ִ ۫ ◌ 12. bionic surprise part two.
▬▬▬▬ Leo estaba en el hospital, no tenemos ningún tipo de información de lo que ha sucedido ni tampoco nos dejan irnos para verlo. Habían dejado a Tasha ir a ver a su hijo, pero tanto como los cuatro y el señor Davenport, aun seguimos encerrados en la casa esperando que nos dejen ir, los seguimos hace ya más de una hora con una gran insistencia y esperanza de que el agente Graham iba a cambiar de opinión.
—Agente Graham, debe de dejarnos ir al hospital para ver a Leo.— Dice Chase caminando al frente de nosotros.
—¡Ni siquiera sabemos que le ha pasado!— Sigue Bree pasando por mi lado para ver mejor al Agente.
—No puede ser que sea tan frío para no dejarnos ir.— Lo analizo de arriba hasta abajo, con ese simple traje ya le da autoridad de hacer lo que se le da la gana, y así no son las cosas, no importa cuánto poder tenga o siquiera cuántas armas hay en la habitación apuntándonos.
—Si, está lastimado y no es divertido como todas las veces que lastimo a Chase.
—Ustedes no irán a ningún lado, el transporte militar estará aquí en cualquier minuto.—Dice Graham con un tono tajante, cansado de nuestras insistencias.— Han visto lo último de su amigo y de ustedes.— Agregó dejando en el aire resonando en nuestros oídos.
Me dejo caer en el sofá con mi rostro entre mis manos a causa de la frustración que todo esto me genera, ¿Qué sentido tiene ser así de poderosos si al final de cuenta nos vamos a rendir por un señor de alto rango y armas que pueden matarnos? Esto ya es inútil y comienzo a cansarme, y a nadie le va a gustar eso de ver.
El señor Davenport va tras el agente Graham saltando por las escaleras hasta alcanzarlo.
—Agente Graham, por favor, no se los lleve, lléveme a mi en su lugar. Soy obviamente la brillante mente maestra, el cerebro detrás de la fuerza, la mente detrás del corazón.
Lo miro levantando la mirada frunciendo el ceño, suelto un suspiro negando con la cabeza ante la exasperación.
—Aun cuando suplica, consigue presumir.— Asiento ante las palabras de mi hermana.
—¡Vamos! Pregúnteme lo que quiera. Supongo que debe de querer saber como un hombre de cuarenta y tres años continua venciendo al padre tiempo.
—Esto va a pasar, sea le guste o no.—Graham se para de manera amenazadora en frente del señor Davenport, da unos pasos para irse, sin embargo vuelve a nuestro papá.— Y para aclarar, el padre tiempo si lo ha atrapado mucho antes que nosotros.
La cara del mayor cambia por completo cuando le dice, sonrío y vuelvo a levantarme tomando impulso con mis piernas, me coloco en medio de mi familia empujándolos un poco a un lado.
—Tenemos que salir de aquí.— Murmuro viendo en todas las direcciones para que no haya nadie escuchando más de lo debido.
—¿Pero cómo? De cualquier forma nos verán cómo una amenaza, Carter.— Bree habla en el mismo tono que yo, los tres me ven con atención.
—¿Y eso es tan malo?—Río sin ganas, mi mirada ahora debe ser la de una persona desesperada, ¿Me importa? Para nada, todo con tal de salir de aquí, soy capaz de hacer cualquier cosa.— Sé como hacerlo, cuando escuchen mi señal, deben de esconderse, ¿De acuerdo?
—Carter, ¿Qué es lo que vas a hacer?
El tono de advertencia de Chase me hace girar a verlo, analizo su expresión y él hace lo mismo con la mía, como si intentáramos leer nuestras mentes pero como pareja aun no hemos llegado a ese nivel de actualización, así que sólo quedan en pensamientos en el aire.
Me limito a sonreír y agarro su mano dando un apretón fuerte en el intento demostrando seguridad.
—No te preocupes por eso, Chase.—Intento sonar tranquila, suelto un suspiro sin dejar de verlo a sus ojos.— Soy la peligrosa, ¿Recuerdan?
Chase no responde, ni muestra tranquilidad con lo que acababa de decir, pero tampoco lo niega. Eso es suficiente para mí. Adam y Bree asintieron, a pesar de que no sabían exactamente lo que planeaba. Chase probablemente está más preocupado que cualquier otra cosa, pero sabía que no podría detenerme si intentaba defender a mi familia.
Sobre todo si uno de ellos se encuentra en el hospital, sin tener idea de qué le ha pasado o cómo terminó allí.
Los minutos de espera se hacen eternos, pero sé que no es el momento.
—El transporte está aquí.— Es mi señal.
Todos nos levantamos el sofá sin ganas, sin embargo Adam salta de golpe.
—¡Yo adelante!
Ante tanta emoción, los oficiales piensan que va a atacar, así que lo tiran al suelo con fuerza entre varios, lo que me hace reír y Chase está satisfecho por lo que acaba de ver.
—Saben, a partir de ahora y después, la vida les da un pequeño regalo.— Aprovecha a decir, supongo que ese ha sido su regalo.
—Apúrense y despídanse.
Ante la señal del agente Graham, no miramos entre los cinco sin tener idea de qué va a suceder a partir de ahora.
—No puedo creerlo, ¡No nos vamos a volver a ver nunca más!— La voz de Bree se eleva un poco ante la injusticia que estamos viviendo ahora.
—Chicos, estarán bien.— El señor Davenport suena tranquilo viéndonos a los ojos.
—No lo sabes.— Chase niega con la cabeza, lo agarro de la mano instintivamente.
—¡Lo sé! Eso es algo que se dice, ¿Sabes?—Su expresión de "padre relajado" se acaba de disipar en el aire a una de preocupación, pero sobre todo, aterrado.— ¿Qué quieren que diga? "¿Están condenados?" Digo, obviamente van a conducir experimentos en ustedes con tubos y...— Comienza hacer unos gestos bastante explícitos para darnos entender que nos van a matar allí adentro.
—¡Muy bien! ¡Basta!—Extiendo mi mano en su dirección para detenerlo.— Gracias por la imagen mental.— Digo con sarcasmo negando con la cabeza.
—Escuchen, sé que no les di una niñez normal, o ni siquiera una niñez...—Eso último va dirigido a mi, sonrío con tristeza.— Pero espero haberles dado una vida feliz.
—Por supuesto que lo hiciste.— Confirma Chase.
—No podemos imaginar tener un mejor papá.— Habla Bree sonriendo con pesar.
—No puedo imaginar a nadie más.— Digo.
—Los amo, chicos.
Todos nos acercamos a abrazarnos con fuerza, y es allí cuando me doy cuenta que lo que debo de hacer, es ahora y ya no habrá más vuelta atrás. No podría imaginar un momento más triste para esto, tampoco el más cargado de ira que alguna vez haya sentido.
—Muy bien, es suficiente, ¡Sáquenlos de aquí! — La voz de Graham se hace presente interrumpiendo nuestro momento.
—No, en realidad no.—Me alejo del abrazo para colocarme en frente de ellos.— ¡Ahora chicos!
Noto que ninguno de ellos lo hace, a lo que frunzo el ceño.
—¡Tu me oíste! ¡No hagas nada!— Graham me levanto la voz, algo que de verdad no me agrada porque a mi nadie me levanta la voz.
Extiendo mi mano en su dirección y lo atrapo en una nube de oscuridad que poco a poco lo dejará sin aire si es que no nos deja ir por su propia voluntad.
—¡No vamos a ningún lado!— Chase se coloca a mi lado estando firme.
—¡Dije que no! ¡Quítense!— Giro mi cabeza para ver que varios de los oficiales uniformados intentaron una vez más atrapar a Adam, pero este es más rápido y los empuja con su súper fuerza.
—¡La pistola con el tranquilizador!
Grita Graham aun atrapado en mi nube, el oficial a su lado me dispara, Chase se lo quita con su kinesis molecular y una vez en el suelo, lo hace explotar. Doy una pisada fuerte en el suelo y es lo suficientemente fuerte para que energía oscura brotara de mi pie haciendo que todos los presentes cayeran al suelo.
—¡Corran!
Ellos me hacen caso, con fuerza lo lanzo al suelo a Graham y salgo corriendo viendo al resto de los oficiales retorciéndose en el suelo, cierro la puerta detrás de mi y sin más vueltas, nos escapamos a toda velocidad usando nuestros poderes para salir de allí antes de que se les ocurra buscarnos en el lugar más obvio del mundo.
El hospital.
Nuestro destino final es ese, por lo que no tardamos ni un segundo, pero de todas formas al llegar debimos de escondernos porque el lugar está lleno de gente que puede reconocernos, y a los pocos minutos se comenzó a llenar de policías en busca de nosotros.
Adam, Bree y el señor Davenport no sé dónde fueron a parar, pero Chase y yo nos escondimos en una camilla debajo de las sábanas, y creo que estuviéramos juntos acostados en el mismo lugar no es la mejor opción ahora. Su mano estuvo en mi cintura todo momento y siento su respiración cerca de mi cuello, estoy tensa ante su toque y sé que lo mejor, es hacer nada.
—Sé que estás pensando.— Murmura, haciendo que me ría un poco.
—No tienes ni la menor idea, Chase. —Digo de la misma manera conteniéndome.— Es un hospital, más respeto.
—No deberíamos estar así de cerca, no ahora por lo menos.
Me muevo un poco para girar a verlo, o por lo menos intentarlo, ya que unos golpes fuertes comienzan a caer sobre nosotros de la nada.
—¡Zombie!— Esa voz yo la reconozco.
Ambos nos quitamos las sábanas de la cabeza viendo a la directora Perry, quien lleva su mano a su pecho tranquila cuando nos ve, nos estaba golpeando con, ¿Esa cosa dónde los pacientes hacen sus necesidades? La pregunta más importante es, ¿Por qué lo agarra como si nada?
—No somos zombies, dios.— Digo con frustración tocando las zonas, ahora con moretones, de mi cuerpo.
—Oh, gracias a dios.—Suelta junto a un suspiro.— ¿Por qué me asustaron así?— Se vuelve a alterar y nos continua golpeando.
—¡Para, para! No tenemos demasiado tiempo.—Chase la detener agarrando el orinal, se da cuenta de eso y lo suelta con disgusto limpiándose con la sábana, hago una mueca de asco, ¿Cuántos han muerto en esta camilla? Oh no, voy a vomitar.— Los demás se están escondiendo afuera, ¿Cómo está Leo?
—Bueno, pensamos que iba a estar bien pero lo perdimos.— Cuenta con tanta tranquilidad.
—¡¿Qué?!— Casi gritamos los dos, siento mi corazón acelerarse dentro de mi pecho.
—¡Oh, lo siento! No está muerto, sólo perdido.—Se corrige con rapidez cuando ve nuestras expresiones, ruedo los ojos dejándome caer contra la camilla. No estaría siendo capaz de soportar más idioteces.— Creemos que Krane lo ha atrapado, así que cincuenta-cincuenta.
—Espera, ¿Krane está detrás de todo esto?—Pregunta el chico detrás de mi.— Tenemos que encontrar a Leo.— Ahora me habla a mi.
Una voz en los pasillo nos alerta.
—¡Abajo, abajo!
Perry nos ayuda a cubrirnos con las sábanas una vez más, el agente Graham también vino a registrar el lugar él mismo y nosotros ahora debemos de encontrar una forma de escapar, lo cual no creo que sea difícil. La motivación es mucho más fuerte, sobre todo porque nadie toca a nuestra familia.
Las coordenadas de Chase nos dirigieron a lo que parece ser una fábrica abandonada, muy original para un súper villano, el lugar tiene cientos de pasillos y habitaciones, pero gracias a mi visión de rayos x y el escaneo de Chase, logramos encontrar a toda velocidad la habitación, para encontrarnos allí a Leo y Douglas en el suelo, rodeados por Krane y la chica que nos estuvo grabando y nos metió en este problema desde el principio.
—Leo, ¿Estás bien?— Pregunta el señor Davenport.
A pesar de que sea una fábrica completamente destruida, la habitación tiene tecnología que antes no había visto, y me hace pensar que aquí es donde trabajaba Douglas antes de irse a vivir con nosotros y volverse bueno, por así decirlo, sigue siendo una persona cuestionable.
Yo también lo soy de vez en cuando, así que no puedo decir nada.
—Estoy bien.— Contesta el chico sentado al lado de mi papá, quien tiene una gran venda alrededor de su cintura.
Imagino que se ha lastimado cuando sucedió todo lo de Leo, porque él estaba con el menor.
—Lo estoy haciendo bien aquí también, gracias por preguntar.— Dice él con sarcasmo llamando la atención de nosotros.
—Esa es la chica que nos filmó.— No es el momento correcto de siquiera pensarlo, pero cuando Chase está serio y su voz suena más grave de lo normal cuando se enoja, me derrite por completo.
¡Pero ahora sí! Concéntrate, Carter.
—Déjalos ir.— Demanda el señor Davenport.
—Oh, no voy a dejar que nadie se vaya.
A penas dice eso, Krane empuja al señor Davenport con una onda de energía que no logro descifrar que es, tiene tantos poderes encima que nunca se es fácil saber cuál está usando. Esto provoca que chocara contra metales cerca de la pared y cae con fuerza contra al suelo.
Enseguida todos nos ponemos en posición para pelear.
—¡Esperen!—Nos detiene Adam de la nada, camina hasta la chica tenso.— No creo que nos hayamos conocido, soy Adam.— Le extiende la mano.
¿Acaso le está coqueteando? No puede ser, voy a matar a ese chico.
La chica ni siquiera responde a su saludo, lo agarra de la mano y lo lanza contra la pared detrás de él, dejando a Adam sorprendido y sin entender que acaba de pasar, yo me acerco para ayudarlo a levantarse.
—¡Ella es biónica!— Señala Chase en lo que Adam y yo volvemos al centro.
—Y tiene súper fuerza.
Asiento con la cabeza ante las palabras de Bree, vuelvo a mi posición preparando mis manos para lanzar todo lo que sea necesario.
—¿Estás seguro que quieres hacer esto? Somos cinco contra dos, no parece justo.— Ese comentario de Chase provoca la risa de burla de Krane.
—Querrás decir, seis contra dos.
Leo se levanta del suelo cuando Chase termina de hablar, frunzo el ceño sin entender que sucede. Ante la pequeña confusión, Krane lanza una gran fuerza contra todos nosotros haciendo que cayéramos al suelo de manera instantánea, me agarro del abdomen por el dolor que me ha generado, y sobre todo la espalda gracias al impacto.
—¿Qué dices si empiezo contigo?— Krane va directo al señor Davenport.
Con lo que parece ser telequinesis, extiende su mano en su dirección y lo comienza asfixiar poco a poco, jugando a una gran sonrisa en la expresión del villano, luego lo vuelve a lanzar como si nada a los equipos.
Los cuatro una vez recompuestos, nos levantamos con habilidad, por lo menos yo ignorando el dolor físico, porque ahora no es momento de quejarse, es momento de pelear.
—Chicas, suerte con ella.— Adam nos agarra a Bree y a mi para ponernos al frente de él cuando la chica se acerca a nosotros. Frunzo el ceño negando con la cabeza, sin embargo no me quejo contra quién debo de pelear.
Y así sin más, la batalla comienza, Chase y Adam van directo a Krane, mientras que Bree y yo vamos a la castaña en ropa de cuero.
Bree corre a mi lado, su figura difusa como un rayo de luz en medio de la oscuridad a causa de su súper velocidad, sus movimientos con tan rápidos que no distingo que hace, pero la chica logra acomodarse bien a sus movimientos, indicando que no es alguien a quién debamos de subestimar, después de todo trabaja para Krane y tiene biónicos gracias a él.
Entre las dos nos turnábamos para atacar a la chica, volando por los aires, dando patadas y movimientos de tantas artes marciales que no podría ni siquiera pensar en ninguno de ellos. Bree se mueve a la velocidad de la luz, su cuerpo un borrón en el aire mientras intenta golpearla. Pero la villana, con una sorprendente agilidad, esquiva sus ataques con facilidad, haciendo que mi hermana ante el poco equilibrio y sorpresa, cayera por encima de unos barriles vacíos de la habitación.
Voy corriendo tras ella para ayudarla a levantar, sin duda y sin vueltas no ponemos en posición para volver a atacarla, la desventaja que tenemos es que la secuas de Krane tiene súper fuerza, así que el cansancio es el doble de rápido de lo que debería. Corro hasta ella y vuelo por los aires dando una vuelta para empujarla de la espalda con una patada que le doy con ambas de mis piernas antes de caer al suelo, Bree va en su búsqueda pero la chica la vuelve a esquivar, con una gran sonrisa viéndonos a ambas.
La chica me agarra de sorpresa del brazo y me deja inmovilizada.
—Es una pena que sea la última y única vez que los vea, chicos.—Me habla a mi, hago un movimiento rápido y me suelto de ella frunciendo el ceño.— Su hermano es bastante lindo.
—¿Adam?— Pregunta Bree.
—No, el otro.
—¿Mi novio?—Digo alterada, mi respiración agitada. Le lanzo con una gran ola de energía oscura provocando su desequilibrio. — Oh no niña, ese chico es mío.
—¿Tu sales con tu hermano?—Dirige su cabeza a mi quitando su cabello del rostro.— Ustedes son raros.
En un movimiento rápido, nos logra derribar a Bree y a mi al suelo cuando golpea nuestras piernas, aquel golpe nos desconcierta un poco por lo que ninguna se puede levantar a la primera.
—Muy bien, me encargo de ella.—Leo se levanta detrás de nosotras cuando nota que no podemos atacar. Él estira su brazo y de allí lanza algo que definitivamente no podía hacer antes, pero en vez de ir a la chica, golpea a Victor Krane, inmovilizándolo en el suelo.— Muy bien, lo tomo.
—¡Señor Krane!
Aprovecho su preocupación por la persona equivocada y la atrapo en una nube negra para lanzarla directamente cerca de Krane, ambos conmocionados por los golpes, removiéndose en el suelo, sin embargo no se levantan.
Ahora a lo importante.
—¿Vieron eso?— Pregunta Chase cuando nos acercamos uno al otro.
—¡Si! ¿Cuándo Leo aprendió a lanzar?
—¡No puedo creer que le dieras biónicos a Leo!— Davenport se tira encima de su hermano, no literalmente pero se entiende lo que quiero decir.
—Si bueno, salvó tu vida.— Se justifica.
—¡No, no lo hizo! ¡Tasha va a matarme!
Oh cierto, esa parte de la mamá de Leo. Aunque me pone muy feliz que ahora Leo ser biónico, no me lo esperaba, sobre todo porque es una persona muy débil... Si, no hay otra cosa, es simplemente débil.
Unos extraños gritos aparecen en nuestros oídos, miramos a la puerta de entrada y una vez más los el equipo de oficiales que comienzan a ponerse a nuestro alrededor.
—¡Okay! ¡Rodéenlos y usen sus tranquilizantes si es necesario!— Graham da la orden y una vez más estamos rodeados con armas en nuestros cuellos.
—¡Esperen! Están arrestando a las personas equivocadas. Este es el hombre que quiere, Victor Krane.—Douglas decide empezar a hablar, señalando a las dos personas en el suelo mientras va caminando, o a penas lo hace a causa del dolor, para ponerse al lado del agente Graham.— Es un sociópata que se ha implantado biónicos él mismo y ahora la ha transformado a ella en un soldado biónico. Si no lo detienen, podría crear más de ellos y tener un ejercito entero.
—¿Y tu quién eres?— Pregunta Graham de la nada, haciendo que riera un poco.
—Douglas Davenport.—Él extiende su mando, que queda en el aire porque Graham no lo estrecha.— No hay registro de mi porque he fingido mi propia muerte.
—Papá...— Digo entre dientes esperando que entendiera la indirecta.
Él asiente con la cabeza y se cruza de nuestro lado dejando a Graham al frente con su equipo.
—¡Muy bien! Agarren a esos dos en custodia.— El agente termina por acceder, varios oficiales se cercan a las dos personas en el suelo.
—¡No lo creo!
Krane se levanta de golpe a punto de atacar a Graham, a toda velocidad Bree y yo decidimos hacernos presentes, yo lo atrapo en mi gran nube asfixiadora antes de que pudiera siquiera hacer algo, y Bree quita a Graham del camino con su súper velocidad en caso de que no hubiera podido detenerlo por mi propia cuenta.
Hago que quede inconsciente a causa de la falta de aire y me alejo dando varios pasos para atrás, me arrepiento de no haberlo matado pero soy buena persona después de todo.
—Ustedes me salvaron la vida.—Dice anonadado el oficial.— Y de ti es sorprendente porque casi me matas asfixiado.
—Es lo que hago.— Me encojo de hombros cruzándome de brazos.
—Gracias.— Esas son palabras que definitivamente no pensé que iba a escuchar salir de su boca.
—De nada.—Contesta Bree con cinismo a su lado.—Como seguimos diciendo, salvamos personas.
Ella camina hasta donde nos encontramos, el señor parece no procesar que después de todo si somos buenos y no asesinos.
—Restrinjan a estos dos antes de que despierten.
—¡Ten! Usa estos, tienen una señal biónica interruptora.
Mi papá le entrega unas grandes esposas con luces, y una extraña tecnología que no pienso ni siquiera en esforzarme a entender. Graham las toma.
—¿Por qué tienes esto?— Cuestiona las acciones de Douglas.
—Yo ayudo a las personas también.— Responde dando una sonrisa inocente.
Ruedo los ojos y me acerco a agarrarlo del brazo.
—Papá, ven aquí.
Si seguía allí solo, iba a seguir diciendo cosas que no debería y allí si terminaríamos presos.
Al día siguiente aquí estamos, detrás de unos grandes telones esperando a salir en frente de una gran cantidad de cámaras que van a estar apuntándonos mientras estamos parados allí, con nuestros trajes de misiones.
Todavía la transmisión no había empezado, pero estaba a pocos minutos de ser lanzado a nivel mundial para presentarnos como los primeros seres biónicos del mundo, los nervios se apoderan de mi, por lo que juego con mis manos en frente de mi. Siento una presencia a mi lado, cuando veo a Chase parado a mi lado viéndome con atención.
—¿Nerviosa tu también?
—Oficialmente nuestro secreto ha salido a la luz y el mundo nos conocerá por nombres, no estoy lista para eso.
—Yo tampoco, pero no hay nada que podamos hacer ahora. Somos héroes para todos.—— Sabes, ayer en la pelea con Krane y su soldado, escuché algo.
—¿Qué escuchaste?— Pregunto con genuina curiosidad, aunque ya sé qué es lo que me va a decir.
—Que me llamaste "tu novio" y "ese chico es mío."— Hay un tono de burla en su voz, pero a la vez de felicidad al repetir eso.
Elevo una de mis cejas girándome para enfrentarlo.
—Creo que ya podemos usar esas palabras, ¿No lo crees? Es decir, si no lo hacemos, en cualquier momento podemos morir.— Lo digo con tanta tranquilidad que le saca una gran sonrisa llevando sus manos a mi cintura para pegarme a su cuerpo.
—¿Eso significa que eres mía y mi novia?— Asiento con la cabeza colocando mis manos sobre sus hombros sin despegar nuestros ojos uno del otro.— Bien, porque soy bastante posesivo.
—Me gusta mucho de ese tipo.
Sonreímos y no dejamos de hacerlo ni siquiera cuando nos besamos con dulzura.
—Muy bien, tortolos.— Adam aparece en medio de nosotros abrazándonos de los hombros, Bree se queda a mi lado viéndome con una sonrisa.— Es momento de entrar.
Suelto un suspiro y vamos entrando al escenario uno tras otro, allí enseguida las cámaras comienzan a disparar flashes por las fotos, y las que transmiten todo, apuntándonos como si fuéramos alguna clase de circo.
Graham pasa al frente y se coloca al frente de nosotros en frente del pedestal con el micrófono para hablar. Nosotros mantenemos una pose firme detrás, al igual que el señor Davenport con su traje bien arreglado para el momento.
—Los rumores son reales, hay humanos biónicos viviendo entre nosotros.— Más y más flashes.— Pero luego de una larga investigación, yo, agente Graham, así es, con una H, he determinado que no son una amenaza y no hay que temer. Son como nosotros.
El agente Graham le da el paso a Chase, nosotros caminamos para acercarnos al micrófono.
—Hola, soy Chase. Este es mi hermano Adam, mi hermana Bree y mi novia Carter.—Nos presenta a cada uno de nosotros, y por primera vez me siento feliz de que eso sucediera, más que nada la forma en lo que lo hizo en frente de todo el mundo.— Y si, somos súper humanos biónicos. Por años hemos ido a misiones secretas.
Adam empuja un poco a Chase para agarrar el micrófono.
—Si, ¿Recuerdan ese tren lleno de nuclonium que casi vuela Welkerville? Ese fuimos nosotros.
No estuve en esa misión pero estoy segura que ellos no provocaron ese problema, todos los presentes empezaron a suspirar horrorizados.
—¡No, no, no! Nosotros no lo causamos, lo detuvimos.— Chase vuelve a tomar control del micrófono, por suerte todos se calman.
Aunque a los segundos se corre un poco para dejar pasar a Bree quien quiere hablar, yo por mi parte prefiero verme linda en las fotografías.
—Ustedes no sabían de esas misiones porque no sabíamos si el mundo estaba listo para nosotros, pero hora que el secreto ha salido...
Adam vuelve a empujar a la persona a cargo del micrófono para hablar él.
—¡Conózcanme mejor! Disfruto largas caminatas por la playa, comiendo cosas y golpeando a este chico.— Le da un golpe en el pecho a Chase, quien se molesta enseguida.
—Oh no.— Murmuro apretando mis labios.
—¡¿Por qué siempre haces eso?!— Reclama el menor a su hermano mayor.
—¿No estabas escuchando? Es lo que me gusta hacer.— Habla con lentitud para que quede en claro.
No tarda ni un segundo en comenzar a pelear en frente de la televisión mundial, agarrando el gran cartel con el logo de la agencia de Graham. Él se une a la pelea de los dos intentando detenerlos, Bree y yo nos miramos mutuamente para empezar a sonreír nerviosas, ella se acerca al micrófono en lo que yo me pongo a su lado posando para las fotos acomodando mi cabello.
—¿Alguna pregunta?— Dice ella, ignorando las cosas volando que hay detrás de nosotras.
Para cuando la conferencia de prensa da su fin, todas las cosas del escenario están en cualquier lado menos en el escenario, rotas. Chase juega con una rama en su mano, que es de plástico de una maceta decorativa de las cuales destrozaron en su pelea.
—Bueno, eso salió bien.—Habla el señor Davenport sin rastro de molestia, lo que nos hace sonreír todos, al parecer ha sido algo para el recuerdo.— Muy bien chicos, estén listos, tan pronto como salgan de esa puerta sus vidas van a cambiar para siempre. Era tiempo de que por fin tengan el crédito que se merecen por todas las cosas buenas que hacen.
—Gracias, señor Davenport pero siempre seremos un equipo de cinco.— Chase coloca una de sus manos sobre el hombre del mayor.
Graham aparece en donde estamos.
—Oh, agente Graham, quería agradecerle por dejar que los niños vuelvan a casa y puedan ser escuchados.— Davenport se acerca al agente.
—En realidad, yo soy el que debe de estar agradeciéndolos, sin ustedes no seríamos capaz de controlar la arma definitiva.
—"¿Nosotros?" ¿Qué quiere decir con "nosotros"?— Pregunta nuestro papá.
—Ya no está a cargo de estos cuatro. Este es mi show ahora.—Comunica con una sonrisa, sin embargo nos deja a todos confundidos ante la falta de información.— Y a partir de ahora, ellos trabajan para mi.— Se va como si nada luego de agregar la peor noticia del mundo. Siento aun peor la información.
Esa no es una buena señal.
Recuerden:
—VOTAR; por favor no se olviden y no les pido mucho, es gratis y consiguen actualizaciones más seguido. Por favor votar en todos los capítulos. 65 VOTOS PARA EL PRÓXIMO CAPÍTULO.
—COMENTAR; amo leer sus comentarios y opiniones sobre la historia.
—SEGUIRME; para no perderse ninguna actualización, noticia o lo que sea de la historia.
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro