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Capitulo 4

...Amenazas...

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PROV'S ____

El día en que Leo se curó y su pie ya estaba sano además de que se podía mover con mucha más libertad pude disfrutar de la compañía de Leo fuera de la casa haciendo una guerra de nieve y muñecos de nieve pero los días siguientes se encontraba fuera entrenando entre la nieve y a veces iba más halla adentrándose al bosque advirtiendome que me quedara en casa hasta que el regresará yo siempre estaba preocupada por como iba a estar, me llenaba de desesperación no saber el como se encontraba y ese día realmente me arrepiento de haber desobedecido pues me adentre al bosque para buscarlo pero al dar tantas vueltas y gritos me caí en la nieve consiguiendo un par de raspones en mi cuerpo, me volví a levantar para seguido avanzar hasta llegar a un cierto punto donde estaba ya bastante exahusta de tanto caminar y gritar, me cubría más con la bufanda pues cada vez era mayor el frío.

Cuando iba comenzar a caminar escuchó una risa que me llena de cierto temor por lo cual me pongo alerta lista para cualquier cosa, pude ver que una sombra paso entre los árboles y seguido de entre ellos salió una chica esta era la misma que había visto hace unas semanas junto a ese tigre.

- Vaya ¿Que tenemos aquí? Un pequeño e indefenso pajarillo

Dijo aquella chica con un toque de molestia en su voz, se podría decir que me tiene un rencor pero no sabría decir porque.

- ¿Quién eres?

Pregunté mientras me intentaba alejar ya que ella se acercaba cada vez más.

- Solo una advertencia cariño

Seguido encajó aquel especie de cuchilla al lado de mi cabeza cortando unos pocos cabellos yo tragué saliva al ver que tan cerca estuvo de quedar aquella chuchilla en mi cabeza.

- No deberías estar cerca de esa tortuga si aprecias tu vida, además no te hagas ilusiones niña el ya es de alguien más

No entendía lo último que había dicho ¿Hacerme ilusiones? ¿A qué se refiere?antes de que pudiera decir algo más un extraño humo se hizo presente para seguido la chica ya no estuviera frente a mi ni siquiera aquella arma que había encajado con bastante fuerza en el árbol, apenas di un paso al frente mis piernas flaquearon por el temor que sentía en esos momentos y cai al suelo de rodillas.

Me senté en el suelo para seguido colocar mis manos en mis rodillas abrazando las y seguido ocultar mi rostro en ellas, sentía unas enormes ganas de llorar por el temor más que nada y seguido pude escuchar pasos apresurados al igual que una respiración agitada, aquella persona se detuvo para seguido caminar en mi dirección calmando se un poco y quedar enfrente mía, este coloco su mano en mi hombro mientras se colocaba de cuclillas frente a mi.

- ____-

No le di tiempo a terminar de hablar y al instante le di un abrazo mientras sentía como lágrimas caían de mis mejillas, este correspondió mientras acariciaba mi cabeza intentando calmarme lo cual funcionaba pero aún así seguía llorando.

- Leo tengo miedo

Solté abrazándolo con más fuerza temiendo que en algún momento fuera a llegar nuevamente esa chica.

- Tranquila, ya estoy aquí... Vamos a casa

Seguido me cargó al estilo princesa ya que yo seguía sin soltarlo y no quería hacerlo me sentía segura a su lado y sentía que si lo hacía algo malo pasaría pero este pensamiento se borró al momento en que recordé a aquella chica y su amenaza.

» ¿Alejarme de Leo? «

En ese momento no quería pensar en eso, cuando llegamos Leo me llevo directo a mi cuarto donde me recostó pero aún así le sujete su brazo evitando que se fuera.

- Qu-quedate por favor

Solo asintió para seguido recostarse a mi lado, recargue mi cabeza en su pecho y lo abrace nuevamente mientras el hacía lo mismo casi al instante me quedé dormida.

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...¿Ilusionarme? ¿Estoy llegando a ilusionarme? Acaso esto es...

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Desde ese día Leo se la pasaba más cerca de mi, yo no quería eso pues cada vez que estaba con él la amenaza de esa chica me llega a la cabeza causando que temiera por mi vida, un día cualquiera salí de mi casa más temprano de lo normal para buscar unos cuantos pedazos de madera y le había dejado una nota a Leo esperando que la lea, me di cuánta de algo y era que no había muchos pedazos de madera, seguido de que ya van más de unas tres veces que casi caigo por una cantilado pero no entiendo porque si yo conozco esta parte del bosque como la palma de mi mano después el colmo fue que mi pierna casi era cortada por una trampa para osos.

No entiendo nada pues pareciera que me quisieran hacer la vida imposible y cuando iba de camino a mi hogar con las pocas ramas que encontré pude ver un pequeño destello y seguido sentí que unas de las sogas que sujetaban las ramas se rompió como si hubiera sido cortada y todos los pedazos de ramas se cayeron por todos lados esparciendose por el suelo.

Me agache para recoger todas las ramas y cuando iba a terminar aquella chica aparece enfrente de mi.

- Hola de nuevo, veo que mi advertencia no sirvió de mucho

- ¿Quién eres y qué quieres?

- Acaso importa, aquí lo que debes de tomar en cuenta pequeño pajarillo es que si no te alejas de Leonardo te irá muy mal y yo me encargaré de eso sí es necesario

- ¿Porque?...

- No quiero estorbos en mi camino

Seguido paso aun lado mío causando que varias de mis ramas se volvieran a caer al suelo, cuando termine de recoger las ramas me dirigí a mi hogar con prisas ya que estaba comenzando a haber una fuerte ventisca.

Entre y seguido deje las ramas a un lado pude ver que Leo aún no despertaba pues no podía verlo ni en la cocina ni en la sala además de que la nota que debe aún seguía ilesa en la mesita por lo cual la tome y arrugue para seguido tirarla, tiritando del frío me acerque a la chimenea para encenderla.

Mientras hacía aquello cada una de las palabras de la chica pasaban por mi mente y repentinamente siento que algo húmedo que cae en mi mano dándome cuenta que estaba llorando de forma inconsciente, me limpie el rostro algo confusa y me aleje del fuego para tomar asiento en el sillón.

- ¿Porque lloro?

Pregunté para mí misma en voz baja, cerré mis puños al sentir impotencia de ni siquiera saber que es lo que me sucede, me levanté y me dirigí a la cocina para hacer una tarta de manzana e intentar despejar mi cabeza.

Me encontraba cortando las manzanas mientras pensaba en todo lo que pase con Leo, la amenaza de chica y aquellas tortugas que probablemente sean sus hermanos pero todos esos pensamientos se borraron al instante cuando escuché como vibraba mi celular además de que me hice una cortada al momento de que mi mente regreso a la realidad.

- Auch... ¿Bueno?

- ¿Señorita ____?

- Oh claro soy yo ¿Porque quién habla?

- Soy la novia de tu hermano Cristel ¿Me recuerdas?

- ¿Cristel? Te a cambiado bastante la voz, claro que me acuerdo de ti ¿Que es lo que ocupas?

- Bueno tu hermano dice que sería una mejor idea que te vinieras a la ciudad de Nueva York y te quedarás en nuestro departamento mientras nosotros viajamos a Canadá

- No es molestia pero ¿Y mi hermano?

- Bueno el... Está ocupado con su trabajo bueno después de todo es doctor no puede dejar su trabajo ni un segundo debe salvar vidas pero le sugirieron un puesto temporal en Canadá y le darán una mejor paga así que no lo puede rechazar

- Está bien, ¿Cuánto tiempo estarán halla?

- Será durante unos dos meses, nos vamos ya mañana y tu hermano ya mando a alguien para que te recoja mañana a primera hora

- Oh de acuerdo, bueno deja hago maletas hasta luego Cristel

- Hasta mañana ____

Seguido colgué la llamada, sinceramente me hubiera alegrado más oír a mi hermano pero tampoco me quejo el haber oído a Cristel vaya cuanto tiempo, me centre en eso que ni me di cuenta que es lo que Leo haría además de que me sangraba un poco el dedo, no me dió tiempo a reaccionar cuando siento un trapo húmedo rodear mi dedo y se trataba ni más ni menos de ángel o bueno Leo quién me limpiaba el dedo lo volteo a ver a la cara observando que tiene una mirada sería concentrada en curarme.

Este me limpio el dedo con un poco de agua y después de volver a secarlo este tomo un curita que estaba en uno de los cajones para seguido colocarlos en mi dedo, yo solo estaba viendolo al rostro mientras el se centraba en observar mi dedo para seguido voltear me a ver por lo cual le sonrió divertida por su acción a lo que el desvío la mirada mientras un leve rojo se hacía presente en su rostro.

- Debes tener más cuidado

- Tranquilo solo fue una pequeña cortada, nada de otro mundo

Cierto le debía de contar acerca de que mañana me haría a Nueva York.

- Oye Leo... Debo decirte algo

- ¿Que pasa ____?

- Bueno acabo de recibir una llamada de parte de la novia de mi hermano y... Me dicen que se irán a Canadá, mi hermano quiere que me quedé en su departamento temporalmente en lo que el regresa de Canadá pero no creo que puedas ir conmigo bueno lo digo porque vendrá mañana alguien por mi y no creo que le sea del todo agradable ver a una tortuga mutante

Solté una pequeña risa al imaginarme la reacción del conductor al ver una tortuga.

- Además puede que nos encontremos halla después de todo tienes que regresar a casa, claro puedes quedarte si quieres unos días más aquí y después irte eso ya está a tu libre decisión

Este guardaba silencio para seguido tomar mis manos tomándome un poco por sorpresa.

- ¿Seguiremos en contacto?

- Claro, después de todo tienes mi número en tu celular

- ¿Podré visitarte a donde vas?

- Siempre y cuando no se arme un alborotó por los vecinos al ver una tortuga mutante

Este soltó un suspiro mientras apretaba mis manos ligeramente para seguido soltarlas.

- Está bien, ¿Quieres que te ayude a hacer tus maletas?

- Claro

Ambos subimos y saqué un par de maletas para guardar ropa, claramente yo me encargue de guardar mi ropa interior pues no podía permitir que la viera es algo vergonzoso, cuando terminamos deje las maletas en la parte de abajo para solo tomarlas e irme cuando ya sea mañana por la mañana.

- ¿Quieres tarta de manzana?

Le pregunté de repente recibiendo una respuesta positiva por su parte por lo cual me dirigí a la cocina mientras el se quedó en la sala, cuando iba terminando la tarta me senté unos momentos en lo que salía del horno.

Por alguna extraña razón tengo un mal presentimiento de ir a Nueva York y ese mal presentimiento se fue al momento en que escuche un pequeño "ding" dando a indicar que ya estaba listo, tome un par de guantes y lo saqué para seguido colocarlo algo cerca de la ventana que estaba entre abierta para que se enfriará un poco.

Dejé los guantes a un lado y comencé a lavar mis manos al igual que los trastos que había utilizado dejándolos a un lado para después secarlos pero al ver a mi lado Leo estaba ahí comenzando a secar los trastes para después acomodarlos en su respectivo lugar.

- No era necesario que los secaras eso ya lo iba a hacer yo

- Solo quería ayudarte después de todo tu ya hiciste mucho por mi

- Salvar la vida de alguien no es para tanto

- Pues para mí sí, salvar mi vida, cuidarme, preocuparte por mí aún siendo un desconocido mutante, no juzgarme, el no correrme de tu hogar y haber logrado que me enamo-

- Espera, creo que la tarta ya está

Le interrumpí, no quería escuchar eso, sabía lo que tenía pensado decir y no quiero escucharlo menos en estos momentos con la amenaza de esa chica, me acerque a la tarta mientras escuchaba un suspiro por parte de Leo.

Corte un pedazo de la tarta dándome cuenta que si ya estaba no tan caliente ni tan fría por lo cual tome un par de platos y serví en cada uno una porción adecuada, le entregué el suyo a Leo y seguido tome el mío para dirigirme a la sala mientras Leo me seguía de cerca.

- Hay que ver Héroes espaciales ya casi comienza

Le dije dedicándole una sonrisa que fue correspondida, encendí el televisor para seguido sentir como Leo me rodeaba con sus brazos mientras encargaba su cabeza en la mía y comenzar a comer al igual que yo.

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...Lo siento pero aún no estoy lista...

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