Luego de dejar a su hermana con esa hermosa y sexy Guardavidas, Gahyeon se acercó al puesto de jugos que estaba en la playa. Pie's Bar. Tenía la adorable imagen de un perrito marron y pequeño tomando un batido y con un sombrero de paja en la cabeza. Le llamó la atención y supuso que sería bueno tomar algo. Se acercó a la chica que estaba leyendo, ya que la otra parecía ocupada con otro cliente; tocó su libro luego de sentarse en uno de esos bancos altos.

—¿Sherlock, eh? Tienes buen gusto.

—Uhm gracias. ¿Qué te puedo ofrecer? —Dijo poniendo un señalador de Chopper en su libro para luego mirar a la chiquilla frente a ella. 

—¿Un exprimido de naranja? Mejor dos y hablamos ¿qué tal?

—No gracias. Parece que tienes como 9 años y la verdad estoy ocupada leyendo.

—Creí que dirias trabajando pero Okey... Hey ¿Sabes el nombre de la chica rubia?

—No. Ve y pregunta tú.

—Por cierto, tengo 14, no 9. Y estoy adelantada un año por que cumplo-

—Te felicito. Aquí esta tu exprimido, son 55 wons.

La "chiquilla" tomo dinero de la billetera de su hermana, suponiendo que no se molestaria por haberle presentado a ese bombom, y se lo extendió a la antipática empleada. Tomó el vaso de plástico y se sentó en una de las mesas con sombrilla en dirección a la torre de la guardavidas, buscando a su afortunada hermana para procurar que no desperdiciara la oportunidad que le había dado con una chica linda. No como todas las idiotas con las que había salido hasta ese momento. La había visto preocuparse un niño y había reaccionado enseguida al decirle que su hermana surfer se estaba ahogando. Lo cual era una mentirilla pero se arreglaba con un "Perdón, me asuste" junto a su cara de niña buena.

De momento esperaba que la chica rubia se desocupara para ir a hablarle. Pero estaba hablando con la hermosa repartidora y la adorable empleada del Bar. Parecia que Busan estaba minado de chicas bonitas. Si Siyeon no tenía suerte con la primera ya sabía a quienes presentarle. Alguna se iba a interesar en su hermana. Y sino a seguir buscando.

—Hey ¿Hay alguna librería cerca? Estoy aburrida.—Volvió a dirigirse a la chica antipática una vez que la repartidora se fue. Ahora solo faltaba que la chica adorable estuvieda ocupada para hablarle. Pero primero un libro para pasar la tarde.

—La calle que está atras tiene una pequeña. Si no encuentras nada, ve allá a la izquierda. 4 cuadras al fondo hay una biblioteca pública.

—Muchas gracias. Por cierto, ¿cómo te llamas?

—Yoohy- Yoobin. ¿por qué te importa?

—Gahyeon. Mucho gusto. Me caes bien y vendré a molestarte seguido. Hasta luego.

Resignada, Yoobin rodó los ojos y volvió a su libro. Aunque comenzó a divagar extrañando a su amigos, Yuna y Seungwo. Pero estaban de vacaciones en otros lugares, fuera de la ciudad y no los vería hasta que volvieran a clases. Al menos podian hablar por mensajes pero no era lo mismo. En especial por que su prima insistía en llevarse bien con ella, sin ver que eran demasiado distintas. Ella y Bora eran las niñas ricas del colegio; sociables y muy lindas. Yoobin era más del tipo promedio que pasaba desapercibido. Algo intelectual, tranquila y de pocos amigos. Simplemente no destellaba amistad por dónde fuera que caminara y realmente prefería ser así. Además no tenía que lidiar con declaraciones 24/7 como Minji o Bora, incluso Yoohyeon tenía varios pretendientes. No le sorprendía, era bonita. Y todo el mundo se fijaba en eso. 

—Dami, solo queda una porción ¿la quieres?

—Sí. ¿te comiste el resto tú sola?

—No. Le compartí a Dong y a Namu. Aunque si podría comerme 6 porciones.

—¿Me explicas cómo tienes ese cuerpo?—dijo apuntandola de pies a cabeza.

—Ejercicio. —reconoció algo avergonzada. No era la primera vez que alguien notaba que comía bastante. Pero quería no darle mucha importancia.—Mucho ejercicio. En fin... Hoy fue un día tranquilo por suerte. ¿Qué haras después del trabajo?

—Iré a casa.

—¿No quieres quedarte? Le mostraré el lugar a Dongie. Y tu sabes bastante, podrías decir algo interesante .

—No. No creo pero gracias por la invitación.—Sonrió. Pese a no sentirse cómoda con ella, apreciaba el hecho de que quisiera pasar tiempo juntas.

—Claro... Es que como tus amigos están lejor creí que tal vez querrias pasar tiempo con alguien más.

—Jeje se nota que no me conoces JiU. Gracias pero estoy bien con un libro y música.

—Entiendo. Pero si algún día quieres, no sé, hacer cualquier cosa juntas puedes decirme.—Dio por terminada la conversación cuando un par de clientes de acercaron. Minji atendió a dos de ellos mientras Dami se encargaba del grupo que se había sentado en la mesa.

Su turno terminaba a las 6p.m. igual que el de Bora; pero esta había hecho planes para quedarse un poco más en la playa para re-aprender Surf con la chica que había conocido por una falsa alarma. Debía admitir que hubiera amado rescatarla pero tambien estaba aliviada de que no pasara nada malo en su primer día.

Le envió un mensaje a Minji para que no la esperara o se enojaria mucho por estarla esperando sin sentido.

De Minji Gay: Claro. Luego me cuentas. Yo olvidé decirte que voy a mostrarle la ciudad a una chica nueva. Luego te la presento.

Genial, ella también estaba por dejarla colgada. Agradecía que ya había hecho planes y que las dos eran igual de distraídas. Lo importante en ese momento era la chica que estaba esperandola para practicar juntas.

—La verdad es que no recuerdo nada. Tenia como 5 años la última vez que usé estas tablas.

—No te preocupes. Te vas a acordar enseguida. Solo vamos y cualquier cosa me dices. Nos quedaremos cerca de la orilla para que no te pase nada.

—Gracias... Hey después deberiamos salir.

—Es verdad aunque hoy no puedo. Noche en família... Pero nos verémos mañana y podemos salir luego de tu trabajo.

—Me encantaría. ¿Hay algo que te guste hacer además de esto?

—Mmm cantar, me gusta la música en general.

—¡Siyeon vamos! ¡Tu hermana se perdió!

Siyeon la maldijo por millonecima vez en el día y suspiró, dirigiendole una apenada mirada a "SuA".

—¡Ya voy! Ag parece que no puedo quedarme hoy. Te salvaste de la tabla pero mañana-

—Mañana te mostraré algo. Ve.

—¿Okey? Bye.—Sacó de la arena su tabla de Surf y se despidió de la Guardavidas para ir con sus papás a buscar a Gahyeon. No le sorprendía que se hubiera perdido, siempre pasaba. De no estar hambrienta no se habría ido de la playa pero ahora que recordaba tampoco sabía dónde estaba el hotel, o la habitación o siquiera el nombre de una calle.