Astro
(bueno aquí tenemos algo que escribí mientras moría en clase)
La luna se ve tan solitaria sin las estrellas.
La obscuridad de la noche es tan profunda, solitaria y fría. Sé lo que siente ese bello astro lunar, no solo me imagino su soledad, no puedo solo hacerlo cuando también la siento.
Conozco su soledad, conozco su castigo de verse alejado de su eterno amor, el sol.
Extrañamos al sol, aquella estrella que nos ilumina y aloja el calor que necesitamos, que yo necesito de mi brillante y magnifica fuente de vida que saca el brillo que internamente oculto.
El viento se lleva el humo con olor a tabaco, el blanco baila en el aire hasta disolverse y perderse en el suave vaivén de las hojas alborotadas por la brisa otoñal, se va jugueteando, explorando y dejándose llevar libre, libre como lo es él.
Mi bello sol que me ha convertido en la excéntrica y solitaria luna, una luna que desea que el eclipse llegue al fin, y permita a la luz y la obscuridad coexistir en un cálido abrazo, donde los dos amantes desean fundirse en sí mismos antes de alejarse.
Quiero acercarme, quiero vivir su luz y sentir su calor, quiero que su brillo me pertenezca sin importar nada, quiero ser egoísta y tenerlo a mi lado, sin un mar de impedimentos, sin un estatuto, sin reglas ni nada.
Quiero convertirme en su amado astro y llevármelo al cielo, convertirlo en mi amante eterno, que las estrellas amantes que cuentan las leyendas se queden cortas ante nuestra historia.
Mi bello sol...Cuento los días para verte, quiero que este invierno se vaya de mi corazón, necesito tu calor para convertirlo en la eterna primavera, aunque tú eres mi verano perfecto.
Tus cabellos mi cálido sol, tus ojos el cielo azul más despejado y hermoso, tu risa es la brisa fresca que revuelve mis cabellos, tu toque es el ardiente calor que calienta mi cuerpo y tus labios, el néctar de tus labios se vuelve el agua del oasis que necesito para sobrevivir ante el perfecto verano que eres. Ni el oro, ni los rayos del sol, ni el agua cristalina y el mejor cielo compiten contigo, mi amado.
Soy tu luna, tú eres mi sol.
Soy el invierno y tú el verano
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro