Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

ִ ۫ ◌ 14. bionic jealous.

NARRADO POR CHASE DAVENPORT.

▬▬▬▬ Juego con el extraño...¿Fideo? De mi plato, porque no sé si comerlo o arriesgarme a agarrar una enfermedad que pueda intoxicarme el estómago hasta el final de mis días, o vivir para siempre.

Definitivamente me quedo con la última, así que empujo la bandeja un poco haciendo una mueca de asco, prefiero morirme de hambre a tocar eso que hay allí. Levanto la cabeza para encontrarme con Bree que se acerca a nuestra mesa.

—Okay, un consejo, no se acerquen a la directora Perry.— Nos advierte de primera mano lo que en realidad todo el mundo sabe que hay que hacer.

Por alguna razón se la pasó peleando con la cocinera desde que entramos a la cafetería, así que debe de haber pasado algo interesante de lo cual no estoy interesado en saber en lo absoluto, pero lo que sí me interesa saber, es qué es esta comida, o vomito, parece algo que pasó por el estómago de otra persona que ni llego a digerirlo.

De tan sólo pensarlo se me revuelve lo poco que desayuné esta mañana.

—Confía en mi, es lo primero que me digo a mi mismo todas las mañanas.— Habla Leo, por lo que asiento con la cabeza.

—¿En serio? La primera cosa que me digo a mismo es "la crema para afeitar sólo luce como comida."

—Adam.— Dice Carter entre risas viendo su rostro, giro para verlo y entiendo la gracia.— ¿Qué onda con tu cara?

Mueve su rostro como si se estuviera haciendo el lindo con alguien, giro mi cabeza para ver de quién se trata y encuentro a la chica que mira en nuestra dirección, niego con la cabeza entre risas.

—Si, ¿Por qué sigues haciendo caras como si te estuvieran tomando una selfie?— Pregunta Bree sonriendo.

—Porque esa chica Sabrina no deja de mirarme. —No quita esa extraña expresión de su rostro.— ¡Oh! Allí viene.—Se levanta de golpe y pone una pose "cool" ignorando la presencia de la chica a mi lado que está al frente de Adam.— Hola, Sabrina, no pude notar que no dejas de mirarme desde la otra punta de la habitación.

—En realidad, estaba mirando a Chase.

Ni siquiera me inmuto, pero alguien a mi lado pega un salto sobre su asiento.

—¡Oh! Sentido del humor, me gusta.

—¡Chase! Quería hablar contigo sobre nuestro proyecto de química.— Adam es ignorado completamente cuando la chica Sabrina se dirige a mi.

—Seguro, lo haré por ti. Envíame tu correo y te mandaré todo cuando termine.— Contesto con simpleza agarrando el vaso con mi bebida para llevarlo a mis labios.

Ya me había acostumbrado a que todos me pidieran lo mismo, lo que me hace pensar, que tal vez debería cobrar por eso, después de todo estoy mejorando sus futuros con mi bello cerebro.

—No, quiero hacer el proyecto contigo.— Muy bien, eso es nuevo. Otra vez otro salto a mi lado me hace contener una sonrisa.— Necesito un compañero y esperaba que fueras tu.

Me paro al frente de ella encogiéndome de hombros.

—Si, supongo que está bien, ¿Esta tarde en mi casa?

—¡Suena genial! Nos vemos allí.— Ella sonríe y se va de allí.

Cuando bajo la mirada, Carter sigue a Sabrina con la mirada y levanta su mano en el aire aun manteniéndose sentada en la silla. Se vuelve a mi con ambas cejas levantadas, como si estuviera ofendida o algo.

Hello! Soy su novia, ¿Acaso ahora nadie parece ver eso?— Por poco y grita para que todo el mundo se entere de eso.

—¿Qué estás hablando? Sólo haremos un trabajo juntos.

—No, a esa chica le gustas y parece que no sabe que tienes, ¡Novia!— Vuelve a levantar la voz, para dejar en claro lo que quiere decir.

Me agacho un poco en frente de ella colocando mi mano sobre su rostro para verla directamente a los ojos, ella está molesta pero aun así no me quita.

—No tienes que preocuparte, es más, seguro ni siquiera es de verdad.— Murmuro cerca de sus labios y planto un beso corto antes de agarrar la bandeja con lo que supuestamente es comida y voy a tirarlo en el tacho para salir de la cafetería.

Ahora debo de prepararme para juntarme con Sabrina en nuestra casa para hacer el proyecto, es decir, es bastante interesante es ver a Carter celosa y puedo asegurar que eso ha pasado muy seguido. Yo sé que ella es una mujer muy segura de si misma, pero eso no significa que no vaya a defender lo que es suyo... Por supuesto, yo soy suyo.

Yo tampoco soy ningún santo en esta relación, he prestado mucha atención viendo a los chicos cada vez que mi novia pasa cerca de ellos. Ella los ignora por completo, de la forma que a mi me gusta, sin embargo eso no quita que no esté pendiente de lo que los demás hacen cuando Carter está cerca, porque ella es mía en todo el sentido de la palabra y más allá, a pesar de que aun no hemos cruzado esa última fase por la cual los dos estamos tan desesperados por estar solos, a la vez ni siquiera poder cruzar de los besos.

Eso hace que nos pongamos más intensos de lo normal... No sabía que una persona podía estar así por otra persona, no me había enamorado nunca en mi vida porque estar la mayor parte de mi vida encerrado en un sótano, no ayuda a las habilidades sociales de alguien, así que todo esto es nuevo para mi al experimentarlo. Creo que lo estoy llevando bastante bien porque no tengo ninguna queja de Carter.

Pero volviendo al tema de Sabrina, sé que puedo divertirme un poco, si Carter cree que ella tiene un crush conmigo, lo cual no es cierto, provocará una imagen que nunca he visto de ella y me muero por hacerlo.

Al salir de la escuela, todos llegamos allí, a los pocos minutos está Sabrina en frente de la puerta con una sonrisa en lo que nos ponemos a hacer el proyecto sin dar más vueltas.

—No puedo creer lo rápido que estás armando la molécula.— Sabrina habla a mi lado luego de un buen rato en silencio, porque no estoy demasiado interesado en formar una conversación más allá del trabajo.

—Esto es lo que hago.— Contesto con una sonrisa, porque a pesar de eso, soy educado.

No como una chica que estoy viendo que está parada en el centro de la cocina, con los brazos cruzados y que no se ha ido de allí desde que llegamos de la escuela, todo con tal de controlar lo que estamos haciendo... Y dios, no puedo estar divirtiéndome más con esto.

Ella sabe que no me interesa nadie más, yo sé que no me interesa nadie más, pero el simplemente verla celosa es como un deleite visual al saber que de verdad está enamorada de mi y de nadie más.

Y en unas palabras distintas, tengo ganas de saltar a besarla ignorando a todo el resto del mundo.

—¿Sabes lo qué me gusta de ti? Además de ser encantador y divertido.— Giro para verla y elevo una de mis cejas, Adam aparece detrás de nosotros.

—Bueno, si tiene que ser algo más porque no es ninguno de esos dos.— Ruedo los ojos cuando dice eso.

Sigue molesto porque una chica está enamorada de mi y no de él, estaría sorprendido yo también si no fuera porque ya tengo a la chica que quise desde un principio.

—Tu eres amable, educado e incluso a pesar de ser biónico, no tienes la necesidad de impresionarme o al resto con tus músculos.— Continúa la rubia, aunque su voz es lejana, a lo que asiento con la cabeza rebotando la mirada entre ella y Carter, quien tiene una expresión en su cara de que acaba de descubrir algo.

—Probablemente porque no tiene ninguno de esos.

—¿Me disculparías?— Me levanto el asiento para agarrar a Adam del brazo y arrastrarlo hasta donde se encuentra Carter, quien da un pequeño salto en su lugar para empujarme de los hombros, ruedo los ojos por eso sin poder evitar sonreír.

—¡Lo sabía! ¡Yo lo sabía! ¡Siempre lo sé! ¡Yo sé todo! Y se supone que tu eres el inteligente, pero yo lo soy aun más, ¿Qué tienes que decir al respecto?— Se cruza de brazos viéndome de arriba hasta abajo elevando una de sus cajas,  mostrando una cara orgullosa.

Suelto un suspiro dando un paso al frente de Carter, ella se pone nerviosa ante mi acción a pesar de que levanta su mentón demostrando estar segura.

—Y yo seguiré diciendo que no te preocupes por eso.

—¿De verdad quieres llegar a eso?—Su voz se ensombrece, y el latido de mi corazón dentro de mi pecho se comienza a acelerar.

La analizo un poco y asiento con la cabeza, para molestarla. Camino para atrás un par de pasos y vuelvo a la sala con Sabrina, quien me esperaba para seguir con el trabajo.

—Una disculpa, ¿Seguimos con el trabajo?

NARRADO POR CARTER KNIGHT.

¡No puedo creerlo! Ahora Chase sólo está jugando conmigo, ¿O acaso cree que no me doy cuenta? Primera regla de una mujer, una chica siempre se da cuenta de absolutamente todo incluso si no quiere, y ahora mismo eso es lo que está pasando, sólo que me está sirviendo.

Estoy segura que la tal Sabrina ni siquiera sabe que somos novios, lo cual es bastante contradictorio porque lo dijo a nivel mundial, lo que me hace pensar es que hay chicas que ni siquiera les interesa eso, ellas rompen la propia regla de convivencia con otras chicas. Y ella se acaba de meter con la chica equivocada, como cualquiera que se acerque a Chase con otras intensiones.

—¡No puedo creer que esté coqueteando con Chase!— Señalo a los dos que están hablando animadamente en la mesa de la sala armando esa cosa rara que nunca entendí.

—¡No puedo creer que le guste Chase!— Se queja Adam a mi lado cruzándose de brazos como si fuera un niño pequeño, frunzo el ceño para verlo con atención.

—A mi me gusta Chase.

—Si pero tu no cuentas, hemos establecido que tienes gustos peculiares.

Se supone que ahora de decir algo inteligente para contestarle, pero no tengo ganas de seguir peleando con alguien que no vale la pena. Él está celoso porque no le prestaron atención una vez en su vida, y yo estoy celosa porque Chase me lo está haciendo a propósito para ver que es lo que hago, y en serio que no me descargaré con la rubia si eso es lo que espera.

Noto que Adam se aleja de mi, por lo que lo sigo porque estoy segura que eso es señal de peligro

—Hey, Sabrina, sólo quería disculparme a los dos por mi comportamiento, aun así graciosos, comentarios de antes.—Dice con una sonrisa en lo que yo lo rodeo alrededor del sofá para detener lo que tenga que detener si es necesario.— Me agrada que por fin Chase haya conseguido una amiga de verdad.

—¿Primera amiga?— Pregunta la chica con una ceja levantada viendo directamente a Chase, quién se comienza a molestar, y a la vez ponerse nervioso.

—Oh si, él de verdad que nunca ha hablado con nadie, ni siquiera tiene amigos de verdad, ¿No te parece gracioso?— Sigue las burlas en dirección a su hermano y sé que eso no va a resultar nada bien.

—Adam, ya cállate. — Murmuro viéndolo, dándole una señal de advertencia con mis ojos. Me ignora por completo porque parece empecinado en seguir irritar al menor.

—Si he tenidos amigos.— Salta Chase, lo veo, está mirando con mucha ira a su hermano.

—¿De verdad? ¿Cuál era su nombre? Yo me acuerdo en realidad.

—Uh... Canadá.—Menciona el castaño con nerviosismo, sus puños se cierran con fuerza marcando sus brazos.— Era de Canadá.

—Esta bien, no todos son buenas personas Chase, es siempre encontrar las personas perfectas para hacer amigos.— Adam no parece tener la intensión de parar por ninguna razón, lo que le va a esperar unos buenos golpes si no lo hace ahora.

—¡Si! Ya sabes, una vez aprendas a socializar eso será genial.— Mala elección de palabras, rubia.

Adam y la chica Sabrina se comienzan a reír, asintiendo con la cabeza. Mis ojos caen enseguida a Chase, quién tiene la respiración agitada y la mirada de un mismísimo loco que acaba de perder la cabeza, lanza la mesa de centro por los aires llamando la atención de todos.

—¡¿De qué te ríes, ricitos de oro?!— La voz de Chase ya no es la voz de Chase.

—Él ha vuelto.— Dice Adam con una gran sonrisa de orgullo por lo que acaba de lograr.

—Oh no.— Muerdo mi labio inferior negando con la cabeza, esperando lo peor.

—¿Quién a vuelto?— Pregunta Sabrina, a lo que todos la ignoramos.

—No sé quien eres, pero te encantará ver esto, y tu...—Mis ojos se abren grande cuando veo que Spike se dirige a mi, pienso que me va a lanzar por los aires, que es lo más lógico, pero me toma por sorpresa con lo que dice:— Eres realmente hermosa, princesa.— Los ojos de Chase, digo de Spike, me analizan de arriba hasta abajo de una manera coqueta,.

Eso me tranquiliza, saber que a Spike también le gusto, ¿O debería de asustarme? No sé, a estas alturas acabo de perder la cordura. Mientras que la nueva personalidad de Chase sigue destruyendo la casa y dejando a la chica asustada aprovecho para hacer lo que debía de haber hecho para parar al mayor desde un principio.

Agarro de la oreja a Adam para arrastrarlo a una distancia prudente de Sabrina y sobre todo teniendo una vista perfecta de Spike, que anda rompiendo absolutamente porque Adam acaba de humillar a Chase con sus "supuestos problemas de socialización," les juro que lo voy a matar.

—¡¿Por qué siempre haces eso?!— Le grito soltándolo de la oreja.

—¡Podrías haberme llamado en vez de arrancarme la oreja!— Se endereza de golpe llevando una de sus manos a su oreja para masajear la zona adolorida.

¡Bien! Se merece incluso una descarga eléctrica directo al cerebro a ver si eso hace que funcione de una vez por todas.

—¡No! Te lo mereces, ¡Ahora ve a arreglar esto ahora mismo si no quieres que te teletransporte en medio de un volcán!— Digo entre dientes dando un paso a él, lo empujo con un poco de fuerza, lo que no hace demasiado efecto porque Adam es la mismísima fuerza personalizada.

—¡Aléjate de ella! ¡Es el gatito de papi!— Spike gritando mientras se dirige a nosotros interrumpe mi regaño hacia Adam, trago en seco cuando ve al mayor con ganas de matarlo.

Oh wow, ¿Es raro que eso me haya gustado y al mismo tiempo aterrado? Sacudo mi cabeza para alejar esos pensamientos, por el momento, viendo como Adam se acerca de forma amenazadora a Spike.

—Confía en mi, no querrás hacer esto.

El mayor advierte a Spike con el tono de su voz, indicando que si se van a poner a pelear.

—Tienes razón, sería rudo hacerlo en frente de las señoritas sacar tus intestinos, es por eso que lo haremos allí.— Señala por detrás de él, ruedo los ojos, Spike coloca su mano sobre el hombro de Adam, con la respiración agitada.

—Espera, ¿Crees que puedes lanzarme al...?

Las palabras quedan interrumpidas cuando hace exactamente lo que no esperaba que hiciera, y es así como la pelea entre los dos comienza sin parar. Por lo que me acerco a Sabrina con tranquilidad, ya estoy acostumbrada a ver esto así que no tiene sentido alterarse.

—Hey, Sabrina, ¿Qué cuentas?— Intento bromear un poco ignorando el ruido de las cosas romperse detrás de mi espalda.

—¿Qué es lo está pasando?— Cuestiona con la mirada perturbada sin entender nada.

—Chase tiene una aplicación de comando que lo vuelve más violento, y se llama Spike.—Explico con tranquilidad en lo que agarro a la rubia del hombro para agacharla a mi lado esquivando una silla que vuela por encima de nosotros.— Soy Carter, por cierto, la novia de Chase.— Sonrío para verla, ella cambia su expresión al escuchar esa última palabras.

—¿Novia de Chase? No lo sabía, de verdad lo siento.— Empieza a divagar con las palabras.

—¿En serio? ¿No miras las noticias? Chase lo dijo en frente de todo el mundo...—No puedo evitar la sorpresa por el hecho de que no lo supiera, otra cosa más que decido ignorar.— ¿Sabes qué? No importa, disculpada, Chase lo ha hecho para molestarme, no te lo tomes personal, todos aquí son idiotas.—Me encojo de hombros, miro a los dos chicos peleando y salgo de mi escondite.— Ahora si me disculpas, detendré esto.

—¿Qué harás?

—Terminando esta idiotez de los dos.—Suelto un suspiro y miro a la chica aun agachada detrás del sofá.— Deberías irte.

Sabrina no duda ni un segundo en salir corriendo por la puerta, seguramente siendo la última vez que la vayamos a ver, porque al final del día nadie quiere volver a esta casa cuando se enteran de todas estas cosas, hasta yo me pregunto porqué sigo volviendo.

Muevo mi cuello de un lado a otro relajando mi cuerpo y camino a paso seguro en medio de los dos chicos para lanzarlos uno a cada punta de la sala, así llamando su atención por completo, luego los envuelvo en una nube de humo negra elevándolos en el aire. Ambos luchan por escaparse de allí.

—Los liberaré si dejan de pelear.— Digo con cansancio en mi voz.

El señor Davenport debería de pagarme por todas las veces que interfiero en una pelea de estos dos, ya sería millonaria a estas alturas.

—Carter... ¿Qué sucede?— Giro mi cabeza para ver a Chase, ahora si Chase, viendo todo con preocupación, lo que me hace soltarlos a ambos de golpe ignorando el hecho de que estaban en el aire y cayeron de manera brusca.

—Adam, obvio, ha activado tu aplicación de comando.— Camino hasta mi novio para ayudarlo a levantarse.

—Si, fue bastante divertido.— Ríe Adam a pesar del dolor que la caída le ha infringió. 

—Muy bien, ya me he cansado.

Vuelvo a extender mis manos en ambas direcciones para agarrar a ambos chicos con mi telequinesis.

—Carter, ¿Qué haces?

Ignoro la pregunta Adam, y los hago flotar hasta encima del sofá en donde los lanzo sobre este con bronca.

—Ustedes dos se van a sentar allí a hablar como dos personas adultas, o lo que sean ustedes dos, y lo arreglarán. — No puedo creer que tenga que hablarles como si fuera su mamá. — ¿Yo? Iré a la habitación de huéspedes a ver televisión porque alguien, ha roto la de la sala.

Aquello último va implícito mientras miro a Chase, aunque sé que directamente no ha sido su culpa, pero su cuerpo si, así que es su culpa después de todo.

Me voy de allí antes de que le arrancara los ojos a ambos chicos, ni siquiera sé porqué Adam ha empezado todo esto, bueno, en realidad, si lo sé, no puede aceptar que otra persona le pase algo bueno en vez de a él. No estoy enojada con Sabrina, no tiene la culpa de que mi hermano sea un idiota, y Chase bueno, ha logrado molestar a dos personas de un sólo tiro así que definitivamente se merece el mismo castigo también. 

Voy a la habitación para encerrarme allí, me tiro en la cama y agarro el control remoto para encender la televisión subiendo el volumen fuerte para tener que evitar escuchar gritos y más cosas rompiéndose. Tasha y el señor Davenport van a enloquecer con todas las cosas rotas, otra vez, aunque lo bueno es que el dinero no es problema, creo que hemos comprado cómo diez veces las mismas cosas de tantas veces que se han roto por peleas.

Cambio los canales hasta que me detengo en uno de música, lo dejo allí cuando veo que están pasando una canción que a mi me gusta, me tapo con las frazadas sonriendo como si fuera una niña pequeña. Sin embargo mi momento de relajación se ve interrumpida cuando la puerta de la habitación se abre, allí entra Chase con una sonrisa tímida en sus labios, vuelve a cerrar la puerta detrás de su espalda y yo salgo de la cama.

—¿Ya hablaron?— Pregunto caminando hasta él.

—Así es.— Asiente con la cabeza.

—¿Lo solucionaron?

—Nos conoces, Carter.

Aprieto mis labios conteniendo una sonrisa.

—Lo sé, aun no entiendo por qué Spike apareció, ¿Qué pasó allí?— Llevo mi mano a su rostro para acariciar su mejilla.

—No lo sé, pero estoy segura que no ha sido por Sabrina, o siquiera que tu escucharas lo que decía Adam porque me conoces mejor que nadie.—Ahora si no puedo evitar sonreír un poco, el saber que me tiene ese tipo de confianza es reconfortante. Que no sienta vergüenza de si mismo.— Supongo que ya no pude contener la furia que me genera que Adam siempre desmerezca absolutamente todo lo que tengo o hago.

—¿Y le has dicho eso?—Mueve su cabeza en una afirmación, suelto un suspiro dejando caer mi brazo a mi costado.— Bien.

La siguiente acción sucede antes de que pueda detenerlo, por lo que no puedo contener una risa pequeña.

—¡¿Por qué ha sido eso?! —Grita Chase, llevándose una mano a la mejilla donde acababa de golpearlo.

—¡Por querer darme celos! —Respondo sintiendo la ira y la frustración mezclándose dentro de mí. Me cruzo de brazos, tratando de mantener la compostura—. Para que sepas, Spike también está enamorado de mí, tiene buen gusto.— Lo analizo de arriba hasta abajo.

—Sí, lo sé, es lo único que podemos compartir. —Chase se frota la mejilla, sus ojos brillando con una mezcla de diversión y desafío, entonces no se ha enojado, mejor. Antes de que pudiera reaccionar, me agarra de la cintura, acercándome a él—. ¿Y ha funcionado? ¿Te causé celos?

El contacto de sus manos firmes en mi cintura envía un escalofrío por mi espalda. Su cercanía hace que mi corazón latiera descontrolado, y la tensión que se formó en el aire se puede cortar con una tijera. Siento una mezcla de rabia, confusión y algo más profundo, algo que no quiero admitir.

—Ya quisieras haberme causado celos.—Intento sonar desafiante, aunque siento que mi voz traiciona un leve temblor, lo que me hace maldecir dentro de mi cabeza.

Chase no contesta con palabras. En lugar de eso, comienza a acercarse peligrosamente a mi cuello, dejando un rastro de besos suaves y ardientes. Cierro los ojos de manera instantánea, intentando mantener la poca cordura que estoy perdiendo a cada tacto, pero mi cuerpo reacciona con una oleada de sensaciones. Mi piel se eriza bajo sus labios, y un calor creciente se extiende por todo mi cuerpo.

—¿De verdad no sentiste nada? — Pregunta Chase entre besos, su aliento cálido contra mi piel.

—No.—Mi voz apenas un susurro. Pero cada beso suyo desmiente mis palabras, haciendo que mi respiración se volviera más rápida y por poco necesitaría un inhalador para ayudarme a que el aire vuela a entrar a mis pulmones. 

Siento como si una corriente eléctrica recorriera mi cuerpo, conectando cada punto donde sus labios me tocaban.

Chase repite la pregunta, la insistencia y desespero se hace notar cuando sigue sin parar aquellos besos.

—¿De verdad no te causé celos?

Niego con la cabeza porque mi boca ya no es capaz de soltar algo coherente, pero mi cuerpo comienza a traicionarme, arqueándose ligeramente hacia él. La tensión entre nosotros es  palpable, y cada beso hacía que mi resistencia se desmoronara un poco más. 

Finalmente, con un suspiro entrecortado, lo admito.

—Sí, lo hiciste.— Murmuro, mi voz cargada de emoción y rendición, sobre todo con un poco de molestia por haberlo dejado ganar.

En ese momento, Chase me besa con una intensidad que me deja sin aliento. Nos fundimos en un beso apasionado, nuestros labios moviéndose con urgencia y necesidad, caminando para atrás sin soltarnos en ningún momento. Tropezamos con la cama, cayendo sobre ella sin dejar de besarnos, aunque unas pequeñas risas se escapan de por medio. 

Siento la presión de su cuerpo contra el mío, sus manos explorando, tocándonos y perdiéndonos en la piel del otro. Cada caricia suya enciende un fuego en mi interior, un deseo incontrolable que sólo él puede encender, y debo de decir, que es la primera vez que llegamos tan lejos en medio de los besos.

Cuando finalmente nos detuvimos, ambos jadeando por aire, lo miro a los ojos. Hay una intensidad en su mirada que me hace temblar y rendirme ante él. En ese instante, siento una mezcla de vulnerabilidad y deseo, sobre todo seguridad, una necesidad de estar más cerca de él, de perderme en él.

—Si doy un paso más, ya no lograré volver.—La voz de Chase se escucha ronca, cargada de deseo.

Lo miro fijamente, consciente de la línea que estábamos a punto de cruzar después de tanto tiempo. Mi corazón late con fuerza, sintiendo una mezcla de miedo porque sería tanto mi primera vez como la de él. Pero más que nada, siento un deseo abrumador de estar con él, de dejarme llevar por lo que fuera que está creciendo entre nosotros, un nivel que nunca creí llegar y que se ha llevado por completo mi sanidad en el proceso.

—Creo que cruzamos la línea del sentido hace tiempo. — Hablo con mis palabras llenas de determinación y deseo.

Aceptamos nuestro destino, dejándonos llevar por la pasión que nos consume. Un momento que sabíamos que cambiaría todo después de tanto. Mientras sus manos siguen explorando mi cuerpo y nuestros labios se encuentran en un beso interminable, siento que el mundo se desvanece a nuestro alrededor. 

Chase empieza a deslizar sus manos por mi espalda, bajándolas lentamente hasta la curva de mis caderas. Siento su tacto como el mismísimo fuego, encendiendo cada centímetro de mi piel. Sus labios abandonan los míos para seguir un camino ardiente por mi mandíbula y mi cuello, provocando que un suspiro tembloroso escapara de mis labios, a la vez de rabia por no poder seguirlo besando, sin embargo la sensación de desespero es demasiado buena.

Intentando aferrarme a algo de cordura, pero mis palabras se desvanecen en un gemido cuando sus manos encuentran la orilla de mi camisa, deslizándola hacia arriba.

Chase me mira con atención, buscando una última confirmación. Asiento, casi imperceptiblemente, pero con una seguridad que hasta yo misma me sorprendo, y aun más, que Chase sabe exactamente lo que hacer. 

Con un movimiento ágil, Chase desliza mi camisa por encima de mi cabeza, dejando mi piel expuesta al aire fresco y a su mirada hambrienta. Me incorporo un poco, mis manos temblorosas trabajando para quitarle su camisa también. Cuando nuestras pieles finalmente se encontraron, la sensación es más intensa de lo que alguna vez había imaginado.

Nos besamos de nuevo él colocando mi mano sobre mi cuello con delicadeza, más apasionado, nuestras manos recorriendo cada rincón descubierto. Chase me empuja suavemente hacia atrás, haciéndome recostar sobre la cama mientras él se sitúa encima de mí. 

Chase continúo su descenso, besando y acariciando, cada vez más cerca de los lugares donde mi deseo se hacía más intenso. Mi respiración se vuelve errática, y mis manos se aferraron a sus hombros, necesitando anclarme a algo mientras las olas de placer comenzaban a sobrecogerme.

Finalmente, sus labios encontraron los míos de nuevo, y nos besamos con una desesperación que es casi dolorosa. Puedo sentir su corazón latiendo tan rápido como el mío.

Nos movimos juntos, sincronizados, en una conexión que no creí posible. Cada roce, cada toque, cada beso nos llevaba más y más cerca del abismo. Y cuando finalmente cruzamos esa línea juntos, es como si una explosión de estrellas iluminara mi interior, algo que no había sentido nunca antes.

Nos quedamos así, entrelazados, nuestras respiraciones lentamente volviendo a la normalidad mientras el mundo comenzaba a reaparecer a nuestro alrededor. Lo miro a los ojos, y supe, en ese instante, que todo había cambiado. Conectados, en todo el sentido de la palabra.

SEPAN QUE ESTUVE UNA HORA DANDO VUELTAS SI PUBLICAR ESTA ESCENA O NO, DIGANME QUE SI HICE BIEN O BORRO TODO JAÑDLJAD ME DA VERGUENZA, ADIÓS

Recuerden:

—VOTAR; por favor no se olviden y no les pido mucho, es gratis y consiguen actualizaciones más seguido. Por favor votar en todos los capítulos. 65 VOTOS PARA EL PRÓXIMO CAPÍTULO.

—COMENTAR; amo leer sus comentarios y opiniones sobre la historia.

—SEGUIRME; para no perderse ninguna actualización, noticia o lo que sea de la historia.

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro