
| C A P I T U L O XXXIV.|
Una fiesta.
¿No puede ser peor?Todavía de que quiere comprometerme va a hacer una fiesta para humillar me más. No puedo creerlo, me planto en su habitación por qué me han llamado para recibir mi primer vestido hecho por el viejo vampiro, y tocó levemente la puerta del rey, este me abre. Y me mira de arriba a abajo como siempre, se hace a un lado para dejarme pasar, y en su cama gigante veo un enorme vestido de piedras preciosas en color blanco. Mi vista va de golpe al rey quién se pone a mi lado.
—¿Y?
—¿Y que?
El resopla, se ve irritado. Me gusta, pero me abofeteó mentalmente así no conseguiré que me ame, si solo tuviera pócimas como en los libros para encantar.
—¿Cuál es tu respuesta al ligamiento?
—Si.
Parece que se ha quedado en shock por qué me giro a verlo y está tieso, serio mirando al frente fijamente, levanta un poco el mentón y solo ladea un poco la cabeza para mirarme—¿Segura?
—Si, haré lo que sea. Quiero ver el reino humano.
—¿Tan desesperada estás?
—Es lo menos que merezco por una vida que perdí, por algo que yo no hice. Ademas, sería mi único consuelo visitar a los de mi raza.
—¿Algo que tú no hiciste?¿a qué te refieres?
Oh, caray. El no sabe que soy la hija del rey de los humanos. Aunque estoy dudando sobre ello.
—Si, yo no mate a su padre. Fueron los humanos, si. Pero yo no lo hice.
—Tu asquerosa raza lo hizo. —Dice entre dientes enfadado.
—Pero yo no¿Cuando va a entenderlo?
El me vuelve a tomar del cuello, pero está vez el odio puro reflejado en su cara me invade y me provoca pánico, está vez abro los ojos asustada, mi espalda impacto contra el muro y me sostiene con fuerza. —Entiende que toda tu asquerosa y despreciable gente mato a mi padre, y quién sabe si tú también. Eres repugnante ustedes lo son, tu eres ellos, ellos son tu no hay diferencia.—Dice empujando más para fijarme a la pared.
Las lágrimas escurren por mi cara por la falta de aire y la humillación, y Cold tiene razón, si esto me hace ahora que no es nada mio¿Que no me haría cuando esté casada con el?Cuando sea solo de el.
Mis lágrimas mojan sus manos, y el mira eso, su rabia pasa momentáneamente y me suelta, para limpiarse mis lágrimas, me tocó el cuello, respiro mucho aire—Si me odias...¿Para que quiere casarse conmigo?
El rie con odio—Ese es el punto Audrey, te desprecio hasta la última gota de tu sudor, pero tienes algo clave para mí.
—¿Algo como que?
El sonríe, me mira sonriente, con perversidad, como si supiera que algo yo no.
Y se lo que es.
Lo que Mirella dijo es cierto.
Soy la hija del rey humano.
El lo sabe y se está aprovechando de eso.
Pero si vamos a atrapar a los humanos, lucharé por qué se unan los humanos y vampiros, no para ser devorados o controlados, lucharé por mi gente. Por mi integridad mi valor y mi fuerza y lucharé por ser mejor de lo que alguna vez fui.
Levanto la cara, me limpio las lagrimas—¿Eso es un no entonces?—El junta las cejas—No va a casarse conmigo?no, por qué me odia.
El da un paso más—Se que hacer contigo y para que me vas a servir pero a veces me vuelves loco...
—¿Loco?
El da otro paso más su cara se inclina y sus labios rozan los mios—Loco por qué deseo besarte, tocarte, hacerte miles de cosas mientras tú te retuerces y gritas mi nombre una y otra vez.
Paso saliva—¿Hablamos del odio hacia mi o hay otra razón?
El sonrie—Es una razón diferente.
Retrocedo aturdida¿Cómo puede pasar del odio al amor tan rápido?o lo que sea que el siente.
—¿Para que es eso?
El mira el vestido sin interes—Es lo que usarás está noche para la fiesta, te presentaré como mi esposa. Habra una celebración y daremos el tiempo estimado de la boda. Un día exacto.
—¡¿Y como va a hacerlo?!
—Soy el rey de insomnia Humana, no hay nada que no pueda hacer.—Dice con el ego muy alto.
Vuelve la vista a mi—Lavate y que te aliste para esta noche, no te quiero ver repugnante como siempre.
Me río bajo al tiempo que tomo el vestido para salir—Eso no dice siempre.
—Me resultas repugnante.
—¿En serio le doy asco?
—Por supuesto.
Aja.
No le miro, pero se que el lo hace, puedo sentir su mirada pesada. Me giro con el vestido y lo miro a los ojos—¿Que tanto?
—Asquerosa, bañate primero.—Me río a carcajadas.
Me acerco a él de golpe, se pone tieso, Eso¡Eso es lo que me gusta!que el sea ahora el que tiene miedo de mi. Me acerco más y más, el levanta el mentón para ganar estatura e intimidarme pero eso no va a pasar, tiene tres botones desabrochados de su elegante vestuario, así que estiro la mano a su pecho. —No me toques—Ordena. Pero lo ignoro, estiro mi dedo a tocar su piel y lo deslizo hasta su cuello el suspira y cierra los ojos, sonrió internamente llena de victoria. Y alcanzó su mandíbula, su cuello y me inclino, abre los ojos y el es quien se impulsa al frente desperado, ataca mi boca con su beso agresivo.
Pero soy yo quién tiene el control.
¡No me lo creo!
Lo beso, le jalo el cabello, y lo mejor de todo¡No me toca nada!soy yo quién lo toca, soy yo quién lo tiene controlado¡A esto se refería Cold!Es genial, suelto el vestido y me pego más a él, me a gustado, sus dientes filosos muerden mis labios ligero en un rose de provocando, pero ahora yo saco mi lengua y rodeo sus dientes, los acaricio el suelta un sonido torturado de su garganta casi sensual, de esos que te derriten. Lo beso, lo sigo besando, y no me toca, tengo mi pecho pegado al suyo.
Lo suelto, tomo sus manos, para ponerlas en mi cadera y subirlas, el entiende y empieza a subir sus manos, se detiene a medio camino y baja sus manos a mis pompas donde las aprieta con fuerza y luego me pega a él. Eso que el dice que alguna vez estará entre mis piernas, lo que yo le llamaba el colgante, ahora está duro y bastante curiosa evito preguntar, los besos ya se han tornado más difíciles. Y me separó de golpe.
Lo alejo y recojo el vestido, el solo se queda ahi de pie, mirándome parece...aturdido.
Su ojos rojos, ahora son un tono carmesí.
—Lo veo está noche, Majestad —Le hago una reverencia casi con burla, sus cejas se fruncen tanto.
Tomo mi vestido y salgo cerrando detrás de mi, al tiempo que escucho su grito—¡Maldita humana manipuladora!—Me grita una vez que estoy afuera y así.
Es como logré domarlo, sonrió mientras voy dando saltos para llegar a mi habitación, estoy feliz por qué todo lo que ah dicho Cold. Es real.
Y ya se que usar a mi favor así como el sabe que usar para controlarme.
Lo tengo.
|XXX|
Es muy noche, la oscuridad hace que el frío se haga más fuerte, y desde aquí puedo ver cómo empiezan a caer los primeros copos de nueve, si no estuviera atada a la mujer que me está arreglando correría a ver la ventana empañarse por el frío, pero vuelvo la vista al frente en ella,está la mujer frente a un espejo que el rey solicito para mí, y ahí puedo ver mi reflejo me está fijando el cabello haciendo que mis ondas rebeldes reluzcan, me eh colocado el vestido brilloso y el collar, también los tacones y ya tengo el maquillaje, es algo muy natural, no me hizo mucho, solo puso color en mis mejillas y es todo. Tomo ese labial rojo del fondo.
—¿Y ese?
—No, ordenó algo natural—La mujer me lo quita de las manos.
Algo desilusionada, espero paciente—Listo, ponte de pie.
Lo hago lento, mientras veo como luzco ahora. Una imagen distinta, los brillos del vestido blanco me hacen relucir como una...Muñeca, mi piel en tono moreno hace que el vestido se vea majestuoso. Me veo, bien.
La mujer feliz me pide que salga y así lo hago, en la entrada está Cold esperando paciente, cuando salgo se gira hacia a mi, me mira de arriba a abajo y sonrie—Luces bellísima.
—Gracias, tu igual.—Golpeo su traje de Guardia real.
El sonríe orgulloso.—Vamos dama vampiro.
—No digas eso—Lo golpeó de nuevo, tomo su brazo y caminó hasta llegar al castillo en la entrada, donde.
Esta todo atestado de gente vampírica, sus miradas van de inmediato dirigidas a mi como si supieran, las luces del castillo brillan casi sobre mi, y toda la vista del reino está puesta en mi. El rey quién está a pocos metros de mi, se acerca y susurra—Solo haz lo que te pido hoy.
¿Pero que me va...?
Quiero preguntar, pero no puedo, me toma del cuello con la cadena con delicadeza y me hace seguirlo, esto es humillante pero supongo que si lo hace debe ser por algo. Lo sigo mientras tira de mi cuello hasta llegar a un especie de escenario instalado, ahí me hace subir junto a él, y se posiciona, yo a lado de el.
—¡Pueblo de Insomnia,.ante lo sucedido con lady Mirella, eh conseguido una nueva reina a la cual van a venerar, respetar y mirar con admiración, aquellos que denigren su puesto como su reina futura, serán condenados a muerte. Ella es su nueva reina Audrey Jacquess Rosseau, futura esposa y reina de Insomnia!
¿Me ah puesto su apellido?No si sonreír o vomitar.
—¡Larga vida a la reina Rosseau!—Gritan todas las personas vampíricas con euforia.
Mi corazón late desbocado y asombrado, pero entre el silencio que se instala alguien dice—¡Es una asquerosa humana!
—¡Lo es!—Afirma el rey provocando murmullos.—¡Por eso está aquí, forzada a la esclavitud a lado de un Vampiro por el resto de sus días!¡pero aún así, le deberán respetar por qué tendrá el mismo poder que yo!¿Alguien se opone?—Nadie dice nada—¡Celebrad entonces!
Todos gritan emocionados,
algunos van por copas para beber, otros no me quitan la mirada de encima, y es Cold quien me acompaña en todo momento, los Vampiros se me acercan para decirme cosas feas la verdad, como que no soy digna de estar a lado de su rey pero que soy digna de vivir en la miseria, pero lo que más me asombra son unos niños que se acercan, temerosa a qué no pueda hacer nada—¡¿Usted es la nueva reina?!
Un niño pregunta, se ve tan triste—Eso parece, si no les gusta niños...
—¡No, eres muy bonita!—Algunos rien—¡Viva la futura reina Audrey!—Exclaman y se alejan corriendo entre risas.
Bueno eso fue raro.
Nos quedamos de pie en la entrada admirando como el rey, convive con todo su pueblo y lo que resta, charla, bebé y rie tan animadamente. Mientras que un par de jóvenes se acerca a nosotros.
—¡Ay, no...!—Cold se quita e intenta ocultarse, lo hace poniéndose detrás de mi.
Los jóvenes dos pelirrojos una mujer y un hombre se ponen frente a nosotros—¡Mira nada más!Cold, la...asquerosidad de nuestra ex clase.—Dice el pelirrojo.
Miro a Cold molesto, ladeó la cabeza buscando lo—Por que no se van a molestar a otra parte.
—Ay, si...para que te quedes con la humana asquerosa que va a ocupar el puesto que cualquiera de nosotros puede hacerlo.—Alardea la joven mirándome con desprecio.
Nunca bajes la cabeza.
—Y el mestizo que la proteja. Tan patetico.
Miro a Cold, que está rojo—¿Quién es más patético, el que lo es o ustedes que lo recuerdan?por qué parece que ustedes son mestizos, Cold vive mejor que ustedes y¿Adivinen que?Ustedes son unos simple pueblerinos, Cold. Trabaja para la guardia real, los patéticos aquí son ustedes.
—¡Maldita humana...!
El se acerca furioso—No pueden tocarme, o su rey les hará pagar
—Por favor..mereces ser su esclava. No eres nadie—Alardea la joven de nuevo dando pasos retadores frente a mi.
Mis ojos van al rey quién mira la escena—Largo del castillo, jóvenes irrespetuosos.
—Obliga me...humana estupida—Dice la chica frente a mi. Saca sus afilados colmillos, y antes de que pueda acercarse más, retrocedo.
Ella mira mi acto y molesta se lanza sobre mi al tiempo que le arrebato la espada a Cold. Y le pico el pecho—Acercate y te corto la cabeza.—La chica más furiosa, se inclina parece que va a saltar.
Pero antes de que lo haga, la voz de alguien llega a nuestros oidos—Saquen los de mi castillo, y lleven una carta a sus padres por su comportamiento, que sepan que su rey los desprecia.—Dice Zev detrás de ellos.
Ellos dan un brinco asustados y le hacen una reverencia, el me mira y dice, sorprendiendo a todos—Le deben una reverencia a su reina.
Los jóvenes giran la cabeza rabioso, y sonrió, ellos de mala gana dicen—No, no lo haremos majestad.
—Ah, entonces debo olvidarlos.
Los dos lo miran asombrados—¿que?Majestad usted.
—Estan cuestionando mi reinado. Una reverencia y les perdono el caos que han alborotado.
Ellos me miran rabiosos, y lo hacen de mala gana, Cold sonríe a mi lado, los chicos rojos de irá sale corriendo de castillo, el se acerca y el rey tira de mi collar hacia el—¡Que todos sepan que quien maltrate a MI..—Recalca la palabra.—...Humana, va a pagarlo de la forma más cruel que conocen sobre mi!
Todos se quedan en silencio, nadie dice nada, yo me estremezco. Por que ser su...esposa va a ser aún más difícil. Cold a mi lado en cambio parece que disfruta todo, pero lo que más me duele en el corazón.
Es ver al General del otro lado, miramos todo tan serio que me duele, eleva mas la cabeza, y después se da la vuelta para irse.
No quiero perderlo.
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