Algunos días más tarde mi aspecto mejoro. Me siento mucho mejor, la sangre del rey fue demasiado buena para sanar más rápido. Pero desde entonces no lo he vuelto a ver. Ni a él, ni al General, lo cual es extraño. Si, se que están molestos conmigo por haber huido del castillo, pero ignorarme como si fuera un animalito. Eso si es grosero de su parte.

Me acomodo mi ropa y miro a Cold—¿Así está mejor?

El se toca la barbilla al momento que achina sus ojos—Si...Me pareces decente. Ahora prepararte para la paliza que te daré, pero primero vamos por conocimiento.

¿Conocimiento?¿A qué se refiere?

Con un puchero confundida le sigo en total silencio, admiro la belleza del castillo,que es todo en tonos blancos y dorados pero oscurecido de soledad. En una de las grandes puertas que se abre con majestuosidad y Cold, me hace señal para que pase delante de el, lo hago dudosa y me quedo tan petrificada al ver los millones y millones de libros, divididos por secciones.

No puedo ni gritar de la locura que estoy viendo, miro a Cold asustada y este sonríe después brinco emocionada y suelto varios chillidos de rata fascinada. Salto, corro a todas direcciones y leo todos los títulos que están aquí.

—¿A qué hemos venido, Cold?

—A entrenar mentalmente, hay libros sobre batallas, tácticas y armas. Tambien algunos que necesitas sobre conocimiento. Por ejemplo como funciona el mundo, las reglas y tradiciones de Insomnia, sobre todo. Supongo que...¿Sabes leer?

No le miro—Si, si. Por supuesto leía mientras estaba encerrada por qué casi no me dejaban ver la televisión vieja y me daban libros para practicar mi lectura, el problema es que se leer mentalmente pero al hablar mi lectura se enreda un poco. Por falta de estudios.

—En eso me encargaré yo, tenemos mucho tiempo libre, en conclusión el rey está molesto y me dijo; Haz lo que quieres con ella, menos tocarla

—Esta loco.

—No puedo opinar nada porque me cortaría la cabeza.

—Pues que me corte a mi

—Tu y tus instintos suicidas.

—Si, si como sea¿Puedo tomar uno?

—No, leerás lo que yo te de.

—Ay...No.—Me quejo de mala gana.

—Sigueme.—Me jala del estante en el que había miles de títulos llamativos.

Me arrastra con el, y empieza a buscar en todas las secciones, me da un libro bastante grueso para mí gusto, dice; Métodos de...Es cubierto el título antes de terminar de leerlo por otro libro, después otro. Unos cinco más, otros tres y al final uno grueso y gordo, para ese llevarlo con el monton de libros volvemos a mi habitación sin mirar a nadie más, los guardias se mantienen a vigilar pero supongo que andar con Cold, por ahí es más reconfortante para la guardia real, llegamos a mi habitación hago ciertas preguntas.—¿Por qué los guardias no me han dicho nada si salgo contigo?

El deja el montón de libros sobre mi cama para quitarme el peso y ordenarlos. —Por que voy contigo, soy un guardia.

Me río—No te ofendas pero me resultas inofensivo. No creo que puedas evitar que yo haga una locura.

El me señala severo—La primera vez que escapaste me distrajiste, eso no vale, pero soy un buen soldado para la batalla.

Enarco una ceja—¿De verdad?

—Si, vamos, ahora. Trata de intentar escapar a la cocina.

Sonrío—¿Seguro?

—Si. Adelante quiero que lo intentes.

Asiento, me coloco frente a el, espera paciente, analizo todo, se ve confiado y relajado así que me lanzó corriendo sobre el, el es más lento pero puedo salir corriendo lejos de el, viene detras de mi por supuesto, es más rápido, me escondo en pequeños pedazos y trato de huir hasta llegar a la cocina, y a medio camino me atrapa y me sube sobre su hombro—¡Eso es trampa!

—Soy un vampiro—Pataleo—Soy más ágil, fuerte que tú. Y además no pesas nada, creo que pesa más mi perro Dragoverto.—Alega con orgullo.

—¡¿Por qué se llama Dragoverto?!

—Por qué es la mitad perro,mitad vampiro. Ahora, sería bueno que intentes liberarte.—Me palmea la espalda.

Va cargándome de nuevo a mi habitacion. —¿Y no puedo esperar a que me lleves?Me siento cómoda.

El rie—No.

Empiezo a patalear, y al ver qué solo refuerza su agarre en mi cintura, doblo las rodillas y le doy una patada, este se dobla soltando me y caigo a suelo—¡Perdón...!—Grito poniéndome de pie corriendo a mi objetivo, lo hago como demente.

Por lo que me resbaló varias veces en los pisos perfectamente pulidos. Pero logro avanzar, el me jala de un brazo y me zafó de inmediato, corro de nuevo girando, ya puedo saborear la victoria y llegó a la cocina pero al girar mi cabeza para verificar que aún me sigue, impacto contra alguien, el pecho duro armado de alguien. Caigo de trasero al suelo, mirando desde abajo al general, baja la cabeza.

—¿Puedo saber que haces?

—Nada. Aqui...

Llega Cold, después de mi tocándose el pecho—No es justo, no se valen patadas en el pecho...

No termina al ver al general—¿Estás jugando con el niño?

Cold hace un puchero molesto, me pongo de pie y me sobo las pompas. —No, estábamos...
Practicando. Es todo.

—¿Ahora el va a enseñarte?

—Si, ustedes ya no les importo. Buscare la forma de aprender.

El general me mira fijamente, una mirada fija e intensa con un odio particular, pero pasa a un lado sin decir nada más. Se que están molestos pero con esto, no creí que tanto. Observo por qué tiene una bandeja en sus manos y al ver cómo dos guardias arrastran a una joven más, sucia y llena de sangre y van dirigidas a los aposentos reales. No sé quién sea o que estará pasando, llegó a la cocina para investigar junto con Cold.—¿Para que llevan a esa chica?

Abigail la cocinera responde preparando una comida humana—Es la nueva alimentadora del rey.

—¿Que?—Replicamos Cold y yo al mismo tiempo.

—Pero el...—Intento replicar yo.

—Es un asunto diferente, no se por que el rey quiere otra alimentadora.

Me giro sintiendo un retorcijon en el estómago, me lo tocó¿Que es este sentimiento?Cold, después de unos minutos me sigue con un bocadillo humano. —Tienes un punto por supervivencia. Pero debes aprender a luchar, a dejar el vampiro tirado ahí y que no pueda levantarse.

—Ya se..Dame—Le quitó un pedazo de pan, el lo parte y me da la mitad.

Regresamos a mi habitación comiendo pan humano, que a Abigail le queda maravilloso. En el nos lanzamos sobre la cama para ver cada libro que el me dio y me los va dando en un orden.—Tu vas a leer primero estos sobre guerra, todos sus métodos. Cuando acabes, seguirás con el conocimiento. Puedes pedirme informe si no entiendes.

—De acuerdo.

Tomo el primer libro, empiezo a leer junto con el.

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Más tarde me duelen los ojos y debo cerrarlos junto con el libro—¿Audrey?

—¿Si?

—¿Si lo separaste?

Abro los ojos de golpe—No...

Busco la página con desespero en la que me quedé y la perdí, me golpeé la frente con el libro por tonta y Cold, rie a carcajadas lo cual es molesto y le lanzo el libro, este lo atrapa.—Me cansé¿Puedo descansar?

—Si, yo también¿Si vamos por algo de comida?No se, se me antojo algo dulce

—Si.

Me pongo de pie para seguirle en silencio, está vez, vemos pasar al rey bastante serio, y Cold respira profundo. Lo sigue con la mirada y cuando desaparece avanzamos nosotros a la cocina.—¿Que pasa?¿por qué el olfateo?

Cold niega un poco serio—Huele a alguien más. El rey...está tomando sangre de alguien más. No quiero ser dramático pero¿Y si te reemplaza?

Me detengo en seco asustada cerca de la cocina, lo jalo para ocultarnos—¿Crees que me reemplace?

El se encoge de hombros—Podria ser una posibilidad. No se, pero temo por ti.

Me abrazo de pronto siento frio—La verdad no quiero volver allá afuera, Cold. Tengo...miedo. Al salir y ver el peligro en el que me metí, me da pavor.

—Tu no vas a volver a ningún lado, tu lugar es en el castillo—La voz del General nos hace dar un brincó a los dos. Y girando a  encarar. El nos alcanza con la cejas fruncidas bastante molesto y se dirige a mi. —Si el rey se olvida de ti, puedo tomarte yo¿eso te consuela?

Entrecierro los ojos—¿Debería?—Cold me golpea por detras—Es decir, si me consuela Gran General...

Cold se escupe evitando reír, lo golpeo esta vez con un ligero codazo. El general niega como si no tuviera remedio, y le da una mirada a Cold—Y tu...Eres su guardia no su novio, ten en cuenta eso.

¿Que?

Levanto un dedo para callarle—Error, es mi amigo ahora. No es nada de eso¿Que es un novio?

Cold puedo verlo asentir a mi lado—Si, general. Ademas Ady no es de mi gusto, me agrada pero no me atrae de otra forma—Cold me toma por los hombros y me abraza, ambos sonreímos ampliamente.

El general eleva una ceja—¿Ady?

Sacudo mi mano—¿Podemos cenar algo General?

El asiente señalando la cocina—Gracias.

Nos giramos sobre nuestros pies para,  dirigirnos a la cocina donde Abigail ha preparado un manjar, nos ofrece un plato para nosotros, el cual solo picotea de alguna vez Cold, pero no toca más. Lo como bastante satisfecha—Esta delicioso—Murmuro.

—Gracias...—Responde Abigail.

En eso al terminar entra el General—Quiero hablar contigo solas, Ady. —Se burla de Cold.

Este solo frunce las cejas—Ve a mis aposentos.—Añade el General.

Cold empieza a toser de golpe, me mirá asustado en cuanto el General desaparece.—¿Que te pasa?

—Nada, solo una vez estuve en la habitación del general, y es aterrador, espero verte mañana.

Palmea mi espalda, lo ignoro al acabar dejo mi plato en el lava trastes y me dirijo a dónde sea su habitación, pero claro pregunto a los guardias, llegó a la última habitación del castillo, en lo más alto casi en la punta de el, la luz es poca aquí, por ahora pero de día es maravillosa, lo vi la vez que estuve en la punta del castillo admirando todo desde arriba.

Tocó la puerta del general dos veces y está se abre de inmediato, me impacta ver al general sin camisa solo con un pantalón pijama, me hace una seña para que pase, lo hago dudosa.—¿Para que quería verme?

—Es sobre el rey. Audrey...le ha disgustado lo que hiciste—Dice buscando ropa en lo que parece ser su clóset. Me siento sobre su cama con cuidado—Y temo por ello, el rey puede ser todo lo que tú quieras pero cuando lo traicionas busca a alguien más. Y...—Se gira hacia a mi—Puede que te reemplace.

—¿Con quién?

—Encontramos a una joven perdida en una cabaña abandonada. Lo cual es sumamente raro, pero considerando que mataste a nuestro cazador de humanos, están apareciendo mágicamente.

Bajo la cabeza—Siempre tuve razón ¿No?solo soy una bolsa de sangre para ambos.

El se acerca escucho sus pasos entre la oscuridad, levanta mi cara tomándome de la barbilla—Ese es el punto, si el te abandona. Quiero tomarte—Se inclina sobre una rodilla se recarga mirándome desde abajo quedando a mi altura.

Me cosquilleo  la panza, estiro una mano para tocar su cara masculina definida, poso mi mano en su mejilla y este cierra los ojos y se inclina un poco para aceptar la caricia, mi corazón late como loco. Esto no es normal...—Puedo...

—No.

El me corta abriendo los ojos—¿Por qué no?Ni siquiera sabe lo que iba a decir.

—Si, lo se. No te dejaré tocar de nuevo Audrey. Me siento traicionado por ti.

Asiento soltando de  inmediato—Lo siento¿Quién fue?

El se pone de pie—No es tu asunto.

—Claro que si.

Me refiero a la vez que tenía esa mancha en su cuello e insinuó algo extraño sobre no aprovecharlo. Pues ni que fuera comida.

—Fue con Mirella, supuse que si el rey tomaba algo que me gustaba, debí pagarle con la misma moneda.

—¿Y?

—No le importo,todo lo que quería era tenerte, para hora desechar por traición.

—¿Y que debo hacer?¿Que sugiere General?

El se gira para mírame, suspira profundo, se pasa la mano por su cabello blanco rubio,a decir verdad es un extraño color. —Que...te reconcilies con el rey, por qué si el te beta, y no puedo tomarte, quedarás en medio de un bosque siendo atacada de nuevo.

Me pongo de pie asustada—No quiero eso.

—Entonces sería buen momento para que vayas a hablar con el.

—¿Ahora?

—Si, está menos furioso—Señala acomodando la ropa que supongo va a ponerse.—Ahora, puedes irte, me daré una ducha.

Me giro sobre mis talones para ir a mi martirio pero antes, sin mirarlo le digo al General—Gracias por todo el apoyo General, lamento haberlo traicionado. Pero le juro que tiene todo mi apoyo.

—Es bueno saber eso, a pesar de como te trate en un inicio.

—Si usted no lo hubiera hecho, ya estaría muerta y jamás conocería el reino humano, menos ahora. Pero por lo menos estoy viva, viviendo una vida diferente a la que siempre tuve, gracias.—Avanzo a la salida. Se que no dijo más.

Y camino en mi próxima dirección la habitación real, en ella tocó un par de veces, pero me da asco el solo oler el aroma a sangre, el abre la puerta y lo veo sin camisa tambien, tiene sangre salpicada por algunos lugares, sus ojos rojos llenos de vida, se mueven de mi cuerpo a todas direcciones hasta enfocarse en mi cara—¿Que quieres?—Dice de mala gana.

Un retorcijon me atrapa el intestino de mala gana.—¿Puedo hablar con usted?

El suspira y se limpia la nariz—Retirarte, humana—Le dice a una chica, está temblorosa, se cubre su cuerpo, pero no se ve tan agobiada como yo al inicio, tiene sangre por todos lados. Y pasa a mi lado sin mirarme, bajo la mirada angustiada.

¿Y si...si me va a abandonar?

El me hace una señal para que pase y es el momento de la verdad, necesito que me perdone para no hacer otra locura, quiero vivir. Quiero ir a Soul, a vivir la vida que merezco.

Pero por la forma en la que me mira, creo que es mi final.