||Narración normal||

《Izu, calmate, hasta donde estoy puedo sentir tu molestia y tus pensamientos asesinos (perdón por leer tu mente pero ya me conoces, soy curioso cuando se trata de ti) estoy enterado que Crowley-san tan solo esta portándose así conmigo porque desea molestarte, le es divertido el como actuas posesivamente conmigo, no le des el gusto, actua como siempre y dejara de comportarse así, lo sé.》

Iwaizumi suspiró, Neo tenía un punto, si seguía dándole el gusto a Crowley de verlo celoso jamás dentendría su juego, por lo que dio un gran respiro para relajarse, tomó su actitud fría de siempre y se dedicó a cumplir su labor.

Neo al ver eso regresó a lo suyo, dedicándose a atender clientes y preguntar algunas cosas al vampiro de cabello bicolor.

[<-~×☆×~->]

Después de unas horas Crowley se retiró de la barra para irse del lugar, pues ya había respondido cada duda que Neo tenía, la información obtenida no fue mucha pero para esos momentos era más que suficiente.

Cuando pasó junto a Iwaizumi, le dijo algo que en un instante le hizo hervir la sangre a este y estuvo a nada de hacer aparecer su espada, pero se contuvo haciendo uso de toda su fuerza de voluntad y con una sonrisa irónica le dijo que se fuera directo al infierno.

El vampiro de cabello bicolor rió con ganas y se despidió con la mano mientras salía de la discoteca siendo acompañado por un linda chica, la cual probablemente sería su cena esa noche.

[<-~×☆×~->]

La jornada laboral acabó con normalidad, el vampiro rubio y el ninja estaban ya caminando por las tranquilas calles de la ciudad que recién era iluminada por el amanecer de ese nuevo día.

Con las calles vacías, aprovecharon para caminar tomados de las manos

Era algo nuevo entre ellos, pero el contacto no era incomódo e incluso lo sentían tan natural como si tuvieran años haciéndolo.

Iban en silencio hasta que Neo decidió hablar.

Habías dicho que dejaste a Zeus con alguien fuerte cuidándolo ¿Es realmente fuerte? ¿Crees que quisiera tener una pelea?-. El ninja desde el día anterior, cuando le mencionaron que Zeus había quedado a cuidado de una persona fuerte.

Tenía una gran curiosidad y entusiasmo por dicha persona, tanto que ya anhelaba una pelea.

Créeme Neo, lo último que quisieras tener es una pelea contra la tía Krul, su aspecto puede parecer la de alguien delicada, pero barrería el suelo contigo en un santiamén, ese tal Crowley es muy débil frente a ella-. Iwaizumi hablaba con gran respeto y admiración sobre Krul, eso causo más intriga en Neo, quien tenía hasta estrellitas en la mirada, era claro que solo habían avivado sus ganas de buscar un combate amistoso contra ella.- Por lo que veo mis palabras tuvieron el efecto contrario ¿No es así? Los presentaré debidamente en cuanto lleguemos, ya le pides si combate contra ti, tal vez acepte si le agradas.

¡Esta bien! Realmente estoy emocionado, aunque eso es obvio, me encanta poder encontrar gente fuerte contra la cual pelear-. La alegría y emoción que emanaba el ninja era en cierta parte contagiosa, al punto en que el vampiro sonrió ligeramente mientras le veía.

Neo notó ese gesto, provocando que sonriera más y sus mejillas se vieran ligeramente teñidas de rosa.

Es notable cuanto te emociona, pero ten cuidado ¿Sí? Mi tía es realmente muy fuerte, ella en el pasado fue la reina de los vampiros después de todo-. Aquella palabras sorprendieron a Neo, quien detuvo su paso abruptamente debido a eso.

Iwaizumi no creyó que aquello fuera algo por lo cual el ninja debía sorprenderse tanto.

¡¿E-e-ella fue la reina de los vampiros?! ¡Entonces es realmente alguien de temer, seguro que pelear contra ella será todo un honor! ¡No puedo esperar para conocerla!-. El ninja ya estaba al borde de la euforia a causa de tener la oportunidad de pelear contra alguien que fue la monarca de una especie sobrenatural, el vampiro suspiró al ver así a su pareja.

Iwaizumi podía asegurar que en cualquier momento Neo saldría corriendo para llegar a casa primero, sin embargo, no sucedió tal cosa

A pesar de la emoción, el ninja seguía caminando tranquilamente sosteniendo con dulzura su mano.

Ahí estaban Neo e Iwaizumi caminando por las calles de la ciudad, faltaba poco para llegar al edificio donde se hallaba su departamento.

Pero decidieron hacer una pequeña parada en una trattoria, en la cual ya era bien conocidos por los dueños del lugar, una pareja de chicos bastante enérgicos y serviciales, los cuales siempre abrían temprano para todas esas personas que salían del trabajo apenas amanecía, justo como ellos.

Al entrar un pelirrojo les saludó alegre mientras salía de la cocina.

Buenos días, Neo-san, Iwaizumi-san, tiempo sin verlos pasarse por aquí ¿Qué les voy a servir hoy, el especial Yukihira de siempre? Takumi estara feliz de verles después de tanto tiempo-. Aquel pelirrojo al hablarles de esa forma era notable que no era alguien de la ciudad, de hecho, era japonés, su nombre era Yukihira Souma, uno de los dos dueños del lugar.- ¡Takumi, ven, nuestros mejores clientes estan aquí!

Ante el grito del pelirrojo, de la cocina salió un rubio bien parecido de ojos azules, estaba acomodandose correctamente el uniforme de chef que usaba mientras comenzaba a sonreír por ver al vampiro y al ninja.

Cuanto tiempo, me alegra verles por fin ¿Qué tal han estado? Hace poco nos enteramos de lo que sucedió en el edificio donde viven y como no se habían pasado por aquí, ni idea de si se encontraban bien-. El rubio con traje de chef blanco y detalles naranjas era Aldini Takumi, un italiano amante de la cocina y segundo dueño del lugar.- Aunque respondan luego, tomen asiento y diganos que es lo que vamos a prepararles el día de hoy, pues seguro que recién acaban de salir del trabajo ¿o me equivoco?

No se equivoca Aldini-san, acabamos de salir, lamentablemente no comeremos aquí, llevaremos la comida ya que nos esperan en el departamento-. Neo fue quien respondió por los dos, pues la verdad era esa, ambos habían decidido pasar por el restaurante para llevar el desayuno a Zeus y de paso llevarse el de ellos.- Llevaremos el especial de Yukihira-san como siempre y uno de sus postres Aldini-san.

Vaya, es una lástima que no vayan a comer aquí, pero que se le va a hacer, sin embargo, tendrán ración adicional de pulpo con crema de maní si no pasan después a tomar el café con nosotros ¿entendido? Tardaremos lo menos posible-. Takumi al decir eso se dio la media vuelta para retornar a la cocina dejando ahí a Souma riendo bajito a causa de la "sutil" amenza que dió el rubio.

Dicha amenaza si que asustó a Neo e Iwaizumi, que ya sabían a lo que se atenían si no platicaban luego.

No pongan esas caras, dudo que lo haga, ni el soporta cuando estoy experimentando con nuevos sabores desastrosos jeje, pero en serio, sí deberían visitarnos y pasar a tomar el café o lo que gusten, saben que son bienvenidos y que los consideramos buenos amigos, de vez en cuando reunirnos no estaría mal ¿No lo creen?-. Souma también se fue a la cocina una vez dijo aquello, tanto el vampiro como el ninja sintieron cierta pena respecto al trato de los dos cocineros.

Aunque en el caso de Iwaizumi, este trataba de evitar ser amistoso, por miedo a luego no poder soportar cuando la vida de esos dos humanos tan carismáticos acabase.

[<-~×☆×~->]

Luego de apróximadamente una dos horas, la comida ya estaba embolsada y lista para ser llevada.

Iwaizumi tomó dicha bolsa de manos del pelirrojo, que aseguraba que el postre preparado iba a encantarles ya que era el especial de Takumi, quien les acompañó hasta la salida del humilde restaurante y les despidió.

No sin antes recordarles la amenaza de antes a modo de broma bien disimulada.

Ambos chicos llegaron al edificio y saludaron a la portera que ya estaba en su puesto como cada mañana.

Subieron las escaleras para poder llegar a su departamento y en dicho lugar les aguardaba, no una, sino dos sorpresas bastante inesperadas.

La primera se hallaba afuera y al frente de la puerta: una jaula con un búho de plumas gris oscuro y claro. El ave dormía profundamente pero despertó en cuanto sintió la presencia del vampiro y el ninja, justo a su lado y dentro de la misma jaula estaba una carta con destinatario a Neo.

《Querido Neo:

Sé que te encantan los búhos, y que no serías capaz de dejar a este sin hogar, por ello lo dejo a tu cuidado, no tiene nombre así que piensa en uno, es como Zeus, por lo que no te sorprendas si después lo ves siendo humano :v

Tomoe.》

Vaya que "amable" es ese tal Tomoe ¿No? Bien, en todo caso no podemos tener otro, así que vas... y... no me veas con esa cara, por favor-. Iwaizumi había sido quien leyó la carta dejada por Tomoe, no estaba dispuesto a tener otro búho especial.

Mas esa no era la opinión de Neo, quien ya tenía abrazada a la ave y le veía con ojitos de cachorro.

Deja que se quede, no nos matara el tener a otro búho, además, si llega a volverse humano tendríamos con quien dejar a Zeus, si pueden cuidarse entre si no tendremos problemas cuando se queden solos en el departamento y tan solo mirale ¡Es muy lindo!-. Tal como Tomoe dijo en la carta, sabía que Neo no podría negarle el hogar a ese segundo búho, aunque todo fuese parte de lo que quería el zorro, al ninja no le molestaba, ya que de verdad no tenía corazón para dejarlo ahí afuera.- Por favor deja que se quede, hare lo que quieras.

...Los trastes por lo que resta del año ¿entendiste? Y más te vale que seas tú quien le compre la comida-. El precio impuesto para que se quedase ese segundo búho era alto, pero Neo lo aceptó sin rechistar.- ¿Y bien? ¿Qué nombre le pondrás?

Mmm... ¿Tú que nombre le pondrías?-. Neo trataba de pensar en alguno pero no se le ocurría.

El búho que estaba antes en sus brazos ahora posaba en su hombro y les veía curioso, le intrigaban sus nuevos dueños.

Si me lo preguntas a mí ¿Tal vez algo relacionado con matar? Si su nombre es su proposito como dijo ese Tomoe, entonces debe llamarse con algo relacionado a que haga para proteger a Zeus, así que ¿Qué tal Kill?-. Iwaizumi era directo respecto a que quería que hiciese el búho de plumaje gris cuando fuese un shikigami en regla, Neo pareció darse una idea con lo dicho por él.

Kill... Kill... ¿Y qué te parece Killua? Suena lindo para él y tiene la base de tu idea respecto al nombre-. El vampiro asintió respecto a la sugerencia del ninja, este sonrió por la aprobación y se dirigió al ave en su hombro.- Bien, apartir de hoy serás Killua Hyakuya Kagamine, espero te lleves bien con nuestro otro búho Zeus, así que bienvenido a nuestra pequeña ¿familia?, no sé como llamarnos jaja.

Dejalo en familia, visto todo desde otra perspectiva lo somos, somos pareja y Zeus pudo volverse humano gracias a nuestro cariño mutuo, por lo que podría considerarse nuestro hijo-. El rubio dijo aquello como lo más normal del mundo, dejando medio conmocionado al pelivioleta, que tenía un sonrojo en sus mejillas, el cual aumento de tonalidad cuando le dieron un fugaz beso.- Entremos de una vez y presentemosle a este pequeño ante nuestro Zeus.

Iwaizumi se acercó a la puerta para abrirla, al hacerlo la segunda sorpresa inesperada estaba allí: los padres del ojiverde estaban en la sala platicando amenamente con Zeus y Krul, a la espera de que llegasen.

En cuanto les vieron entrar Mika se levantó, y en un segundo ya lo estaba abrazando fuertemente.

Al fin llegas Iwa-chan, creímos que algo les había pasado y por eso la tardanza, menos mal estas bien-. El rubio ojirrojo estaba muy preocupado por su hijo quien no terminaba de procesar el hecho de que sus padres estuviesen ahí.- Pero di algo, no venimos desde tan lejos como para que te quedes en silencio.

Mika, primero sueltalo, lo estas abrazando muy fuerte y dudo que pueda decir algo en ese estado-. Yuu fue quien señaló el hecho de que, aparte de aún no procesar el que sus padres estuvieran ahí, Iwaizumi casi no podía respirar por el fuerte abrazo del rubio ojirrojo.

¡Oh, lo siento, no me di cuenta Iwa-chan!-. Mikaela rápido se aparto de Iwaizumi, este comenzó a tomar grandes bocanadas de aire para normalizar su respiración, una vez lo hizo, con duda les saludó.

Me alegra verles pero ¿Qué hacen aquí? ¿Cuándo llegaron? ¿Por qué no me avisaron que vendrían?-. Una vez respiro con normalidad, el vampiro ojiverde preguntó muchas cosas de golpe.