04: La Isla Calavera
Finalmente, el día había llegado, por lo que Lamb reunió a toda la aldea en las cercanías del portal que normalmente usaba para acceder a otros sitios cercanos a su pequeño paraíso.
--- Bien, ¿todos listos? ---. Cuestionó el cordero.
Los adeptos, cargados con mochilas sobre sus espaldas y algún bebé o huevo en sus manos, asintieron con emoción.
--- Bien, entonces podemos proceder con esto ---. Lamb sonrió con una leve satisfacción, usando el poder de la corona para activar el portal. --- En marcha, Goat ya nos está esperando allá ---. Dijo ingresando en el portal.
Acto seguido, el resto de adeptos siguió el ejemplo de su líder, entrando en el portal.
En cuestión de segundos, todos aparecieron en el corazón de lo que parecía ser otra aldea similar a la suya, la única diferencia además de la agradable temperatura del lugar, era que esta tenía una apariencia más acorde a lo que uno esperaría de un pueblo costero.
--- ¡Bienvenidos a la Isla Calavera! ---. Anuncio Goat mientras se acercaba al resto del grupo en compañía de los habitantes nativos de la isla quiénes, en su mayoría, eran cangrejos y estrellas.
--- Te luciste Goat ---. Lamb sonrió complacido.
--- Sólo lo mejor para ti ---. Sonrió la cabra, tomando con delicadeza ambas manos del cordero para luego darle un tierno beso en la mejilla.
--- Awww ---. Tanto los nuevos adeptos como los viejos observaron al dúo de líderes con ternura, incluso aquellos que eran cónyuges de ambos no podían sentirse celosos al ver eso.
--- Rompe hogares... ---. Susurro Narinder para si mismo.
Goat escucho ese comentario pero decidió no decir nada, ya habría tiempo para resolver sus asuntos.
--- Bien, vayan a dejar todas sus cosas en las cabañas, los nativos les indicarán el camino ---. Informó Goat en voz alta para que todos pudieran oír. --- Los bebés tienen su propia zona especial, por lo que no se preocupen por ellos ---.
--- Después de eso, sientanse libres de hacer lo que quieran, al fin y al cabo, vinimos aquí a pasarla bien ---. Lamb sonrió.
Con la aprobación de ambos líderes, tanto los adeptos se apresuraron a seguir a los nativos. Narinder hizo lo mismo Pero fue rápidamente detenido por Goat, quién no sólo lo sujeto del brazo con fuerza, sino que también le arrebato su equipaje de la mano, pasandoselo a un cangrejo color rojo para que lo llevará a la cabaña dónde él y Lamb se hospedarían.
--- Bien jefe, ¿cuál es plan? ---. Preguntó la cabra, ignorando completamente la sorpresa del contrato aunque aún lo sujetaba con fuerza.
--- Sinceramente no tengo ni la más remota idea, estuvimos tan ocupados con organizando esto que ninguno planeó lo que haríamos después... ---. Confesó Lamb soltando un suspiro de cansancio.
--- ¡Espera! ¡¿No que ibas a liberarme de todas mis responsabilidades sobre ti durante las vacaciones?! ---. Reclamó Narinder indignada.
--- ¿Enserio le creíste? ---. Preguntó sarcásticamente la cabra
El gato negro se tardó unos segundos en procesar aquella pregunta, dándose cuenta no sólo de que Lamb había jugado sus cartas muy bien sonó que él había Sido muy estúpido al fiarse de la palabra de quién alguna vez fue su receptáculo.
Lamb sonrió débilmente, una sonrisa que reflejaba como su mente enferma y perturbada había tenido una idea.
--- Je, creo que ya sé cuál será nuestra primera actividad ---. Dijo finalmente.
[...]
Arena suave.
Olas espumantes rompiendo en la orilla.
Aves marinas sobrevolando el lugar.
Una suave brisa acompañada por un sol resplandeciente.
Y finalmente, una zona completamente equipada con sombrillas de diferentes colores, mantas extendidas sobre la arena, canastas con comida y agua, un puesto dónde se preparaban jugos, varios juguetes para el agua y varias tablas de surf.
--- ¡LA PLAYA! ---. Gritaron tanto los líderes como todos sus adeptos, prácticamente arrancandose la ropa de sus cuerpos.
--- Si... Yupi... ---. Obviamente, Narinder era el único que no estaba emocionado con la idea, tanto que ni se había quitado su túnica como el resto.
Acto seguido, todo el mundo se dispersó por la zona, la mayoría fue directamente al agua mientras que otros apartaban su lugar en la playa
--- ¡Vamos al mar! ---. Gritó Goat corriendo hacia el mar.
--- En un segundo voy, primero debo apartar nuestro lugar para dejar la ropa ---. Dijo Lamb recogiendo ambas prendas.
--- No hace falta, yo lo haré ---. Inesperadamente, Narinder tomó la ropa de las manos del cordero y se dirigió bajo la sombra de una palmera.
Está acción tomó a ambas por sorpresa, era extraño que aquel Dios fracasado tomará la iniciativa en algo sin verse obligado por terceros. Sin embargo, Lamb sabía que solo estaba intentando encontrar una manera para evitar pasar "tiempo de calidad" con ellos, no por lo que se apresuró a seguirlo.
--- Oh vamos, no puedes trasladar tu actitud en la secta hasta aquí... ---. Dijo Lamb en un tono padivo-agresivo. --- Estamos de vacaciones y, lo más importante, en una playa ---.
--- Si, ¿y...? ---. Respondió el gato oscuro en un tomo similar.
---¿Cómo que "y"?... Es la oportunidad perfecta para que todos puedan admirar tu sensual figura brillando bajo la luz... Por mucho que sólo estés reservado para mí, y en menor medida para Goat, eso no significa que no pueda compartirte con el resto ---. Respondió esbozando una sonrisa pícara. --- Soy un Dios generoso después de todo ---.
--- El lugar está repleto de tus adeptos, ve a variar un poco y busca otro que te guste ---. Respondió Narinder tumbandose sobre una manta, pegandose a dormir parte de este circo, queriendo relajarse aunque sea una vez.
Grave error.
De la nada, una pelota de playa rozo el costado del cordero para impactar de lleno en la cara de Narinder, quién no tardó en ponerse de pie con sus tres ojos abiertos, los cuales brillaban en un tono rojiza similar a cuando un adepto se volvía hereje, y emitiendo gruñidos de una bestia a punto de lanzarse contra su presa.
Confundido y sorprendido, Lamb volteo en dirección dónde pensaba que la pelota había Sido lanzada, encontrandose a un Goat que observaba la escena con rostro triunfal.
--- ¡De nada! ---. Sonrió.
El sonido de un fuerte rugido resonó en toda la playa, llamando la atención de todos los adeptos, quiénes observaron a sus líderes siendo perseguidos por Narinder. Sin embargo, ninguno hizo nada para detenerlos, ya que este solo era uno de los tantos "juegos" que los tres compartían.
--- En dirección al agua, aprovechemos que está en trance para quitarle la túnica detrás de las rocas ---. Lamb señaló una formación rocosa cercana a la orilla lo suficientemente grande como para darles privacidad.
--- ¡Pido ser el primero! ---. Grito Goat siguiendo a su amado cordero.
Si, sin dudas las vacaciones habían iniciado a lo grande.
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