Monique miró alrededor de la habitación, todavía molesta por el hecho de que le habían pedido que fuera a la casa de Kim tan temprano un domingo por la mañana, especialmente porque era uno de sus días libres. "¿Alguien sabe por qué Ron nos llamó a todos aquí?" Su mirada se fijó en cada individuo, desde toda la familia Possible hasta Bonnie, Tara, Josh e incluso Felix. Bonnie era la única con una sonrisa segura en su rostro.

Kim fue quien respondió, sentándose apretujada con Josh en una de las sillas más cómodas. "No estoy seguro, pero sé que hay una sorpresa que te va a encantar".

Monique la miró, ya que fue la única que respondió. "No juegues conmigo niña, es demasiado pronto para esto".

"Solo ten paciencia Mon, Ron y su familia serán..." Fue interrumpida cuando tocaron la puerta y la familia Imparable entró en la habitación.

Monique estaba de pie, con los brazos cruzados frente a ella. "Vaya, más vale que esto sea bueno para sacarme de la cama un domingo por la mañana".

Ron sonrió al ver que casi todos los que quería que estuvieran allí estaban allí. "No te preocupes Monique, valdrá la pena, te disculparás por ser insolente".

La mirada de Monique se intensificó rápidamente. "Ron, NO quieres verme insolente".

Ron avanzó rápidamente antes de que Monique pudiera enojarse más mientras sus padres tomaban asiento. "Muy bien, parece que estamos esperando a una persona más y luego..." Hubo un golpe en la puerta y Ron saltó emocionado hacia la entrada. "¡SÍ! Le dije a Wade que TENÍA que venir por esto. Finalmente voy a conocerlo en persona".

Kim también estaba de pie ahora, casi tan ansiosa por conocer a su compañero de equipo más joven. Ron abrió la puerta rápidamente, con los brazos abiertos. "Wade, hombre, me alegro mucho... de que... pudieras..."

De pie en la entrada era una vista muy familiar; El Wadebot de Wade, la cara del técnico residente iluminando la pantalla. "Gracias por invitarme Ron."

Ron gruñó levemente, moviéndose a un lado para dejar entrar al wadebot. "Wade, pensé que vendrías en persona".

"Lo siento Ron, teleconferencia con Japón. No pude irme en el medio".

Ron suspiró, esperando a que Kim y Wade se instalaran antes de comenzar. "Les pedí a todos que estuvieran aquí porque son todas las personas que significan más para mí".

Félix miró a su alrededor brevemente, casi interrogante. "Uhh... solo me conoces desde hace un par de semanas".

Ron, levantó un dedo para hacer un punto, pero se detuvo, reflexionando sobre eso. "Está bien, entonces no tengo muchos amigos. Pero amigo, eres mi hombre cuando se trata de la gama de videos". Félix tuvo que reconocer eso, ya que se habían juntado un par de veces para jugar.

Ron continuó rápidamente. "Está bien, entonces mis padres, Bonnie, KP y Tara saben sobre esto a primera hora, pero les pedí que no dijeran nada hasta hoy. Verás... Recibí un cheque de regalías de Bueno Nacho... por noventa y nueve Millón de dólares."

Hubo sonrisas de los que sabían, pero el resto de su audiencia estaba atónita. Josh dejó escapar un silbido suave, incapaz de creer lo que escuchó. "Tío..."

Ron siguió adelante, feliz por la reacción. "Normalmente, Bonnie y yo nos hubiéramos vuelto locos con esto, pero después de lo que pasó con su padre, decidí que deberíamos hacer lo inteligente e invertir la mayor parte... que en realidad fue mayormente idea de mi papá cuando le pregunté en busca de ayuda. Pero..." Ron levantó su dedo índice en el aire rápidamente, "otra cosa que el Sr. Rockwaller mencionó fueron las metas. Entonces, se me ocurrieron algunas cosas que hacer con el dinero para promover esas metas".

"Primero... ¡Voy a conseguir una motocicleta!" Ron aplaudió con alegría.

James Possible frunció el ceño ligeramente. "Ronald... ¿cómo es eso un gol?"

Ron dejó de aplaudir y se volvió un poco más moderado. "Está bien, algunas de mis metas son personales. La segunda cosa... y esto es para ti y Wade KP... ¡Voy a financiar al Equipo Posible!"

Kim se quedó en blanco por un momento, sin entender del todo. "¿Qué quieres decir Ron?"

"Quiero decir... ¡Conseguí un jet! ¡Con un piloto robótico! ¿No es dulce?"

Andrea miró a Gene y Jean un poco atónita. "¿Le estás dejando comprar un jet?"

Gene asintió y se volvió para mirar a los Posibles mayores. "En realidad, tiene sentido a largo plazo. Podemos incorporar a Team Possible en una organización sin fines de lucro y el avión se convierte en una cancelación. Alivia la carga fiscal en general y debería brindarles un viaje más seguro y rápido, aumentando la probabilidad de su xito en una misin en un veinticuatro por ciento. Gene miró brevemente a su esposa, pareciendo un poco avergonzado. "Además... Ronald dijo que podríamos usarlo para volar de vacaciones de vez en cuando.

"Sin embargo, papá cortó el equipo que quería contratar. Pensó que no era rentable". Ron siguió adelante, dirigiendo su atención a Wade. "Y amigo Wade, ¿te gustaría un presupuesto ilimitado para hacer todos esos dulces juguetes que nos das para las misiones?"

"No, gracias."

"Mira, lo sabía..." Ron parpadeó un par de veces mientras lo que Wade decía se asimilaba. "Uhh... ¿qué?"

Wade solo sonrió enigmáticamente. "No necesito el dinero. Mi mamá todavía está depositando todos mis cheques de patentes por mí y solo hago uso de eso para lo que necesito".

Kim parecía algo avergonzada cuando dirigió su atención a su amiga más joven. "Wade, no sabía que estabas pagando todo tú mismo. Solo pensé que estabas usando cosas que tenías por ahí".

Wade hizo caso omiso de sus disculpas. "No te preocupes por eso. Simplemente no lo mencioné porque no querías cobrarle a la gente por ayudarlos. Me gustó eso, así que pensé en ayudar tanto como pudiera. Además", Wade. le sonrió a Ron, "Ron tendría que recibir algunos cheques más como ese para tocar los saldos de mi cuenta".

Ahora toda la sala estaba atónita, ninguno de ellos se había dado cuenta de que Wade en realidad podría ser más rico de lo que era Ron ahora. Wade solo se rió de la reacción a su alrededor. "Simplemente no pierda demasiados de esos lápices labiales láser. Las piezas cuestan poco más de dos millones para hacer que un láser tan poderoso sea tan pequeño".

Kim miró su bolso, con los ojos muy abiertos, al darse cuenta de cuánto podrían valer las cosas que llevaba.

"Doctores P al cuadrado", Ron les entregó un sobre a cada uno, "Papá dijo que necesitaba aumentar mis donaciones caritativas. Así que haré contribuciones bastante grandes tanto para el centro espacial como para el hospital".

Andrea se levantó, dándole un abrazo al joven. "Ronald, eso es muy considerado de tu parte, pero ¿realmente deberías estar tirando todo este dinero de esta manera?"

"Papá dijo que estaba bien". Ron miró a su padre, quien asintió en confirmación. "Dijo que terminaría dando más en impuestos que haciendo las cosas de esta manera". Félix y Josh fueron los siguientes en el desfile. "Chicos, ¿se animan a ir al centro comercial a gastar algo de este dinero? Estoy hablando de videojuegos, materiales de arte, lo que quieran, con todos los gastos pagados. ¿Están interesados?" Si hubieran notado que Bonnie saltaba positivamente en su asiento, podrían haberlo reconsiderado, pero ambos acordaron rápidamente que estaba más que bien para ellos. Ron les sonrió, la sonrisa no tan amistosa esta vez. "Bien, porque todas las chicas vendrán con nosotros y probablemente necesitarán ayuda con sus maletas".

Las caras del chico se desplomaron cuando el horror de la situación cayó sobre ellos. Bonnie estaba mareada mientras que el resto de las chicas estaban atónitas. Los ojos de Monique estaban muy abiertos mientras miraba a Ron. "¿Dijiste... dijiste... todos los gastos pagados?"

"Sí." Ron estaba sonriendo ampliamente ahora mientras metía la mano en su billetera, sacando un par de tarjetas. "El banco tenía estos giros para..."

Monique se puso de pie en un instante, más rápido de lo que nadie podía ver, sus manos agarrando las muñecas de Ron con fuerza. "Son esos..."

Ron se estremeció levemente ante el agarre que Monique tenía sobre él. "Uhh... son tarjetas de doble platino".

La cabeza de Monique se echó hacia atrás, con la lengua colgando por un lado de la boca. "Doble platino... uhhhhhhh..."

Ron miró suplicante a Kim y Bonnie, quienes con cuidado apartaron a Monique de Ron. "Finalmente, eso todavía deja mucho dinero que papá va a invertir, de modo que cuando plantee algunas metas más, el dinero estará ahí para eso". Ron se movió incómodo frente a todos, su discurso preparado terminó, dejándolo inseguro de qué decir a todos los rostros que miraban. "Entonces... ¿qué piensan todos?"

"¿Puedo tener a tu bebé?"

Todas las cabezas se giraron para mirar a Monique, que todavía parecía un poco fuera de sí. Por supuesto, la mirada más dura vino de Bonnie, a quien no le gustó para nada ese comentario. Ron tiró de su cuello, sonriendo torpemente. "Uhh... no creo que sea necesario Monique."

Bonnie se puso de pie rápidamente, aferrándose al brazo de Ron y mirando a Monique. "Maldita sea, no es necesario".

James rápidamente se insertó entre la línea de visión de los adolescentes, palmeando a Ron en el hombro. "Creo que estás haciendo una gran cosa, Ronald".

"Estoy de acuerdo." Andrea le dio a Ron otro abrazo, esta vez agregando un beso en la mejilla. "¿Qué tal si nos dejas hablar de todo esto con tus padres y todos van a divertirse al centro comercial? Sé que las chicas tienen que estar ansiosas por ir".

"Estoy muy de acuerdo." Bonnie, todavía aferrada al brazo de Ron, comenzó a arrastrarlo hacia el auto. "Las tiendas abren en veinte minutos, y deberíamos llegar allí para las ventas tempranas. Calculo que solo debería tomar seis o siete horas para eso".

Los ojos de Ron se agrandaron. "Se... ¿siete horas?"

Rufus aprovechó ese momento para saltar del bolsillo de Ron, despidiéndose de su humano. Josh y Felix también fueron arrastrados tras ellos, ambos parecían bastante asustados. Andrea se acercó al lado de Jean con una sonrisa en su rostro. "Esos chicos están condenados, ¿no es así?"

Jean Stoppable sonrió junto con su amiga. "Oh sí."

John Rockwaller estaba trabajando en su computadora cuando entró la llamada que había estado esperando. "Cameron, dime que tienes algo para mí".

"Es de fiar." Cameron sonaba cansado por teléfono, después de haber trabajado toda la noche. "El chico tiene casi cien millones, aunque parece que podría haber gastado algo de eso ayer".

"No es un problema." John sonrió, revisando los saldos de sus cuentas en el extranjero. "Dudo que el chico pueda gastar todo el dinero tan rápido. Nadie es tan estúpido. Pero, ¿cómo es que no encontraste esto en tu primer chequeo de la familia?"

"Ese fue mi culpa. El niño solo trabajó en Bueno Nacho durante una semana. ¿Quién podría haber imaginado que sería gerente y crear un elemento de menú popular en ese momento. Además, como no tenía el dinero cuando hice el cheque..."

"Bien, bien." John hizo caso omiso de las excusas de su hombre. "Pero revisa el resto de los antecedentes de los niños con un peine de dientes finos. No quiero perderme nada con este niño, no si lo voy a usar".

John apagó el teléfono, considerando la situación. Había sido corredor de inversiones en una gran empresa cuando acababa de salir de la universidad, una de sus estrellas en ascenso. Estaba viviendo la vida, con una hermosa esposa, un auto elegante e invitaciones a todas las fiestas correctas. Pero había sido demasiado arrogante. Cuando ocurrió un problema y una inversión que él había garantizado no funcionó, se arruinó. La empresa lo enlató, dejándolo a él ya su esposa, con dos hijas ya, sin nada.

Fue entonces cuando salió por su cuenta, creó su propia empresa. Tomó tiempo, pero finalmente llegaron las cuentas. Pero esta vez, no estaba dispuesto a correr riesgos. Falsificar algunos registros, mantener al crédulo enganchado a cuánto dinero les estaba 'ganando', y desviar un poco de cada cuenta a sus participaciones en el extranjero. Por supuesto, había tenido que hacer algunas otras cosas para llegar a donde estaba ahora, pero nada de eso le importaba.

Con el dinero del chico Stoppable, John finalmente tendría suficiente para rescatar al país de alguna isla tropical en el Caribe. También podía deshacerse de su molesta familia, que en su mayor parte había resultado inútil para él. Su esposa había perdido su apariencia y él apenas la tocaba a menos que fuera necesario para mantenerla feliz. Su Bonnie más joven estaba demostrando ser un gran fracaso. Al menos Connie había probado sus genes y Lonnie había sido útil en ocasiones. Podría mantenerse en contacto con ellos después de instalarse en su nueva vida.

Cuando John Rockwaller se recostó, pensó en la vida en una playa tropical, con lindas jóvenes isleñas para satisfacer todos sus caprichos.

El tráfico del centro comercial todavía era muy ligero cuando las tiendas comenzaron a abrir sus puertas. Pero Ron no estaba prestando atención a eso. Estaba observando las expresiones felices y vertiginosas de sus compañeras. Parecían niños en una tienda de dulces, pero ya exagerados con el azúcar.

Ron metió la mano en su billetera, sacando una de las tarjetas. "Así que supongo que todos están ansiosos..."

Bonnie le arrebató la tarjeta de las manos a Ron con una sonrisa. "Gracias Ronnie. Te amo".

"¡Oye!" Kim dio un paso al lado de Bonnie, frunciendo el ceño. "¿Por qué recibe la tarjeta?"

Bonnie solo sonrió triunfalmente. "Privilegios de novia".

Kim agarró la tarjeta de la mano de Bonnie, para gran ira de Bonnie. "Bueno, he sido su mejor amigo desde que teníamos cuatro años. Creo que puedo velar mejor por los intereses de Ron en cómo gastamos su dinero".

Mientras Kim estaba concentrada en Boonie, no se dio cuenta de que Monique se deslizó hacia arriba y le arrebató la tarjeta. "Bueno, creo que debería... solo porque sí".

"¡Pero yo soy su novia!

"¡Soy su mejor amigo!"

"Y me ofrecí a tener sus hijos".

Bonnie y Kim se giraron hacia Monique, la mirada dura de Bonnie. "Y no creas que me he olvidado de que eres una desvergonzada buscadora de oro".

Kim empujó contra Bonnie. "No llames desvergonzada a Monique".

Monique se movió para empujarlos a ambos, profundamente ofendida. "Y NO soy un buscador de oro. Si alguien es un buscador de oro..."

"¡SUFICIENTE!" Las tres chicas se giraron rápidamente para mirar a Ron, a quien nunca habían oído sonar tan agitado y enojado. Ron rápidamente le arrebató la tarjeta, solo mirándolos a los tres. "Ninguno de ustedes podrá quedarse con la tarjeta. Todos están actuando como niños, peleándose por algo que todos van a usar de todos modos". Ron dio un suspiro exasperado. "¿Cuándo diablos me convertí en el responsable aquí?" Ron dirigió su atención a la cuarta hembra del grupo. "Tara, puedes quedarte con la tarjeta".

Tara solo sonrió dulcemente. "Gracias, Ron".

"Ahora, vamos a ir a ver videojuegos. Llámanos si nos necesitas". Bonnie, disgustada, besó a Ron en la mejilla antes de irse, y Kim hizo lo mismo con Josh.

Pero una vez que Ron, Josh y Félix estuvieron fuera del alcance auditivo, la dulce sonrisa de Tara se convirtió en una de triunfo. "Sabía que eso funcionaría".

Tres cabezas se giraron hacia ella, inseguras de lo que estaba hablando. "Tara, ¿qué quieres decir?"

"Oh, pensé que si ustedes tres peleaban por eso, obtendría la tarjeta. Parece que funcionó".

Kim y Monique la miraron boquiabiertas, pero Bonnie le dedicó a Tara una sonrisa maliciosa. "Tara... eso fue positivamente tortuoso".

Tara le dio a Bonnie una dulce sonrisa y un encogimiento de hombros. "Lo sé. Ahora vamos, estamos quemando el tiempo de compras aquí".

Ron estaba sacudiendo la cabeza mientras entraba a la tienda de videojuegos con Josh y Felix. "Hombre, estaban actuando tan... infantiles. Y Monique..."

Félix solo se rió de la expresión en el rostro de Ron. "Eso es dinero para ti, hace que la gente haga cosas locas. No me preocuparía demasiado por eso. Por lo que he visto de ellos, Kim y Bonnie se calmarán pronto".

Ron hizo una pausa, mirando a su amigo. "Noté que no mencionaste a Monique en eso".

Félix rió aún más fuerte ahora, llamando la atención de los otros clientes en la tienda.

"Ni siquiera voy a tocar ese. ¿Ves la forma en que reaccionó cuando sacaste esa tarjeta de crédito en casa de Kim? Hombre, estás frito. No conozco muy bien a Monique, pero espero que se calme". antes de que tu novia la derribe. Parece que va a tener un buen gancho de derecha. O simplemente podrías decirles que luchen con gelatina por ti".

Ron pareció sorprendido por la declaración de Félix. "Felix, no podría hacer eso. Bonnie me mataría si le dijera que luche con Monique en..." Los ojos de Ron se miraron a lo lejos por un momento, una sonrisa tonta se extendió lentamente por su rostro. Sin embargo, después de un momento negó con la cabeza, aclarándose. "¿Qué estaba diciendo?"

"Bonnie, Monique, lucha de gelatina..."

"Cierto, cierto, aunque caliente, decírselo a Bonnie significaría mucho dolor en mi futuro inmediato".

"Sin embargo, podría valer la pena si llegara a suceder". Ambos adolescentes se rieron y Félix se alejó rodando, revisando los estantes de los nuevos lanzamientos.

Josh había estado mayormente en silencio todo el día, pero se acercó a Ron, que estaba mirando en la papelera de ofertas. "Hola Ron, gracias por invitarme y todo eso".

Ron levantó la vista con una sonrisa en su rostro. "No hay problema, José".

"Sé que es principalmente porque Kim y yo estamos saliendo, pero lo aprecio".

Ron levantó la vista rápidamente, frunciendo el ceño ligeramente. "Eso no es todo. Hemos salido antes. ¿Recuerdas el Halloween del año pasado? Sé que no somos muy unidos, pero a KP le gustas mucho".

"A mí también me gusta mucho Kim". Josh hojeó algunos juegos sin prestar demasiada atención. "Oye Ron, ¿puedo preguntarte algo?"

"Seguro amigo."

"Ustedes van a todas estas misiones... ¿alguna vez se lastiman, como si estuvieran en contra de Motor Ed?"

Ron hizo una pausa en su mirada, pensando en la pregunta. "Bueno... no sé si nos lastimamos, pero tenemos los rasguños y cortes habituales, seguro. Quiero decir, hubo una vez, en la guarida de la isla del señor Senior Senior, tenía estos trompos de perdición. ¡Eran enormes! KP fue golpeado bastante bien por uno de ellos cuando se cansó". Ron no se dio cuenta de que Josh palidecía ligeramente. "Oh, y estaba esta cosa del calamar mutante cuando Kim vino a rescatarme a mí y a los O' Boyz, creo que se destrozó un poco. Y hubo un momento en que Kim y Shego estaban peleando, y esta explosión perdida me atrapó justo en el la pierna." Ron se subió la pernera de los pantalones y le mostró la vieja cicatriz de la quemadura a Josh. "Me dolió un poco, pero no fue tan malo. La mamá de Kim me curó".

Josh ni siquiera pretendía mirar los juegos. "¿Y qué piensa Bonnie de ti y de estas misiones?"

Ron consideró eso por un momento. "Bueno, hablamos sobre eso. Además, ella estuvo en una misión conmigo antes, cuando Kim estaba enferma, así que ella sabe cómo es. Sé que se preocupa, pero confía en mí y sabe que esto es algo que tengo que hacer. Quiero decir, ayudamos a salvar el mundo, no puede ser más genial que eso".

"Yeah Yo supongo." Josh se apartó del contenedor, su rostro inexpresivo. "Gracias Ron".

"Oye, no hay problema, amigo". Ron volvió a repasar los juegos, pero algo en las preguntas que hizo Josh le molestaba en el fondo de su mente. Por un momento, pareció que podría haber descubierto qué estaba mal, pero luego su ojo vio el videojuego original de Bricks of Fury, y todos los pensamientos sobre Josh se fueron por la ventana.

Notas del autor: Siguiente... Kim tiene una cita con Josh, John Rockwaller comienza a poner en marcha su plan y ahora Tara tiene un admirador secreto. ¡Manténganse al tanto!