las chaquetas que uso, dijo que quería sentirse seguro.

— También está comiendo mucho. — Mencionó de forma sugerente el menor. Jimin se encogió de hombros.

— Eso está bien. — Comentó el alfa mayor. JungKook rodó los ojos fastidiado. — Taehyung también anda muy comelón.

— Come en compañía de YoonGi para que este no se sienta extraño. — Descartó el pelinegro. — Últimamente está muy sensible, Tae le dijo que estaba comiendo demasiado y YoonGi le lanzó una caja de grapas. ¡Casi me lo mata! — Exageró el menor. Jimin rió imaginándose la escena.

— Siento que me quieres decir algo pero no soy del todo consciente. — Jungkook asintió.

— ¿No te has dado cuenta que YoonGi huele más dulce de lo normal? — Jimin parpadeó confundido, luego de lo que parecieron largos minutos negó. — Eres un tonto Park Jimin, Tae tiene razón. — Gruñó por lo bajo.

— ¿En qué tiene razón? — Preguntó Jimin confundido.

— En que el primer golpe que YoonGi te dio te quitó la inteligencia.

...

Después de aquella extraña conversación, todas las cosas que había dicho JungKook quedaron en su mente dando vueltas, y ahora que lo pensaba mejor, YoonGi si estaba actuando de una manera un tanto extraña.

A veces lo mimaba, otras veces vivía peleando con él por la mínima cosa que encontrara mal puesta. En ocasiones lloraba tontamente por algún detalle, luego volvía a molestarse sin motivo alguno.

Incluso ahora que estaba a pocos pasos de su apartamento, su tigre se encontraba un tanto ansioso y temeroso ante la reacción que tendrá su omega. Por una parte esperaba besos y abrazos, en otra y la más realista, quizás le lanzaría algún libro en la cara por llegar pasadas las 12 de la noche.

Pero para su sorpresa, quien lo recibió fue MinGi, la madre alfa de YoonGi quien tenía una cara de pocos amigos. Jimin sintió a su tigre retroceder y muy tarde reaccionó cuando la mujer simplemente lo jaloneó hasta dentro del apartamento y lo sentó en uno de los muebles de la sala.

— ¿En dónde estabas a tan altas horas de la noche? — Preguntó la mujer seriamente mientras olisqueaba superficialmente el ambiente. — Hueles a alcohol y a mi pequeño JungKookie. ¿Qué estaban haciendo? ¿Buscando más omegas? — Jimin negó de inmediato como si su vida dependiera de ello y la careta seria de la mujer se cayó dejando al menor de los dos alfas perplejo mientras observaba como la mujer reía frente a él. — Quita esa cara muchacho que solo estaba bromeando. — Sonrió la mujer feliz. Jimin parpadeó confundido ante el cambio tan brusco en las acciones de la alfa. — ¿Para cuándo?

— ¿P-Para cuándo qué? — Preguntó confundido el alfa. MinGi gruñó y aquello alertó a su tigre.

— El bodorrio. — Mencionó con obviedad. — Mi bebé engordará un poco dentro de unos meses y no te perdonaré que parezca una bolita el día más importante de su vida. — Acusó señalándolo. Jimin negó intentando procesar las palabras antes dichas. — ¿Pero qué te pasa? — Preguntó la mujer.

— El hecho de que Yoonie esté comiendo un poquito más de la cuenta no quiere decir que vaya a ser una bolita dentro de poco. — Aseguró Jimin. MinGi se llevó las manos a la cara en un sonoro golpe mientras negaba un tanto incrédula.

— Hijo mío. ¿No sientes el olor dulce en el ambiente? — Jimin cerró los ojos e inhaló profundamente. El olor de YoonGi cubría deliciosamente la estancia y aquello de cierta forma hacia que su tigre saltara de emoción al distinguir un olor completamente diferente al suyo con el del omega. Tensándose en su lugar abrió los ojos rápidamente y observó a la mujer. MinGi asintió divertida.

— Felicidades, yo seré abuela y tu papá. — Felicitó la mujer con una autentica sonrisa de felicidad en su rostro. — Todos lo sabíamos ya, menos YoonGi quien se negaba a creerlo y tú por tonto obviamente. — Rió la mujer ante las muecas del alfa.

Jimin se levantó de su lugar y como pudo, prácticamente sacó a la mujer del apartamento quien entre risas, le explicó que estaría organizando la boda de YoonGi y que no se libraría de ella tan fácilmente. Cuando por fin estuvo solo en la sala, una sonrisa tonta se dibujó en su rostro antes de ir corriendo a la habitación que compartía con el omega.

— Yoonie. — Llamó acostándose junto a él. El omega gruñó entre sueños mientras se tapaba la cara con la almohada que estaba abrazando. — Min YoonGi. — Volvió a llamar obteniendo el mismo resultado. — Gatito gatito. — Llamó divertido. El gruñido molesto del omega se escuchó.

— Que no soy un gato, soy un lobo. — Recordó el pálido con el ceño fruncido. Jimin rió besando la frente del omega mientras sentía la emoción de su animal interno brotar libremente de él.

— Ven aquí lobito mío. — Susurró el alfa apresando entre sus brazos al omega. YoonGi rió mientras era arrullado por los fuertes brazos de su pareja. — ¿Tienes algo que decirme? — Preguntó fingiendo curiosidad.

— Posiblemente engorde en unos meses. — Mencionó el omega. Jimin asintió.

— Serás el omega más bonito del mundo. — YoonGi rió.

— Posiblemente tengamos un lindo gatito. — Concluyó YoonGi. Jimin intervino con una pequeña sonrisa en su rostro.

— Quizás un lindo lobito como su padre. — YoonGi asintió emocionado mientras abrazaba con más fuerza al alfa y se entregaba a los mimos y caricias que estaba recibiendo. Entre besos y abrazos, ambos durmieron con el corazón latiendo a un mismo sentido. Al ritmo de la felicidad.

¡Ven aquí lobito!✔

...

¡Oficialmente terminó!

Muchas gracias por leer, por votar y comentar. Alegraron mi vida gris sin internet durante cada actualización con sus ocurrencias.

Solo faltaría el epílogo y listo.

Disculpen cualquier error a lo largo de la historia, he corregido algunos pero espero no encontrar más.

Nos leemos pronto en el epílogo.

No olviden seguirme. 

» © MarinaLightweight.