▬▬▬▬ Bree me había obligado a ir con ella a una larga fila para obtener información sobre un viaje al extranjero que la escuela está haciendo. Podría tranquilamente quejarme por dejarme sola al ser mi única mejor amiga, pero eso sería malo y perdería a mi única mejor amiga así que lo mejor que puedo hacer con mis pocas habilidades sociales, es apoyarla y dejar que siga su curso.

Ella ha estado pasando demasiado tiempo con sus hermanos, así que imagino que está mucho más cansada que yo de tener que soportarlos, ahora me ha entregado la gran vara para dedicarme a hacerme cargo de ese estrés y el nunca poder estar sola...Si, no quiero que se vaya en realidad.

Cuando la veo salir de la oficina donde había entrado hace unos minutos para obtener información, me muestra con una gran sonrisa el papel en donde muestra que ya se ha inscripto para viajar a Australia por un semestre entero, sonrío asintiendo con la cabeza intentando copiar su emoción y cuando da un paso la cambio a una más seria negando con la cabeza siguiéndola para encontrarnos con los chicos, quienes están sentados en medio al lado de la banca circular de la escuela.

—Hey chicos, ¿Ustedes sabían que en la escuela hay un programa de intercambio?

Es lo primero que dice Bree sosteniendo el folleto entre sus manos.

—¿Por qué iría a otro país a hacer lo que no hago aquí?— Pregunta el mayor, asiento con la cabeza dándole la razón en eso. 

Tomo asiento en la parte de abajo de la banca, ya que Chase está en la de arriba, así que aprovecho para apoyar mi cabeza sobre sus piernas como si fuera mi respaldo personal, él enseguida coloca su mano entre mi cabello para juguetear con eso por un par de segundos.

—Miren, dice que puedes pasar un semestre entero en Australia en la secundaria, y adivinen qué, ¡He aplicado!

—¡Genial! Kelly Porter fue el año pasado, fue golpeada por un canguro.— Hago una mueca por la historia de Leo.

Debe ser interesante pelear con un canguro, es decir, no tiene oportunidad con esta chica pero sería divertido intentarlo alguna vez. Sueños y más sueños raros.

—¡Bueno, está bien! Supongo que iremos a Australia.— Los tres chicos comienzan a chocar los cinco después de Adam y su estupidez. 

Levanto mi trasero del asiento para colocarme al lado de la castaña moviendo mis manos en señal de negación para que ellos lo vean con claridad.

—No chicos, esto es sólo de Bree, no podemos intervenir.—Interrumpo su celebración, haciendo que me miraran.

Por más que no me convenza demasiado la noticia, es algo que debo de aceptar de todos modos, ¿Quién soy yo para decirle que no vaya a ningún lado? Se la pasa diciendo como amaría estar sola, tener una vida mucho más normal lejos de las misiones, de los poderes, en resumen de ser biónica.

—Gracias Carter, la única que me entiende...—Habla en un tono bastante alto para dejar en claro, sobre todo porque mira a los chicos en cada segundo de esas palabras.— Finalmente puedo estar por mi cuenta, puedo estudiar, viajar, hacer amigos.

—Mmh, odio ser un aguafiestas...— Chase se levanta de la banca haciendo un gesto con su rostro.

—No, no lo haces.— Decimos Leo y yo al mismo tiempo, nos miramos con una sonrisa asintiendo con la cabeza. El chico se voltea a vernos a ambos con el ceño fruncido, vuelve a Bree.

—Pero el señor Davenport nunca te lo permitiría, tu no puedes ir a misiones si estás lejos al otro lado del mundo.

—Bueno, si puedo, quiero decir, aun no he averiguado todos los detalles pero debe haber una forma de hacerlo funcionar.

—No a menos que estos dos desbloqueen una nueva habilidad para reemplazar la tuya.— Leo señala a ambos de sus hermanos, parándose al lado de Chase.

—Y la mayoría de las misiones no sirve mi súper vuelo, siempre es en el suelo.— Bueno, supongo que mi intento de parecer desinteresada se acaba de esfumar con ese comentario.

—¡Oh! Tal vez pueda desbloquear una habilidad en donde desaparezca y aparezca en otro lugar. Déjenme intentar.—Adam se levanta, se pone en posición de sentadillas extendiendo sus brazos al frente con puños cerrados al igual que sus ojos, enseguida comienza a gruñir con fuerza por la concentración que está poniendo en forzar una habilidad nueva. Abre los ojos al cabo de unos segundos para vernos enderezándose.—¿Lo hice?

—No lo hiciste el tiempo suficiente, hazlo devuelta, esta vez con más gruñido.— Sugiere Chase ayudando al delirio de Adam.

Vuelve a hacer su posición anterior, esta vez Chase nos hace gesto para que lo siguiéramos y eso hacemos, pasamos del lado izquierdo al lado derecho de Adam, quien de manera impresionante no ha perdido la concentración. Adam abre los ojos sorprendido de como "logró" teletransportarse.

—¡Lo hiciste!— Lo festejamos todos con una gran sonrisa en lo que él se cree haber desbloqueado una habilidad.

En estas situaciones amo pasar tiempo con ellos, a veces me sorprende la capacidad de inventarse cada cosa para divertirse y bromear, aun así no creo nunca ser capaz de abandonarlos. Tengo muchas razones y motivos distintos a los de Bree, los cuales no estoy comparando, pero creo que si estuviera en su lugar, estando sofocada entre tantos hombres, también me iría lejos.

Supongo que cuando ella regrese, yo seré la próxima en irme a ese intercambio a otro país.

Volviendo a la casa, pasamos a comprar un par de ingredientes para hacer palomitas en casa ya que Adam quería comerlos de forma desesperada, por lo que todos pusimos un poco de plata para cumplir el deseo, porque como él dijo "me lo merezco porque ahora puedo teletransportarme" y allí nadie más pudo rechazar la oportunidad de comprarlo.

Luego de una ducha en la casa, y varias tareas en el proceso, es mi momento de descansar. Voy a la cocina en busca de agua, por lo que abro la nevera y al cerrarla me encuentro con la perfecta visión de Chase tocando la guitarra que tiene el señor Davenport allí de decoración porque nunca lo he visto siquiera tocarla. En vez de tomar agua, al final me termino de distraer por ver a Chase con la guitarra en sus manos, el cual parece saber a la perfección lo que hace así que mis ojos van a sus dedos que se mueven de manera ágil sobre las cuerdas en una melodía tranquila que llena la sala.

Él se da cuenta de que me he quedado hipnotizada, así que se detiene para hacerme un gesto con su mano queriendo que me acerque, así que eso hago en lo que me siento a su lado viéndolo con una ceja elevada.

—Así que ahora tocas la guitarra.— Abro la botella de agua para dar un par de sorbos sin dejar de verlo.

—Estaba aburrido así que descargué una aplicación para aprender a tocar y ahora soy todo un experto.— Chase presume sus grandes talentos como de costumbre hace con todo el mundo.

—Todos se burlan, incluida yo.— Hago un gesto con mi mano demostrando lo obvio.

—Dime algo de lo que no te burles de mi, sería más fácil.

—¡Como sea! Estoy intentando llegar a un punto aquí.—Digo con una sonrisa, él me deja continuar en lo que deja la guitarra a un lado.— Creo que es genial saberlo todo, no tendrías que pasarte horas y horas para que te quede una página en la cabeza.

—Si, soy bastante genial, ¿No lo crees? Soy muy poderoso.

—No lo presiones, y parece que nunca vas a superarlo, ¿No es cierto?—Le doy una sonrisa, él voltea los ojos. Frente a nosotros aparece el señor Davenport con el celular en sus manos y una expresión para nada amigable dirigiéndose a donde se encuentra Bree.— Oh, oh, creo que se vienen problemas.

Ambos nos levantamos del suelo para ir a la cocina, intentando disimular un poco que queremos escuchar un poco cómo va a ir esta conversación, aunque creo que es demasiado obvia la respuesta.

—Acabo de recibir una llamada diciendo que fuiste aceptada para estudiar en Australia.

—¿Qué? ¡Es una locura!—Bree se hace la desentendida cuando el señor Davenport le habla.— ¿Mencionaron qué día me voy?— Al instante demuestra su emoción.

—¡Tu no irás!

—¡¿Por qué?!

—Oh vamos Bree, era obvio, incluso Adam se la veía venir.— Dice Chase a mi lado en lo que tomo asiento encima de la barra para verlos mejor.

—No puedes abandonar el equipo.—El mayor se acerca a nosotros y Bree lo sigue, con una gran molestia en su mirada.—¿Qué tal si Adam, Chase o Carter se fueran por un mes?

—Entonces no tendría que irme a Australia.—Frunzo el ceño ofendida, ella hace un gesto diciendo que conmigo no era el problema y vuelvo a sonreír.— Mira, no los estaría abandonando, puedo viajar a toda velocidad cada vez que quiera.

—Ese no es el único problema, ¿Qué hay de tus biónicos? ¿Tu entrenamiento? ¿Tu capsula?

—Señor Davenport, esto es muy importante para mi, ¿No podemos al menos discutirlo?

—Ya lo hicimos, no irás de intercambio. Fin de la conversación.— La firmeza en su voz deja más que claro que mi hermana no se va a ir.

Bree suelta un gruñido de frustración levantando sus manos en el aire, caminando con desespero de un lado a otro.

—¡Esto es tan injusto!— Se dirige a nosotros, por lo que me bajo de donde estaba sentada para acercarme a ella, para poder calmarla un poco.— ¿Qué hago ahora, Carter?

—Tal vez nos venga bien una salida de chicas ahora, para que te tranquilices un poco.— Coloco mis manos sobre sus hombros.

Ella suelta un suspiro largo asintiendo con la cabeza, las dos nos acercamos a la salida y en el proceso agarro mi chaqueta negra antes de salir, giro a ver a Chase quien me enseña su dedo pulgar y una sonrisa, el cual devuelvo asintiendo con la cabeza.

No voy a fingir que no me alegra que se quede en su presencia, lo haré cuando esté sola, aunque me siento mal por el hecho de que esté pasando un momento que esperaba para salir de la casa. No puedo creer que pasé de ser a alguien a quién no le confiaban nada, a alguien que es el apoyo emocional de mis hermanos, si mi yo del pasado se diera cuenta de lo que pasa en el futuro, no lo creería.

La noche en el cielo al final ya se acercaba, así que tenemos que volver a la casa, pero por lo menos algo de lo que pasó durante la salida ha hecho que Bree se sienta feliz al respecto cuando volvemos.

Abre la puerta emocionando dando pequeños saltos de felicidad.

—¡Adivinen quién acaba de ser invitada al concierto de Panic Inferno esta noche!

—¡Oh! Brendan Delaney.— Salta Adam, quien parece que ni siquiera estuvo escuchando, y acaba de despertarse de una siesta para decir el nombre más random que alguna vez haya escuchado.

—¡Yo!— Se señala con felicidad.

—Ella.— Ruedo los ojos señalándola yo también para tomar asiento al lado de Adam agarrando una almohada para abrazarla.

Ha sido un buen día de chicas, hasta que Caitlin apareció llorando de la nada en frente de nosotras, y Bree tiene alma de una oveja vieja que es buena persona y estuvo allí para ella. A mi que ni me mirara, no lloro desde que nací así que no tengo idea de cómo se siente ese sentimiento.

—Oh vamos, a ti también te invitó.—Me dice mi hermana sin quitar la sonrisa, me encojo de hombros prestando atención a la televisión.— Caitlin me invitó porque no quería ir sola, ya que está devastada.

—¿Por qué está devastada?— Pregunta Chase con genuina curiosidad levantando la mirada de su tarea.

—¡Su novio rompió con ella! ¿No es genial?

—Bree, lo siento pero no puedes ir al concierto. — El señor Davenport se hace presente en la conversación, ya que estaba en la cocina escuchando todo desde allí, y es allí cuando me doy cuenta que esa negación llevará un mal camino para Bree.— Tengo que extraer sus chips biónicos esta noche para una modificación critica de desempeño.

—¿No lo podemos hacerlo mañana?—La castaña camina hasta él, su cara ya cambió por completo así que me pongo al borde del asiento, siendo que esto es más interesante que el programa puesto en la televisión.

—No, estoy fuera todo el día con el nuevo lanzamiento de un producto. Mira, ojalá poder ir al concierto yo también, ya sabes, yo entiendo todo la cosa del rock & roll.

—Las personas que entienden la cosa del rock & roll, no dicen "yo entiendo la cosa del rock & roll."— Chase se burla del mayor elevando ambas de sus cejas, lo que me hace sonreír.

—Por favor señor Davenport, no puedo sólo...

—No, lo siento Bree, pero no puedes ir.— El señor Davenport la interrumpe antes de que pueda terminar, y así es como se va una vez más se va dela habitación, dejando a una destructora y de malhumor Bree.

El silencio se instala por un par de segundos en la sala, me levanto de mi asiento para poder verla de cerca, sin embargo ella explota de la nada, bueno en realidad no, porque era algo que se esperaba.

—¡Ser biónica está arruinando mi vida! No puedo ir al concierto, no puedo ir a Australia, ¡No puedo hacer nada!

—Puedes ir a traerme un jugo.—Empujo a Adam por hacer uno de los comentarios más fuera de lugar en la peor situación posible.

—¿Saben qué? No me interesa.

—Bree.— Murmuro cerrando los ojos en tono de advertencia.

—¡Iré a ese concierto!— Ella camina de espaldas hasta la puerta con toda la furia del mundo corriendo su cuerpo.

—¡Bree! ¿Qué haces? ¡No puedes sólo...!—Chase se levanta de su asiento intentando detenerla con palabras, sin embargo se queda a la mitad debido al impacto de la puerta cerrándose con fuerza.— ¿Pueden creer eso?

—Lo que no puedo creer es que Caitlin tenía novio.— Comenta Adam y asiento con la cabeza estando de acuerdo, al igual que Chase a mi lado.

—Esta vez no puedo darle una noche de chicas.—Suelto un suspiro viendo directo a la puerta ladeando la cabeza. —Ella de verdad la está pasando mal, espero que no traiga problemas.

—Yo también espero lo mismo.

Sé que Chase lo dice más que nada por el equipo, y yo porque de verdad me preocupa, después de todo es mi hermana y debería de saber cuando dar buenos consejos y cuando dar apoyo moral para ciertas cosas. No es excusa pero sigo siendo nueva en esto de las relaciones familiares y hay un montón de cosas que sigo intentando entender e interpretar.

Y verla de esa forma sin saber qué decir o hacer, también es estresante para mi, ella necesita una mejor amiga que esté allí a su lado y siento que la estoy decepcionando en todos los sentidos posibles. Aun así tengo la esperanza de que todo mejore como debe de ser, somos adolescentes, ¿No? A veces sobreactuamos en situaciones que no deberíamos, creemos que es el fin del mundo pero en realidad no lo es.

O eso es lo que leí en el libro para padres que tiene el señor Davenport al fondo de su biblioteca, el cual por alguna razón lo tiene razón y no usa demasiado los consejos que tiene allí para padre, porque hay que ser sincero, a veces no es el mejor padre del mundo, sé que quiere lo mejor para todos nosotros.

Para lo que Bree está siendo una pesadilla, los biónicos para mi es aquello que me salvó de una vida de miseria y la verdad es que no lo cambiaría por nada. Ciertos acontecimientos podrían haber sucedido de otra forma pero así es como conocí la familia, como conocí al insoportable de Chase del cual ahora estoy enamorada y no podemos decir las palabras que empieza con la letra n mayúscula pero tampoco lo negamos cuando otros lo dicen.

Es todo un dilema lo que está sucediendo, aun así debemos de concentrarnos y sabemos que el señor Davenport sabrá que hacer.

El momento de la inspección de nuestros chips ha llegado, Chase y Adam llevaban en el laboratorio por mucho más tiempo que yo, que acabo de salir del ascensor. Los veo peleando porque al parecer el mayor está intentando tocar algo que no debería de la cyber consola y Chase lo detiene para que no haga más desastres.

Enseguida el señor Davenport pregunta porqué Bree no está allí, así que Adam la delata diciendo que había ido al concierto de todas formas. Así que él mismo va a buscarla, extiendo mi cabeza cuando los veo a los dos saliendo del ascensor, y la castaña con una cara de pocos amigos por el hecho de que su papá la haya ido a buscar, y no me imagino que otra vergüenza la habrá hecho pasar.

—Tu estas en grandes problemas.— Me hago paso en la mesada del centro para poyarme en esta para ver la escena frente a mi.

—Si, gracias por delatarme, chicos.— Bree estira la cabeza para vernos a cada uno de nosotros, a lo que yo levanto las manos demostrando mi inocencia para señalar a Adam.

Uno tiene que protegerse así mismo hasta cierto punto.

—Mira, ahora por ti, estamos tres horas atrasados, ahora la modificación tardará toda la noche. Ahora entra en tu capsula para que pueda extraer tu chip.—Nunca había visto al señor Davenport tan molesto con uno de nosotros y eso es mucho decir, así como al revés, nunca vi a Bree tan enojada desde que la conozco. Hablando de ella, pasa a súper velocidad para entrar a su capsula cerrando la puerta, a lo que el mayor se acerca a la cyber computadora.— No tengo idea de qué se ha metido en ti últimamente, no puedes hacer lo que se te dé la gana cuando se te dé la gana.

—Confía en mi, has dejado eso mucho más que claro. Mi vida no es mía.—Murmura y hago una mueca por la tristeza en lo que dice aquello. El proceso de sacar el chip termina, ella lo agarra y sale de su capsula para entregárselo al señor Davenport.— Toma, mi chip.—Este lo agarra y lo deja en la mesada a mi lado, viendo que eso es lo tenemos en el cuello y es enorme.— Lo único que quiero es un poco de control en lo que hago.

—Si bueno, eres parte de un equipo así que eso no va a suceder.

—¿Así que tengo que renunciar a mi vida entera por eso?

—Si.— Contesta entre risas el mayor para irse a la cyber computadora una vez más.

—Bueno, si ser biónica va a detenerme de la vida que quiero, ya no quiero ser biónica.— Dice la castaña acercándose a nosotros.

—Bree, ¿Qué estás haciendo?—Pregunta Chase en tono de advertencia, yo frunzo el ceño.

—Obteniendo mi libertad.— Ella agarra una taza.

—¡Bree, no!— Grito para intentar detenerla, todos nos acercamos lo más rápido que podemos, ya que comienza a destrozarla, golpe a golpe, demostrando la bronca que recorre en ella.

Todos nos quedamos en silencio viendo lo que acaba de suceder, y Bree parece no mostrar ni un tipo de arrepentimiento ante su acto.

—¡¿Qué acabas de hacer?! —Adam, Chase y yo nos miramos preocupados por lo que acaba de suceder.— ¡¿Cómo pudiste hacerlo?! Tu no tienes idea de lo que has hecho.

—Sé exactamente lo que he hecho.

Adam y Chase hacen "uuh" al unísono, ruedo los ojos cruzándome de brazos.

—Entonces acabas de cometer el peor error de tu vida.— Otra vez los "uuh" de los dos inmaduros que tengo a mi lado.—Ahora ayúdame a encontrar los restos del chip para que pueda arreglarlo.

—¿Sabes qué? No.— Habla con firmeza Bree.

Por supuesto, los dos chicos no tardan en molestar, así que se llevan un golpe en el pecho de mi parte, haciendo que se callaran.

—¿Qué dijiste?

—Dije que no.

—Adam, Chase, Carter, ¿Nos pueden dejar a solas unos minutos? Necesito hablar con Bree a solas. 

—No, quédense, no hay nada de lo que hablar.— Nos detiene para vernos, con esa mirada que demuestra que está orgullosa de lo que ha hecho.

Luego de eso, se retira del laboratorio para dejarnos a todos consternados por lo que acaba de pasar, mientras que yo sigo en shock, Chase se acerca al señor Davenport colocando su mano sobre su hombro, ya que está preocupado.

—No te preocupes, señor Davenport, iré a hablar con ella.

—No, si ella no quiere sus habilidades biónicas, está fuera del equipo.— Cuando menciona eso, suelto un suspiro para también retirarme de la habitación, siendo llamada por Chase queriendo detenerme, ahora necesito un momento a sola de procesar que no estaré con mi mejor amiga y hermana cumpliendo misiones cómo antes.

Al día siguiente, sigo al señor Davenport y a Chase para adentrarnos al laboratorio, quienes acaban de recibir una alerta de misión.

—Prepárense, acabo de recibir una alerta de misión. Hay una alarma de incendio en una planta química y aun no pueden controlarlo, vístanse.— A penas el señor Davenport da la señal, los tres entramos a nuestras capsulas.—Hay que adelantarnos antes de que se extienda.—Las puertas se cierran en frente de nosotros.— Chase, escanearas imágenes vía satélite y trata de encontrar a los atrapados. Carter, tu volaras el perímetro y verás que tan grande es el incendio y luego lo contendrás con tu poder. Adam, tu vas a derribar la puerta para rescatarlos.— Los trajes enseguida están en nosotros y salimos de la capsula listos para irnos.— ¿Yo? Iré con ustedes y trataré de ayudar como pueda.

Cuando nos acercamos, vemos al señor Davenport con su chaqueta especial para misiones que lo hace parecer un anciano que quiere parecer un adolescente, además los lentes de sol que llevan no ayudan en absolutamente nada, me agacho para agarrar el bolso con mis cosas y no puedo evitar reírme.

—Si, puedes venir a la misión pero no vestido así.

—Si, la tragedia ya es una tragedia, no lo haga peor.

—Deberías vestirte como alguien de tu edad, los de cincuenta no usarían eso.

—¡Tengo treinta y nueve!

—¡Sólo vayan!

Los tres salimos corriendo por el túnel para ir directo al lugar del desastre.

Tengo que admitir que me encuentro nerviosa con el tema de que es la primera misión sin Bree estando allí presente con su súper velocidad, es decir, yo puedo ser bastante útil en cuanto a este tipo de cosas, seré poderosa pero hay cosas que no puedo conseguir ni siquiera con el poder más poderoso que existe en el mundo.

Al principio de la misión luce bien, sólo que los chicos están tardando demasiado en sacar a todos de la planta de químicos, desde arriba veo como todo se incendia, indicando a través del comunicador como va y donde pueden pasar y dónde no, habían explosiones con los cuales al principio no le tomé importancia debido a que gracias a mi visión de rayos x podía seguir el camino de todos hasta la salida, sin embargo una explosión cerca de ellos me termina de preocupar haciendo que me detenga de golpe en el aire, sumando el aire que me comienza a sofocar y faltar.

Ninguno me contesta cuando les hablo y comienzo a preocuparme, después de esa explosión, comienza una cadena de desastres en que el desespero se hace presente en mi cuerpo, por lo que caigo en picada rompiendo en el proceso el techo de la planta de químicos para ingresar, sabiendo que eso dejará gran daño en mi. Me meto entre los escombros para buscarlos yo misma entre el fuego, el humo y la gran cantidad de aire tóxico presente en los pasillos que parecen eternos ante la falta de aire en mis pulmones.

Gracias a mi visión de rayos x soy capaz de encontrarlos enseguida, buscando una forma de salir, su mirada se ilumina cuando me ven y sonrío con un poco de tranquilidad en todo el desastre.

—¿Estás bien?— Chase lleva su mano sobre mi mejilla, suelto un gemido de dolor, ni siquiera me he dado cuenta que me lastimé ante la adrenalina del momento.

—Eso no importa, tengo que sacarlos de aquí, ahora mismo, pero tiene que ser uno por uno, no tengo súper fuerza.—Toso con fuerza al igual que el resto, otra explosión se hace presente en nuestros oídos y más escombros caen encima, que nos hacen correr a un lado para no ser aplastados por esto.

—Sácalos a ellos primero.

Ni siquiera lo pienso dos veces cuando Chase me da esa orden, al primero que tomo es al señor Davenport donde lo dejo en la otra punta de la planta, el siguiente es Adam y por último es Chase, quienes por suerte están a salvo.

—Creo que todavía puedo contenerlo.

Extiendo mis manos en la dirección del desastre, sin embargo todo da una última explosión que nos hace retroceder a todos por la fuerza con la que erosiona en todos lados. Mi cabeza golpea el suelo un par de veces, todo se ve borroso y ni siquiera me doy cuenta del dolor, hasta que desvanezco por completo, sólo escucho gritos y el sonido del desastre.

Luego de eso no tengo idea de qué es lo que sucede, sólo sé que cuando abro mis ojos, ya no estamos en la planta, sino devuelta en el laboratorio, y yo en los brazos de alguien, a quien no puedo distinguir a la primera, hasta que veo a Adam, totalmente preocupado y asustado, y a Chase a su lado.

—¿Qué pasó? ¿Qué le pasó a Carter?— Una voz femenina entra por mis oídos.

Adam me deja con cuidado en el sofá, intento levantarme pero un mareo fuerte se hace presente así que vuelvo a acostarme, el chico deja una almohada por debajo de mi cabeza.

—Estoy bien.— Contesto con un hilo de voz llevando mi mano sobre mi cabeza dando masajes por el dolor punzante que siento.

—Es probable que tenga una contusión.— Dice Chase con total seriedad, ahora si lo tengo todo claro, y veo a las personas yendo y viniendo con desespero de todos lados, bueno sólo al señor Davenport que parece que se ha multiplicado, increíble.— Sacamos a todos pero la misión tardó el doble, Carter se sobrecargo cuando las cosas se complicaron. A penas salimos con vida, y Carter pierde la suya.

—No seas tan dramático, estoy bien.— Esta vez logro levantarme y sentarme en el sofá, ignorando el mareo constante y el dolor punzante de mi cabeza para ver a la chica.

—Lamento eso, pero estoy segura que si hubiera estado allí sería igual de peligroso.

—No, si tu hubieras estado allí, tu súper velocidad hubiera creado un vórtice para apagar el fuego y Cartes se hubiera mantenido sólo en su posición en salir y que esto pasara.— Cierro mis ojos conteniendo las lágrimas... Esperen, ¿Quiero llorar? Oh no, estoy segura que es el dolor, y no por la forma en la que el equipo se acaba de desarmar.— Felicidades Bree, espero que ser normal haya valido la pena.

—Carter, como lo siento.

Cuando abro mis ojos, noto a Bree en cuclillas en frente de mi, la veo apretando mis labios conteniendo la necesidad de llorar que no voy a dejar que suceda. Doy una sonrisa débil.

—¿Sabes qué? Hubiera preferido que te fueras a Australia, en vez de que nos abandonaras de esta manera.—Me sincero con la situación, ella se queda por completo seria sorprendida por mis palabras.

—Vamos Carter, veamos ese golpe.

El señor Davenport aparece a mi lado y me ayuda a levantarme, me lleva con él dejando a Bree atrás.

Me lleva a una habitación aparte pare revisarme la cabeza, analizándome con un aparato que al parecer ve a través de mi, como si fuera mi visión de rayos x. En todo momento estuvo Chase y Adam conmigo, aun con los trajes de misión puesto y sus cara llena de tierra y escombros para hacerme compañía viendo como me encontraba, al final el señor Davenport llega a la conclusión de que si tengo una contusión, eso explica por qué hay tantas personas a mi alrededor.

—Tuviste suerte, podrías haber muerto por haber cerrado los ojos, supongo que tus biónicos te protegieron.

—Estoy feliz por eso.— Murmuro con sarcasmo rodando los ojos.— ¿Puedo irme ya?—Lo miro y asiente con la cabeza dejando las cosas sobre la mesa.

—Ve, pero no hagas movimientos bruscos.— Me señala en forma de advertencia y confirmo con un pequeño movimiento de cabeza.

—Yo me encargaré de que esté bien, señor Davenport.— Chase da un paso al frente y sonrío ladinamente viéndolo.

—Vayan a descansar, porque yo lo haré, ha sido un día exhausto.— El mayor se va de la habitación, no sin antes tocar mi hombro para confortarme. 

Chase me ayuda a bajar de la camilla y sonrío un poco, por suerte esta vez ya me puedo mantener parada por mi cuenta así que los tres vamos a nuestras capsulas para cambiarnos y salir una versión limpia y normal de nosotros.

Enseguida voy a mi asiento, intento acostarme, sin embargo siento unas manos que me detienen con rapidez haciendo que me detuviera, miro confundida a la persona que hizo eso y me enderezo para ver a Chase quien niega con la cabeza.

—¿Qué?

—No puedes simplemente acostarte, según los resultados de lo que busqué, siempre debes mantener la cabeza arriba del nivel del corazón, así que...—Chase coloca varias almohadas por detrás de mi espalda, frunzo el ceño con una sonrisa, extiende sus manos en señal de presentación.—Listo, ya puedes recostarte.

—Eres algo dulce, ¿Lo sabías?—Hago caso y me recuesto sobre la montaña de almohadones dejando mi cabeza reposada allí, giro a ver a Chase con una sonrisa.

—Ahora lo sé.— Se acerca apara darme un corto beso en los labios.— Descansa.

Él se va con Adam que tiene cara de que está haciendo un desastre en los controles, porque lo primero que hace el chico al llegar a su hermanos es empujarlo y golpea sus manos para que deje de tocar la pantalla antes de que explote algo a la otra punta del mundo, situación que me hace gracia de ver.

Va a ser difícil acostumbrarse a estar sin Bree en las misiones, pero ella quería su vida normal y tal vez las últimas palabras que le dije no fueron las más adecuadas dada la situación. Puedo dar de excusa que tengo un golpe en la cabeza que me hace idiota, aunque sé que lo dije bastante consciente y en parte es la verdad, no voy a mentir al respecto.

Noto que Bree se acerca de manera tímida a los chicos, lo que me hace levantarme con rapidez viendo desde la distancia.

—Ustedes pueden adivinar el por qué estoy aquí.

—¿Ninguno de nosotros logró sobrevivir el incendio y somos fantasmas?

—Les debo una disculpa.

—¡Si! ¡Deberías haberte disculpado cuando estábamos vivos!

—Miren, sólo quería algo de libertad de ser biónica, nunca pensé en ponerlos en peligro, ni que eso le sucediera a Carter.—Bree pasa por al lado sus hermanos para colocarse en medio de ellos y de mi, que sigo en el sillón.—De verdad lo siento, Carter.—La miro con atención, me levanto con cuidado de mi asiento.—Estaba pensando en mi en vez de ustedes. Somos una familia, una rara y disfuncional familia. —Aprieto mis labios asintiendo con la cabeza.— Estaba siendo egoísta y de verdad, de verdad lo siento.—Una sonrisa aparece en los labios de la chica.— Quiero volver.

—¿En serio?— Doy un paso al frente sin esconder mi felicidad.

—Bien.—Contesta Chase viendo a su hermana con una sonrisa.

—¡Wow! Tenemos que votar en esto.— Salta de golpe Adam haciendo que sonriamos por la confusión.

—Adam, no tenemos que votar en esto.—Contesto entre risas acercándome a mi hermano mayor.

—¡Si! ¡Vete!—Frunzo el ceño sin quitar mi sonrisa por lo que acaba de decir, luego cambia a una de que acaba de entender que sucede.—Oh cierto, familia, familia, yada-yada, lo tengo. Vengan aquí.

Adam extiende sus brazos y los cuatro nos acercamos para darnos un fuerte abrazo.

—¿Qué sucede aquí?— La voz del señor Davenport interrumpe nuestro momento y nos separamos.

Bree se acerca a él primero, en lo que yo aun sigo abrazada a Adam, más que nada porque siento que estoy a punto de desmayarme, pero nadie tiene que saber eso.

—Señor Davenport, lo he arruinado, de verdad lo siento. Estoy lista para ser biónica otra vez.

—Bueno, estoy feliz de que sea así pero no puedo devolverte los biónicos.— La forma tan seria en la que lo dice me dice que no se vienen buenas noticias, y no es sólo que estoy por desmayarme, otra vez.

—¿Qué quieres decir? Se ha disculpado, y ella quiere volver. —Habla Chase defendiendo a su hermana.

—Yo no creé su chip, mi hermano lo hizo.—Ah, ahora todo tiene sentido.— Ahora está tan dañado que no puedo duplicarlo.

—¿Qué? ¿Qué está diciendo?— Pregunta Bree.

—No sé si volverás a ser biónica otra vez.—Nos miramos entre todos.

—Estoy segura que encontraremos una solución.— Mi voz sale más arrastrada de lo que quería.

—Carter...

—Estoy cayendo...— Me deslizo dejando de agarrarme de Adam, pero él es más rápido y me sostiene antes de volverme a golpear la cabeza contra el suelo.

—Ya te tengo, hermanita.—Dice con cariño para dejarme en el sillón, no cierro los ojos porque eso puede significar peligro.

Bueno, después de todo ha sido una semana interesante y nunca creí que iba a casi morir en una misión, en serio el señor Davenport debería considerar hacer cascos para este tipo de cosas. 

Este ha sido un capítulo más que nada emocional, y amé agregar esas escenas extras para dar más énfasis a la situación, espero que a ustedes igual les haya gustado <3

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