Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

💜𝘾𝙖𝙥𝙞𝙩𝙪𝙡𝙤 𝙙𝙞𝙚𝙯💜

(RINA)

¿Que qué se sentía? Pues era como estar en el mismísimo cielo. Besar a Jungkook no estuvo en mis planes nunca, me tomó desprevenida que lo hiciera, según tengo entendido que él es tímido con las chicas, además de que lo ví rápido y precipitado, pero no se lo iba a negar, y ya está hecho y no se puede cambiar.

El frío en mi estómago se me hacía cada vez mas precente, mi corazón bombeaba fuerte, hasta el punto de llegar a pensar que se me saldría del pecho. También pude sentir el de él, rebotaba contra mí. Por ser mas alto que yo, estaba de puntillas, hasta ya me estaba cansando, pero era increíble besar los suaves labios de Jungkook. Nos dejamos llevar, bajo la lluvia, el beso era dulce, delicado, suave y me hacía sentír mariposas en mi estómago. Jeon Jungkook era poderosamente grande en comparación conmigo, era distinto a como yo me lo imaginaba cuando lo veía en fotos o videos, pensé que eso de ser el "hércules" del grupo era solo una supocición, pero el estaba fuerte, y grande en su totalidad, podía jurar que me tapaba con sus brazos facilemente. Nuetras bocas viajaban, topando lengua con lengua lentalemente, rosando nuetras narices.

Me erizaba por el frío, temblé en un instante, casi podía asegurar de que estaba congelada. El beso se detuvo, mirándonos a los ojos, su cabello negro goteaba y estaba totalmente mojado al igual que su gorra negra. El agua de lluvia le recorría cada parte de su rostro, parecía un ángel, solo nos acompañaba la luz de la luna. Sus ojos tintinaban como dos estrellas en el cielo, realmente siento algo por Jungkook.

Aún nuestros cuerpos no se despegaban y mucho menos hacían el intento para hacerlo.

—Te llevaré a la casa—negé, hasta llegé a malinterpretar aquello, pero estaba claro que Jungkook no me lo decía en otro sentido —Rina, estás congelada —no tuve opción que aceptar por que verdaderamente estaba congelada.

—Cúbrete, es peligroso —le dije, el pelinegro al lado mio, sacó el cubrebocas de un bolcillo y se lo colocó.

Caminamos hacia la casa que compartía todo Bangtan, me sorprendí, cuando sentí la enorme mano de Jungkook agarrar la mía para seguir caminando, ¿acaso el sentirá lo mismo que yo? Por su actitud y compotamiento diría que sí, pero no estaba del todo segura. Cuando llegamos, Jungkook abrió la puerta, nos encontrábamos literalmente empapados. Imité la acción de Jungkook de quitarme los zapatos en la entrada, donde ya no nos caía agua.

Miré frente a mi la gran sala, era grande, espaciosa y muy bonita, perfecta para siete chicos como los son BTS. Me qué atenta agarrando cada detalle, si fuera otra, hubiese sacado mi teléfono y tirar fotos por doquier, saltar como una army desquiciada por que tuve la oportunidad de estar en la casa de Bangtan, pero no fue así, me dejé de llevar por la curiosidad, mirándo cada detalle sin dejar ninguno por medio. Aquello fue interrumpido, por una toalla blanca que me rodeó completamente.

—Uh... Gracias —sonreí un poco, esta vez miré a Jungkook, no se en que momento pasó, pero Jungkook ahora esta sin gorra, sin abrigo y con una camisa negra y los mismos pantalones de antes negros, se veía muy guapo en verdad.

—Vén sientate —me invitó señalando el gran sofá que adornada el centro .

—Estoy mojada, no quiero causar problemas —me negué, estaba sacando últimamente mi lado negativo mas que nunca, siempre solía ser así.

—Rina, necesitas calentarte, puedes pegar un resfriado facilemente —Kookie casi me arrastró por un brazo hasta llegar al sofá y hacerme sentar casi a la fuerza, el lugar no era frío, a lo contrario, era muy cálido y acojedor.

En mi cabeza aún el beso me daba miles de vueltas, sentí como mis mejillas agarraron un calor cuando pensé en ello, aunque suelo sonrojarme por todo, recordar el beso hasta me dió calor. Dí un brinquito pequeño cuando Jungkook me sonrprendió al lado mio con una taza en sus manos.

—Tómalo, te calentará —me ofreció, dejé de agarrar con una mano la toalla que me cubría para poder coger aquella taza, me daba mucha vergüenza todo, pero estaba claro que Jungkook me iba a hacer acceder a todo lo que él diga, tomé un sorvo, era chocolate, y estaba calientito, estaba en el punto perfecto para tomarlo.

—¿Y los demás...?

—Madre mía, ¡Namjoon! ¡Jungkookie trajo a su novia! —bociferó Jin quien habia bajado las escaleras en ese momento, ya había respondido mi pregunta. Mis mejillas agarraron color y se me pusieron calientes cuando dijo eso, miré a Jungkook, quien también estaba sonrojado y apenado, pero no mas que yo, si tuviera un poder ahora, desearía que fuera el de desaparecer.

En menos de nada, no solo Namjoon bajó, sino que los demás también lo hicieron, poniendome mas nerviosa e incómoda, mis mejillas en cualquier momento estallarían.

—Pero que bonita —Tae se me hacercó, agarró mis mejillas con sus manos jalándolas juguetonamente.

—¿Tu no eres la chica de los USB? —me sonrojé aún mas, lo mas seguro es que parecía un tomate viviente, asentí a la pregunta de YoonGi.

—Sabía que se me hacía conocida —dijo Jimin quien se sentó no tan lejos de mí en otro sofá.

—Al parecer hicieron las pases, Rina, no te asustes cuando Jungkook te empiece a evitar —dijo Jin, sonreí un poco y miré a Jungkook a mi lado, que estaba negándo con la cabeza y estaba bien rojito, me parecía tan tierno y guapo a la vez

—Hyung, por favor, me avergüenzan —fué lo que dijo, ganándose un codazo de Jin.

—¿Pero que dices niño? ¿Como te vamos a avergonzar? Ella tiene que conocernos tal y como somos —en estos momentos Jin parecía una mamá de verdad —Rina, ¿te quedarás? —negué .

—Yo solo me quedaré hasta que pase la lluvia —dije, era muy incómodo tener a siete pares de ojos sobre mi y mucho mas siendo yo la única chica.

—Las canciones que hiciste para nosotros realmente son lindas, me quedé fascinado cuando la escuché —dijo Hobi y lo miré con una sonrisa como agradecimiento —¿Has estudiado música?

—Cinco años, desde mis nueve hasta los catorce, luego lo dejé —dije sorbiendo de mi chocolate que aún estaba caliente, era muy agradable, dulce y suave, me miraron todos con un "O" en sus labios.

—Deverías conciderar hacer audiciones en algunas discográficas —me dijo Tae mientras me miraba con una sonrisa cuadrada en sus labios.

—No puedo, mis padres nunca aceptarían que me fuera lejos de ellos —confecé —Además, vivo muy lejos, y es algo dificil, saben... Viajar —me miraban atentos mientras hablaba.

—Que malo —hizo un puchero algo adorable el de sonrisa cuadrada, miré a Jungkook a mi lado, quien se mantenía callado, seguía sonrojado y al parecer muy incómodo, notó como lo miraba y me miró a los ojos y me sonrió de lado, suspiré.

—La lluvia está cesando, lo mejor es que me vaya, sonreí poneindome de pié.

—¿Tan rápido? Nada de eso señorita, usted no se va de aquí hasta que no se cambie esa ropa toda mojada —abrí mis ojos bien grandes cuando Jin practicamente me hizo subir las escaleras a la fuerza y arrastras.

Debí de huir cuando tuve la oportunidad.

(💜💜💜)

Este Jin, es que me lo imagino y todo.

Cuidense💜

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro