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𝐭𝐡𝐢𝐫𝐭𝐲-𝐬𝐞𝐯𝐞𝐧



JOHN B Y YO NOS SENTAMOS en el muelle en silencio durante una hora más o menos, absorbiendo la leve brisa y disfrutando del sonido de las pequeñas olas. Antes de darme cuenta, los bostezos se acercaban cada vez más y mi largo día comenzaba a afectarme. Me levanté, sacudiéndome los pantalones cortos y mirando a John B.

-Voy a seguir adelante y dormir un poco. Kie y JJ están en casa, eres más que bienvenido a unirte.

-No, creo que podría sentarme aquí un poco más y luego estrellarme en mi propia cama.- respondió, mirándome antes de asentir con la cabeza hacia el horizonte.-Además, tal vez podría quedarme y esperar despierto hasta el amanecer. Ver de qué se trata todo el bombo.

-La oferta estará válida en caso de que te canses y no quieras estar solo- sonreí, alejándome del agua.-Y si te quedas despierto, déjame saber lo que piensas sobre mi interesante hábito matutino.

-Lo haré.- se rió, asintiendo hacia mí. -Buenas noches Junie.

-Buenas noches, John B-respondí, dándole una suave sonrisa antes de darle la espalda y luego caminar por el muelle, distanciándome de él.

Abracé mis brazos mientras caminaba por su patio y hacia el terreno que separaba nuestras parcelas de tierra. Agachándome debajo de las ramas, entré al claro y luego hasta la puerta, abriendola ligeramente antes de subir los escalones y entrar por la puerta principal. La lámpara de la mesa de la cocina se había atenuado considerablemente y me acerqué a ella, apagándola completamente antes de dirigirme al sofá donde había visto a JJ por última vez.

Como era de esperar, estaba completamente tumbado, la manta todavía lo cubría y su cabeza se volvía hacia mí, con sus ojos cerrados. Probablemente fue lo más pacífico que le había visto. Sus cejas se fruncieron ligeramente y parte de su pelo rubio desgreñado caía contra un lado de su cara. Miré hacia el pasillo, viendo que la puerta de mi habitación todavía estaba cerrada, lo que significaba que Kie probablemente todavía estaba profundamente dormida en mi cama. No quería molestar a ninguno de los dos, sabiendo lo duro que parecía llegar el sueño en estos días, así que lentamente me alejé del sofá y me volví para ir hacia el pasillo y bajar a la habitación de invitados.

-¿A dónde vas?- JJ murmuró, moviendo la cabeza contra la almohada del sofá.

Me volví para verlo tirado allí, con los ojos aún cerrados.

-No quería despertarte. Pensé en ir a dormir a la habitación de invitados.

Se aclaró la garganta, manteniendo los ojos cerrados mientras levantaba la manta hasta la mitad y se empujaba hacia el respaldo del sofá.

-Venga.

Miré hacia la puerta de Nana, escuchando su regla en el fondo de mi mente. Pero vamos, era tarde y después de hoy, ni siquiera JJ medio dormido se atrevería a romper su nueva regla. Me quité los zapatos y me agaché, me subí al sofá y rodé de lado, de espaldas a él.

-¿Como les fue?- Preguntó, dejando que la manta nos cubriera a los dos.

-Le hablé de Rafe.

JJ rodó sobre su costado, pasando un brazo alrededor de mi cintura.

-¿Lo hiciste?

Asenti.

-Quiere matarlo.

JJ se rió entre dientes suavemente en mi cabello mientras descansaba su barbilla en el hueco de mi hombro.

-Que se una al club.

-Y luego- respiré hondo y suspiré, colocando una mano sobre la suya. -Le hablé de nosotros... y él dice que está de acuerdo.

-¿Ves? Te dije que no tenías nada de qué preocuparte- exhaló un largo suspiro mientras bostezaba.-Ahora duerme un poco.

Nos quedamos allí en silencio por solo unos momentos antes de que la confesión de John B volviera a ocupar el primer plano de mi cerebro.

-Sabes que él solo creó la regla porque les gustaba a los tres, ¿verdad? Y no quería que la relación de nadie conmigo cambiara.

Pensé que ya estaba profundamente dormido de nuevo, hasta que se burló, abrazándome.

-Ese bocón.

Mantuvimos nuestra risa enredada en silencio mientras él se relajaba contra mí, mi pulgar rozando el dorso de su mano.

-Dice que ha sabido de nosotros todo el tiempo... al menos la parte de los sentimientos. Aparentemente, leyó la entrada de mi diario sobre ti en octavo grado. Así que supongo que nunca fue realmente un secreto de todos modos.

-¿Diario?- Preguntó JJ, levantando un poco la cabeza mientras me miraba.-¿Puedo leerlo?

-No.

-Pero...

-Buenas noches, JJ.- Me reí cuando él dejó caer la cabeza sobre la almohada en derrota.

Suspiró y se inclinó, besando mi mejilla.

-Buenas noches, June Bug.

-Ah, y por cierto- dije, mirándolo por encima del hombro.-Dijo totalmente que estaría de mi lado si alguna vez rompíamos.

Dejó escapar una burla dramática, con el ceño fruncido.

-¿Él dijo que?

-No... pero todos sabemos que lo estaría.

JJ se rió y me acercó más a él mientras apoyaba la barbilla en el hueco de mi cuello.

-Menos mal que nunca tendremos que averiguarlo.

-¿Oh si?

-Mmhm-murmuró, su voz se volvió suave. -Estoy en esto a largo plazo, June Bug.

Sonreí, dejando que mi cabeza se hundiera más en la almohada mientras apretaba su mano suavemente.

-Yo también.

✗✗✗✗✗✗✗

Respiré hondo y exhalé, tirando de la manta sobre mis hombros y sintiendo mi cuerpo hundirse más en el sofá. Inmediatamente noté la falta de la presencia de JJ ya que ahora estaba rodando sobre mi lado derecho y mi cara estaba casi presionada contra el respaldo del sofá. Pensé en darme la vuelta para tratar de ver adónde había ido, pero las voces silenciosas que venían de la cocina respondieron a mi pregunta.

-Bueno, me alegro de que te hayas alejado de él, JJ. Sé que es tu padre... pero me alegro de que hayas dado el paso para salir de esa situación.-Dijo Nana, el sonido de las patas de la silla de la cocina raspando suavemente contra el suelo.

-Bueno... se lo debo todo a Junie. Si nunca se entera...-La voz de JJ se apagó por un momento antes de suspirar.-No sé qué hubiera pasado.

-Es bueno que lo sepa. Sé que era lo último que querías, pero necesitas gente a tu lado y los secretos...-Nana hizo una pausa por sólo un segundo-Los secretos pueden hacer más daño a una relación que cualquier otra cosa.

Fruncí el ceño, dejándome adelantarme demasiado mientras mi mente comenzaba a reflexionar sobre lo que Nana podría haber estado hablando, pero JJ se aclaró la garganta y me volvió a enfocar antes de que pudiera adentrarme demasiado.

-Lo siento... por todo. Eres lo más cercano que tengo a una madre y yo... lo siento.

-Está bien, JJ. Es solo que he pasado por toda esta fase de la adolescencia con Corde...-Dudó al escuchar el nombre de mi madre, aclarándose la garganta.-No quiero ver a ninguno de los dos seguir el mismo camino, ¿de acuerdo?

JJ tosió, sin duda sacudiendo la cabeza.

-Créeme, Nana Addie. Nunca volverá a suceder, lo juro.

Nana se echó a reír, recogiendo las llaves del coche de la mesa.

-JJ, ustedes dos están en una edad en la que explorar su...

-Por favor... no, esto no otra vez Nana Addie, te lo ruego.

-Todo lo que te pido es que respetes mi regla de dormir en dormitorios separados y por favor, por favor, si ustedes dos alguna vez...

JJ gimió, un golpe suave golpeó la mesa de la cocina.

-Nana Addie, por favor.

-Solo usen protección.

Podía sentir la vergüenza de segunda mano de su interacción tomar el control y me senté, estirándome y bostezando como si acabara de despertar.

-Oh, buenos días Junie-sonrió Nana, apoyada contra la encimera de la cocina.

-Buenas, June Bug- dijo JJ, girando su silla.

-No te preocupes Nana, no me quitaron la ropa anoche-le dije, levantando una ceja y haciéndole saber que había escuchado su conversación.

Ella sonrió, asintiendo con la cabeza antes de incorporarse.

-¿Ustedes dos tienen planes para hoy?

JJ me miró y me encogí de hombros.

-John B está de vuelta en el Chateau, podríamos alcanzarlo hasta que termine la entrevista de Pope.

-Así es- dijo Nana, caminando hacia la puerta principal.-Tendré que pasar por Heywards y decirle que le dé a Pope mis mejores deseos.-Abrió la puerta principal y se volvió para mirarnos.-Si ustedes dos, Kie o John B se aburren, estoy segura de que puedo encontrar algo de trabajo en la biblioteca para que lo hagan.

-Lo consideraremos, Nana- respondí, JJ y yo saludando mientras ella salía de la casa.

JJ se levantó de su silla y caminó hacia el sofá, dejándose caer a mi lado mientras yo me recostaba también.

-Bueno, solcito, ¿cómo dormiste?

Me encogí de hombros, moviendo la cabeza de un lado a otro.

-No muy bien, supongo.

JJ se burló, llevándose una mano al pecho.

-Uy, eso duele.

-No, no es eso- me reí, rodando los ojos.-Es solo, lo que dijo John B... sobre Ward matando a Big John. No puedo entenderlo, ¿sabes?

-Bueno- suspiró, inclinándose hacia atrás y colocando su brazo sobre mi hombro.-Yo, por mi parte, no dejaría que el hombre más grande de Kildare tenga al menos algún tipo de tendencia loca. Quiero decir, has conocido a Rafe y si eso no es una gran pista, entonces esta es.

Suspiré, negando con la cabeza.

-Quiero decir... ¿es por eso que Ward lo acogió? ¿Conciencia culpable tal vez? Y si es por eso... ¿entonces sabe que John B está buscando el oro? ¿Se lo dijo Sarah?

JJ me acercó a su costado, besando la parte superior de mi cabeza antes de descansar su cabeza encima.

-Necesitas relajarte, Junie. Estás haciendo que me duela el cerebro.

-Hablo en serio, JJ. Si Ward se entera de la búsqueda de John B... podría saber que lo encontramos.

-Bueno, es bueno que tengamos a John B al lado para preguntar, ¿eh?

Negué con la cabeza.

-No lo sé... todo parece un poco morboso, ¿no? ¿Preguntar cómo Ward mató a Big John?

JJ fue a responder cuando escuchamos la puerta de mi habitación abriéndose, Kie saliendo del pasillo unos momentos después. Se acercó al sofá y se sentó en el sofá de dos plazas que estaba a la derecha de la mesa que estaba entre los dos sofás. Sacó su teléfono de su bolsillo y nos lo agitó, suspirando.

-Solo tengo una barrita, pero le envié a Pope un mensaje de texto deseándole buena suerte. Dudo que responda después de todo lo que pasó... pero es un paso.

-Se recuperará, Kie. Está estresado por todo-Respondí, dándole una pequeña sonrisa.

-Yo espero que sí.- Murmuró, mirando su teléfono, la pantalla permanecía oscura.

Todos nos sentamos en silencio antes de que JJ se levantara del sofá con un suspiro, caminó hacia la puerta principal y la abrió antes de darse la vuelta y mirarnos.

-¿Bien?

-¿Y bien qué, JJ?-Respondió Kie, mirando por encima del hombro.

-¿Nos vamos a sentar aquí todo el día o vamos a preguntarle a John B qué diablos pasó ayer?

-Quiero decir, ¿qué más vamos a hacer?-Kie y yo intercambiamos una mirada y me encogí de hombros. -Quiero decir, ¿qué más vamos a hacer?

Ella suspiró y asintió con la cabeza, los dos nos levantamos de nuestros lugares y caminamos hacia JJ.

-Gran idea, JJ. ¡Eres un genio, JJ!- Dijo JJ, imitándonos mientras salíamos por la puerta principal. -Vaya, gracias, chicas. ¡Es agradable ser apreciado a veces!

-Déjalo, JJ- dijo Kie, poniendo los ojos en blanco mientras caminaba delante de nosotros y se dirigía hacia el terreno entre nuestras dos casas.

-Vaya, parece que alguien se despertó en el lado equivocado de la cama esta mañana- murmuró, dándose la vuelta mientras yo cerraba la puerta principal.

-Dale un respiro. Ella y Pope tuvieron una discusión bastante acalorada anoche. Probablemente todavía esté tratando de recuperarse, considerando que Pope es el más tranquilo de todos nosotros.

-Pensé que la iba a empujar en el agua, honestamente-dijo JJ, caminando a mi lado mientras se dirigía hacia el Chateau.-Pero... tenía razón, ¿sabes? Ella no estuvo cuando Big John se fue...

-Escuchen, estoy segura de que tenía una buena razón. Si lo piensan, no éramos tan cercanos a ella en ese entonces. No los presenté, se terminó la escuela, y Big John desapareció, ¿qué? ¿tres meses más tarde?-Me agaché debajo de las ramas.-Eso no justifica exactamente que ella necesite estar a su lado 24 horas al día, 7 días a la semana.

Caminamos por el terreno para ver a Kie corriendo por los escalones de la entrada lateral y dirigiéndose hacia nosotros. Ella se detuvo, sacudiendo la cabeza.

-No estaba adentro. ¿Estás segura de que está aquí?

Asentí con la cabeza, mirándolos a ambos.

-Dijo que iba a dormir aquí y quedó sentado en el muelle cuando me fui- Hice una pausa, mirando hacia el muelle y, aunque no era una vista clara, definitivamente se podía ver la forma de una persona acostada en el muelle.-Vamos, sé dónde está.

Efectivamente, mi intuición era correcta y John B estaba acostado allí, profundamente dormido en el muelle y usando un viejo chaleco salvavidas como almohada. JJ, siendo JJ por supuesto, se encargó de correr delante de Kie y de mí y despertar a John B fingiendo que lo iba a empujar al agua. Y cuando John B echó el brazo hacia atrás y golpeó a JJ en el hombro, Kie y yo no teníamos ninguna simpatía por él. John B no parecía estar sufriendo de falta de sueño y cuando le pregunté si había dormido aquí toda la noche, dijo que había sido un accidente, pero que solo se había quedado dormido unas horas antes.

No sabía por qué y dijo que realmente no podía explicarlo, pero algo en él le dijo que fuera a la casa de la Sra. Crain. Pensó que tal vez Ward sabía del oro y algo que él había dicho volviendo a su mente era la causa. De cualquier manera, hace unas horas, había conducido hasta la casa de los Crain, y bajo y justo ahí estaban las cosas de Cameron Development por todas partes. Señales, carretillas, palas y cosas para bloquear el área y evitar que se pasee por ahí, lo que sea, John B dijo que estaba allí. Incluso habían dejado atrás la máquina que usaron para bajar al pozo, que según John B, es la forma en que regresó... solo para descubrir que el oro se había ido.

Ward Cameron lo había robado todo, directamente de nuestras manos de 16 años.

-¿Estás seguro de que tiene todo?- Preguntó Kie, con los hombros caídos hacia adelante y llenando el deprimente silencio.

-Todas las barras.- respondió John B, mirando hacia el techo que cubría el extremo del muelle.-Todo.

-¿Por qué necesita el oro de todos modos?- Pregunté, dejándome caer en el banco después de pasar la mayor parte de los últimos minutos caminando de un lado a otro. -Es asquerosamente rico.

-Es un capitalista importante, Junie- suspiró Kie, mirando hacia atrás a John B, quien finalmente estaba empezando a tener el desgaste de su muñeca.

-Mira-gruñó, quitando completamente el yeso de su muñeca y tirándolo hacia el banco, el yeso aterrizó justo al lado de mis pies.-No es como si esperara un final feliz o alguna mierda.

-Habla por ti mismo sobre esa mierda del final feliz, hombre- dijo JJ, tomando otro trago de su porro y mirando hacia el pantano.

Kie miró el yeso, mirándolo a él.

-John B...

-¿Qué, Kie? Es una pequeña fractura. ¿A quién le importa?

Suspiró, agarrándose a la barandilla mientras negaba con la cabeza.

-Deberías preocuparte. Tu brazo estará estropeado de por vida.

-Está bien. ¿Ves?- Dijo, cerrando los ojos y levantando las manos, moviendo los dedos.

Me levanté del banco y me acerqué a JJ, apoyando los codos en el borde del muelle y empujando su muslo con el codo derecho.

-¿Un centavo por tus pensamientos?

-Preferiría tener 80 millones- murmuró, arrojando su porro al cubo del suelo.

-Apesta, lo sé-suspiré, volviéndome hacia él.-Pero John B tiene razón... ¿qué esperábamos que sucediera? Esta no es una película de Disney en la que los desvalidos ganan al final.

Se volvió para mirarme, dejando que sus piernas colgaran del borde.

-En lo que a mí respecta, esos 80 millones iban a ser el comienzo del mío, June Bug.

Caminé hacia él, parándome frente a él mientras comenzaba a jugar con el anillo negro en su pulgar. Todos estábamos entusiasmados con la posibilidad de encontrar y poseer el oro, cada uno por nuestras propias razones... pero supongo que cuando todo se redujo, además de John B, por supuesto, JJ era el que más quería encontrarlo.

-Bueno, tal vez me equivoque y la suerte estará de nuestro lado por una vez. Convirtamos esto en la mejor historia de desvalidos de la vida-Sonreí, sosteniendo sus manos y entrelazando mis dedos con los suyos.

Se rió y puso los ojos en blanco, extendiendo su mano derecha y levantando su anillo de plata que todavía descansaba en la cadena del collar alrededor de mi cuello.

-Realmente tienes una forma de mejorar las cosas, ¿eh?

-Es por eso que ustedes me mantienen cerca, ¿no?-Me reí, apretando su mano izquierda.

Se encogió de hombros, dejó caer la mano y sonrió.

-Eh, eso y no eres exactamente difícil para los ojos.- Dejé caer su mano y me burlé, pero él solo se rió y me atrajo hacia él, envolviendo sus brazos alrededor de mi cuello.-Es broma, solo estoy bromeando. Te guardamos por tu cerebro también.

Envolví mis brazos alrededor de su cintura y lo abracé.

-En el lado positivo, incluso si todo no funciona, al menos me tienes a mí- Me aparté y asentí.-Y a John B y Kie-miré más allá del hombro de JJ para ver nada menos que a Pope corriendo hacia arriba.-¿Y... Pope?

JJ me miró con una ceja levantada.

-¿Por qué dijiste que Pope era incluso una opción para dejar atrás?

-No, quiero decir que...

-¡Chicos!- Pope gritó, agitando un brazo en el aire mientras se acercaba al muelle.-¡Chicos!

-¡Oh, mira, es Pope!-Dijo JJ, sonriéndome.

-Como si no hubiera dicho eso-respondí, poniendo los ojos en blanco y saliendo de entre sus piernas, volviéndome para mirar a Pope, que se había detenido en medio de la zona de carga, de pie junto a John B.

-Oh, oh-resopló, apoyando las manos en las rodillas mientras trataba de recuperar el aliento.-Oh, Dios. Corrí todo el camino hasta aquí.

-¿Estás bien?- Preguntó John B, girando la cabeza hacia un lado para mirar a Pope.

-¿Cómo estuvo la entrevista, Pope?- Preguntó JJ, asintiendo con la cabeza.

-Sí, ¿estamos viendo al próximo destinatario de la Beca al Mérito Lucas T. Vanderhorst o qué?-Sonreí, cruzando los brazos.

-No preguntes-resopló, sacudiendo la cabeza y levantándose lentamente con la camisa empapada en sudor.

-Está bien- susurré, mirando a JJ.

-JB- continuó jadeando, asintiendo hacia John B.-Mira, lo siento, amigo. Sobre todo.

-Está bien.-John B murmuró, mirando al techo.

-Pero, pero no tengo mucho tiempo, y... y tengo información que es tácticamente relevante.-Nos miró al resto de nosotros mientras comenzaba a hablar con las manos.-Entonces, antes de mi entrevista, mi papá dijo que iba a la pista de aterrizaje privada para cortar las palmas del gran avión de los Cameron. Porque era demasiado pesado y necesitaba una pista de aterrizaje más larga para despegar.

JJ se inclinó hacia mí con el ceño fruncido.

-Deberíamos estar preocupados, parece un poco agotado... y eso dice mucho considerando que es Pope- Susurró, asintiendo con la cabeza en dirección a Pope.

-Probablemente esté tratando de no morir de un golpe de calor si corrió hasta aquí- respondí, asintiendo con la cabeza.

-Entonces, estoy sentado en mi entrevista, pensando para mí mismo, Hm. ¿Por qué Cameron necesitaría una pista de aterrizaje más larga para despegar? ¿Qué podría ser tan pesado?

-No está fuera de lugar, es un maldito genio-susurré, una sonrisa formándose en mi rostro.

-El oro-agregó JJ, mirando a Pope y asintiendo.

John B se burló con incredulidad, sentándose y mirando a Pope.

-Así es.

-¡Exactamente!- Pope dijo mientras agitaba sus brazos alrededor.-Chicos, esta es nuestra oportunidad, pero se va esta noche y tenemos que irnos.

Kie sonrió, empujándose fuera del banco.

-Chicos, no podemos rendirnos ahora.

-¿Cuál es el plan, grandullón?- Preguntó JJ, mirando a John B.

-Nos robamos esa mierda.- John B sonrió, mirándonos a todos.

-¡Demonios, sí, lo haremos!-JJ sonrió, bajó de un salto de la cornisa y se acercó a Pope y le dio una palmada en el hombro.-Pope, te devolveré el 5% que me debes por protección si podemos lograrlo.

-¿El 5% que nunca accedí a darte, quieres decir?-Pope gritó cuando JJ y Kie empezaron a caminar por el muelle. -¡Nunca acorde darte el 5%!- Gritó, gimiendo y corriendo tras ellos.-¡JJ!

John B se volvió hacia el agua, con las manos en los bolsillos mientras la risa de nuestros amigos se alejaba de nosotros. Me acerqué a él y le di un codazo en el hombro con el mío, mirándolo.

-¿Nervioso?

Respiró hondo y suspiró, sacudiendo la cabeza y poniendo su brazo alrededor de mi hombro, acercándome a su costado.

-No, solo quiero hacer esto... por mi papá, ¿sabes?

-Por Big John- Sonreí, envolviendo un brazo alrededor de su cintura.

-¿Vendrán ustedes dos o qué?- Gritó JJ, de pie junto a la camioneta y haciéndonos señas.-No me opongo a tomar otro 5% de los dos.

-Controla a tu novio, Junie, dios.-se rió John B, mientras nos dábamos la vuelta para caminar por el muelle.

-¿No crees que lo he intentado desde que lo conocimos?-Respondí, señalando en dirección a JJ.-Él hace lo suyo.

-Bueno, si pudieras convencerlo de que no me quite el 5%, sería genial.

-Lo haré, JB.

✗✗✗✗✗✗

-Entramos allí, a lo ninja.- dijo JJ, recogiendo otras dos balas para cargar en el cargador.-Hacemos que Ward Cameron ruegue por misericordia, nos fugamos con la mayor cantidad de oro posible, y nos vamos, fuera de aquí.

Miré a mis amigos, ninguno de ellos parecía preocupado en lo más mínimo por exactamente dónde JJ había conseguido la caja de munición o cómo tenía acceso a ella. Mi mejor suposición podría haber sido que se lo arrebató a su padre, asumiendo que Luke Maybank tenía un arma. De lo contrario, me quedé sin ideas y solo podía esperar que no hubiera hecho nada drástico para conseguirlo.

-Envía esa mierda por el intercostal- John B agregó, mirando a Kie mientras continuaba conduciéndonos hacia la Figure Eight y hacia la pista de aterrizaje privada.

-Espera el clima- intervino Kie, con una sonrisa en su rostro.

Pope asintió con la cabeza, tan emocionado como el resto de nosotros.

-Podríamos escaparnos a Cuba.

-¿Lo siento, Cuba?-Pregunté, levantando una ceja.-¿En qué mundo sería una idea remotamente buena?

Pope hizo un puchero, mirándome.

-Hice un proyecto en ese país el semestre pasado... y realmente quiero probar una auténtica Ropa Vieja.

-Cuba es un no de mi parte, hermano- respondió JJ, sacudiendo la cabeza, cargando el arma y amartillándola. -Tiene que ser Xcalak, la joya de Yucatán. Langostas tan gruesas, mangos y no hay palabra para el dinero.

-¿400 millones de dólares y ustedes dos eligen Cuba y México?-Pregunté, recostándome en el asiento.

-¿Dónde sugieres, oh Junie la Sabia?- Preguntó JJ, dándome una sonrisa sarcástica.

-Jamaica, duh.- Sonreí, sentándome de nuevo.-O las Bahamas, ambas son hermosas y tropicales, así que anotenme ahí.

-Ambas también requieren visas de entrada- respondió JJ, sacudiendo la cabeza.

-También México y Cuba, idiota-le respondí, empujando su pierna con mi zapato.

JJ sonrió, volviendo a poner la tapa en la caja de balas.

-No si sabes adónde ir.

-Ahora que ustedes dos terminaron, ¿estamos todos de acuerdo en que elegiremos un lugar una vez que obtengamos el oro y nos subamos a un bote?-Preguntó John B, mirándonos a todos.

-Estoy dentro.-Kie asintió.

Pope estiró las piernas en el espacio vacío junto a mí.

-Suena bien.

-¿JJ? ¿Junie?- Preguntó John B, mirando por el espejo retrovisor.

JJ se dejó caer a mi derecha y apoyó las piernas en una caja vacía, descansando su brazo detrás de mí.

-Estoy listo para ir a donde sea siempre que tenga a June Bug, y ochenta millones de dólares.

-Bien-respondió, asintiendo con la cabeza.-Hagamos esta mierda.

El silencio se apoderó de la furgoneta mientras los bajos retumbos del motor se mezclaban con la suave música procedente de los altavoces de la radio. JJ tenía su muslo presionado contra el mío y su brazo colgado detrás de mí, pero su cabeza descansaba contra el reposacabezas y se volvía hacia la ventana, viendo los árboles correr a nuestro lado.

-¿Podrías mover eso, por favor?-Le pregunté, señalando su regazo con la cabeza.-Preferiblemente no apuntando en mi dirección.

JJ miró la pistola en su regazo, con una sonrisa juguetona en su rostro mientras la recogía.

-Por un segundo pensé que estabas hablando de él y estuve a punto de decir que estaba muy ofendido.

-¿Él?- Le pregunté, levantando una ceja mientras colocaba el arma dentro de su mochila.-Si dices que nombraste a tu...

-Gerald.-Respondió, sentándose de nuevo. -Su nombre es Gerald. Actualizate June Bug, todos los chicos nombran a su... ya sabes.

-Eso es algo que podría haber pasado toda mi vida sin saber.

Crucé mis brazos mientras él se reía, atrayéndome hacia él.

-Anímate, June Bug. Él es un gran admirador tuyo...

-Te daré oficialmente mi 5% si nunca lo llamas o dices Gerald nunca más- respondí, volviéndome hacia él.

JJ inclinó la cabeza hacia atrás mientras se reía de nuevo, antes de inclinarse y besar mi frente.

-De acuerdo.-Miró su regazo, un ceño falso en su rostro.-Lo siento amigo, ha sido un buen viaje.

-¿Ya terminaron ustedes dos?- Preguntó John B, mirándonos.-Porque estamos aquí y me gustaría mucho que esta conversación nunca salga de esta camioneta.

-O para que se hable de él y lo repita de nuevo, gracias-añadió Pope con los brazos cruzados.

-Claro, hombre- respondió JJ, mientras la camioneta se detenía.

JJ abrió la puerta trasera cuando Kie y John B salieron por sus respectivas puertas. Conducir hasta la pista de aterrizaje privada nunca fue una opción, por lo que nos vimos obligados a hacer un pequeño todoterreno a través de las afueras de la zona de césped detrás de la propiedad encadenada para incluso echar un vistazo a la pista de aterrizaje. Corrí detrás de JJ, John B nos dejó a todos contra la cerca cuando el avión privado de Ward Cameron apareció a la vista, y una camioneta blanca estacionada junto a él con hombres cargando maletas negras en el avión con la ayuda de una carretilla elevadora.

-¿Cuál es el plan? A grandes rasgos.- Preguntó Kie, acercándose al lado de John B.

-No creo que hayamos llegado tan lejos-respondió, sacudiendo la cabeza mientras todos miramos a través de los eslabones de la cadena.

-No es exactamente terreno cubierto, así que no podemos acercarnos sigilosamente a él. Ward nos vería venir desde una milla de distancia y nos pondría seguridad más rápido de lo que se podría decir oro-respondí, agarrándome a la cerca mientras mirábamos impotentes el oro cargándose en el avión.

Pope apretó los prismáticos contra la valla y enfocó el frente.

-Están cargando el oro.

John B tomó los prismáticos a continuación, mirando a través de ellos mientras el resto de nosotros tratábamos de reconstruir lo que estábamos viendo y buscando una forma de entrar.

-Ahí está Ward.

-¿Cómo se supone que vamos a entrar ahí?- Pregunté, asintiendo con la cabeza en la parte superior de la cerca. -Tiene púas y no veo un punto débil en la cerca para que podamos avanzar.

-No hay forma de que los kooks estén encima de mantener todo seguro-respondió JJ, pateando la parte inferior de la cerca para tener un margen de maniobra. -Tiene que haber alguna forma de entrar. Dudo que seamos los únicos que hemos intentado irrumpir aquí.

-¿Por qué alguien más que un kook necesitaría la pista de aterrizaje privada, JJ?- Pope preguntó, sacudiendo la cabeza.

Empujé a Pope a mi izquierda, colocándolo junto a JJ mientras los dos me miraban.

-No voy a permitir que ustedes dos me ensordezcan cada oído con sus discusiones.-Miré a John B, lista para pedir los binoculares cuando noté que ya los tenía abajo.-¿John B?

-¿Qué?- Preguntó Kie, mirándolo mientras seguía mirando al frente. -¿Qué?

John B tragó saliva, una mirada de preocupación cruzó su rostro.

-Es Sarah.

-¿Ella está con él?-Pope preguntó mientras él y JJ miraban a John B.

-¿Qué?-Me volví hacia la cerca, entrecerrando los ojos y tratando de concentrarme en la escena que tenía delante. -De ninguna manera, ella no iría con Ward... ¿o sí?

-Bueno, quiero decir, es su papá- respondió JJ, agarrándose a la cerca. -No te ofendas, John B, pero ¿qué tan seguro estás de que ella no le contó a Ward sobre el oro?

-Ella no haría eso, ¿de acuerdo?-Gritó, agarrando los binoculares.-Sarah... ella, simplemente no lo haría. Ella sabe lo que esto significa para mí... para todos nosotros.

-John B tiene razón, Sarah no nos haría esto.- Kie estuvo de acuerdo, asintiendo con la cabeza.

-¿Qué? ¿Ahora ustedes dos son de repente mejores amigas?-Pope respondió, poniendo los ojos en blanco.

-Oh, lo que sea Pope, como si no hubiese querido dejarnos varadas en el pantano en el barco de tu padre.- respondió Kie, apartando la mirada de él. -Junie, ¿puedo conseguir algo de respaldo aquí?

Me mordí el labio inferior, tomé un respiro y suspiré mientras me volvía hacia Pope.

-Tiene razón, Pope. Puede que hayamos reavivado nuestra amistad con ella, pero Sarah no nos traicionaría así.

Pope miró de mí a Kie y luego a mí antes de volverse hacia la cerca, agarrándose a los eslabones de la cadena.

-Espera un minuto-dijo John B, acercándose los binoculares a los ojos mientras los presionaba contra la cerca. -La está lastimando.

Kie giró la cabeza en dirección a la pista de aterrizaje, tratando de echar un vistazo para ver si tenía razón.

-¿Qué?

-¿Qué?- JJ repitió, sus cejas se fruncieron mientras miraba a John B.

-Están peleando- respondió John B, sacudiendo ligeramente la cabeza.

A lo lejos, apenas se podía distinguir a Ward obligando a Sarah a subir los pequeños escalones del avión y entrar en el avión, desapareciendo pronto de la vista.

-Ella definitivamente no está allí de buena gana, de ninguna manera- dije, mirando a John B.

-Mierda- jadeó Pope, sacudiendo la cabeza con incredulidad.

John B se apartó de la cerca y corrió hacia la camioneta. Inmediatamente sentí que yo hacía lo mismo, mis pies me llevaron justo cuando él llegó a la puerta del conductor.

-¡John B!- Se subió al asiento y fue a cerrar la puerta justo cuando yo subía corriendo. Lo agarré, reteniéndolo. -¿Qué demonios estás haciendo?

Tenía una mano en la llave y la otra en el volante, jadeando mientras se volvía hacia mí.

-Estoy encontrando un punto débil para romper... ¿estás dentro?

Volví a mirar a nuestros amigos que todavía estaban acurrucados contra la valla, mirando impotente mientras otra de nuestras amigas era obligado a subir a un avión. Lo miré y solté la puerta.

-Qué diablos. No he sido totalmente castigada todavía este verano, no es como si esto fuera a cambiar nada.

Él sonrió y se inclinó sobre el asiento del pasajero, asintiéndome.

-Venga.

Corrí alrededor de la camioneta y me subí al asiento, cerrando la puerta detrás de mí cuando él la encendió. Me puse el cinturón de seguridad y miré hacia la parte trasera de la camioneta.

-Está bien, entonces creo que puedo inventar una mentira lo suficientemente creativa como para llevarnos a la pista de aterrizaje si regresamos a la entrada principal.

-Sí, eso suena bien.- Asintió, poniendo el coche en marcha mientras nuestros amigos se daban la vuelta.

-¿Hey qué están haciendo?-Pope gritó, los tres se volvieron hacia la camioneta.

-John B, Junie. ¿A dónde van, chicos?- Preguntó Kie, siguiendo a Pope.

-¡Déjanos entrar, hombre!-JJ gritó, los tres ahora se dirigían hacia la camioneta.

-Espera, Junie.-Dijo, agarrando el volante.

-¿Espera? ¿De qué estás hablando? ¿John B, que demonios?

John B pisó el acelerador, enviándonos a los dos más a nuestros asientos.

-Encontré otra manera.

-¡Oye, John B, detente!- Gritó JJ, agitando los brazos.-¡Junie, sal!

Mi mano agarró la manija y me apoyé contra mi asiento mientras la camioneta ganaba velocidad y la reja se acercaba.

-¡Detente, John B, detente!- Kie gritó cuando Pope la apartó de la camioneta.

JJ saltó hacia atrás cuando la camioneta pasó rozando.

-¡No seas un héroe, amigo! ¡John B!

Cerré los ojos con fuerza cuando el sonido del cristal y el metal crujiendo llenó mis oídos. Mi corazón latía contra mi pecho y mis nudillos estaban blancos, el sonido de los frenos chirriantes de la camioneta resonaba a nuestro alrededor. Cuando abrí los ojos, estábamos en la pista de aterrizaje, dirigiéndonos directamente al avión de Ward Cameron.

Me di la vuelta en mi asiento para ver a nuestros amigos gritando detrás de nosotros, corriendo a través del espacio del tamaño de una camioneta en la cerca e intentando que volviéramos. Respiraba con dificultad cuando miré a John B y me reí con incredulidad.

-Mierda, acabas de hacer eso. Acabas de atravesar una jodida valla, JB.

Él mismo soltó una risa estremecida, sacudiendo la cabeza mientras trataba de ver a través del parabrisas agrietado.

-Estoy tan jodido, ¿no?

-Sólo si nos atrapan.-Sonreí, mi agarre todavía fuerte en el mango.-Así que... no nos dejemos atrapar por la policía, ¿de acuerdo?

Me miró por un segundo, con una sonrisa en su rostro.

-No lo estaba planeando.

Observé que el velocímetro seguía subiendo mientras John B seguía aplicando más fuerza en el pedal del acelerador. Estábamos ganando terreno en el avión de Ward y con cada segundo que nos acercábamos, más podía sentir mi adrenalina bombeando. No pasó mucho tiempo antes de que John B lograra llevarnos hasta donde estaba la cabina del avión, y allí, sentada en el asiento del pasajero y luciendo absolutamente aterrorizada... estaba Sarah.

-¡Oye! ¡Está bien! Está bien.- John B dijo, mirando a Sarah mientras trataba de consolarla.

Me incliné hacia delante y le sonreí, asintiendo.

-Te tenemos, ¿de acuerdo? ¡Solo espera!

Nos sonrió aliviada, asintiendo con la cabeza mientras sostenía el avión. Desde detrás de ella, vi a Ward darnos una mirada, solo para mirar atrás de nuevo.

-Uh, John B... nos han visto.

John B apartó la mirada de la carretera de nuevo y volvió a mirar el avión cuando Ward comenzó a saludarnos con la mano con enojo.

-¡Fuera de la pista! ¡Fuera!

John B miró a Ward antes de agarrar el volante con más fuerza y ​​volverse hacia la pista de aterrizaje, derribándolo. Empezamos a adelantarnos al avión y pude oír el motor de la furgoneta haciendo todo lo posible por mantener el ritmo.

-Junie, cuando te diga que te alejes y te agaches, lo haces. ¿Te parece bien?-Dijo, mirándome.

-John B, ¿qué estás...?

-Solo hazlo, ¿de acuerdo? Confía en mí.

-Bueno.-Asentí con la cabeza mientras lo derribaba aún más.

-Agarra la manija y no la sueltes-Dijo, asintiendo hacia mí.

Levanté la mano y agarré la manija, mirándolo mientras él tiraba del freno de emergencia y giraba el volante completamente hacia la izquierda, llevándonos a una curva cuando los frenos chirriaron contra el pavimento. Sentí mi cuerpo presionarse contra la ventana antes de dar un salto hacia la izquierda. Estábamos en una parada completa y cuando me volví para mirar a John B, fue como si todo mi cuerpo se enfriara.

Porque el avión de Ward Cameron se dirigía directamente hacia nosotros, como si no tuviera intención de detenerse.

-John B...

-Confía en mí, Junie.

-¡John B nos va a matar!-Grité, mis ojos se agrandaron mientras movía mi mano ciegamente en busca de la manija de la puerta.

-¡Ahora, Junie!-Gritó, inclinándose hacia mí y colocando su brazo derecho sobre mí, presionándome hacia abajo mientras cubría la parte posterior de su cabeza con la izquierda.

El chirrido de los frenos proveniente del avión de Ward fue lo único que pude escuchar además del latido de mi propio corazón... y luego silencio. John B se sentó primero, manteniendo su brazo sobre mí mientras miraba hacia la izquierda. Cuando sentí que me quitaba el brazo, no tardé en sentarme y desabrocharme el cinturón de seguridad. Abrió su propia puerta de una patada, saltando mientras yo abría la mía, y apenas obtuve suficiente estabilidad en mis piernas para estar de pie.

Corrí alrededor de la camioneta y miré hacia la parte delantera del avión. Si tuviera a John B, Sarah y yo parados directamente uno frente al otro y entre el avión y la camioneta... así de cerca estuvo Ward de golpearnos.

-¡Sarah!- John B gritó, golpeando su puño contra la nariz del avión cuando la puerta del avión se abrió y un enojado Ward saltó al suelo.-¡Sarah!

-¿Estás tratando de matarla?-Gritó, enfurecido hacia nosotros dos.-¿Tratando de matarnos?

John B extendió su brazo, manteniéndome detrás de él mientras se acercaba a la cara de Ward.

-Necesito el oro, Ward.

-¡No no no!- Sarah lloró, saltando del avión y corriendo hacia John B y hacia mí. Se veía agotada y su cabello estaba ladeado, en su mayoría pegado al frente de su cara.-¡John B!-Ella sollozó, interponiéndose entre su papá y él, tomando su rostro como si no creyera que él estaba parado frente a ella.

Miré a Ward, quien los miró a los dos y sentí que la ira hervía dentro de mí. Este fue el hombre que se llevó la única figura paterna que me quedaba después de la muerte del abuelo. Quien se llevó al padre de mi mejor amigo. ¿Y para qué?

Ni siquiera 400 millones de dólares en oro podrían costar un asesinato.

-John B, estás bien-suspiró, rozando su pulgar contra sus mejillas sucias.

Ward dio un paso adelante y se acercó a Sarah.

-¡Alejate de el!

-¡No la toques!-Grité, mientras salía de detrás de John B y ayudaba a agarrar a Sarah antes de que Ward pudiera poner una mano sobre ella y tirar de ella hacia John B mientras la rodeaba con sus brazos.

-¡N-no me toques!-Ella gritó, John B acercándola más a él y alejándola de Ward.-Y no me digas qué hacer.

-Junie, toma a Sarah y vete- susurró, mirándome.-Estaré justo detrás de ti, lo juro.

Asentí con la cabeza, alcanzando el brazo de Sarah y agarrándolo mientras él la soltaba.

-Todos están esperando junto a la valla, vamos.

-No, no, no puedo dejarlo-dijo, sacudiendo la cabeza y quitando su brazo de mi agarre.

Miré a John B, dándole una mirada suplicante y esperando que pudiera convencer a su novia con algo de sentido común, y él asintió con la cabeza, mirando a Sarah.

-Estaré justo detrás de ti.-Miró a Ward, con una mirada fulminante en su rostro.-Voy a recuperar lo que es mío... lo que es nuestro.

Ward se pasó las manos por la cara, riendo incrédulo.

Fui a agarrar la mano de Sarah cuando el eco de una sirena de policía vino de nuestra izquierda. Y allí, en la distancia, estaba el auto de la Sheriff acelerando hacia nosotros. Giré mi cabeza hacia atrás hacia John B, negando con la cabeza.

-No puedo volver a meterme en problemas, John B. Nana me matará.

Sarah no se estaba separando de él, agarrándose a su camisa como si su vida dependiera de ello y él asintió.

-Sarah, tienes que ir con Junie, ¿de acuerdo? Te prometo que estaré justo detrás de ti.

Trató de empujarla hacia mí y tomé su mano, tratando de comenzar hacia donde habíamos conducido, pero ella se resistió y se apartó.

-¡Sarah, vamos! ¡Tenemos que irnos!- Grité, mirando hacia el coche de la Sheriff acercándose.

Sacudió la cabeza, mirando a John B.

-No lo dejaré, Junie. No puedo.

Le di otra mirada suplicante a John B que ahora estaba abrazando a Sarah y manteniéndola alejada de Ward. Suspiró, mirándola antes de mirarme a mí, justo cuando el coche de la Sheriff llegaba al final del avión.

-Vayan, los encontraré chicos.

Asentí con la cabeza, corriendo hacia la gran zona de césped.

-¡Reúnase en el lugar, está bien! ¡El del que hablamos antes!

-¡Bien, ahora vete!- Gritó, despidiéndome mientras los dejaba atrás.

El viento soplaba en mi contra mientras trataba de correr lo más rápido que podía por la hierba. Parecía que había mucha menos distancia desde donde empezamos hasta donde terminamos, pero, de nuevo, también íbamos muy rápido y estábamos en una furgoneta. Incluso cuando me había distanciado bastante del avión, todavía me quedaba un largo camino por recorrer antes de llegar a la cerca. Bombeé mis brazos más rápido, mirando con pánico cuando vi a Pope, Kie y JJ comenzar a regresar hacia el bosque.

Quería gritar, decirles que casi estaba allí y que me esperaran, pero si me atrevía a gritar incluso uno de sus nombres, le haría saber a cualquier oficial de policía que hubiera llegado a la escena, que estábamos ahí. Empecé a cansarme cuando la resistencia me empujó, pero estaba casi allí, casi en la cerca.

Y luego, un disparo.

Prácticamente patiné hasta detenerme, casi tropezando con mis propios pies mientras giraba. Venía de donde acababa de estar, donde había dejado atrás a John B y Sarah. Mi corazón se aceleraba contra mi pecho y apenas podía enfocar mis ojos lo suficiente como para saber quién seguía de pie, aunque incluso si pudiera, el auto de la Sheriff estaba bloqueando parcialmente mi vista. Quería gritar por John B y Sarah, para ver si contestaban o si eran ellos los que habían sido víctimas del disparo, pero sus nombres se detuvieron en mi garganta.

Mi adrenalina estaba bombeando cuando me di la vuelta y mis pies me llevaban más rápido de lo que mis piernas podían alcanzar. Quería detenerme una vez que llegué a la valla, tomar un descanso y recuperar el aliento, pero mis pies seguían... y seguían... y seguían.

Pero sentí que no podía dejar atrás el eco del disparo ni el miedo en mi cabeza de quién había sido víctima de este... o quién podría ser el próximo.

___________

[n/t]

HE VUELTO. Estamos taan cerca del final, que ya me está dando penita:((

No sé si subir todos lo capitulos rápido, o me tomo mi tiempo así no sufrimos tanto. you decide.

En fin, si no me equivoco, quedan alrededor de 7 capitulos, más el epilogo. So, be ready.

Nos leemos a la próxima, bai.

D🌻






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