Sabía que los vampiros eran despiadados, podían matar sin ningún tipo de remordimiento. Pero, ¿matar a un niño de seis años? ¿Matar a tu hijo de seis años?

Aún no lo podía creer.

Ayer en la noche se habían llevado preso a Choi SooBin, y hoy, luego de la denuncia por parte de Seong-Suk, estaban en el juicio para decidir la sentencia del hermano menor y discutir mejor sobre el caso, porque la muerte del pequeño SeungBae estaba en duda.

SooBin estaba a su lado, sentado y esposado, llevaba su suéter manchado de sangre aún y YeonJun no pasó desapercibido el aspecto débil del vampiro.

—Mi cliente es totalmente inocente —habló colocándose de pié e intercalando su mirada con el juez humano y el vampiro. Así se llevaban a cabo los juicios, con dos jueces, uno humano y otro vampiro, así sería más fácil tener diferentes puntos de vista y el que los acusados y el acusador no alegaran el que por ser un juez humano estaba de parte de esta raza y viceversa— Choi Seong-Suk entró a su casa a llevarse al pequeño, y...

—Disculpe interrumpirlo, señor Choi —dijo el abogado del adversario— Pero mi cliente afirma que Choi SooBin no quería darle al niño, se mantuvo en negación, señores jueces —habló ahora a los dos hombres que veían todo con atención y seriedad— El pequeño debía estar con su padre, eso es todo —dijo tomando asiento de nuevo.

—Mi cliente afirma de igual manera que se mantuvo en negación a entregar al menor por el hecho del peligro que representaba el señor Choi en la vida del niño —dijo con seriedad.

—¿El señor Choi representaba algún peligro para el niño? —preguntó el juez humano arqueando una ceja.

—Mi cliente afirma que el señor Seong-Suk llegó a maltratar al pequeño de una manera muy brusca y repetidas veces —dijo mirando de reojo al abogado levantarse.

—Si me permite decir, tengo el conocimiento que en el mundo y crianza de los vampiros la rudeza es esencial —dijo el hombre.

—Mentira...—habló SooBin en un susurró, YeonJun asintió suavemente.

—En la crianza de los vampiros no es esencial la rudeza, señor Oh —dijo el juez vampiro— Cada familia de vampiros decide como criar a sus hijos —aclaró— Y el que el señor Choi haya maltratado al niño por crianza no tiene nada denunciable.

—Su señoría, hay que recordar que la familia Choi habita en el lado humano —dijo YeonJun— Si bien tienen sus propias leyes aquí, el maltrato a menores es denunciable en la ley humana. El señor Choi es una figura pública, es un empresario famoso, la ley humana cae sobre él también.

—Caiga o no caiga sobre él, abogado Choi —el abogado le miró con seriedad— El problema es de dos vampiros, quitando que sea en el mundo humano o en el mundo de los vampiros, las leyes humanas no caen sobre mi cliente, tampoco...

YeonJun quiso reír en la cara del abogado, ¿qué mierdas estaba diciendo? ¿De dónde habían sacado ese abogado?

—Tampoco sobre el mío —contestó sin quitar la mirada del abogado— Choi SooBin es una figura pública, supongamos que él mató al menor, la ley humana no recae sobre él ya que el problema es de vampiros, tal como usted insinúa... Por ende pediré que se le quiten las esposas y se le deje libre.

—¡No puedes hacer eso! —Seong-Suk se levantó de su lugar mirando al pelinegro.

SooBin sonrió de medio lado desde su lugar. Jackson tenía razón, YeonJun era buen abogado.

—Si nos vamos por las palabras de su propio abogado, sí puedo —le contestó sin inmutarse.

—¡Él mató a mi pequeño, lo quiero preso! —gritó Hye levantándose también mientras señalaba al vampiro pelinegro. El público que había tras ellos empezó a murmurar haciendo sus anotaciones y compartiendo sus opiniones unos con otros.

—¡Orden en la sala! —el humano golpeó el mazo frunciendo el ceño— ¡Orden! —volvió a gritar, todo quedó en silencio.

—Abogado Choi —dijo el juez vampiro señalando al pelinegro que tomó aire y empezó a hablar de nuevo:

—Recapitulemos —dijo quitando su saco y dejándolo en el banco— Choi Seong-Suk denuncia a Choi SooBin por matar a su hijo, más mi cliente niega haberlo hecho...

—Choi SooBin estuvo con el difunto todo el día y el que no lo haya querido devolver a sus padres es sospechoso —le interrumpió el abogado. YeonJun se aguantó un bufido.

Odiaba que lo interrumpieran.

—Muy bien, mi cliente estuvo todo el día con el pequeño, fueron al parque de diversiones —relató paseando frente a la mesa en donde estaba SooBin que lo seguía con la mirada— El que un tío esté con su sobrino todo el día no me parece sospechoso, si bien el niño murió horas después, no hay solo sospechas hacia mi cliente... —los jueces le veían atento, Seong-Suk con odio y SooBin asentía de vez en vez más que encantado con el trabajo del abogado— El señor Choi Seong-Suk agredió a mi cliente, digamos que lo hizo en defensa propia —subió sus hombros— Pero pediré de igual forma que se tenga en observación a Choi Seong-Suk.

—¿¡Por qué!? —el mencionado se levantó furioso por sus palabras.

—Porque mi cliente afirma haberlo visto en el bosque, incluso afirma que le dirigió unas palabras...

—Eres tan débil, ¿enserio estás llorando? —susurró SooBin aún teniendo fresco los recuerdos de hace unas horas aún sentía el dolor de perder a un ser querido.

—También exijo muestras de ADN —dijo, el pelinegro no pasó desapercibido como Seong-Suk empezaba a mover sus ojos a todos lados y su expresión se volvía molesta— Tengo entendido que el niño fue matado a mordidas, exijo muestras de ADN con la saliva que hay en ellas...

—Tengo una muestra —habló el abogado tomando una carpeta en el escritorio— Los restos de la sangre de Choi SooBin fueron encontradas en la boca del niño. Posiblemente para defenderse de las garras de su tío.

—Entregue las pruebas —dijo uno de los jueces. YeonJun cruzó sus brazos.

—Diré dos cosas —dijo con el ceño fruncido— Número uno, mi cliente no tiene heridas de mordidas que delaten un acto de defensa personal y, número dos, en ningún momento a mi cliente se le ha llevado a tomar muestras de sangre para poder saber si la misma es de él o no, la falsificación podría agrandar el caso y apuntar una evidente sospecha a Choi Seong-Suk, quien según mis investigaciones no sería la primera vez en ser culpado por falsificación ¿estoy en lo correcto? —los dos jueces se miraron.

—Tomemos un receso de dos minutos —dijo el vampiro. Todos se levantaron, YeonJun solamente tomó asiento mientras tomaba de una botella de agua.

—Mi sangre si está en su boca —dijo SooBin mirando al abogado.

—¿Mnh? —el pelinegro le miró tragando de su agua.

—Él estaba muriendo y si bebía de mi sangre podía tomar fuerzas y mantenerse hasta que sus heridas sanaran —contó— Pero ya estaba demasiado débil y no pudo tragar, solo la escupió.

—¿Está seguro de que SeungBae era su sobrino? —le preguntó repentinamente.

—¿Ah? —SooBin frunció su ceño— Claro que era mi sobrino.

—Señor Choi, ¿compartían la misma sangre? —el vampiro asintió seguro— ¿Seguro?

—Sí, ¿qué pasa con eso? —miró al abogado.

—Si está diciéndome que Seong-Suk fue quien mató al niño... —dijo mirando la botella de agua— Pero él no pondría su cabeza en juego, ¿o sí?

—Prefiere poner la de otras personas. Él no se arriesgaría de esa manera —contestó.

—Entonces SeungBae no es su hijo —dijo— Tanto en la ley de vampiros como en la humana matar a un niño o a tu propia sangre es penado a muerte o a cárcel. Y sí me dice que su hermano no se arriesgaría de esa manera, eso quiere decir que SeungBae no es su hijo, no es su sangre, ya que al no ser su sangre está libre en el mundo vampiro...

—Pero penado en el mundo humano —dijo SooBin procesando todo lo que había dicho el abogado.

SooBin había pasado toda la noche pensando una y otra vez por qué su hermano hizo eso, habían pasado demasiadas cosas y su mente estaba hecha un lío, tanto que no se había detenido a analizar la situación tal como lo hizo el abogado.

—El descanso terminó —habló el juez vampiro. Todos volvieron a sus lugares y callaron— Éstos exámenes no serán tomados en cuenta —dijo dejando la carpeta que le había entregado el abogado de Choi hace minutos— Se repetirán con la presencia de los dos abogados.

—Su señoría —YeonJun se colocó de pié— Exijo exámenes de ADN, con el difunto, Choi SooBin y Choi Seong-Suk —dijo.

—¿Para qué usted requiere eso? —el otro abogado le miró— Choi SeungBae es hijo de Choi Seong-Suk no se necesitan unos exámenes de ADN.

—Su señoría —volvió a hablar mirando solamente a los jueces— Mi cliente al afirmar que había visto al señor Choi en la escena del crimen le hace un sospechoso —empezó a hablar— Exijo con todo el derecho que se lo concede a mi cliente que se hagan tres tipos de exámenes, la sangre que hay en la boca del difunto, la saliva que hay en las mordidas y la compatibilidad de estos tres —dijo.

—¡No puedes hacer eso! —Seong-Suk- se levantó de nuevo y gritó.

—Si puede, está en todo su derecho. Tome asiento, señor Choi —dijo el juez humano acomodando sus lentes— Se le concederán dichas peticiones. Los exámenes se llevarán a cabo.

—Concedido —dijo el vampiro— Choi Seong-Suk estará en observación mientras se dan los resultados de las pruebas y Choi SooBin permanecerá bajo arresto. Choi Seong-Suk se convierte en un sospechoso.

—¿Qué? —YeonJun negó— Mi cliente no puede estar en cárcel mientras el segundo sospechoso está en casa, los dos estarán bajo observación o arresto domiciliario.

—Negado —negó con su cabeza el vampiro —De inmediato se tomarán las muestras de los dos sospechosos y se llevarán a laboratorio, los dos abogados estarán presentes en el momento de la revelación. Se levanta la sesión —dijo el vampiro golpeando el mazo, todos se levantaron y empezaron a salir.

YeonJun bufó y tomó asiento en la banca.

—En un momento vendrán los especialistas a tomar las muestras —informó uno de los jueces extendiendo su mano al pelinegro que se levantó y estrechó la mano de los dos.

—¿Qué le hizo pensar en aquello del ADN? —preguntó SooBin al abogado que suspiró.

—Cuando mencioné la primera vez que exigía muestras de ADN su hermano hizo gestos de molestia, también empezó a mover sus ojos....—subió los hombros— Me hizo pensar que oculta algo, luego hablamos lo que hablamos y mi sospecha se intensificó.

—Es buen abogado —soltó mirando a dos mujeres llegar con una pequeña cava en manos.

—Gracias —sonrió.

—Apriete esto —la mujer le dio una pelota de goma al vampiro que, sin fuerzas, apretó— Con fuerza, señor.

—No tengo fuerzas, señorita —mencionó, la enfermera tomó la mano del vampiro y apretó con la propia, la otra mujer sacó la sangre del pelinegro, luego le indicó que escupiera en un pequeño bote de nuestras.

—Los exámenes se realizarán aquí —dijo dándole una dirección al abogado que asintió con una sonrisa.

—Iré en cuanto me den los resultados —dijo levantándose para tomar sus cosas.

BaekHyun estaba en casa cuidando de SooJung.

—Gracias —SooBin le miró una última vez y se dejó llevar por los dos policías. YeonJun miró de reojo como Choi Seong-Suk se acercaba a él, sin querer enfrentar al vampiro, sintiendo miedo de su simple cercanía se dio la vuelta y salió de ahí con rapidez.

Dio un salto en su lugar cuando miró una sombra negra seguirle, se dio la vuelta dispuesto a gritar que se alejaran pero al divisar la chaqueta de cuero desgastada, solo rió.

ChanYeol le asustaba a veces.

Esta es la primera escena de juicio que hago así que tenganme un poco de paciencia, puede que se me hayan escapado unas cuantas cosas pero este fic, como todos, no para aprender y avanzar no escritora a medida de que voy haciendo los capítulos.

Dejen su opinión en los comentarios!

También pueden aconsejarme, eso sí, de buena forma ;)

The_Dark_Diamond