CAPÍTULO 8:  Cuidarte.

«Fantástico» Pensó con sarcasmo Gina saltando por los techos yendo a la dirección escrita en la carta.

—¿Desde cuándo me convertí en acosadora? —se preguntó en un murmuro bajo la mujer aterrizando en una iglesia, sigilosamente entró a ésta y se escondió en las sombras teniendo puesta su máscara plateada.

Habían transcurrido horas o días capaz desde la última vez que había cruzado palabras con Kaneki y ahora ella se encontraba cuidándolo después de haber visto una carta y una rosa tirada afuera de la cafetería.

Clavó su mirada en el cuerpo tirado de Nishio y su ceño se frunció al ver como una humana estaba en el lugar, miró a Kaneki y a Touka y soltó un gruñido cuando la vio morder el hombro del híbrido.

—¡Kaneki! —exclamó Gina saltando del balcón y aterrizando al frente del menor, miró la herida que tenía en su hombro y miró furiosa a Touka.

—¡El me pertenece! —gritó el hombre de cabellos azulados furioso y el ojo izquierdo de Gina se tiñó de rojo y la esclerótica negra, se dio la vuelta encarando al Ghoul y el kagune plateado de ella salió.

—¡El no te pertenece! —rugió con fuerza la fémina que hizo temblar los presentes y en un rápido movimiento esquivó el kagune azul que venía hacia ella.

Su máscara plateada seguía puesta y eso lo vio Tsukiyama, quién había susurrado impresionado—: Eres ella, la Ghoul Plateada.

—Es bueno que reconozcas quién está al frente suyo, Tsukiyama —respondió y saltó hacia el Ghoul clavando sucesivamente las colas plateadas, que tenía como kagune, en el cuerpo del peli-azul usando el momento que él estaba en shock.

Rastros de sangre mancharon gran parte del lugar y el cuerpo del Ghoul impactaba contra los asientos de madera por la fuerza de las colas plateadas que poseía la mujer.

Soltó un patada en el abdomen del hombre y con dos colas hizo un escudo al ver como el kagune del muchacho iba rápidamente hacia ella.

El cuerpo de la fémina retrocedía por la brutalidad de los golpes que hacía el kagune azul de él con su escudo plateado.

Sacó de su espalda otros das colas más, ahora siendo cinco, y lanzó pequeños pero afilados picos, obtenidos en su pasado, al Ghoul quien se cubrió para no salir más lastimado de lo que ya estaba. Pero que a pesar de eso, hubo picos que llegaron a cortar parte de su anatomía y como por consecuencia, mucha más sangre salpicada en el suelo.

—Espero que no te vuelvas a meter con él, Tsukiyama —murmuró a un lado del cuerpo del nombrado, después de que Touka le hubiese dado batalla cuando Gina se alejó al sentir como aquella voz hacía acto de presencia en su mente, la cuál había dicho:

¿Volvimos al pasado, Gina?

Gina escondió su kagune y su ojo izquierdo volvió a la normalidad, caminó hasta Kaneki sacándose la máscara y guardándola dentro de su saco.

Se agachó al frente de él y miró la herida, soltando un suspiro arrancó un pedazo de tela de su camisa negra e hizo un torniquete en el hombro de él  escuchando detrás suyo la voz de Touka.

—Ella sabe lo que son ustedes realmente, ¿cierto? No puedo permitir que una mujer tan peligrosa siga con vida.

—Eso dices tu, Touka-san —murmuró lo suficiente alto Gina llamando la atención de la menor—. Pero si en lugar de aquella humana estuviera tu querida amiga, tu no harías nada para terminar con la vida de la chica, ¿o me equivoco, Touka?

Gina se paró y giró hacia la menor, a pasos lentos se ubicó a un lado de ella y miró con curiosidad la humana.

—¡Cállate! ¡La mataré!

Gina no reaccionó a tiempo cuando los picos del kagune de Touka se dirigieron a la humana y Nishio se paró usando su propio cuerpo como escudo y soltaba gritos de dolor cuando los picos impactaban en sus extremidades.

—¿Nishiski-kun?

—¡Touka! —gritó Gina poniéndose al frente de la pareja y encarando a la menor—. Vete ahora mismo de aquí, tu no matarás a la mujer porque tendrás que matarme a mi.

Kaneki abrió sus ojos impresionado por las palabras dicha de Gina y Touka al saber que ella misma podía salir mal parada si intentaba matar a la humana, se fue del sitio.

—Toma —Gina sacó de su saco una bolsa oscura pequeña y se la tendió a Nishio—. Es lo único que tengo.

—¿Q-Qué es? —preguntó como pudo el Ghoul agarrando la bolsa.

—Sangre —dijo para después irse hacia Kaneki, lo miró sin expresión alguna y pasó un brazo por su espalda y otra por las piernas alzándolo en el acto para después irse de la iglesia.

—G-Gina-san —susurró avergonzado pasando un brazo por el cuello de ella, ésta lo miró de reojo y siguió avanzando—. ¿Por qué estabas ahí?

—Esa es una buena pregunta, Kaneki —admitió con una sonrisa de lado la fémina y bajó el cuerpo del chico a un lado de una banca—. Quería cuidarte pero no llegué a tiempo.

Dijo mirando la herida del muchacho y éste se la cubrió avergonzado, con un leve gesto le pidió que se sentase en la banca mientras que ella revisaba el hombro.

—¿C-Cuidarme? ¿Por qué?

—No lo sé —frunció su ceño al decir eso y miró los ojos grises de Kaneki—. Es algo extraño, nunca lo había sentido pero algo en mí me dice que debo cuidarte de este mundo.

—No debes hacer eso, Gina-san —miró a otro lado el Ghoul sintiendo sus mejillas calientes por la declaración de la fémina—. ¿Puedo preguntarte algo?

—Claro.

—¿Cómo te llamas? —Gina abrió sus ojos sorprendida y miró a Kaneki con un leve sonrojo.

—Tukusama Gina.

—Guerrera plateada —susurró el significado del nombre de la fémina y ésta asintió concentraba en la lesión—. ¿Es por eso que te dijo Tsukiyama-san la Ghoul Plateada?

Después de decir eso soltó un gruñido cuando sintió como la chica apretó fuertemente su herida, observó como el rostro de ella se transformó en uno serio y temió haber dicho algo malo.

—Hice cosas que me arrepiento hoy en día —comenzó a relatar la mujer atando nuevamente aquel pedazo de tela en el hombro de él—. Y por esas cosas, me conocen como la Ghoul Plateada.

—¿Cuántos años tienes? —preguntó Kaneki queriendo cambiar de tema y no hacer que recuerde esas cosas la chica.

—Se acabó tu tiempo, Kaneki —sonrió levemente ayudándolo a pararse y pasó el brazo de el por sus hombros y puso su mano en la cintura de el—. Ahora debemos irnos a casa.

—A casa —murmuró con una sonrisa mirando el perfil derecho de la chica.

Si se quedaron pensando en cómo Gina tiene el mismo poder que Touka, el de los picos,  es porque en una parte de su pasado obtuvo por consecuencia aquel poder.

Se aclarará con el pasar de los capítulos, lamento si se quedaron confundidos al leer el capítulo.