La habitación estaba oscura, todo estaba en silencio, la cama estaba cómoda, el climatizador le daba un frío a la habitación que disfrutaba, solo se veía la mata de cabello saliendo de la colcha.

SooBin sonrió, ya se había acostumbrado a esa imagen, encendió la luz y se acercó a la cama.

El abogado se quejó cuando sintió un gran peso sobre él, SooBin le descubrió la cara.

—Feliz cumpleaños, mi precioso abogado —dijo sacándole una sonrisa al cumpleañero, YeonJun abrió los ojos, observando al vampiro sonreírle antes de empezar a besar sus mejillas, su frente descubierta y por último sus labios castamente— Ve a asearte, te tengo una sorpresa —se levantó de la cama, tomando de la mano al abogado que ahora, con SooBin más alejado de su cara, habló.

—¿Qué sorpresa? ¿Un desayuno? —preguntó ansioso y emocionado, una de las fechas que más amaba era su cumpleaños y ese sería el primero que pasaría con SooBin.

—No lo sé, solo ve a asearte —pidió guiando por los hombros al otro, YeonJun rió tomando su cepillo de dientes.

—Por cierto, ¿Qué hora es? Tengo clase a las dos —recordó antes de empezar a lavar sus dientes, mirándose en el espejo. Estaban en el penthouse, desde hace dos días YeonJun no iba a su apartamento a pesar que quedaba unos cuantos pisos más abajo.

—Son las nueve de la mañana —SooBin lo esperó pacientemente, tendiendo la cama en el proceso, solo fueron minutos que YeonJun tardó.

—Listo, muéstrame mi sorpresa —dijo casi dando saltos en su lugar, SooBin rió.

La pareja entrelazó sus dedos, caminaron a la sala de estar, y luego a la cocina...

YeonJun abrió la boca en grande, soltó a SooBin abruptamente y corrió la distancia que lo separaba de su mejor amigo, BaekHyun y ChanYeol estaban ahí.

La relación de ambos amigos era hasta más unida de lo que era antes, duraban horas hablando, se aconsejaban, escuchaban sus problemas e incluso en algún momento BaekHyun ayudó a YeonJun con un examen importante.

Por cierto, YeonJun llevaba dos cienes de los tres que les había pedido SooBin.

—¡Oh, que emoción! ¡Gracias gracias! —el abogado rió de emoción abrazando a su mejor amigo con fuerza, BaekHyun devolviendo el abrazo hasta más emocionado después de no verlo desde hace tiempo— ¡ChanYeol hyung! ¡Venga acá! —dijo agregando al ex guardaespaldas al abrazo, SooBin sonrió mirando la escena alejado.

Sabía que le gustaría, había hablado desde hace semanas con la pareja para que fueran a Italia por el cumpleaños de YeonJun, ChanYeol y BaekHyun accedieron casi de inmediato, sin tener algún problema para viajar hasta allá.

—¡Quédense a desayunar! —pidió emocionado a la pareja. YeonJun volteó a ver a SooBin que le tocó el hombro.

—Ve a cambiarte, comeremos afue-... —el vampiro fue cortado por los labios del abogado, YeonJun le estampó un rápido beso antes de saltar de la emoción para ir a cambiarse.

Nada le podría arruinar ese día.

[...]

—¿Hola? —YeonJun contestó el teléfono mientras caminaba a la salida de la universidad, sosteniendo un ramo de flores junto a una bolsa de regalo.

—Mi amor, BaekHyun pasará por ti, arréglate que iremos a una discoteca.

—¿U-una discoteca? SooBin, tuvimos sexo hace dos días... —susurró mirando a los lados para asegurarse de que nadie estuviera cerca.

—Deja de pensar que cada que te invito a una discoteca es por sexo.

—Siempre hemos hecho eso, lo sabes —acusó sonriéndole a Baekhyun cuando lo vió estacionado cerca, empezó a caminar a él a paso rápido.

—Solo arréglate, YeonJun —bufó SooBin.

—Mi nombre no es YeonJun.

—Ajá, ¿Cuál es?

—Principe, Cariño, amor, cualquiera de esos menos YeonJun —subió al auto saludando a su mejor amigo, emocionado.

—Si, okey, ajá... —dijo el vampiro fingiendo desinterés. YeonJun rió.

—Adiós, SooBin. Te amo~ —canturreó antes de colgar y dejar el teléfono en el tablero del auto, tenía millones de mensajes que no había contestado, lo haría al final de la noche.

Si estaba sobrio.

[...]

SooBin le había dicho a MoonBin y a Hyejin que lo ayudaran a invitar a los compañeros de YeonJun, habían unos veinte invitados de la universidad, y ChanYeol.

Solo faltaban BaekHyun y YeonJun.

En total, eran veintiséis personas en el club nocturno Cat Eyes, contaba con las mejores bebidas, karaoke, shows de pole dance, etc.

A eso de las nueve de la noche, SooBin estaba tecleando por el teléfono, en una esquina del lugar.

—Disculpe, señor Choi —alguien lo llamó, observó a una chica algo tímida con un vestido corto.

—¿Si? —preguntó sabiendo que era amiga de su novio.

—¿Podría tomarme una foto con usted? —preguntó. Todos los invitados estaban casi haciendo fila por una foto con SooBin, después de todo, era famoso, ¿Quién no querría una foto con alguien famoso?

Ya se había regado la voz de que no estaba ahí por una sorpresa o algo parecido, si no que, aparte de ser el principal organizador, también es la pareja del cumpleañero.

Muchos no lo creyeron, algunos ya estaban empezando a creer al recordar los momentos que habían visto a SooBin y a YeonJun juntos a la salida de la universidad.

Aunque, todos querían ver más de cerca.

SooBin en algún momento desapareció, diciéndole a ChanYeol que iba a terminar de pagar por as veinticuatro horas que había alquilado.

Porque sí, había alquilado todo el local con varios servicios.

Los únicos dos vampiros que había tenían tapones especiales en los oídos debido a la música de alto volumen.

Y fue a eso de las diez de la noche que YeonJun y BaekHyun llegaron.

—¡Feliz cumpleaños! —gritaron al unísono los presentes dando aplausos y gritos, acercándose para abrazar al cumpleañero que no dejaba de sonreír y agradecer, buscando entre las personas a su modelo favorito.

Recibió regalos y se tomó fotos, agradeció millones de veces y abrazó a todos los invitados.

Pero no veía a SooBin.

—¡Esto es genial! ¡Oh, por Dios, mira eso! —YeonJun se acercó a una mesa con varios aperitivos, una fuente de chocolate en el medio con galletas, fresas, pan, habían demasiadas cosas.

La música apenas se escuchaba, el DJ estaba tranquilo, armando en su laptop de forma anticipada la música que pondría en la noche y que le habían pedido específicamente.

—Oigan, ya la barra abrió, pueden tomar lo que quie-...

—¡Choi SooBin! —el vampiro volteó a verlo con una sonrisa, recibiéndolo en sus brazos cuando el otro corrió hacia él, ambos fundiéndose en un afectuoso abrazo que le causó ternura a los presentes.

YeonJun no paraba de sonreír.

—¡Aquí hay una fuente de chocolate! ¡Y allá hay de las galletas que me gustan! ¡Y mira, esto tiene mi nombre! —YeonJun estaba aferrado con una mano a la muñeca de SooBin que lo seguía y solamente sonreía como un bobo.

—Lo sé —asintió jalándolo a la barra. YeonJun lo siguió con emoción— Pide lo que quieras —le dijo sonriéndole amable a los tres bartenders que había contratado para esa noche.

YeonJun, en medio de su emoción, no había notado que solamente era ese grupo de personas y más nadie, no había público, y solo cayó en cuenta de eso cuando MoonBin comentó algo sobre la muy buena situación económica de SooBin.

Buscó al vampiro entre las personas, éste hablando animado con ChanYeol con un vaso de whisky en una mano.

—Soo, ven acá —llamó al vampiro que lo siguió hasta una parte apartada, que solo estuvieran los dos.

—¿Qué pasa, cariño?

—Tu... ¿Tu alquilaste el local completo? Es decir, todo esto, ¿Salió de tu bolsillo? —preguntó sintiéndose repentinamente apenado. SooBin asintió con la cabeza bebiendo de su trago como si nada.

—Es mi regalo de cumpleaños para ti, en casa tengo otro, olvidé traerlo —dijo recibiendo una negación de YeonJun.

—No no, SooBin no más regalos, mira esto, mira todo esto —dijo señalando el alrededor. Empezó a alterarse al pensar la cantidad de dinero que había gastado el vampiro— ¿Cuánto fue todo esto?

—No te voy a decir, solo gózalo —le dijo riendo con la expresión inconforme de su pareja— Si, YeonJun, es un lugar caro, y blá blá, pero no me importa, es tu cumpleaños debes festejarlo como se merece.

—Dime cuánto gastaste.

—No.

—Olvídate de tener sexo estos dos meses entonces.

—Dos millones de dólares —soltó el vampiro con un bufido. YeonJun cubrió su boca con su mano al escuchar la cantidad de dinero, sabía que SooBin no le estaba mintiendo.

¿Acaso estaba loco?

—No está loco, está enamorado —eso fue lo que le contestó HyeJin cuando le contó a su amiga.

—¡Oigan, abrieron el karaoke! —avisó BaekHyun casi que atrayendo a la multitud a la zona de karaoke.

La noche apenas estaba empezando.

[...]

3:30 a.m

—¡Fondo! ¡Fondo! ¡Fondo! ¡Vamos, fondo! —YeonJun y todo el grupo animó a Baekhyun a beber de su gran vaso de vodka, trago tras trago, el abogado alzó el vaso ya vacío a los segundos, ganándose los aplausos del público.

Ya la mayoría estaba con el alcohol empezando a subir, YeonJun había prometido no beber mucho, pero no sabía hasta cuándo duraría su promesa.

—Oh, ¿Qué es eso? —preguntó cuando vió a SooBin con un vaso extraño y una bebida vinotinto— ¿Puedo probar?

—Ey ey, no —SooBin le alejó el vaso con una risa— Es una bebida para vampiros, es a base de sangre tipo o —explicó bebiendo un sorbo.

YeonJun asintió sintiendo las ganas de probar la bebida irse.

—¿Y sí emborracha? —preguntó quedándose con SooBin, habían varios grupos, en algún momento todos se unían, pero después empezaban a bromear y a hablar en grupos separados, YeonJun se estaba encargando de compartir con todos, ahora le tocaba compartir con su novio.

—Si, ésta es la única bebida que puede emborrachar a un vampiro, tiene un tipo de alcohol muy fuerte, especial de vampiros, junto a esto —señaló el polvo que decoraba el borde del brazo— Esto... Adormece nuestros sentidos, y nos baja el estado de alerta.

—Es como una droga —dijo mirando detalladamente el vaso.

—Exacto, algo así, pero legal para los vampiros, es la única forma de estar ebrios. Y este es uno de los pocos lugares que lo sirve, hace mucho no lo bebía —y culminó dándole otro sorbo al vaso. YeonJun lo observó con una pequeña sonrisa.

—¿Por cuál vaso vas?

—Es el segundo apenas.

[...]

4:30 a.m

—SooBin, ¿Cuántos tomaste? —preguntó YeonJun preocupado a un lado de su pareja, SooBin estaba de brazos cruzados, acostado en una mesa, quejándose.

—Así —el vampiro alzó una mano y mostró cinco dedos— Y después así —abrió y cerró la mano, mostrando otros cinco.

—¿Diez? —preguntó recibiendo un asentimiento. ChanYeol soltó una carcajada, apareciendo con un vaso de la misma bebida de SooBin.

—Déjalo, en un rato se le pasa, se le acaban de bajar los estados de alerta, está relajado solamente, cálmate no va a morir —dijo ChanYeol con la voz algo... ¿Aguda?

YeonJun obedeció, dejó un pequeño beso en la coronilla del vampiro y se fue, buscando a su mejor amigo entre las personas.

Aceptó un vaso de vodka y siguió bebiendo, de a poco, era uno de los pocos que estaba sobrio, siendo solo dos.

Cada cierto tiempo veía a la mesa de SooBin.

No te emborraches, colmillos.

[...]

6:00a.m

—Te amo, te amo, te amo, te amo mucho~ —YeonJun se quejó sintiendo a SooBin besar múltiples veces su mejilla, su aliento era lo peor, y ni se diga sus labios enrojecidos de algo que sabía, no era labial.

—Basta, estás ebrio —se quejó de nuevo separándose del vampiro ebrio, volteó a la otra mesa, BaekHyun acariciaba los cabellos de ChanYeol, aún bebiendo de su cerveza, el vampiro usando sus muslos de almohada, parecía dormido y BaekHyun se lo confirmó.

YeonJun nunca había visto a un vampiro ebrio.

Y ese era el momento.

Baekhyun le explicó mucho mejor la situación siendo esta una tercera vez con ChanYeol en ese estado.

Dicha bebida, lograba prácticamente humanizarlos, no podían usar dones, ni sacar garras ni colmillos, necesitaban dormir para pasar el malestar, incluso al día siguiente tendrían jaqueca o resaca, había posibilidad de vomitar. Era un estado de ebriedad humano, así que YeonJun debía cuidar a SooBin humano ebrio.

—Vamos a casa, SooBin, mírate —le dijo señalando al vampiro.

—¡Que no quiero, hombre! ¡Ve a fastidiar a otro! —dijo tomando el vaso que le quedaba un poco para beber, YeonJun se lo quitó antes de que tomase.

—Nos vamos ya, Choi SooBin —ordenó tomando de la muñeca al vampiro que se quejó, haciendo un berrinche dejando a YeonJun con la boca abierta— ¿¡Qué haces!? —le preguntó con un grito mirando al vampiro aferrarse a una silla cercana para evitar que lo sacaran, BaekHyun rió agradeciendo que su pareja no fuera ese tipo de borracho.

—¡No me quiero ir! ¡No te conozco!

—¡Soy tu novio!

—¿Enserio? —preguntó acercandose a YeonJun, inclinándose con pasos inestables, negó con la cabeza unos segundos después— No, mi novio es más lindo.

Oh, por la Luna, dame paciencia.

YeonJun necesitó veinte minutos para llevar a SooBin al auto, siendo acusado de ser un secuestrador en el proceso.

La luz del sol les hizo ambos arrugar el entrecejo, habían estado horas en oscuro, y lo peor, eso no ayudaba para el dolor de cabeza de SooBin y YeonJun.

Entre los dos, SooBin estaba ebrio, YeonJun solo estaba mareado, pero era suficiente para que le doliera la cabeza.

—Ah, mi cabeza —SooBin se arrojó al sillón apenas llegó a su penthouse, la ebriedad más que presente en él— ¡No me debería pasar esto! ¡Soy un vampiro, temible, y mírame! ¡Me secuestraste!

—Si si, ven acá, temible drácula, dúchate para que duermas —YeonJun entró a la habitación y empezó a acomodar las cosas para que SooBin se duchara, pero el vampiro no respondía— ¿Binnie? —volvió a la sala de estar, sosteniéndose de las paredes por un pequeño mareo.

El vampiro estaba dormido.

YeonJun suspiró acercándose a él, quitó con cuidado los tapones de los oídos ajenos, lo peinó con dulzura sintiendo su propio mareo pasar, sabía que si tomaba una ducha y dormía un poco ya estaría recompuesto, pero SooBin no.

—¿Ahora como te paso a la cama? ¿Uhm? Eres como un poste, alto, y pesas, no puedo contigo, Binnie —le habló al vampiro dormido mientras le quitaba los zapatos con cuidado, dejándolo descalzo, desabrochó el jean del mismo sabiendo lo incómodo que era dormir así, hizo su mayor esfuerzo para dejarlo en ropa interior.

Buscó una manta y se la arrojó encima, buscó una cubeta por precaución, pastillas para el dolor de cabeza y agua. Todo lo que necesitaba para cuidar a un vampiro con resaca.

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YeonJun abrió los ojos apenas escuchó un quejido, se había quedado dormido en el mueble frente al de SooBin.

—¡En la cubeta, SooBin, en la cubeta, no pienso limpiar tu vómito! —le gritó el abogado cuando despertó con una arcada, el vampiro tomó dicho implemento y se lo dejó en las piernas, suspiró pensando que solo había sido una arcada.

Y por primera vez, YeonJun vió como SooBin vomitaba todo lo que había en su estómago, la bebida saliendo de tono rojizo.

—Eso te pasa por borracho —le dijo recriminatoriamente, SooBin siguió vomitando usando una mano para sostener la cubeta y otra para sacar la puñeta a su pareja que rió antes de darle todas las atenciones que necesitaba, con cariño.

Lo mandó a duchar, le dió un cambio de ropa y le dió un plato de sopa.

El vampiro en la mesa observó el plato humeante, después vió a su pareja.

—¿Me la das?

—SooBin tiene dos mil quinientos años, quien sabe si más, no eres un recién nacido —bufó YeonJun dejando su propio plato de lado— Abre —y sin más, SooBin recibió la cuchara gustoso.

Si, SooBin tenía dos mil quinientos años, pero eso no le quitaba que le gustaba ser consentido.

Además, se sentía débil, se sentía horriblemente mal, tanto, que durmió todo el día, apenas reincorporándose al medio día del día siguiente.

Para YeonJun, había sido el mejor cumpleaños que había tenido, había sido diferente a los demás, había disfrutado, y no le importaba tener que cuidar a SooBin.

Porque siempre, lo haría con gusto.

—Feliz cumpleaños, precioso.

—Ya, eso fue hace dos días, ¿Sigues ebrio? —preguntó el abogado revisando su teléfono.

—Se me olvidó entregártelo. Ten —SooBin le extendió una pequeña caja, ese sería su último regalo de cumpleaños por ese año, de parte de su querido colmillos.

Y al abrir la caja, supo que no podía estar más feliz.

Bien, acabo de inventar esa bebida ok? En mi universo los vampiros pueden emborracharse con una bebida especial u.u

¿Qué creen que le regaló SooBin?

¿Les gustó el capitulo?

The_Dark_Diamond