Bakugō se ha quedado en los dormitorios, según por problemas de salud -lo cual era falso ya que le dolía la cola como nunca-. Kirishima quería quedarse, cuidar de él, pero no querían levantar sospechas del tremendo show en uno de los cuartos de Yaoyorozu.

Lo cierto es que estaban usando un poco que Todoroki y su mejor amigo se habían besado como cortina de humo de que habían pasado hasta demás cosas. No era muy masculino ocultarse, pero no sabía cómo se lo tomaría el bicolor de que alguien había cogido con el que le gusta.

Al terminar las clases decide regresar pronto a los dormitorios, pero Midoriya le detiene en plena carrera.

—Hay algo de lo que debemos de hablar —sentencia ocasionando que se ponga impaciente.

—No puedo, debo de salir.

—Es sobre Kacchan.

El pelirrojo detiene su andar sintiéndose ansioso. ¿A qué se refiere?

Andan hasta el techo de la escuela, estar en la azotea es el mejor lugar para hablar de temas delicados, fumar un rato e, incluso, besarse. Pero justamente no hay nadie, qué conveniente.

—Si vas a decir algo que sea rápido.

—Sé que Kacchan y tú tuvieron relaciones.

—No te incumbe.

—Él me lo contó.

—Ya, ¿y qué?

—No se siente cómodo de cómo se han dado las cosas.

—¿De qué hablas?

—Tuvo relaciones contigo, no quiere arruinar su amistad contigo, deja de buscarlo.

—Blasty no pudo decirlo simplemente así.

—Lo hizo.

—Si él me lo dijera, lo entendería.

—No quiere hablar contigo, ¿sabes? ¿por qué yo sabría todo esto si se supone que es un secreto?

—¿De qué hablas?

—Lo suyo fue un error; te dije que me gusta Kacchan y él sabe de mis sentimientos, simplemente me está escogiendo.