Esa mañana Baekhyun fue a doblar la ropa que había recogido la tarde anterior, se encontraba sentado pensando en que debió haberse quedado en su antiguo hogar, aunque sinceramente no sabía si podría vivir con saber que el padre de su bebé estaba haciendo una vida aparte tan cerca de él y su cachorro; pensaba que le dolería en el alma cuando su pequeño supiera que su papá prefería estar con otra familia que con ellos, pero era mejor a vivir con un maltratador asesino. 

Aunque no era notorio, se había fijado en que su pequeña pancita tenía una leve curva, acaricia su piel pensando en que era tan feliz de saber que estaba albergando vida en su cuerpo… un cachorro que el amor de su vida dejo fecundando en él. Suspira mientras dobla una camisa, ahora que lo pensaba, el aroma de JoonGi comenzaba a marearlo de mala manera.

Luego de terminar, fue a preparar el almuerzo; después de un rato pudo percibir aquel aroma a mandarinas y luego escuchó como la puerta se abría. Nunca pensó que él le había estado mintiendo todo ese tiempo, ahora se sentía tonto por haberle creído, por haber caído entre todas esas palabras bonitas.

—Hola, pequeño, —saluda JoonGi mientras lo abraza por la espalda y luego besa su nuca.

A Baekhyun le había comenzado a dar asco los besos del alfa, la sensación de su saliva fría sobre su piel era sumamente molesta, sin embargo lo aguantaría por ahora; sabiendo lo que JoonGi había hecho antes, no haría nada que lo pusiera en peligro.

Sin embargo, cuando la mano de JoonGi se metió por la falda de su vestido para acariciar su muslo fue donde sintió arcadas, respira profundamente y se separa para coger el aceite que estaba en la esquina.

—¿Algo que contar? —pregunta Baekhyun intentando actuar normal.

—Lo normal, —se encoge de hombros algo hastiado mientras recarga su cadera contra el mesón, —trabajar y trabajar, —se encoge de hombros mientras coge una manzana para darle una fuerte mordida.

Baekhyun solo asiente para luego comenzar a cortar las verduras, mientras el filo rebana el tomate en su mano, se imagina a sí mismo tomando aquel objeto y clavandolo en el pecho del alfa, pero luego sacude levemente su cabeza. Él no era un asesino.

Ambos comieron en silencio y luego JoonGi salió diciendo que debía hacer algo, Baekhyun por su parte también salió para encontrarse con Kyungsoo. Este se encontraba con su niño en aquella parte del bosque donde habían estado la última vez, estaban lejos del pueblo.

—¿Listo? —pregunta Kyungsoo mientras deja a su niño comiendo una paleta roja de miel.

—Sí, —asiente mientras comienza a quitarse la ropa quedando completamente desnudo.

Kyungsoo hizo lo mismo y luego los huesos de ambos comenzaron a crecer, romperse y acomodarse mientras su piel se partía dejando un manto ligero de sangre sobre el pelaje. Baekhyun se imponía en elegancia con su color blanco mientras que Kyungsoo impartía un seductor color rojo que haría babear a cualquier macho alfa que pasará cerca de él.

Eran más pequeños que los alfas como era natural, así que no podrían nunca cazar un oso o un alce, nada demasiado grande, pero tenían más agilidad para poder atrapar animales rápidos o escurridizos.

Kyungsoo comenzó a enseñarle a agazaparse, a gruñir cuando era necesario y también a como mantenerse en silencio absoluto; lo que se le dificultó más a Baekhyun fue reducir su aroma, sin embargo ponía empeño.

Habían pasado casi dos horas y ahora ambos estaban en su forma humana, se encontraban bañándose en el río ya que se habían cubierto de lodo y hojas. Baekhyun no había podido cazar nada, pero Kyungsoo le dijo que no había problema, que era normal. Incluso a los alfas se les dificultaba cazar al principio, eso reconfortó a Baekhyun.

Así, cada vez que JoonGi se iba, Baekhyun se encontraba con Kyungsoo en el bosque; decía que él podía salir cuando quiera porque su alfa estaba ya sea borracho, trabajando o con omegas del burdel. 

—¿Qué es un burdel? —preguntó ya que jamás había escuchado esa palabra.

—Uhm pues es un lugar donde los omegas bailan y venden sus cuerpos, —se encoge de hombros.

Baekhyun frunce su ceño ante esa respuesta, la sentía extraña. —¿Vender sus cuerpos? ¿Como un brazo o algo así? —rasca su cabeza mientras tiene una lanza en su mano.

Kyungsoo había pensado que también sería bueno que aprendiera a pescar. Recuerda que fue Kai quién le había enseñado, dijo que a veces había escasez de presas en la tierra por lo que era bueno saberlo; mira a su pequeño haciendo casitas de tierra sabiendo que al menos tenía un pedacito de su amado con él.

—Soo, no entiendo eso, —hace un puchero sabiendo que fue ignorado.

—¿Ah? —mira hacia arriba y luego recuerda el tema sobre el que hablaban. —No, no lo venden de esa manera. —Dice con algo de gracia en su voz, —tienen sexo con alfas a cambio de dinero o a veces hasta a cambio de regalos como presas o cosas así, —se encoge de hombros mientras tira su lanza dando justo en el torso del pequeño pez azul cerca de él. 

—¿Entonces si tienes sexo con un alfa y este te da regalos es malo? —pregunta mirando hacia el agua.

—No siempre, si lo haces con tu pareja no es malo, —rueda los ojos ya que la paciencia no era su virtud.

—Oh ya entiendo, —asiente sintiéndose mejor.

Él había tenido sexo muchas veces con Chanyeol y este le había regalado muchas cosas por lo que por un momento pensó que había algo malo en eso. Pero el alfa había sido su pareja… o bueno algo así, su relación fue algo extraña.

—Tu barriga está creciendo, —dice después de un rato cuando se encontraban asando los peces, —¿JoonGi sabe que estás embarazado? 

Baekhyun da un mordisco lento a su pez y luego mastica aún más despacio mientras niega con su cabeza y desliza una mano por la pequeña curvatura en su abdomen, dónde descansaba su pequeño cachorro.

—No le he dicho, —susurra para luego mirar el fuego frente a ellos.

—Es mejor que nos vayamos antes de que lo sepa, tú aroma dulce aún es débil, —comenta mientras sonríe un poco al ver cómo Baekhyun toca su casi inexistente abdomen. —Hay que esperar a que acabe el invierno porque sino moriremos en la intemperie, —da otro mordisco.

—Lo sé, espero que no se de cuenta hasta eso, —dice preocupado imaginando múltiples escenas dónde JoonGi dañaba a su pequeño. —De verdad había pensado que él era una buena persona… —susurra.

—No te sientas mal, muchos omegas de aquí han sido traídos casi de la misma manera. Se aprovechan de nosotros porque no somos queridos en ninguna parte, —tuerce la boca y luego coge un poco de pescado con sus dedos para soplar, —ten cariño, mastica con cuidado, —le dice a su pequeño quien asiente aceptado el bocado de su madre.

—Yo quiero ser tan buena mamá como tú, —dice mientras mira con cariño la interacción del omega con su cachorro.

—No soy tan bueno, por mi culpa mi niño es golpeado por ese maldito, —aprieta la boca intentando calmarse ya que recordó como aquel alfa solía encerrarlo para golpear a su pequeño cuando esté hacia alguna travesura o mucho ruido. —Mi chiquito ha visto cosas que un niño no tendría que hacerlo, —su mirada se apaga mientras ve al pequeño comer. —Él para castigarme me… me tocaba mientras me golpeaba y hacía que mi cachorro viera, —traga saliva intentando no romper en llanto. —No soy buena madre.

—No, eso no es cierto, —levanta un poco su voz llamando la atención de ambos, —ese tipo es un asco, no es tu culpa, —se levanta y luego se sienta junto a Kyungsoo para mirarlo, —nosotros somos más débiles así que entiendo que no siempre puedes protegerlo, también sé lo difícil que es vivir solo así que no me imagino como debe ser con un cachorro, —abraza con calidez a Kyungsoo, —no te culpes, no eres malo, te esfuerzas.

El omega en sus brazos había comenzado a llorar sobre el pecho de Baekhyun, sus ojos estaban apretados mientras que su garganta se atoraba con los gritos que quería emitir. Odiaba su vida, era cierto, pero también era cierto que trataba de dar lo mejor de sí mismo para cuidar a su niño.

—¿Qué pasa a ama? —dice el pequeño con algo de dificultad.

—No le pasa nada, cariño, está bien, —le regala una cálida sonrisa para tranquilizar al cachorro quien asiente y sigue comiendo su pescado. 

Paso un rato antes de Kyungsoo finalmente se recuperará y susurró un suave gracias antes de limpiar sus mejillas. Se terminó su pescado y limpió las mejillas de su pequeño.

—Mañana seguiremos, en esta semana has avanzado bastante, —susurra con su voz nasal por haber llorado. 

—Gracias, —susurra para luego levantarse limpiando la falda de su vestido.

🌹

En el pueblo, Chanyeol se encontraba acostado en su cama mirando el velo en sus manos, lo estaba extendiendo. Se supone que iba a regalarle eso a Baekhyun por su cumpleaños, pero no pudo y le hacía sentir mal. Quería tanto ir hacia aquella cabaña, necesitaba verlo aunque sea un momento.

Esa noche había una tormenta con truenos seguidos, a él le daban igual porque sabía que solo eran unas cuantas luces con ruido, sin embargo pensaba que Baekhyun debía estar muy asustado dentro de sus mantas, quería ir a protegerlo.

Minha no tenía permitido el paso a su habitación además de que no tenía la llave del candado para abrir la puerta, por lo que no se enteraría que él no estaba. Se levanta dejando el velo a un lado y mira por su pequeña ventana que no había nadie afuera salvó mucha agua cayendo como cascada desde el cielo, los guardias no estaban.

Se coloca una capa de tela gruesa encima para luego salir por la ventana hasta que siente como sus botas pesadas tocan el suelo de lodo. Se agazapa para correr hacia los árboles del bosque mientras intenta ver a través de la cortina de agua pesada. 

Le costaba un poco seguir con los párpados abiertos ya que el agua lo impedía, pero aún así debía aprovechar lo que sucedía para poder ir a ver a su pequeño. Sintió como si fuera eterno el camino hacia la cabaña junto al río, pero finalmente pudo llegar a la parte frente a la puerta. 

Jadea cansado y siente como su corazón late rápidamente al saber que podrá ver nuevamente a su niño. Con decisión da un par de pisadas hasta llegar a la puerta y cuando la tocó, está se abrió sola lo que le pareció extraño, pero no prestó demasiada atención y entró encontrandose con que el jardín de Baekhyun estaba muerto. En cuanto estuvo adentro vio que todo estaba oscuro.

Comenzó a recorrer la casa y encontró algo, la habitación tenía luces prendidas de velas. Respira tranquilo para luego abrir la puerta y con pasos sigilosos se subió a la cama quitándose sus botas y su ropa mojada quedándose en ropa interior.

—Hola, amor, —susurra mientras se mete debajo de las cobijas y coloca sus manos frías sobre la cintura del otro, —lo siento tanto por no haber venido, perdóname cariño, —luego comienza a besar su nuca hasta que siente como el cuerpo se tensa y al levantar un poco la manta siente un olor a pimienta negra.

—¿Qué rayos haces? —una voz gruesa se escucha y luego sus ojos se abren al ver a su amigo frente a él. 

—¡¿Qué mierda haces aquí?! —exclama mientras limpia su boca por haber estado besando la piel del otro alfa, —un poco más y te terminaba follando, —da una arcada mientras sale de la cama. 

—Ya quisieras, —rueda los ojos, —estaba investigando algo y luego me cogió la tormenta así que me quedé a dormir aquí, —explica sintiéndose raro de haber sido tratado como a un omega, —¿Qué haces tú aquí?

—Aproveche la tormenta para venir a ver a Baekhyun, es todo, —se encoge de hombros. —¿Dónde está él? —su expresión de asco cambio olvidandose que había estado acariciando a Kai. 

—Uhm no lo sé, —hace una mueca.

—¿A qué te refieres? Ahora que lo dices, tú prometiste llevarme a Baekhyun, —entrecierra los ojos no queriendo pensar mal de él.

—Lo quise hacer, pero no encontré a nadie en la cabaña y cuando comencé a buscarlo en el bosque encontré algo, —se sienta en posición de indio mientras mira al otro alfa, —un cuerpo muerto…

—No, por favor no-

—No te apresures, no era Baekhyun… Al parecer Baekhyun no ha estado aquí desde hace mucho tiempo, —señala todo su alrededor lleno de una capa gruesa de polvo. 

—¿Cómo? ¿Y dónde está? —sentía como su lobo arañaba agonizando por querer ir a buscar a su omega.

—Eso estaba investigando estos días, —explica mientras suspira, —encontre algunas cosas, pero no es nada certero así que no-

—Solo escupélo ya, —rueda los ojos resoplando.

—Al parecer el líder tampoco sabe dónde está, eso lo supe extorsionando a algunos guardias, —dice haciendo una mueca y bosteza ya que aún era de madrugada, —sin embargo supe sobre la manada que se había alojado aquí hace un tiempo, son un montón de criminales.

—¿Criminales? —frunce su ceño.

—Sí, también hay personas con diferencias físicas como la de Baekhyun… —en ese momento recuerda a su pequeño de ojos bicolor. —Quizá él fue allá, aunque como te digo, no lo sé con seguridad, —mordisquea su mejilla interna.

—Podríamos ir allá, —dice apresurado.

—Estaba pensando en eso, pero no creo que el líder te deje salir del pueblo, —tuerce la boca y luego se arropa acostándose de nuevo.

—No me importa, ya no quiero seguir aquí… Tenía la esperanza de que Baekhyun estuviera aquí, pero si ni siquiera sé dónde está, —su respiración se hizo un poco pesada intentando imaginar dónde podría encontrarse su omega. —Él ha crecido toda su vida aquí, no puede estar solo, —se arrodilla en la cama y agarra por los hombros a Kai sentandolo mientras lo zarandea. 

—Ya, ya, —empuja a Chanyeol para que le dejé en paz, —podemos ir mañana, solo cálmate, ese pueblo está bastante lejos, —tapa su boca bostezando de nuevo.

—No quiero dejar a Baekhyun solo ¿Y si le ha sucedido algo? Soy tan idiota, como no me di cuenta que ese tipo no era mi omega, —suelta al alfa por completo y se derrumba en la cama.

—Era porque tenía un brebaje con su aroma encima, al parecer es un omega que cometió un crimen así que lo usaron para hacerse pasar por el tuyo, —explica mientras vuelve a dormirse.

Sin embargo Chanyeol no podía dormirse, no con la información que tenía ahora. Quería convertirse para correr hacia el bosque y buscar a su Baekhyun. Envidiaba como Kai podía dormir tan tranquilo, pero sabía que tenía que estar perfectamente despierto al día siguiente por lo que se acostó en la esquina de la cama para poder dormir.

Lo que Chanyeol no sabía era que Kai había tenido pesadillas desde hace muchos años y ahora que tenía una diminuta esperanza de que su omega y su bebé estuvieran en aquel pueblo, pudo dormir plácidamente pensando en que solo quizá podría encontrarlos pronto aunque intentaba no darse falsas ilusiones en caso de no hallarlos.

🌹

Baekhyun no sabía que hacer, habían pasado algunos días donde aprendió bastante bien como cazar, pero ahora sentía miedo. Miedo de ir al bosque a tratar de sobrevivir por sí mismo, pero al ver la pequeña curva en su abdomen le dió fuerzas así que dejó de pensar en los peligros de allá afuera.

Esa noche al igual que la anterior, llovía con fuerza, odiaba esos días ya que se sentía incómodo. Hacía mucho frio y todo se humedecía con más frecuencia.

Esa noche fue a dormir mientras JoonGi se bañaba, sabía que pronto se iría. El alfa había seguido igual, le gritaba cuando no le servía rápido el desayuno, lo empujaba cuando estaba de mal humor y le sacaba en cara que él le había dado un techo cuando nadie más quiso hacerlo.

No sabe que hora de la noche era, pero se despertó cuando sintió como algo tocaba su trasero apartando su ropa interior. Se tensó en el momento en que supo que JoonGi lo estaba acariciando y luego sintió como sus pechos eran masajeados.

—Joongi..  —susurra queriendose apartar, pero el otro lo agarró.

—Ya estoy jodidamente cansado de tus evasiones, —susurra con un tono de voz profunda que asustó al omega, —voy a joderte y te dejaras, —después de decir eso comenzó a besar su hombro.

—No quiero, por favor, no, —se remueve queriendo soltarse.

JoonGi se fastidia y luego se cierne sobre Baekhyun agarrando sus muñecas con una mano, luego golpea con fuerza la mejilla del omega dejándolo desorientado.

—Te he tenido mucha paciencia todo este maldito tiempo así que voy a tener lo que me corresponde, —da otro golpe en su cara para luego comenzar a desgarrar su piyama.

JoonGi bajo su boca hacia la de Baekhyun para atrapar sus labios mientras abría sus piernas, sin embargo un aroma demasiado dulce se emanó llegando hasta su nariz; olía a pasteles de melón.

—P-Por favor, —escupe un poco de sangre porque sus mejillas internas estaban heridas, —déjame, —susurra intentando alejarse.

—Estás… ¡Estás malditamente preñado! —brama enfurecido, —tú, maldita zorra, —coloca una mano en el cuello de Baekhyun apretando, —¿Acaso querías que criara a tu puto bastardo? —presiona más su mano mientras lo ve a los ojos, la mirada del omega era desesperada.

Baekhyun intentaba rasguñar la mano en su cuello, pero no tenía la misma fuerza que el alfa así que era inútil; sin embargo después de un momento pudo respirar otra vez así que comenzó a coger oxígeno, desesperado.

Sin embargo se quedó sin aliento cuando sintió un dolor agudo en su abdomen, baja la mirada viendo que JoonGi había golpeado su abdomen. Luego lo levantó de la cama solo para pegar su puño contra su cara volviendo a tumbarlo. 

—Me haz hecho perder el tiempo, —le escupe en la cara para luego patear su abdomen, —maldita zorra, —grita mientras coloca su pie sobre su abdomen.

Baekhyun había puesto sus manos intentando que no dañe su vientre, pero estaba siendo difícil. 

—¡Suéltame! ¡Déjame! —gritaba una y otra vez desesperado sintiendo el terror de ser asesinado en ese día, —¡Ayuda! ¡Por favor! —suplica desgarrando su garganta.

—Grita, pequeña puta, nadie te ayudará, —se inclina hacia abajo riéndose para luego tomar su cabello y golpear su cabeza contra el suelo, —voy a sacarte a ese maldito bastardo para luego preñarte, —le grita mientras se coloca entre sus piernas.

—¡No! ¡Déjame! —quería moverse, pero el golpe en su cabeza lo dejo mareado.

El alfa comenzó a frotar su miembro endureciendolo para luego alinear la punta de su miembro contra su entrada dispuesto a ingresar de golpe.

Baekhyun se encontraba llorando queriendo morirse, su abdomen y su cara dolían. Su bebé, había querido tanto protegerlo, pero tantos golpes seguro lo habían dañado. Se encontraba viendo borroso y solo sentía los toques asquerosos de sus manos sobre su piel y como algo se apretaba contra su entrada.

—Jodido hijo de puta, —Baekhyun escuchó a lo lejos y luego dejo de sentir como su piel era tocada. 

—Uhm… —gime adolorido cuando siente como alguien lo levanta.

—Ya, perdón por tardar, ¿Tienes tu mochila? —Baekhyun asiente y con su dedo débilmente señala debajo de la cama, —bien, —lo deja sentado en la cama y luego de un momento vuelve a ser levantado. —Trata de caminar, tenemos que irnos antes de que se levanté, —susurra viendo de reojo como el alfa quedó desmayado luego de que lo golpeó con una silla rompiéndola en su cabeza.

No planeaban escapar ese día, pero cuando Kyungsoo fue a comprar los huevos para el desayuno, pudo escuchar los gritos de Baekhyun así que se apresuro hacia la casa de JoonGi y le dió con lo primero que encontró al ver cómo casi viola a su amigo.

Baekhyun movió lentamente sus pies siendo ayudado a caminar hasta que con dificultad llegaron al lugar donde Kyungsoo le enseñaba a cazar y lo dejó sentado contra un árbol con su mochila a un lado.

—Ya vengo, iré por Hyungsoo y mi mochila, si JoonGi te encuentra te va a matar, nos tenemos que ir hoy, —besa su frente para luego levantarse, —vendré rápido.

Baekhyun solo asiente con su cabeza y luego se queda dormido por el golpe, sin embargo no sé percató de la sangre regandose por sus muslos. Su cachorro, él no merecía aquel final sin siquiera haber empezado a vivir.

No sabía cuanto tiempo había pasado, pero su cuerpo se llenó de terror cuando vió a un hombre alto acercándose a él, era un alfa aunque no podía distinguirlo bien ya que seguía viendo borroso. Luego se volvió a desmayar cuando un aroma profundo a mandarina lleno su nariz. Era su final y el de su bebé. Una lágrima cae por su mejilla pensando en que hubiera querido ver una última vez a Chanyeol aunque probablemente esté ni siquiera se acuerde de él.

—Te amo, Channie, —susurró con la voz rasposa estando inconsciente.