Uzu prólogo

Todo había terminado ya, la cuarta guerra mundial shinobi llegaba a su fin con la redención de Obito, la caída de Madara Uchiha y el sellado de la diosa Kaguya Otsutsuki, lo que antes había sido un hermoso y frondoso bosque era ahora un yermo lleno de cráteres humeantes, sin rastro alguno de vida, el árbol gigante que había sumido en un profundo sueño a todos los shinobis y a la población de todas las regiones elementales se había convertido en un resto marchito que se caía a pedazos lentamente sobre el terreno, Naruto, que se alzaba como el gran héroe del pequeño mundo shinobi, una de sus ambiciones más perseguidas desde su infancia, no podía disfrutar plenamente de ese momento, estaba más preocupado por el comportamiento de su recién recuperada amiga Sakae Uchiha, ambos habían peleado en una última batalla, el clímax definitivo de su combate por imponer su visión de la vida, del camino del shinobi, de la luz y la oscuridad... que los había llevado a la extenuación absoluta, perdiendo ambos un brazo en el proceso, ciertamente le había sorprendido que ella le reconociera, que le sonriera y que llorara cuando reafirmo su compromiso para con ella como su amigo, Sakura y su sensei les ayudaron a ponerse en pié y a cerrar sus heridas, Naruto se sentía muy bien, había aliviado un gran peso que caía sobre sus espaldas desde los 12 años, haber cumplido casi todas sus promesas excepto la que le quedaba, convertirse en hokage, promesa que no sabía que comenzaría a tambalearse en los meses siguientes a este horrible acontecimiento bélico, pues durante su pelea con Madara junto a Hashirama y los demás hokages habían avivado en él, el interés por su clan, personas como Mito Uzumaki, la esposa de Hashirama o su propia madre, descubrir ser pariente de los Senju y conocer la gran influencia que la aldea de Uzu había tenido hace décadas antes de ser destruida por otras aldeas. Cualquier persona hubiera sentido rencor al saber que su familia fue casi aniquilada por los que ahora eran sus aliados y que para más ironía clamaban llamándole héroe, movidos por un fervor de respeto ganado honestamente por el "chico zorro" respeto que habitaba en los corazones de todos aquellos que se habían unido a una misma causa profundamente. Pero la paz que tanto había costado construir... debía durar para afianzarse y reforzarse, el odio entre las aldeas debía disiparse y él no debía crear un nuevo eslabón en la cadena de odio que por fin se había quebrado gracias a todos.

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El regreso a Konoha fue agridulce, la celebración por la victoria se vio opacada por el rezo y el pesar por todas las almas que habían partido en el conflicto, la Godaime había declarado una semana de luto por los héroes caídos... la celebración debía esperar por respeto a las familias y amigos de los muertos, Sakae por su parte fue encarcelada provisionalmente por sus crímenes, el atenuante por su cooperación se vio opacado por su confesión acerca de como fue que ella y Naruto perdieron uno de sus brazos, el consejo lo consideró como un nuevo acto de traición hacia el príncipe de Konoha... ohhh si, aquellos que una vez odiaron, oprimieron y desearon un destino miserable al chico Kyubi ahora le idolatraban como a un noble. Naruto actuó como testigo en el juicio de la Uchiha, para sorpresa de todos los clanes declaró a favor de Sakae alegando que esa pelea había sido necesaria para sacar toda la maldad y rencor de su corazón, que de otra forma, todo habría culminado con más traiciones, más muertes, más odio, más dolor... ante esas palabras, la influencia que ostentaba el príncipe y el poder demostrado en batalla, todo el consejo decidió castigar a Sakae con una pena leve, un escueto período de encarcelamiento, libertad vigilada y revisión a sus propósitos de ahora en adelante...

Varias semanas después....

Naruto había pedido una reunión con el consejo, Tsunade se la concedió sin problemas ni trabas aunque con gran curiosidad, Naruto alegó razones personales para tal pedido y la godaime entendió que no le diría nada más, horas después el rubio se encontraba ante todo el consejo que se mostraban expectantes.

Tsunade: Naruto Uzumaki a qué se debe su requerimiento del consejo?.- El rubio que estaba enfrente de la mesa semicircular dio un paso al frente.

Naruto: Me gustaría hacer un par de peticiones al honorable.- Los aludidos se miraron entre ellos con gusto por el respeto con el que hablaba el chico, digno de un príncipe.- Como ya saben todos ustedes, soy hijo del Yondaime y de la última Uzumaki que se creía, es por eso que desearía que se me diera mi herencia, como único heredero y además contar con la mayoría de edad, consto en acta mi derecho.- Los murmullos se escucharon en la sala sin embargo no había ningún argumento para oponerse.

Koharu: Uzumaki-dono usted sabe bien que acceder a su herencia es totalmente legítimo, pero a su vez le otorga a usted una serie de responsabilidades que debe cumplir.- Aún habían unos pocos susurros entre el honorable, aunque la mayoría del consejo evaluaba al chico esperando algún gesto que evidenciara falta de compostura o seriedad.

Homura: Al hacer efectiva su apropiación de la herencia quedará sobre sus hombros la responsabilidad del clan Uzumaki, siendo usted su líder, tendrá un sitio en esta mesa y una responsabilidad como miembro del consejo... y bueno... como usted es el único Uzumaki vivo (Karin murió en la guerra junto con los demás miembros de Taka) deberá restaurar su clan... ya sabe poligamia...- Tsunade miró al chico con preocupación, no lo veía como un hombre de más de una mujer.

Tsunade: Naruto... si quieres puedes optar por no entrar en el programa de restauración de clanes...- El rubio la miró entendiendo el punto de vista de la vieja, punto que el compartía en casi la totalidad del mismo.

Naruto: De momento deseo acceder a las herencias, a la responsabilidad como líder de clan y sobre el programa me voy a guardar la respuesta para más adelante, no soy un hombre de muchas mujeres por eso deseo reflexionar sobre las consecuencias de aceptar ese compromiso.- De nuevo un murmullo llenó la sala del consejo mientras el Uzumaki esperaba la conclusión del mismo, Shikaku Nara alzó el brazo para pedir un turno de palabra.

Shikaku: Uzumaki-san, debe conocer que como líder de clan, muchos de los aquí presentes comenzaremos negociaciones con usted para acordar beneficios mutuos y muchos de ellos pueden incluir matrimonios políticos...- El rubio no perdió la compostura ni la calma, había preparado todo durante una semana con ayuda de Kurama.

Naruto: Soy consciente de ello, estuve preparando esta reunión con detenimiento, por lo que mis posiciones no se moverán, espero que respeten mis decisiones.- Después de unos momentos de intercambio de opiniones y valoraciones entre los miembros del consejo Naruto consiguió todo lo que pidió.

A la salida del edificio, se encontró con su equipo que se había enterado por su boca de que se iba a reunir con el consejo por un asunto importante, le saludaron con interés en saber porque el rubio había pedido que el consejo le prestara atención.

Kakashi: Naruto, como te ha ido en la reunión, has tardado poco.- El chico sonrió ante el interés de su sensei, aunque podía ver en las caras de todos una pequeña curiosidad.

Naruto: Bueno... quería reclamar lo que me pertenece, así que solo puedo decir que lo logre...- Todos le miraron extrañados, no sabían que había podido reclamar al venerable y muy a su pesar, la curiosidad aumentaba con virulencia en su interior.

Sakura: Dilo ya que no aguanto tanto secretismo.- Sacándole una sonrisa al rubio y a los demás excepto a Sakae que estaba seria (ya la habían liberado y estaba bajo vigilancia extricta de Yamato y Kakashi).

Naruto: Reclamé la herencia de mis padres, como ya todo el mundo me conoce como el hijo del Yondaime no tengo por que negarme a recibirla, y bueno como esperaba, a partir de ahora actuaré como líder de clan...- Todos se quedaron pasmados por eso último, no todos los días un chico que habías conocido siendo un paria acababa como un líder de clan.

Kakashi: Entonces... la herencia de tus padres... que es?.- Naruto sonrió por la curiosidad de su maestro, era algo que no se veía todos los días.

Naruto: Pues todavía no lo se... mandé un clon a por las cosas, supongo que llegará en breve...- Tuvo que nombrarlo para que sucediera, del cielo cayó un clon del chico con una bolsa con los símbolos Namikaze y Uzumaki, Naruto los cogió, el clon también le extendió una llave al rubio y un sobre con documentos antes de desvanecerse.

Sakura: Y esa llave?

Naruto: Al parecer mi padre había comprado unos terrenos para establecerse junto a otros clanes... de seguro hubiera tenido muchos hermanitos...- Con un ligero sonrojo al igual que los demás (excepto Sakae).- Es una pena que todo sucediera de aquella manera...- Su semblante reflejó un deje de tristeza al pensar en una familia  extensa, en la cual el abría crecido como el hermano mayor... hubiera sido digno de vivir...- no me quiero poner nostálgico... mejor vayamos a ver que compraron y allí vemos lo demás.

Tras un pequeño paseo...

Ante ellos se extendía un complejo bastante grande, era increíble que estuviera en buenas condiciones, cierto es que no era antiguo ya que tras la destrucción de Pain todo se había reconstruido a imagen y semejanza de como estaba antes, el grupo entró en la casa principal, no estaba muy limpia, mucho polvo, olor a cerrado, telarañas... pero nada que no se pudiera arreglar con un día de meticulosa limpieza, el salón era enorme, por lo menos la habían amueblado durante la reconstrucción bueno... amueblado... una mesa grande un par de estanterías largas y unos cuantos cojines para sentarse... algo era...

Naruto: Bueno vamos a ver que me dejaron de herencia mis padres...- Colocando la bolsa en la mesa ante la expectación de todos los presentes.